Tus ojos me recuerdan
las noches de verano
negras noches sin luna,
orilla al mar salado,
y el chispear de estrellas
del cielo negro y bajo.
Tus ojos me recuerdan
las noches de verano.
Y tu morena carne,
los trigos requemados,
y el suspirar de fuego
de los maduros campos.
De tu morena gracia,
de tu soñar gitano,
de tu mirar de sombra
quiero llenar mi vaso.
Me embriagaré una noche
de cielo negro y bajo,
para cantar contigo,
orilla al mar salado,
una canción que deje
cenizas en los labios...
De tu mirar de sombra
quiero llenar mi vaso.
Dame la mano y danzaremos;
dame la mano y me amarás.
Como una sola flor seremos,
como una flor, y nada más...
El mismo verso cantaremos,
al mismo paso bailarás.
Como una espiga ondularemos,
como una espiga, y nada más.
Te llamas Lili y yo Juan;
pero tu nombre olvidarás,
porque seremos una sola danza
en la colina junto al mar...
Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante los continentes;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡Todo sucederá!
Podrá la muerte
cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí,
podra apagarse la llama de tu amor.
¡Eres El Sol Que Brilla En Mi!.
Con todo el amor del mundo te dedico estás palabras desde mi corazón y con la gran satisfacción es que tu eres el motivo de aquel sentimiento tan bonito y de todo el amor que hay en mi para ti.