Te conocí un día de mayo, Un día cualquiera de ese año, no vi tu cara, no vi tu cuerpo. Solo expresaste con palabras lo que sentías en ese momento.
Tu personalidad me cautivó, y mi vida cambió, No podía dejar de pensar en lo que nosotros iba a cambiar.
Tu amistad me dio felicidad, aunque yo anhelaba algo más, ese deseo carnal que solo entre amantes estabas dispuesto a dar.
Aunque el paso no pude dar, me demostraste que en ti había estabilidad y un salto por fin pude dar.
Mi vida a tu lado es excepcional, por que tú, Cariño, Eres mi verdad.