Había una vez.. nació un bellísimo bebé en una familia cristiana, esté bebé creció con dos hermanos mayores y con el tiempo dos hermanos menores. El niño creció siendo muy amado por su familia aunque a veces notaban que no era como los demás niños de su edad, a él no le gustaba jugar con camioncitos, autitos ni jugar a la pelota, no le interesaba para nada, al contrario, amaba jugar con las muñecas de su hermana, veía tutoriales de belleza y moda, él tenía muchísimas amiguitas porque jugaban a las mismas cosas, y por ello mismo los demás niños de su cuadra lo molestaban, lo insultaban y despreciaban por no tener los mismos gustos que él, pero él tenía una amiga incondicional que siempre lo defendía de cualquier niño y niña, además, él tenía a todos sus hermanos que lo amaban con toda su alma, que lo protegían y defendían con uñas y dientes, al paso del tiempo el niño fue creciendo y sus intereses seguían siendo los mismos, las burlas e insultos no cesaban, pero seguía teniendo a esa gente incondicional para él.
Un día el niño tuvo la confianza y seguridad suficiente para confesarse con sus hermanos y su amiga; les contó que no le gustaban las niñas, sino los niños y les preguntó que opinaban de eso, ellos le dijeron que no cambiaba nada, que su amor por él seguía estando igual o para más, también le confesaron sus hermanos que siempre se lo imaginaron y que estaban preparados, él niño sorprendido lloró, lloró y lloró, no cabía más en el su felicidad, de poder compartir su secreto que lo atormentaba y que lo siguieran amando igual por quien era él. Después de ese día el niño comenzó a liberarse más en su día a día, comenzó a maquillar a sus hermanas y a él mismo, comenzó a preparar mejor sus oufits, descubrió que amaba cocinar y bailar, sobre todo el k-pop, estaba enamorado de esos cantantes coreanos. Él niño siguió creciendo y conoció su primer amor, nuevamente se atrevió a contarle a sus hermanos y a su amiga, todos lo apoyaban y lo alentaban, pero también lo aconsejaban y cuidaban.. hasta que un día, su mamá se enteró de lo que estaba pasando, enojada le contó a su esposo y a sus padres los "pastores", todo este tema llevo una revolución y división en la familia, los adultos creían que él niño estaba confundido con sus sentimientos y que eran influenciados por sus hermanos y amiga, así que por ello tomaron como medida de castigo para el niño quitarle cualquier forma de red social, no lo dejaban salir de la casa por miedo a que se viera con su novio y no lo dejaban estar a solas con sus hermanos, el niño alegre que siempre cantaba, bailaba y reía mucho se convirtió en un niño triste y apagado que ya no podía hacer nada de lo que le gustaba, se sentía prisionero de su propia familia. Sus hermanos y amiga en lo cubrían y apoyaban de igual modo, aunque tarde o temprano los adultos se enteraban y les daban una reprimienda, aún así ellos siempre unidos ante todas las adversidades lucharon contra su familia y los de afuera.. al paso del tiempo el niño fue creciendo, acercándose cada vez más a la legalidad de edad, donde por fin, podría liberarse por completo y ser quien siempre quiso ser por completo sin miedo a las reprimiendas o el desprecio, solo esperando ese día; para por fin irse a vivir con sus queridos hermanos mayores quiénes aguardaban por él y su felicidad.
