El Rey Del Sol Y La Princesa De La Lluvia

Capítulo 2

A la llegada de la princesa al reino del Sol unos guardias reales la escoltaron al castillo, y al llegar al palacio Laila noto dos cosas, primero que era sombrío y un poco tenebroso, y lo segundo es que era…. Enorme, era 10 veces más grande que su casa pero, era tan sombrío que casi parecía que nadie viviera hay.

Cuando Laila llegó a la sala donde esta el Rey ella estaba muy nerviosa y cuando estaba a un metro de distancia del Rey ella se arrodilló porque pensaba que mirarle la cara era como una falta de respeto pero unos segundos después de que se agachó se escucho un silencio y ella no pudo contenerse y levantó la cabeza y vio la cara del Rey y vio que el rey tenía una expresión sombría y además que también parecía que tenía su misma edad y ella se asustó y volvió a agachar la cabeza pero el rey dijo: levanta la cabeza y cuando la volvió a levantar la expresión del rey cambió, de lo sombría que era se volvió una expresión calmada, entonces ella se calmo y se presentó.

Laila: Soy Laila LLuvius, tercera princesa del reino de la lluvia, un gusto en conocerlo rey del imperio del sol.

Rey: Mucho gusto Laila LLuvius, soy el rey del reino del Sol, Julius Solet.

Cuando terminaron de presentarse se presentó la persona que estaba al costado del rey: soy Edgar, mayordomo principal del rey, un gusto conocerla princesa Laila Lluvius.

Luego de eso el rey pidió a Edgar llevar a la princesa a su habitación y le dijo a Laila que en unas horas va a ver una cena y que Edgar la va a escoltar al comedor. Laila dijo esta bien y Edgar la llevo a su habitación, de camino al dormitorio Edgar le contó algunas cosas básicas que tenía que saber y que el rey le pidió que le explicara, primero este castillo tiene 5 pisos y que los dormitorios estaban en el segundo piso al igual que también la oficina del rey pero que no entre si el rey no se lo pide, también le dijo que unas sirvientas van a estar a cargo de su vestimenta y encargadas de avisar cualquier mensaje del rey.

Luego de eso y otras cosas que Edgar le dijo, llegaron a su habitación y Edgar se despidió y no olvide que dentro de unas horas va a ver una cena y que las sirvientas le van a decir cuando, Laila dijo: esta bien y gracias. Luego Edgar se despidió y dejó que la princesa se acomode a su nuevo cuarto.

Cuando Laila cerró la puerta se sintió un poco más aliviada y se hecho en su cama, pensó que en cualquier momento podría decir algo que molestara al rey, así que está aliviada de no haber dicho nada.