"Una flor florece para su propia alegría".
●Oscar Wilde●
El aire fresco moviendo las flores a la vez que choca contra mi, refrescadome es lo que más necesitaba en este momento ─ Su Alteza debe volver, el rey a pedido que se resguardara en su palacio .
— Quieres decir mejor que vuelva a estar encerrada en mi cuarto !huh¡ — Que molesto ni siquiera puedo salir a caminar en mi propio prado, ni muchos menos poder ver las flores que tanto trabajo le llevo a mis sirvientes cuidar para mi— Ya en unos meses este lugar ya no estará bajo mi mando espero que perdure .
Yo soy Natalie Davydova Andreyer princesa del reino Outugitish y como toda hija leal y obediente debo acatar su absurda orden de permanecer en el "cuarto" pero lo que es lo peor de todo, es mi matrimonio arreglado porque es así, es como ay que llamarlo y todo para evitar una guerra .
— Natalie se que es apresurado pero debes hacerlo , debemos evitar una guerra a toda costa — Dice desde su escritorio tranquilo revisado papeles .
— Se que quieres evitar a toda costa una confrontación con ese imperio pero porque tengo que sacrificar mi vida, podemos encontrar otra manera pacifica para resolverlo — Digo intentado convencerme de ello pero aún así sé que no cambiara nada.
— Lo intente todo pero es mejor , además es con el emperador con quien te casaras .
— Y debería sentirme mejor por tal elección es un loco amante de la guerra — Grito enojada .
— Es mi ultima palabra tus hermanas son solo unas niñas, esto te compete a ti y es lo ultimo que dire sobre el tema.
Y así como sin nada me vendió para obtener un tajada de dinero no para detener posible guerra y además tener poder en el imperio más grande y rico que ha existido desde hace siglos. Y asi como si nada tendré que dejar él reino como muchas antecesoras como yo debieron hacer por el reino.
Recojo algunos girasoles.
— Su alteza — Dicen al unísono las tres chicas frente mío .Las extrañaré aunque mayormente son muy estrictas cuando se trata de mi siempre las he tenido junto a mi, además a donde voy solo seré una esposa más del montón que abra porque los demás reinos no querrán quedarse atrás sobre ese imperio. Espero no llamar la atención así seria más cómodo pero conociendo será un poco difícil.
— Las extrañare chicas espero solo saber buenas noticias de ustedes — Les digo dándole palmaditas en la cabeza haciéndoles llorar — Ustedes son más que mis sirvientas personales asi que cuídese mucho — Digo y comienzo a caminar hacia mi palacio con ellas detrás de mi limpiándose las lagrimas .
— Su alteza usted seguro sera muy feliz a donde quiera que valla — Dice Laura haciéndome voltear hacia ellas riéndome.
— ¿Lo crees? veremos — Esperemos que así sea, sinceramente no espero amor seria muy tonto y me haría más infeliz por tal al menos espero tranquilas y respeto por mi y mi reino ya lo demás se puede tratar con él tiempo.
"A veces el mejor camino para vencer una batalla es persuadir para que no haya una guerra. "
( Desconocido)
Khalil Alexeyev
Solo veo rostros juveniles con una sonrisas en sus rostros mientras me reverencia, es irritante después de todo cada una de estas señoritas solo ven el puesto no a mi — Emperador necesita decirles algo, vinieron de muy lejos — Lo miro irritando por tal interrupción — Señor son hijas de Duques, condes y princesas de los reinos cercanos — Me susurra .
— Deja que se vayan, solo quiero saber donde esta la princesa que envió el reino Outugitish nada más — Me levanto del trono y camino hacia afuera pasando por todas ellas que intenta llamar mi atención con prominentes escotes y peinados exagerandos.
Dar comienzo a la guerra al tener de una vez el trono fue lo mejor pero ahora no paran de enviar señoritas para retener mi intención de seguir sometiendo más reinos a mi lista, que idiotas — Su Majestad — Reverencia de mis súbditos es lo único que veo al salir al patio delantero del palacio — Señor es un poco tarde para enviarlas de vueltas las dejare en la parte este del palacio — Ah que fastidio solo debería eliminar las pero no quiero que ella me vea así. Puedo hacer cualquier cosa por ella hasta darle este imperio si es así pero lamentablemente no pude encontrarla hasta que empecé la guerra.
Franchesco Dali mi mejor comandante y mano derecha para no decir la única sino fuera por el hecho de que nos conocemos perfectamente los dos ,ya hubiera muerto hace mucho por no llamarme por mi titulo y que haya formado parte del ejercito anterior con los demás o tal vez porque es el único con quien estuvo conmigo en esta jaula de oro desde hace mucho — Debería matarte sabes demasiado — Digo deteniendo mi caminar .
— Como podrías sobrevivir en el palacio sin mi o mejor dicho los demás — Riéndose se detiene también pero para reirse más — Alexeyev somos los únicos sobrevivientes de lo que paso aquella vez, somos familia — Dice y lo miro con el ceño fruncido , si debería matarlo pero no quisiera perder mi mejor guerrero .
— Solo mantela lejoz de mi vista o las mato son irritables .
— Entiendo , entonces porque vamos al jardín de la entrada Su majestad — Dice y se nota su pésimo sarcasmo .
— Veré a mi futura esposa ,déjanos solos ¿entendido?.
— Claro pero como sabes que ella esta alla todavía no te he dicho donde estaba — Pregunta mientras ordena a los demás guardias .
— Solo lo se — Camino dejando atrás el gran numero de guardias y al ver el gran camino de flores la veo , cerca de las flores rojas sus favoritas .Sigue igual o más hermosa de la ultima vez que la vi , ahora su hermoso pelo negro esta más largo casi hasta su cintura , esta más delgada pero igual de hermosa y su cara oh cuanto la extrañe — Natalie — La llamo y la veo ahora de frente con su ceño fruncido al verme , si te encontré porfi mi hermosa flor .
Natalie Davydova
—Que mierd — Me tapa la boca y le doy un manotazo que quita su mano — ¿Que haces aquí? ,¿ sabes que es territorio ? Estas loco y si algún guardia te ve — Miro a los lados por si alguno esta cerca. Curiosamente nisiquiera están los guardias que estaban custudiandome desde que llegué al imperio.
- Tranquila no estará por aquí , solo seremos tu y yo Natalie - Me dice agarrado me de la mano y guiadome hacia una banca cerca.
Uh extraño que hace este tipo aquí, la ultima vez que lo vi estaba escapado de unos asesinos sera — Te volviste un guardia real o eres el famoso comandante de ese tipo, siempre fuiste muy bueno con la espada — Al mirar su ropa debe serlo, ningún pueblerino podría conseguir ropa así y más de ese tipo de tela .
—Sigues igual de parlachina — Se rie y lo miro con enojo por tal osadía, antes estaría muy callado - Disculpa pero es verdad hablas mucho — Le intento dar un zape pero me detiene antes, mierda sigue siendo bueno con sus reflejos — Cariño la agresividad para después ahora solo quiero verte bien ¿ Como te ha hido ? .
— No me vas a responder entonces y es feo responder con otra pregunta — Menciono porque si lo dejo ir no me dirá nada y quiero saber antes de que nos vea un guarda o hasta el dichoso emperador .
— No soy un guardia.
— ¿Y ?.
— Estas hermosa como siempre Natalie — Lo miro sorprendida y el solo me ve sonriendo, este tipo cambio o siempre fue así — Eres ese tipo de flor única y preciosa que no se ve a menudo — Esta bien es seguro este tipo ya no es como el que conocí. Que le pasó en este tiempo que no nos vimos.
Ahora que lo pienso lo único que ha dicho es que me ve hermosa y es obvio, no es que sea muy pomposa pero sé que me veo muy bien a comparación a otras princesas y no es la primera vez que me lo dicen pero porque me pone nerviosa sus palabras — Sabes que me casare con el emperador de aquí, seré una de sus muchas mujeres pero aun asi deberías controlar lo que dices - Ay Dios estoy toda sonrojada y ni siquiera me ha dicho como llego aquí siendo alguien proveniente de la calles bajas.
— Uh tienes razón pero te equivocas en una — Dice quitado me las manos de mis mejillas y agarradome las -—Seras la única esposa del emperador y madre de sus futuros hijos — Me besa los nudillos de ambas manos dejándome perpleja. Me sonríe con una bonita sonrisa, creí que lo sabia lo que era sonreir. Tal vez cambio más que lo físico.
— ¿Porque dices eso ? —Me rio nerviosa, no puede ser debo estar delirando. Ese niño que conocí en las calles bajas no puede ser él verdad?.
— Yo Khalil Alexeyev te pido Natalie Davydova que seas no solo mi esposa también mi emperatriz para gobernar este nuevo imperio y me hagas él hombre más feliz al desposarte ¿ Quieres?
Khalil Alexeyev
— ¿Disculpa?
— No fue buena proposición al parecer — Me mira irritada , es muy adorable por tal con todo lo que conseguí en esta guerra nadie ni nada se compara a tenerla a ella — La próxima lo intentare mejor Natalie .
— Si y mira que yo soy una romántica por naturaleza — Asiento — Pero el problema no es ese como es eso de que eres el emperador y no me divagues — Se levanta y me señala ,debe estar muy enojada como lo predije .
— Te lo explicare mientras caminamos hacia el comedor, ya es hora de cenar.
PVO Natalie
Me levanto siendo guiada por el todo él caminó hacia una gran habitación con también una gran mesa en donde nos sentamos y después comienza a servir la comida.
— Entonces como lo explicas — Me arreglo como dicta la etiqueta y comienzo a comer.
— Si era un vagabundo en ese momento Natalie pero después de un tiempo de preparación y tener todo en equilibrio vine por ti — Me limpio un poco la boca.
— Eso no explica nada, como es que un príncipe termina en los barrios bajos como un pordiosero en un reino vecino — Es casi una tontería.
— Es simple querida es huir o morir deberías saber a lo que me refiero por tu padre — Ah lo había olvidado mi padre llego a ser emperador después de matar a todos sus hermanos y hermanastros de la línea directa y a los de línea indirecta los mando al exilio perdonando sus vidas. Y todo en solo un año cuando los demás pensaba que él había muerto por uno de los atentados de sus hermanos.
— No debiste preocuparte porque tu padre solo tuvo un hijo y no diste de señales de un ingenio superior o magia poniendo el hecho de que no eres hombre o sino estarías en una situación igual o peor que yo — Tiene razón, aún cuando soy la mayor de tres niñas de quince y dieciséis y uno niño dieciocho sigo siendo la mayor — Pero eso es lo que creen ellos de ti ¿no? — Él sabe mi secreto.
— Entonces qué, quieres que sea tu emperatriz así como nada, hace muchos años que no nos vemos.
— Natalie tenemos mucho tiempo para enamorarte y a la par para que te prepares a hacer responsable del título del ser acompañante de un emperador — No nesecitas explicar eso.
— No es como si tuviera opción de negarme.
— Lo tienes, no te obligarte a armarme Natalie, yo jamás te haría eso no a ti de los demás, si quieres puedo darte un palacio separado y tu decides que quieras ser — Oh no pensé que en realidad sería comprensivo.
— Lo pensaré.
Desde hace unos meses que estoy en este imperio y él no me ha pedido respuesta al menos tan directamente. Si que tiene paciencia conmigo desde esa comida él y yo tenemos reuniones como citas por todo el imperio.
Al principio lo sentí con un poco de presión por parte de mi padre pero con ayuda de él mi padre no viene a menos que yo lo quiera también. Siempre estoy en el jardín del Palacio Real y misteriosamente solo él lo cree, él viene a pasear y terminamos cenando juntos.
Las demás señoritas se fueron al día siguiente y aunque algunas intentaron quedarse a la fuerza él las sacó y desde entonces él solo ha estado para mi como yo para él cuando lo conocí intentado escapar de los asesinos y lo ayudé a eliminarlos.
Ya no soy tan tímida al respecto de mi poder de sanación desde que llegué al imperio en eso no lo puedo negar en este tiempo este lugar se volvió mi hogar. Termino mi taza de té y miro la puerta esperando que el aparezca repentinamente como lo ha estado haciendo desde hace semanas. Tal vez tardará esta vez.
Es gracioso que el mismo emperador intente entrar en uno de las alas de su palacio a escondidas.
Aún sé que no lo amó aún pero si sé que me gusta y... — ¿Natalie estás sola?.
— Lo estoy pasa — Me levanto para acercarme a él y puedo ver que vino otra vez con ropa un poco descubierta dejando ver su bien trabajado cuerpo. Al principio me ponía nerviosa bueno aún lo hace peo no tanto.
— Terminaste tu té, quería un poco — Toco sus rulos que sobresale en su frente, están mojados.
— Acabas de bañarte ¿no? — Le pellizco la mejilla haciéndole reir.
— No tanto, deberíamos ir a dormir mañana tenemos reunión con unos diplomáticos del reino vecino — Ah si es verdad, es de ese imperio que ha estado muy festivo desde que él emperador se casó creo que la emperatriz se llamaba Katherine.
—¿ Y a quienes enviaron? — Me subo a mi lado de la cama para después acomondarme enzima de su pecho.
— Su mismísima emperatriz actual vendrá con unos cuantos más, al parecer lo ha estado haciendo por los reinos y imperios cercanos para mantener y solidificar las alianzas de paz en su continente y ahora a venido a este lado del mundo para conseguir más conexiones — Asiento. Que impresionante he escuchado mucho de ella desde se casó con él emperador ha creado muchas cosas importantes y además de la cultural y financiero.
— Es impresionante.
— Aja si a dormir ahora — Me tapa los ojos, me trae recuerdos de ese dia.
— Desde mañana dormiré en tu habitación y aceptaré ser tu esposa, bueno ya soy tu emperatriz después de todo — Me mira sorprendido y le dejo un beso en la boca — Lo he estado pensado mucho y no estaría mal dejarte armarme más a la par de yo a ti — Después de todo debo dejar ir mi miedo de no ser amada por quien soy realmente después de todo él no es y no seria como los demás pretendientes que tuve.
— Natalie...
— Te quiero
— Te amaré más de lo que podrías imaginar — Me pone enzima de mi y pongo mis manos por su cuello y espalda — No sabes cuánto querida — Y me beso. Esto es lo el comienzo de nuestra historia y de nuestras próximas noches de amor.
— Te quiero — Digo entre besos apasionados siento sus manos por todas partes volviendo me loca. Suspiro, tal vez no debí atrasar tanto aceptar que lo quiero más de lo que pensaba.
Fin.♤♧☆