Bajo el dominio de mi padre...

¿Hola, hijo como estas? Te escribo para saber si

necesitas algo. Aunque se que estas enojado conmigo, debo cuidar de mi heredero.

Y como sabes últimamente están pasado muchas cosas por aquí y no quiero que

nada te pase. Te amo hijo tu padre…

Otra carta de mi padre. Lo único que le importaba es

quien va a cuidar su lugar el día de su muerte…maldición.

-joven amo su desayuno-. Dijo marcos

Gracias, marcos déjalo en la mesa y sal.

Como ordene joven.

Ya estaba cansado de estar encerrado en la habitación

de ese hotel, tendría que buscar la manera de despistar a los guardaespaldas, y

poder salir de ahí.

Últimamente se sentía más solo que nunca, y mucho más

en ese maldito país. Nuevamente su padre hizo uso de su poder para manejar su

vida y ya se estaba cansando. -Buscaría la manera de hacer lo que fuera

necesario para poder tomar el control de su propia vida- pensó eros.

Hacía ya varios meses que estaba en Argentina, y no

le había ido muy bien ya que no entendía el idioma, si bien sabia hablar varios

idiomas nunca pensó que el español en estos momentos le seria de buen ayuda. Pero

gracias a los avances tecnológicos podía hacerse entender.

Le gustaba el país, la gente era diferente, tenían costumbres

que en su país seria muy raras de ver como por ejemplo tomar mates, aunque al principio

lo encontró desagradable, ahora podía tomar uno cada tanto y le gustaba. Así como

muchas otras cosas, pero no podía negar que extrañaba a su

querida tierra, su país.

Joven amo- joven su padre al teléfono…

Ya voy - grito eros enojado.

Padre ¿cómo estás? ¿que deseas?

Hola, hijo. ¿sigues enojado?

Y tu que crees padre, ya te he dicho muchas veces que

me molesta que tomes el control de mi vida, sin que te importe mis

sentimientos. Y solo porque para ti es más importante quien va a heredar tu

maldito lugar.

Hijo, por favor solo entiéndeme

Que te entienda padre que quieres que entienda, ya te

lo he dicho muchas veces no quiero heredar ese puesto, no quiero vivir como tu

no así.

Hijo, dame tiempo, pronto recuperaras tu vida, pero

por el momento necesito cuidar de ti. Haz como tus hermanos que hacen todo lo

que yo les digo sin crear problemas.

Necesitas algo más padre…sino adiós

Adiós, hijo.

Eros estaba demasiado enojado en ese momento y

necesitaba descargar ese enojo de alguna manera, había conseguido escapar de

los guardaespaldas, luego de hablar con su padre,pudo conseguir escapar de sus custodios,

y ahora se dirigía a un bar, necesitaba tomar.

en algún lugar de puerto madero argentina

bar edén…

mientras bebía, una joven mujer se me acerco…

hola hermoso como te llamas…

haciendo señas con las manos le dije que no le entendía…

mmm, no eres de aquí cierto…

no quería que nadie me molestase, pero no podía negar

la belleza de esta señorita.

Y haciendo uso de la tecnología me presente…

Hola mi nombre es eros, como te llamas pregunte

Hola eros, como el dios del amor…mi nombre es soledad…un

gusto…

Encantado, ¿qué tomas? - le dije

Un Martini por favor, gracias

Mozo…un Martini para la dama y uno en las rocas para mí

por favor.

Estuvimos bebiendo y hablando, aunque muchas veces se

nos dificultaba, pero entre tantas copas la invite a mi habitación y la señorita

encantada acepto…

Necesitaba de alguna manera

descargar la frustación y el enojo y solo habia una manera de hacerlo llevando

a la dama a la cama. Penso eros

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