Fabián en ese día tendría la oportunidad de conocer cada rincón de Dani.
Fabián entró y más tarde llegó Daniel, parecía que recién se había bañado pues su cabello parecía más ligero y fresco de lo usual, el descanso parecía haberle hecho bien.
Después de saludar a los del turno matutino como cada mañana Daniel se dirigió hacia su amigo Fabián, se saludaron como si nada.
Platicaron con un poco con una ligera tensión todavía.
Fabián quería sentir los pies de su amigo, conocerlo a un nivel más profundo y personal, pero ¿cómo llegaría eso luego de aquella experiencia tan tensa?y sobre todo con alguien tan recatado e inocente como lo parecía Daniel.
Daniel por su parte estaba dispuesto a dejar que su amigo explorase cada rincón de sí, había ya fantaseado con ello durante el fin de semana.
Fabián tuvo una idea, ya no quería esperar más tenía que hacerlo, pensó que al menos sería bueno insinuarle o mostrarle abiertamente su gusto por los pies a Daniel y qué mejor manera que hacerlo si no era casualmente, con uno de esos memes sobre pies que se han hecho tan populares actualmente, Fabián preparó todo, descargo un par de memes y los organizó justo al lado de una captura del juego que solían jugar.
A mitad del turno por la noche, Fabián puso en marcha su plan. Hablaban sobre el juego y Fabián presumió sobre la partida que había tenido el día anterior, sacó su celular para mostrarle la captura a su amigo y en eso mientras pasaba de imágenes Daniel lo vió.
Daniel esperaba esperaba expectante, genuinamente le emocionaba el juego pero en eso aquel interés se vió aplastado con otra emoción, pues mientras Fabián pasaba de imágenes vió el meme de los pies.
Sintió entonces una sensación de presión en su pecho, en este punto era obvio que su amigo trataba de insinuarle algo, pues aquella mirada de la otra vez lo decía todo, al pensar en esto Daniel sentía esa excitación creciente en su pecho cada vez más haciendolo sonrojarse y bajar la mirada.
Fabián notó esto, y rápidamente dijo "Oh, lo siento es un meme que guarde la otra vez..."
Daniel estaba apenado, sentía la presencia de Fabián creciendo fuertemente pero aquella emoción en su pecho era tan fuerte como su timidez, aún así esa emoción lo empujó a preguntar entrecortadamente:
¿Te gu-... Te gustan los pies?
Fabián lo sintió, esa era la señal, lo tenía. No quería andarse con más rodeos, tenía que mantener el tema así que ingeniosamente regresó la pregunta después de responder:
Sí, bueno... creo que sí. ¿A ti te gustan, Dani?
Daniel sabía que se dirigía a un camino que nunca había explorado, sin embargo aquella extracción creciente en su pecho se hacía más y más fuerte así que respondió sonrojado y nervioso:
Ah.. sí... Bueno, es que me gusta que a la gente le gusten mis pies, es que son muy sensibles ya que desde niño...
Dani entonces contó su historia, sobre como sus pies habían crecido protegidos dentro de su calzado y calcetines.
Fabián notó la vergüenza de Daniel, no quería arruinarlo ya lo tenía pues Daniel se mostraba sugerente al mostrar Interés, entonces trato de calamar a Daniel y respondió:
"Oh, claro... Es normal, los pies son muy sensoriales, es un fetiche muy común ¿Sabes? De hecho ¿sabías que los pies tienen conexiones nerviosas con las zonas erógenas?"
Fabián pensó que lo había arruinado, quiso calmarlo y terminó diciendo algo aún más sugerente, para su sorpresa Daniel respondió más tranquilo aunque todavía tartamudeando un poco al hablar.
Ah, sí... Creo que leí algo sobre eso en un libro de anatomía...
Daniel sabía que lo venía, por primera vez dejaría que alguien más aparte de él tocará su cuerpo Daniel casi temblaba, la excitación en en su pecho esperando a ser liberada lo hacía sentir tan emocionado.
Fabián no sabía cómo decirlo, pero está vez fué aún más directo.
Aunque en me gustan realmente es difícil encontrar unos pies verdaderamente lindos, ya sabes con su forma compacta, delgados, con el arco bien marcado, uñas bien cuidadas, sin juanetes, bien definidos, con la suela rosada
Daniel bajo la mirada nuevamente, su rostro estaba rojo, había entendido el mensaje de Fabián y todavía no terminaba de hablar Fabián cuando Daniel dirigió su mirada a sus pies bajo su mano y levantó frente a Fabián uno de sus pies, queditamente dijo:
"Quieres..."
Daniel, no terminó la frase, pero Fabián no iba dejar pasar ésta oportunidad rápidamente respondió:
"¿En serio puedo?"
Daniel no respondido, pero parecía accesible manteniendo levantado su pie mientras miraba a un costado.
Fabián tomó el pie de Daniel por el tobillo que era sorprendente delgado si lo comparaba con el suyo, aunque era obvio Fabián media 1.78 y Daniel con suerte llegaba a 1.65, quizá su altura y la falta de trabajo duro también influía en su apariencia ya que Fabián apenas eran un par de años mayor que Daniel.
Fabian quitó el tenis de Dani, su pene estaba erguido con solo haber tomado el pie de Daniel, quitó el tenis y ahí estaba, Daniel tenía una calcetas cafés, similares a las anteriores, eran delgadas podías ver la piel atraces de las, especialmente en el talón, borde lateral en la almohadilla debajo de los dedos y en los dedos, al quitarle el tenis despidio un olor cálido a suavizante de telas y ese carácteristico olor de la piel, la piel de Daniel.
Fabián le pidió el otro a pie a Daniel, Daniel lo subió cuidadosamente y Fabián repitió el mismo proceso. Fabián estaba exitado, ni su le había quitado las calcetas pero la forma tan bien definida de los pies de Daniel lo hacía sentir exitado.
Daniel sentía con vergüenza como Fabián apreciaba sus suelas sobre el calcetín, podía sentir el aire frío y como Fabián pasaba sus dedos en sus plantas, parecía que Fabián ya no estaba ahí. Era un contraste extraño el estar sentado con las suelas expuestas en el regaso de su amigo, cuando antes estaba en el mismo lugar hablando de videojuegos, películas o soltando una que otra broma ocasionalmente.
Fabián tomó ambos pies, y al mismo tiempo retiró las calcetas y ahí estaban, se reveló aquella zona tan perfecta de Daniel, sus talones estaban rosados el borde lateral de sus pies que era fino y delgado brillaba naturalmente reflejando la luz del techo, la almohadilla debajo de sus pies parecía húmeda y tersa, la zona del arco del pie era perfecta sin arrugas o marcas, eran unos pies como los que había deseado siempre. Acaricio pasando sus dedos entre los dedos de Daniel.
Daniel, al sentir el tacto daba ligeros tirones hacia arriba tratando intuitivamente alejarlos, pues empezaba a sentirse estimulado sexualmente, movía los dedos abriendolos y cerrandolos. Pronto dejo de quitarlos y empezó a mover sus pies buscando sentir más cosquilleo empujando sus pies hacia Fabián, como si dijera con esos movimientos que quería más.
Daniel sentía extraño, sentía como si hubiera dejado a un extraño entra a su casa o como si dejara entrar a sus secretos más privados a alguien.
Fabián disfrutó de la reacción de Daniel, parecía encantado, las mejillas de Daniel estaban tan rojas y miraba a Fabián con una mirada concentrada en Fabián y en lo que hacía y sentía en los pies.
Fabián acercó su cara y pudo olerlos, eran tan suaves y Daniel no esperó, movía sus güeros pies en la cara de Fabián, tenían un aroma encantador entre suavizante de telas, el aroma de la piel y el sudor. Fabián habría deseado que tuvieran un olor al menos un poco a pies, pero ese aroma tan propio de Daniel fué suficiente.
Fabián lamió los pies de Daniel, Daniel retorcía sus dedos y los movía en toda la lengua de Fabián y empujaba sus pies hacia él.
Dani estaba exitado, la excitación en su pecho estaba desbordandose Fabián le lamía las patas y se sentía tan bien, el vapor cálido de la boca, la sensación resbalosa y como Fabián movía su lengua entre sus dedos hacían que Daniel se derritiera, el pene de Daniel estaba reaccionando poniéndose gradualmente más duro.
Era tan erótica la escena de Daniel exitado con sus pies desnudos y sus suelas rosada siendo lamidos por Fabián.
Fabián pudo ver qué Daniel parecía querer más, acercó la silla de Daniel jalandola con una mano lo que hizo que Daniel tuviera que flexionar sus rodillas exponiendo su culo y sus suelas al mismo tiempo. Daniel sabía que Fabián pensaba hacer algo más, y aunque sentía que dejar que le chupe los pies era algo diferente a tener sexo con él ya no tenía límite, aquella lamida de pies lo había puesto caliente y estar en esa pose tan erótica, nunca antes lo hacía hecho.
Fabián estaba encantado nunca antes había prestado atención al culo de Daniel, pero cómo era de esperarse de alguien con pies tan lindos su culo era perfectamente redondeado sin tener demasiado era un balance perfecto, nalgueó Daniel con los pantalones todavía puestos y Daniel arrugó los pies y los abrió, Daniel sintió un cosquilleo entre el culo y los testículos era el presemen que empezaba a escurrise, aquel líquido transparente y viscoso.
Fabián repitió un par de nalgadas más y Daniel entre conciente e inconcientemente movió el culo de un lado al otro sugiriendo que deseaba más.
∆ llegando más allá de tus pies ∆
Daniel estaba derritiéndose, sentia algo de culpa por dejar que alguien lo viera así pero no podía evitarlo, lo deseaba, había soñado con eso varias veces.
Fabián tomó a Daniel de los tobillos y quitó el pantalón delicadamente, se sorprendió al ver los muslos sin bellos de Daniel y ver la poca cantidad que tenía en las piernas, eran incluso bellos más delgados de lo usual, Daniel tenía también una pequeña pulsera roja en el pie izquierdo era sexy, contrastaba tanto con la actitud reservada de Dani.
También tenía un boxer negro bastante delgado y muy corto, Fabián preguntó a Daniel sobre sus lindas piernas y este le contó que desde hace mucho había odiado el bello se veía feo y desagradable así que cuando empezó a crecer lo quitaba con los dedos, al pasar el tiempo dejó de hacerlo pero el bello no creció igual creció delgado y muy poco, por otra parte en sus muslos todavía no crecía bello o no sabía si le creería aún.
Daniel se sentía expuesto, estar sin pantalones enfrente de alguien y en esa pose dejando sus piernas expuestas con ese boxer tan corto lo hacía sentir sensual
Fabián entendió y le explicó que el cuerpo se sigue desarrollando hasta los 25 en algunos tarda incluso un poco más.
Fabián entonces habiendo terminado de hablar se