17. Confianza.

Habían pasado 3 días y Maty seguía sin señales de los mellizos, ya se estaba cansando de esperar pero no podía volver sin ellos, significaría desobedecer una orden de Paz y él jamás lo había hecho. Se sentía ansioso y nervioso al mismo tiempo, no sabía cómo estaba ella en ese lugar sin nadie de los suyos, ¿Jonh le estará haciendo daño? esa pregunta no lo dejaba tranquilo. Tomo su celular y le marco.

Paz- Hola Maty.

Maty- hola jefa ¿cómo estas?.

Paz- Bien, ¿para que me llamaste?.

Maty- Para ver cómo estabas y avisarte que no vuelvo aún por qué los mellizos están en una misión y no vuelven todavía.

Paz- Está bien esperarlos, no te preocupes yo estoy siendo cuidada por Lion.

Maty- Si jefa pero igual no me siento tranquilo lejos de ti.

Paz- Si algo pasa te llamo. ¿Viste a Lío y mis hermanos?.

Maty- Si me estoy quedando en la casa de Ángel. Ellos están bien.

Paz- Gracias, ahora te dejo quiero descansar. Nos vemos pronto.

Maty- Hasta pronto jefa.

Mientras tanto la mansión de Jonh se había vuelto un lugar muy concurrido por su padre y hermana que iban a diario para asegurarse de que la nueva miembro de la familia Black se encontrase bien.

Karl- Hijo en unos días llegará tu madre. Espero que se te ocurra una buena historia de cómo terminaste casado y por ser padre, sabes cómo es ella y no estará satisfecha hasta saber cada detalle.

Jonh- No se que decirle, tal vez Paz le cuente la verdad.

Karl- No lo hará, ella no tiene interés en que personas inocentes como tu madre o tú hermana sepan lo que hiciste. Ya debes de haber notado que cuando habla con nosotros es sería y fría pero con jazmín se transforma en un ser cálido y lleno de luz, aunque por dentro este destruida no deja que esos sentimientos lleguen a tu hermana.

Jonh- Si padre, aunque no entiendo el por qué aparenta algo que no es ni siente.

Karl- No pensé que fueras tan tonto para verla y no ver.

Jonh- No te entiendo.

Karl- Ella es la mujer fría pero al mismo tiempo es la mujer cariñosa. No actuamos de igual manera con diferentes personas es algo que tú deberías de tener en claro.

Jonh- Entiendo lo que dices pero a ella no.

Karl- ¿Por qué no intentas acercarte? habla con ella, conócela, haste su amigo, y tal vez así sepas lo que en verdad sientes y la comprendas en sus acciones.

Jonh- Lo intentaré. *Pensamiento: tal vez tengas razón padre y ella sea las dos caras de la moneda, aunque diferentes forman parte de la misma*.

Karl- Ahora debo irme mañana vendré con Jazmin.

Jonh- De acuerdo padre ve con cuidado.

El resto del día Jonh se la paso en su despacho atendiendo reuniones a larga distancia y revisando nuevos contratos.

Eran las 8 PM cuando salió de ahí decidido a dar el primer paso para acercarse a Paz, fue a buscarla a su habitación, después de golpear la puerta dos veces sin respuesta ingresó y no la encontró allí, así que fue hacia la cocina a preguntar a Mary si la había visto.

Paz se había dado un baño, noto que los pantalones le comenzaban a molestar un poco a la altura del vientre ya que sus hijos se empezaban a hacerce notar mediante una pequeña panza, por ello decidió colocarse una calza de ejercicio y una remera corta sin sostén ya que sus pechos estaban algo hinchados y sensibles, luego de unas horas se había aburrido de estar encerrada todo el día en su cuarto y el hambre se hacia cada vez más frecuente.

Bajo a la cocina donde se encontraba Mary organizando los últimos detalles para la cena, al verla sin su habitual ropa deportiva y con una remera corta que dejaba ver su pequeña panza dejó lo que hacía para dirigirse hasta Paz y pedirle permiso para colocar la mano sobre su vientre a lo que Paz no se negó.

Mary- Que hermosa panza señorita, estoy segura que si sigue creciendo así en 2 meses más le costará hasta atar sus zapatos.

Paz- Mientras ellos tengan lugar suficiente para estar cómodos no importa cuánto crezca mi vientre (Le respondió con una sonrisa).

Así las encontró Jonh quien miraba la panza de ella queriendo sentirla, queriendo ser parte de sus hijos antes de que nacieran, queriendo acompañar a Paz en la gestación de sus pequeños. Estaba tan concentrado mirándola que no noto cuando Mary siguió con sus deberes y Paz lo miraba fijo a los ojos.

Paz- ¿Quieres sentirlos?.

Jonh Salió de su breve trance y la miró como si no la entendiera.

Paz No necesitaba una respuesta por su cara adivinaba que él quería poder tocar a sus hijos a través de su vientre, se acercó a escasos centimetros de Jonh y antes de que este se diera cuenta ella lo tomo de la mano y la colocó con cuidado sobre ellos.

Jonh no podía articular palabra alguna la emoción de poder sentir ese bulto bajo su mano y saber que eran sus desendientes los que allí estaban le provocó algo que jamás había experimentado. En su cuerpo la felicidad y el miedo convivían armoniosamente.

Paz observaba atenta cada ligero gesto que esté hacía y como sus expresiones cambiaban repetidamente hasta que vió algo que no esperaba los ojos de este se cristalizaron dejando escapar silenciosas lagrimas que expresaban lo que las palabras no podían.

Se empezaba a sentir incómoda con el contacto de este. Debido a su bondad lo dejo sentir a sus hijos pero el recuerdo de su concepción no la dejaba estar mucho tiempo en esa situación.

Paz- Podrías ya soltar.

Jonh retiró su mano entendiendo lo que pasaba, no era tan tonto ella había hecho un gran esfuerzo para que él pudiera sentirlos. Con la manga de su camisa seco su rostro. -Gracias.

Paz solo lo miro y se dispuso a hacer lo que tenía en mente desde un principio.

Puso a calentar agua y sobre la mesa de la cocina preparo su equipo de mate, busco y rebusco en todas las alacenas, en la heladera e incluso en el bajo mesada ante la mirada atenta de Jonh y Mary.

Mary- ¿Que necesita señorita?.

Paz- Quiero panqueques con dulce de leche pero veo que no hay. (Dijo mientras seguía rebuscando inconscientemente)

Mary- No señorita pero tenemos Nutella.

Paz arrugó la nariz e hizo un puchero. Era la primera vez desde que estaba ahí que adoptaba una imagen un poco aniñada y dulce.

Jonh Trato de aguantar la risa y miro a otro lado.

Mary- Ya tiene su primer antojo señorita.

Jonh volvió a mirarla esperando su respuesta, no iba a dejar sin cumplir nada que ella quisiera.

Paz- No se, solo quiero comer panqueques con dulce de leche acompañados con el mate.

Mary- ¿Y no quiere que le prepare otra cosa?.

Paz- La verdad no, gracias igual.

Mary- Entonces si es su primer antojo, le prometo que mañana le traeré su dulce.

Paz- Entonces solo me queda hacer esto. (Paz se llevó ambas manos hasta sus nalgas y ahí las apoyo).

Mary- ¿Señorita qué hace?.

Paz- Es que en Argentina si no tenes lo que se te antoja estando embarazada los mayores te dicen que te toques aquí, es una superstición que si te tocas cualquier parte del cuerpo tu hijo nacerá con el antojo donde de toques. Y el único lugar del cuerpo que está siempre oculto es este. (explicó)

Mary empezó a reír bajito.

Paz- Se que suena y se ve tonto pero son las creencias con las que estoy familiarizada.

Mary- No para nada señorita solo es que es la primera vez que lo veo y escucho.

Jonh- No te preocupes ya mismo haré que te traigan lo que quieres.

No dió tiempo a qué le responda salió de ahí sacando su celular y llamando a varias personas exigiéndoles que consigan el dulce, todo aquel al que llamaba creía que había perdido la cordura, estaba movilizando a media ciudad solo por un dulce de leche.

Al último en llamar fue a Logan.

Logan- Hola Jonh ¿Paso algo?.

Jonh- Si dime si tienes un dulce de leche.

Logan empezó a reír -¿Qué broma es está?.

Jonh- No es ninguna broma ¿lo tienes o no?.

Logan- Haber primero ¿para que quieres un dulce de leche?

Jonh- Paz tiene su primer antojo y quiero dárselo.

Logan- Hay amigo veo que te tiene de la médula.

Jonh- ¿Dime si lo tienes o no?.

Logan- No pero un conocido es dueño de un local que solo se dedica a vender productos argentinos, ahora lo llamo y le pido de favor que te mandé uno.

Jonh suspiro aliviado -Gracias eras mi último recurso.

Logan- ¿A quien más llamaste?.

Jonh- A todos, incluso a mi padre.

Logan- jajajajaja Donde está mi amigo, por qué tú debes ser un impostor. Jajajaja.

Jonh- Cállate y llámalo rápido. (Le cortó).

Se paró junto a la puerta hasta que media hora después uno de sus hombres llamo a la entrada.

x- Señor, afuera ahí un hombre que dice traer un encargo suyo.

Jonh- Déjelo pasar.

A los pocos minutos volvió el hombre acompañado de un anciano de unos 80 años. Quién le entrego un pote de 1 kilo de ese producto.

anciano -Que bueno que aún no me había ido a mi casa, sino no podría traerlo.

Jonh- Muchas gracias señor.

anciano- No hay por qué Logan me explico la situación del primer antojo, y no podía dejar que una embarazada duerma toda la noche tocándose las nalgas. (Río el anciano).

Jonh- ¿Es usted argentino?.

anciano- Si como lo noto, ya hace muchos años vivo aquí y no queda rastro de mi acento.

Jonh- Es que mi mujer dijo lo mismo de las nalgas.

anciano- Deduzco que ella también lo es, toda mujer argentina lo hace, le dejo mi tarjeta por si a su señora le da antojo de algo más. Ahora me retiro, buena noche.

Jonh- Adiós y gracias en verdad.(Se dirigió triunfante a la cocina ya eran más de las 9:30 PM, pensó que tal vez Paz ya se había ido a descansar por lo que tardo en conseguirlo, se alegro al verla sentada a la mesa con sus brazos apoyados en esta y su cabeza inclinada sobre estos)

-Pense que estarías durmiendo.

Paz- Lo iba a hacer pero cuando te vi tan decidido llamando a persona tras persona solo por mi antojo, no quise hacerlo.

Jonh- ¿Tu me viste llamar?.

Paz- Si fui a decirte que podía esperar hasta mañana, pero estabas muy decidido así que decidí dejar que siguieras.

Jonh- Pero al final si lo conseguí. (Le extendió el pote).

Paz lo tomó y lo colocó sobre la mesa se dirigió a la heladera y saco las creeps que había hecho junto a Mary. -Sabía que lo harías.

Jonh se sentía en extremo feliz ella le había depositado una pequeña confianza aunque sea mínima aún estaba la posibilidad de tener a su familia con el, y no se refería a sus padres y hermana sino a su mujer y a sus hijos.

Paz armó los panqueques y le ofreció a Jonh este dudoso tomo uno y le dió un mordisco, nunca le gustó lo dulce pero puso su mejor cara y lo comió todo. Mientras ella se comía uno tras otro como si fueran a desaparecer, comía con tal desesperación que él no pudo aguantar la risa.

Paz lo miró - ¿Que te resulta gracioso? (continúo comiendo).

Jonh- Come más despacio nadie te los va a quitar.

Paz- Ya lo se pero tengo muchas ganas de ellos, están riquísimos.

Jonh- ¿Podemos hablar?.

Paz- Ya lo estamos haciendo. (Con la boca llena).

Jonh- Si pero quisiera conocerte un poco apenas y se de ti.

Paz- Como tú hiciste algo por mi (Se levantó y puso a calentar más agua) yo haré algo por ti. Te responderé lo que quieras solo pregunta.

Jonh- ¿En verdad?.

Paz- Yo no miento, solo a veces omito los hechos.

Jonh- ¿Y no es lo mismo?.

Paz- No, verás si voy a tomar un helado digo fui a tomar un helado no cuento la historia de cómo llegué a la heladería. Omito lo que no quiero decir.

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