Renacer

Los rayos del sol entraron por aquel ventanal de aquella habitación blanca, desperté abrazada a ese joven que me había enseñado una gran lección, no abrí los ojos queria disfrutar con todos mis sentidos la tranquilidad que estaba a mi alrededor, me deje llevar por todo lo que en mi mente se encontraba pasando, lo reconfortante que era sentirse así, de alguna manera me hacía sentir en paz, todo era más claro ya no era evidente la nube gris que ocultaba el camino que debía seguir, hace tiempo que sabía qué dirección tomar pero no era capaz de aceptarlo, tenía una idea más clara de la "relación" que tenía con Aaron aunque en el fondo aún deseaba que todo fuera más que una simple amistad, pero aún no estaba lista para tener una relación dónde pudiera entregarme por completo pues mis inseguridades no estaban sanadas, ahora sabía que tenía que hacer conmigo, tenía que empezar a perdonarme por lo sucedido en mi anterior relación y se que este sería el paso más difícil de todos, pues si quisiera volver a enamorarme tenía que hacerlo.

- Buenos días Emma. - Su voz hizo que despertara de mis pensamientos y me levanto de la cama de una manera tan dulce, me dió un beso en la frente, en la nariz, los ojos y las mejillas hasta llegar a mis labios, extrañaba tanto estos labios, esas caricias tan necesitadas y sin más rodeos comenzó a besarme el cuello, los hombros la espalda, era como si estuviera recordando cada parte de mi, beso mis pechos hasta hacerme gemir, sus manos pasaban por todo mi cuerpo, como si estuviera recordando algo que había olvidado, se quitó la camisa, su torso desnudo era mejor de lo que recordaba, sentir su piel ardiente era algo de otro mundo, hacia tiempo que no lo sentía y lo tenía entre mis manos y mis piernas, el sexo que teníamos en verdad era tan pasional, exitante, único, salvaje, tierno, era simplemente perfecto como dos piezas de rompecabezas que encajan a la perfección, solo me permiti disfrutar esto una vez más, dejando aun lado el miedo que sentía al entregarme a alguien, dejé que mis emociones y mi cuerpo hablaran por mi, sentía como un ligero peso en mis hombros se había desvanecido, simplemente lo hice mío una vez más.

Aarón fue a ducharse y decidí que una forma buena de recompensar su apoyo de la noche anterior era haciendo un buen desayuno, huevos, tocino, hotcakes y café, cuando salió me dejó ver su cara de sorprendió y de felicidad, comimos disfrutando de una buena plática, parecíamos una pareja y entre esa plática Aarón me recordó algo que estaba olvidando.

- ¿Emma qué harás en quince días?.

- ¿ah? pues no tengo algo planeado ¿por?

-¿ No te gusta celebrar tu cumpleaños?

¡¡Mi cumpleaños!! por supuesto todo este embrollo me había hecho olvidar algo que tanto disfrutaba, no recordaba cuando le dije de que era mi cumpleaños y pensandolo bien tampoco sabia cuando era el de él, que yo recuerde nunca habíamos tenido este tipo de conversaciones.

- Lo lamento, es solo que sigo dormida, tengo planeado ir a la playa con mis padres, quedamos de vernos ahí, ya que mamá estara en una conferencia cerca de ahí y papá tiene. un proyecto de hoteles en la costa.

- Mmmm ya veo...bueno mi cumpleaños es una semana después del tuyo, pienso hacer una fiesta aquí en mi casa, pero también quiero ir a la playa ahora que lo mencionas.

- Pues deberías de ir conmigo, jajaja. - Lo mencioné en plan de broma y tome otro bocado de hot cake y un sorbo de café, a decir verdad no me desagradaba la idea de pasar unos días en la playa con él

- No estaría mal, pero ¿y tus padres? - ¿lo tomo enserio? No me disgustaba para nada la idea pero qué le diría a mis padres "hola mami mira el es Aarón y bueno el es mi amigo íntimo" seguro me encerrarian en su casa de por vida, no es para nada una buena opción.

- Cierto podrían pensar algo diferente.

- Vamos antes.

- ¿Qué?

- Vamos unos días antes tu y yo, invitemos a más personas si quieres y ahí mismo podrás encontrarte con tus padres.

- La idea no es descabellada... me gusta, les comentaré a mis amigos.

- Excelente. - se acercó y me dió un beso en la mejilla cojio mi plato y lo coloco en el fregadero, era extraño se veía bastante entusiasmado por el plan, ví la hora y me levanté rápido, no tenía ropa limpia así que iba a usar el disfraz del día anterior pero Aarón me prestó unos pans y la sudadera que use para dormir, Aarón me llevo a casa y está vez olvide pedirle se estacionara unas calles antes, fue la primera vez y a decir verdad ya no me importaba. Por la tarde pense en llevar a lavar la ropa entre ella lo que Aarón me había prestado para poder regresarla después, aunque nunca sucedió, al regresar a casa solo quería dormir sentía un terrible dolor de cabeza seguro era la resaca, más el drama que viví y el llanto que tuve era razón suficiente para el dolor que sentía, al llegar solo me baje del auto y entre a casa cerca del medio día, me bañe y dormí un rato más la cabeza me explotaba ni las Aspirinas me ayudaron, logré de milagro consiliar el sueño dormi un par de horas y al despertar me sentía mejor así que decidí abrir mi ordenador y mi antiguo correo, ahí estaban guardadas unas conversaciones que había tenido con Bastián, aún dolía mencionarlo aunque me sorprendió notar que al pronunciar su nombre el dolor era ligeramente menos intenso, al revisar la bandeja de entrada me encontré con la sorpresa de tener correos nuevos de él parecía que tuviera poderes de invocación o algo así, los correos eran de algunos meses atrás, me quedé observando el título del correo "Hola" algo dentro de mi me decía que no lo hiciera y a decir verdad tenía miedo de abrirlos no sabría que dirían, no sabia si alguna palabra de ese correo podría volver a dañarme tanto como lo hizo, sinceramente no sabía si tenía la fuerza para soportarlo, en ese momento recordé lo enamorada que estaba de él, también la tristeza que senti aquella noche que terminamos y la depresión que viví y que me ha costado mucho salir, pensé por un momento y logre reflexionar que al final solo recordaba el dolor, tanto que opacaban los momentos felices que pude vivir con él, no recordaba con exactitud cuál fue el motivo de esa separación, lo que tenía presente era su rechazo, los gestos, el dolor, la desesperación.... decidí abrir las conversaciones pasadas tal vez me ayudaría a refrescar la memoria hasta llegar a los correos nuevos, leí cada uno hasta llegar al más reciente.

Bastián

- Hola Emma, ya hace tiempo que no se de ti, espero te encuentres muy bien... he intentado localizarte, pero todo ha sido en vano, logre contactar a Mirna pero colgo mi llamada... pues quería pedirte perdón por mi actitud estúpida... quiero que sepas que pronto voy a casarme, quería que supieras esto, ya que tú siempre tendrás un pedazo de mi corazón.

Lamento mucho la forma en como te trate espero algún día puedas perdonarme.

Con cariño Bastián

Me quedé perpleja, ¿casarse?, de verdad va a casarse o más bien ¿ya se casó?, ¿disculpas? pero ¿porqué? ¿Para qué? el daño ya estaba hecho, las cicatrices se veían a leguas... Cerré el ordenador y me recosté en la cama, el dolor de cabeza regreso igual de intenso, tome más aspirinas trataba de aliviar ese dolor, todo era muy confuso intentaba armar el rompecabezas en mi mente, el malestar y el cansancio me gano. Como luz al final del túnel tuve un sueño revelador, recordé todo, como si lo estuviera viviendo nuevamente, esa noche había decidido salir con Mirna mi mejor amiga en la preparatoria, Bastián es más grande que yo por 5 años lo conocí gracias a ella y me enamore perdidamente de él, un chico rockero, romántico, carismático y divertido, él fue mi primera vez sin embargo detrás de ese disfraz había alguien posesivo, celoso y manipulador quien poco a poco se aprovechó del amor que tenía alejándome de mis amigos, mi familia con sus amenazas emocionales "Emma eres mi novia no me gusta que salgas con tus amigos siempre hay chicos al rededor", "porque usas esa ropa es muy reveladora no lo hagas", "como odio que tú madre no confíe en mí, sabe que estás conmigo y sigue fastidiando", "te marque y no respondías ¿qué hacías? ¿con quién estabas?", incluso logré recordar varias faltas de respeto a mi persona como arrebatarme mi teléfono y revisarlo de pies a cabeza, mi mochila, incluso hasta los libros porqué según él decía uqe podria tener notas ocultas... Esa noche de viernes decidí salir con Mirna era su cumpleaños y es mi mejor amiga, recuerdo haberle comentado a Bastián que me acompañará pero él no quiso, el quería que fuera a verlo a su casa y viéramos alguna película, pero yo no quería fallarle a Mirna así que fui con ella, Bastián me hizo sentir tan culpable, tan insegura, tan perdida, la peor mujer del mundo, era tan buen manipulador que nunca supe en qué momento me perdí, creí en su mentira, la hice mía, esa misma noche termino conmigo recuerde su llamada que me decía "eres una niña, jamás vas a entenderme, estoy harto de tus tonterías", se que era ingenua en aquel tiempo pero me habían criado para ser una mujer independiente y autónoma decidi luchar por mi libertad y por mi, él había sido el culpable y no yo, él quería que fuera sumisa ante él... ahora lo recuerdo era sofocante, dañino, doloroso incluso más que los momentos felices que pudimos vivir juntos, pero el amor y la dependencia que desarrolle hacia él me cego por completo, me había perdido en esa relación.

Me desperté con lágrimas en los ojos pero en esta ocasión no era ese dolor tan agudo que sentia en el corazón a tal punto que sentía que dejaba de latir, no era esa ansiedad, eran lágrimas de perdón, de aceptación, de amor propio, ví el reloj y eran cerca de las 5 AM, me pare de la cama fui por un vaso con agua, reflexione un momento y decidí responder al último correo de Bastian era momento de cerrar aquel ciclo que había permanecido abierto por tanto tiempo.

Emma:

Hola Bastián, quiero que sepas que me encuentro mejor... antes que nada quiero agradecerte las marcas que dejaste... agradezco al cielo tu partida... agradezco haber vivido la depresión que me hiciste vivir, porque al final todo eso tan dañino que viví contigo me hizo mas fuerte... al principio pense que habia sido lo peor que me había pasado en la vida pero en algo tenías razon "era una niña", mi ingenuidad y el amor que te tuve me cegaron, tengo mucho más que decirte pero no tengo la intensión de saber nuevamente de ti, me alegra mucho saber que te casarás, espero seas muy feliz y quiero que sepas que te perdono y que tambien me perdonó, gracias por guardarme un lugar en tu corazón, sin embargo yo no quiero guardarte un lugar en el mío.

Borre la cuenta y los datos de cache para no volver a abrir ese correo, ya era suficiente de tantos recuerdos y vivencias emocionales, era el momento de renacer, de seguir adelante, de perdonar a todos los actores de esta mala obra de teatro y dejar de dañar a quienes no lo merecen.

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