CAPÍTULO 12

Shindra: ¿S-seguiremos entrenando?

Natku deslizó sus dedos en una de las piernas de la chica, miró el recorrido de éstas y luego penetró su mirada en ella.

Shindra: Natku, espera...

Natku: ¿Qué?

Shindra: ¿Qué pasará con mis amigos?

Natku: Habrá reunión esta noche para ver qué hacer con los humanos, no te preocupes.

Shindra: Entonces hay que volver pronto, ya está anocheciendo.

Natku le sonrió malévolamente, tenía un plan preparado para Shin esta noche y una reunión no iba a echarlo a perder.

Natku: Está bien, nos iremos de aquí pero no regresarás al castillo.

Shindra: ¿Qué? ¿Por qué?

El chico verde sólo se limitó a sonreírle de manera pícara. Más tarde, en una sala de juntas, con una mesa redonda y varias sillas, se encontraban los diez mejores peleadores junto con la presencia de Hank como moderador.

Hank: Bien, es momento de hablar del destino de los seis humanos. Ya tenemos en nuestro poder a la señorita Shin, que era lo primordial en estos días, pero ahora no tenemos idea de cómo regresar a sus amigos a su mundo, ¿alguna sugerencia?

Kinto: Repítanme por qué esos chicos están aquí.

Hayate: Porque fueron arrastrados junto con Shin cuando este mundo la trajo aquí.

Tamayo: ¿Han dicho que hacían junto a la chica en ese momento?

Shun: Solo dijeron que celebraban algo.

Kai: Entonces que nos digan la historia completa, tal vez nos den alguna ubicación o señal o lo que sea para saber cómo ayudarlos.

Hank: Entonces, no nos queda de otra que conservarlos con nosotros.

Duke: Por mientras, ¿qué haremos con ellos?

Issei: Podrían ayudarnos en nuestras labores diarias, ¿no?

Nawako: Buena idea, me gustaría saber más de las tradiciones y vocabulario humano.

Tayue: No estaría mal, pero nos arriesgamos a que ellos sepan más de la cuenta.

Natku: Issei podría quitarles estos recuerdos cuando vuelvan a casa.

Tamayo: ¿Y si no pueden volver?

Shun: Ese sería un problema grave, prometimos ayudarlos a regresar.

Hank: Pues no retiraremos nuestra palabra, se hará hasta lo que se encuentre a nuestro alcance para regresarlos a su mundo.

Natku: Sería una buena oportunidad para poner a prueba a la chica, ya comenzamos con el entrenamiento y ella está más despierta que sus antecesoras.

Kinto: Cuéntanos, verde.

Natku: La llevé a la selva y sus reflejos pueden mejorar con entrenamiento, creo que se especializa en escapar y mantenerse con vida ante terrenos desconocidos. Aprende rápido y encuentra su manera de resolver las cosas.

Shun: Eso genera conflicto, debe ser obediente a las clases de preparación.

Kinto: ¿Bromeas?, lo excitante es que sea rebelde y que cree su propia forma de pelear.

Duke: Así sería un aprendizaje mutuo entre maestro y pupilo.

Kai: Solo hay que darle espacio y dará buenos resultados.

Hank: Me parece bien. En cuanto a los humanos, les permitiremos hablar para escuchar la versión de su historia.

Tayue: De acuerdo, mañana temprano empezará el interrogatorio.

Todos se levantaron de sus asientos para comenzar a irse, pero Natku se desvió cuando salió al pasillo, dirigiéndose a la puerta principal y no a las escaleras.

Duke: ¿A dónde vas, Natku?

Natku: Por mi mujer...

El chico verde salió, dejando a sus hermanos confundidos. Por otra parte, en lo profundo de la selva, en el que se ha convertido en el nido de amor de Natku y Shin, la chica estaba sola, en paños menores y en compañía de unas lianas que se movían por sí solas en todo el cuerpo de la humana para hacerla feliz - ¿dónde demonios está Natku?... - dijo para sí, avergonzada por estarse “divirtiendo” con las plantas que colgaban desde lo más alto del árbol. Afuera, a unos metros, Natku contemplaba su antigua creación, ahora esas flores brillaban como si tuvieran luz propia, la copa era frondosa y el tronco relucía vetas doradas en el exterior. Caminó y se adentró en el refugio, vio a su pareja en el otro extremo del espacio, con la cabeza gacha y su cabello tapando sus expresiones, pues sus lianas estaban haciendo muy buen trabajo; se acercó a ella, se agachó y levantó su mentón, apreció esa mirada de resistencia por no soltar ningún sonido, sus mejillas estaban coloradas y su cuerpo temblando un poco.

Natku: ¿Te gusta?

Shindra: S-se siente... extraño...

El joven le ordenó a sus hiervas a detenerse, estos soltaron a la chica y la recargó en el tronco.

Natku: ¿Has estado con dos hombres a la vez?

Shindra: N-no, nunca.

Natku: Entonces hoy es tu noche de suerte...

Shindra: ¡Espera! Tengo entendido que sólo uno de ustedes puede estar conmigo, ¡no dos al mismo tiempo!

Natku: Y así será, solo tú y yo....

El ojos verdes dibujó una sonrisa de lado, la acercó más hacia él y, de pronto, Shin sintió un cuerpo que se recarga en su espalda, unos brazos aprisionaron su cintura y sintió una respiración en su oído.

Natku: Y una copia mía...

Un gemelo idéntico de Natku se formó detrás de la chica, ella se asustó y volteó a verlo, mismos ojos verdes, mismo cabello lacio y largo, misma ropa y sonrisa de satisfacción.

Shindra: N-no...

Natku: No, ¿qué?

Shindra: Natku... n-no estoy lista... para esto...

Natku: Según tengo entendido, las humanas pueden estar con tres hombres al mismo tiempo, ¿no es así?

Shindra: ¡N-no todas las mujeres hacen eso!

Natku: Ah... Pero ¿es cierto que las mujeres pueden estar con más de un hombre?

Shindra: S-sí, pero...

El joven detuvo el habla de la chica con un solo dedo mientras le sonreía.

Natku: shhh.... Entonces, disfrútalo...

La chica asintió muy nerviosa, sintiendo a ambos hombres acorralarla. Al día siguiente, en el castillo, dentro de la recámara de Natku dormía Shin, tapada con una ligera sábana blanca y suave hasta su pecho; la noche anterior ella acabó agotada recargada en el pecho del ojos verdes, su clon había desaparecido después de terminar. Con los rayos solares entrando por la ventana, ella despertó, se enderezó y cepilló con sus dedos su cabello castaño, observó alrededor y se dio cuenta que el maestro de las plantas no estaba, tal vez se había levantado temprano para entrenar, así que salió de la cama, pero le dolía mucho la cintura, ni siquiera podía mantenerse de pie por un minuto, por lo que se recostó de nuevo en la cama hasta que se le pasara el dolor.

Por otro lado, en la habitación de los humanos, los seis recién se acababan de despertar, los dos chicos salieron al balcón para esperar a que las chicas se alistaran y no incomodarlas. De pronto, se abrió la puerta de la habitación con la presencia de Kinto, Duke y Hank, sorprendiendo a las damas en ropa interior haciéndolas gritar, Mako y Kenta entraron para ver qué pasaba, pero una ola de objetos pequeños los golpearon y cayeron desmayados. Los otros tres caballeros salieron ilesos de ese ataque de las jóvenes, pues Duke quemó esos objetos que amenazaban con golpearlos.

Hank: Perdonen por importunarlas, pero lo que tenemos que preguntarles es de suma importancia.

Kinto: No es para tanto, el cuerpo de Shin es más excitante que el de ustedes.

Karimen: ¡Vete a la mierda, estúpido!

Duke: ¿Lo dices en serio? Ya quiero que esté conmigo...

Hank: No se desvíen del tema, traigan a los otros dos del balcón y bajemos al comedor. Le diré a Natku que también lleve abajo a la señorita Shin.

El ojos marrones levantó sus manos para crear dos plataformas flotantes y traer consigo a Mako y Kenta, Duke obligó a las chicas a cambiarse rápido para najar. En la sala de juntas, los humanos, incluyendo Shin, están sentados junto con los diez maestros y Hank.

Hank: Bien, humanos, la razón por la que estamos aquí todos reunidos es para averiguar qué podemos hacer por ustedes para devolverlos a su mundo lo más pronto posible. Ayer por la noche, nos reunimos para discutir este asunto y llegamos a la conclusión de que los ayudaremos a volver, pero necesitamos que nos cuenten qué fue lo que pasó antes de que llegaran aquí.

Tayue: Así es, cada detalle que recuerden es esencial para poder descubrir cómo resolver este problema.

Natku: Díganos, desde el principio, ¿qué pasó?

Kenta: Bueno, resulta que…

Inicia Flash Back

Días atrás, un grupo de alumnos exploraba un bosque en España, todos iban muy entusiasmados por llegar a acampar, ya que había sido un premio por parte de la escuela a los mejores salones con un promedio excelente, cosa que no se veía muy a menudo. Como todo viaje planeado, un trotamundos guiaba la expedición con varios adultos más para cuidar a los estudiantes. Al caminar atravesaron un rio sobre un puente de madera para llegar al sitio donde iban a acampar, Mako miraba hacia ambos lados y notó que una parte de la arboleda era extraña y se detuvo, arqueando una ceja.

Kenta: ¿Qué pasa, Mako?

El ojos claros había visto la expresión de su amigo y se paró frente a él.

Mako: Mira esos árboles…

El ojos cafés claros señaló a su derecha.

Mako: ¿No crees que esos árboles tienen una forma extraña? Como que están ladeados… y se fueran a caer…

Kenta: Viéndolo bien, sólo esos están así…

Trotamundos: ¡Hey, chicos!

El hombre se acercó a los adolescentes con cara de disgusto.

Trotamundos: Les dije que no se separaran del grupo, ¿qué les pasa?

Ambos señalaron esa zona extraña, el hombre la observó y tragó saliva.

Trotamundos: No se acerquen a esa zona, es un sitio con mucha neblina y podrían perderse.

Se interrumpe Flash Back

Shindra: ¿Qué? Esa zona no tenía neblina… tenía mejor alumbramiento que todo el bosque…

Los humanos se extrañaron ante el comentario.

Hank: De acuerdo… dejaremos ese detalle para después, ¿y luego?

Se reinicia Flash Back

Ambos chicos volvieron a integrarse al grupo, pero la ojiazul también volteó hacia ese sitio y se congeló, Karimen volteó a verla, giró los ojos con desagrado y volvió para jalar a Shin, pero no pudo moverla ni un centímetro, - ¡rayos! Parece petrificada… - la ojos miel oscuros la soltó, fue por Fumiko y Amei y las tres regresaron hacia la morena, con esfuerzo pudieron alejarla de ese sitio e integrarla por completo al grupo. Al llegar al sitio indicado, todos empezaron a levantar sus tiendas aprovechando la tarde, por la noche todo estaba listo para disfrutar de una corta velada frente a una gran fogata, supervisada por los encargados del lugar. Horas después, casi amaneciendo, Fumiko despertó y vio que faltaba una de sus acompañantes, salió de la tienda y vio a la castaña sentada a metros de la casa de campaña, sin moverse y viendo hacia la nada.

Fumiko: ¿Shin?

Por la voz, Amei también se despertó, se enderezó un poco y talló sus ojos.

Amei: Fumiko, ¿qué haces levantada?

Fumiko: Shin está afuera…

Amei: ¿Qué?

Fumiko: Creo que pasó toda la noche ahí…

Ambas chicas salieron y se acercaron a la morena, la cabellos marrón tocó el hombro de Shin, haciéndola reaccionar.

Fumiko: Shin, ¿qué haces aquí afuera?

Shindra: No sé, pero tengo la sensación de que debo ir a esa parte del bosque al que no tenemos permitido ir.

Amei: ¿Por qué? Podrías perderte…

Shindra: Tal vez… pero quiero ir ahí…

La ojiazul se levantó y empezó a caminar hacia el bosque prohibido, sus amigas se miraron con duda y siguieron a la primera. Kenta abrió su tienda al escuchar murmullos provenientes de afuera y vio como las tres chicas caminaban para alejarse del campamento, despertó a Mako, Tafy y Karimen aventándoles su almohada y su cobija.

Mako: Aahhh… ¿qué pasa, Kenta? Es muy temprano…

Karimen: ¡Rayos! ¡¿Qué tienes en la cabeza, idiota?!

Kenta: ¡Shhh! Shin y las demás acaban de salir… vamos a seguirlas…

Karimen: ¡Ash! Si ellas van a perderse, qué nos importa…

El chico de anteojos jaló a la hermana mayor y la miró con enfado.

Kenta: ¡No se deja solo a un compañero!

La chica de mechones hizo un gesto de desaprobación, pero aceptó, los cuatro chicos salieron de la tienda y comenzaron a seguir a las otras tres. La morena caminaba como araña, Fumiko y Amei tuvieron casi que correr para no perderla de vista, cruzaron el puente anterior y fueron alcanzadas por sus otros compañeros, que sí tuvieron que llegar casi volando.

Mako: Dios… qué rápido caminan…

Kenta: ¿Y Shin?

Los seis miraron al frente, la morena estaba ante un árbol enorme con frutos rojos colgantes, y notaron en sus manos un poco de sangre y las colocó en la corteza del árbol.

Se interrumpe Flash Back

Nawako: Espera, ¡¿qué?!

Kenta: Manchó el árbol con su sangre.

Natku: ¿Por qué hiciste eso, Shin?

Shindra: Pues… para empezar…

Inicia Nuevo Flash Back

Shin se detuvo a admirar esa parte del bosque, donde el sol brillaba más que en otras partes, quiso seguir avanzando con el grupo, pero logró ver que alguien estaba en ese lugar, que se ocultaba detrás de uno de los árboles y la miraba a ella, - y ese, ¿quién es? – pensó la morena con una ceja arqueada, era una silueta gris, alta, su ropa parecía desgarrada de abajo, no se podía ver el rostro a causa de su cabello que lo cubría, - debió estar vigilándonos desde hace rato… - concluyó, pero ese extraño se acercó rápidamente a ella, como si flotara sobre el agua y pudo verlo bien: ojos rojos escarlata y cabello negro azabache, quien le ofrecía la mano.

Fumiko: ¡Hey, Shin!

La voz de su amiga la hizo reaccionar, tres de ellas la estaban jalando, el ojos rojos ya no estaba y las cuatro chicas volvieron con el grupo. Al llegar al campamento e instalar las tiendas de campaña, llegó la noche y todos se fueron a dormir. Shin no pudo pegar el ojo, el recuerdo de ese sujeto rondaba en su cabeza, se enderezó y vio a sus dos amigas profundamente dormidas. Con sigilo, la castaña se levantó y salió de la tienda para despejarse, cerró sus ojos para respirar y meditar, al cabo de un par de minutos, los abrió y notó que ya estaba amaneciendo, sintió una palmada en su hombro y Fumiko la veía preocupada.

Fumiko: Shin, ¿qué haces aquí afuera?

Se interrumpe el Flash Back

Fumiko: A ver, ¿olvidaste lo que hiciste en seis horas?

Shindra: S-sí… después…

Se reinicia Flash Back

La castaña se levantó y caminó deprisa hacia el bosque prohibido, cruzó el puente y pudo ver al extraño desaparecer en un árbol, ella fue rápidamente hacia esa planta para ver si el ojos rojos estaba del otro lado, pero no había nadie. Shin se decepcionó y escuchó un susurro, la ojiazul notó que era el tronco quien hacía esos ruidos, acercó su oído y pudo captar unas palabras.

Árbol: El líquido rojo puede abrir un oscuro pasadizo…

-¿El líquido rojo? – se preguntó la humana, - ¿será la sangre? – entonces cortó un pedazo de corteza y se lastimó la palma de la mano, colocó la misma en el tronco y este se abrió, sin pensarlo lo atravesó y sintió un jalón abrupto desde adentro. Sus cinco amigos vieron esto y la siguieron, siendo absorbidos también por esa abertura oscura.

Finaliza el Flash Back

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