Esa es mi pregunta, no puedo creer que justamente lograra entender de qué me gustas, y más de lo que imaginas. No puedo apartar la mirada a aquellos ojos que me miran de una manera que provoca en mí una desenfrenada ilusión y que mi mente no pare de imaginarse tal escena: tú y esos hermosos ojos que parecen mirarme tiernamente... o, eso es lo que me haces pensar. No sé, es confuso. Hay momentos en los que me pregunto, si tú sientes lo mismo que yo... Tengo miedo, miedo a que sea lo estoy pensando, que no me ames, que no mires con esos ojos de amor, aunque, tus acciones me hacen reflexionar sobre eso. Pensar en ello, me hace sentir mal, como si de ello dependiera mi estado emocional, siento un bajón, uno muy horrible y trato de convencerme de que es mentira y engaño a mi corazón diciéndole que estos sentimientos son falsos. ¡FALSOS!... Me esmero por olvidar y borrar esto que abunda en mí para no terminar rota y que mi pobre corazón sufra por una desgracia, pero... Es difícil.Es difícil desengacharme de tí, de tú compañía y de esas lindas anécdotas que me cuentas con tanta confianza. De aquella sonrisa tan brillante como las estrellas que admiro desde muy lejos y de aquellos ojos miel, dulces, como tus palabras que llegaron a endulzarme el oído y que terminaron por llevarme a ese abismo llamado amor, el cual me es difícil salir.