Capítulo 15

Julie se acercó a Elizabeth y la abrazo con alegría.

-Julie _ pronto formarás parte de nuestra familia.

-Elizabeth _ gracias Julie.

-Antoine_ deja que te felicité Antuan, eres afortunado por comprometerte con una mujer hermosa, de donde sacaste a tan bella...Dama.

Antoine miraba a Elizabeth de forma lasciva, Antuan al darse cuenta apretó los puños cabriado.

-Antuan _ la conocí hace meses en San Francisco.

-Clarisse _ es verdad, te recuerdo ¿eres la chefcita no?

-Elizabeth _ si, yo también la recuerdo, señorita Clarisse Lebrún.

-Julie _ así que ya se conocían.

Clarisse miraba altiva a Elizabeth, pensaba que había sabido amarrar bien a Antuan, de seguro después de esa noche, ella lo había buscado hasta metersele por los poros. Comenzaba a hervir de envidia.

-Elizabeth _si me disculpan iré por una copa.

Elizabeth se alejó para caminar hacia donde estaba el bar.

-Elizabeth _ sirveme lo más fuerte que tengas.

-Clarisse _ tan humilde que te veías y de eso no tienes nada. Mira que conquistar al hombre más rico de Francia te ha salido bien.

-Elizabeth _ tienes algún problema con eso.

-Clarisse _ Claro que lo tengo, Antuan tenía que ser mío.

-Elizabeth _Mmh.. lamento que no sea así.

-Clarisse _ déjalo, de seguro una mujer como tu podrá encontrar a otro pobre idiota al que le robes su dinero.

-Elizabeth _ jajaja lo siento pero.. ¿adivina que?. No pienso dejarlo solo por que una niña caprichosa y engreída me lo pide, así que ve haciéndote a la idea de que muy pronto Yo, seré LA SEÑORA DE LE ROUX GILLES.

Elizabeth se dio la vuelta y la dejo haciendo rabietas, ¿que pensaba esa chiquilla al pedirle esa estupidez?.. Esta vez no estaba dispuesta a dejarse hundir por nadie.

-Antuan _Elizabeth te estaba buscando, quiero bailar una pieza con tigo.

Antuan tomo de la mano a Elizabeth, la jalo despacio hacia el y la llevo al centro de la pista. Los músicos comenzaron a tocar una canción lenta, ellos se movían al compás de la canción.

-Antuan _por la mañana vendrá la profesora de francés, ella también te dará clases etiqueta. Ya en la tarde te llevara Julie de compras, aprenderás a vestirte con las mejores prendas de diseñador.

-Elizabeth _ ¿es tan necesario eso?.

-Antuan _ lo es, si quiero causar una buena impresión de mi futura esposa.

Antuan hablaba con tono frío y después de terminar la pieza la soltó sin más.

-Elizabeth _ creo que con el beso y el baile es suficiente para que la gente se crea el estúpido compromiso.

Elizabeth se dio media vuelta y subió a su habitación. Antuan solo veía como se alejaba.

-Antuan _ ay Elizabeth, me causas emociones que no quiero sentir.

Los meses pasaron y Elizabeth aprendió rápido el francés y etiquetas. Comenzó a estudiar economía por petición de Antuan. ahora en las reuniones de negocios su opinión siempre era considerada por el. Algunos de los socios de Antuan quedaban impresionados por su sagacidad en los negocios y otros tantos, solo veían la inigualable belleza de la mujer.

En las fiestas ella siempre causaba la envidia y la admiración de muchas mujeres, en su andar denotaba seguridad y elegancia, su mirada era dulce y a la vez altiva. Ya no era la simple Elizabeth Campbell, ahora era una mujer digna de admirar más allá de su belleza.

Los preparativos estaban listos, su boda sería en unas horas. Elizabeth se sentía nerviosa, iba a unir su vida a un hombre que no amaba o al menos eso creía.

Con el tiempo y el trato hacia Antuan había aprendido a sobrellevarlo, conocía su lado tierno y noble que dejaba ver estando con su familia, y el lado insensible y arrogante que mostraba en los negocios y muchas veces con ella.

-Julie _ las estilista llegaron..

La estilista comenzaron a alistar a Elizabeth. Al terminar ella se miró al espejo y sonrió con tristeza, aunque sólo fuera un matrimonio falso le hubiera gustado que annie y su padre estuvieran con ella en ese momento. suspiro con pesadez y volteo a mirar a Julie.

-Elizabeth _ bien... Es hora de irnos.

En la iglesia la canción nupcial comenzaba a sonar, Elizabeth caminaba sobre pétalos blancos hacia Antuan, quien la esperaba ansioso. Ellioth se acercó a Antuan y le susurro la oído.

-Ellioth _ limpiate la baba cuñado o se dará cuenta...

- Antuan _ cállate...

-Ellioth _ jaja..

Antuan le dio una mirada rápida a Ellioth con enojo.

Elizabeth llegó hasta Antuan y el se acercó a tomar su mano para llevarla con él frente al padre.

-Padre _ queridos hermanos, estamos aquí junto al altar, para que Dios garantice con su gracia vuestra voluntad de contraer matrimonio...............

Después de una el padre los había declarado marido y mujer, ahora era momento de su primer beso como esposos. Antuan la acercó con delicadeza hacia a él, primero beso su frente y después poseyó sus labios con paciencia y ternura.

Por la noche en la fiesta de su boda ambos sonreían al mirarse, Antuan estaba nervioso, la cercanía con Elizabeth en estos meses le había enseñado que ni con el más duro corazón se salva de las emociones que ella le provocaba.

-Antuan _ Julie porfavor encargate de los invitados.. Elizabeth y yo estamos nos retiramos.

-Julie _ ustedes disfruten de su luna de miel, de lo demás me encargo yo.

Julie le guiño un ojo divertida, sabia que ellos comenzaban a sentir algo el uno por el otro, los delataba las miradas. Tenía la esperanza de que al menos esta noche dejaran a un lado el trato absurdo que tenían y comenzarán a procrear una sobrina para ella.

Antuan tomo de la mano de Elizabeth y la ayudó a subir al auto. En el camino ambos iban en completo silencio hasta que Elizabeth se dio cuenta que no era el camino hacia el castillo.

-Elizabeth _ ¿a dónde vamos?.

-Antuan _ hoy nos quedaremos en la cabaña que tengo cerca de el Lago Annecy. El viaje es un poco largo así que duerme un poco.

Elizabeth se sintió nerviosa, ¿acaso pensaba consumar el matrimonio?.

Antuan sonrió con burla, ya imaginaba lo que esa mujer estaba pensando ahora.

Elizabeth se recargo en la venta de el auto y decidió mirar por la ventana la obscura noche que los rodeaba. Cuando llegaron a la cabaña Elizabeth se había quedado dormida y Antuan la cargo para subirla a su habitación. Pero al adentrarse a su habitación ella despertó.

-Elizabeth _ ¿que haces?.

-Antuan _te quedaste dormida así que tuve que cargarte.

Antuan la bajo con delicadez.

-Elizabeth _ no es necesario que lo hagas, a la próxima solo despiertame.

-Antuan _ entiendo.

Antuan salió de la habitación y cerró la puerta detrás de él. Camino hacia el bar que tenía en la cabaña y se sirvió un trago. Se sentía frustrado por esa mujer. Se quito la corbata, el sacó, el chaleco y los zapatos. Desabotono su camisa blanca y tomó la botella de whisky para sentarse aun lado de la chimenea.

Elizabeth daba vueltas en la cama, no lograba dormir, pensó que tal vez unos tragos de alcohol le ayudarían a conciliar el sueño. Salió de su habitación sin recordar, que llevaba un diminuto camisón blanco. Cuando llegó a el bar pego un brinco de susto.

-Elizabeth _ Dios.. No sabía que estabas aquí.. me asuste al ver tu silueta.

-Antuan _ lo siento..¿Quieres un trago?.

-Elizabeth _ uno doble porfavor.

-Antuan _ toma.

Elizabeth tomó el vaso y se sentó aún lado de Antuan, se llevó el vaso a la boca y bebió el líquido de un solo trago.

Antuan se dio cuenta de cómo resaltaban los botones de sus pechos, podía ver a través de él camisón. Comenzaba a tener deseos por tocarla, su erección comenzó a crecer y ser notable, así que intentó cubrirla y concentrarse en el fuego de la chimenea.

Ella se sentía a gusto a su lado y empezó a contarle de sus planes, después de que terminara todo retomaría su vida como chef y abriría un nuevo restaurante.

A él le daba gusto escucharla hacer planes, el la admiraba más allá de su belleza y sonreía al ver sus ojos llenos de ilusión.

-Elizabeth _ Antuan.

-Antuan _si..

-Elizabeth _ yo... bueno...creó que me voy a dormir, ya es muy tarde.

-Antuan_ Claro..

se levaron al mismo tiempo, Antuan le deseo buenas noches y deposito un beso fugaz en sus labios, Elizabeth se quedo estática, el esperaba que hubiera un reclamo de su parte, pero al ver que ella solo lo miraba a los ojos, decidió volver a unir sus labios a los de ella pero esta vez de una forma lente y suave.

Elizabeth se sentía embriagada con los besos de Antuan, ambos podían sentir como la electricidad hundía sus cuerpos en el deseo, Elizabeth revolvía los cabellos de Antuan mientras el acariciaba sus nalgas y las apretaba hacia el para que sintiera su erección.

Ella podía sentir como los botones duros de sus pechos se presionaban contra el pecho firme de él. Antuan se sentía muy excitado, Dios como deseaba sentir su piel desnuda contra el.

ninguno quería detenerse, era una sensación exquisita los besos y las caricias, hasta que Antuan decidió parar. Elizabeth lo miraba incrédula, con la respiración acelerada.

-Antuan _ que descanses Elizabeth.

Antuan camino hacia su habitación y se dejó caer en la cama, a pesar de que lo deseaba no podía tocar a Elizabeth, sabía que ella aún sentía algo por Benjamín y si él le hacía el amor, mas difícil se le haría sacarla de su corazón.

Suspiró con pesadez y miro la gran carpa que sobresalía de su pantalón, Rayos ahora tenía un trabajo para manuela.

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