Mi nombre es ERNESTINA, mi relato empieza así… En aquel entonces tenía 18 años, era una mujer soltera que aún vivía con mis padres y trabajaba en una tortillería.
Por otro lado, yo convivía y compartía mucho con la esposa de mi tío, pues era una mujer muy amable y servicial. Su nombre es PLÁCIDA, una mujer morena de 1.74 cm de estatura, cabello negro y lacio, boca grande y un cuerpo realmente lindo. Ella actualmente tiene 60 años.
Ella siempre me trataba muy bien y nos gustaba mucho platicar, sabíamos de antemano que ambas necesitábamos estar cerca.
En una ocasión yo regresaba del trabajo y ya eran las 8 de la noche, de camino a casa pasaba por un callejón oscuro donde había algunas casas solas o sin construir.
De repente vi que Plácida estaba fumando y llorando en aquel callejón, pues su esposo la había insultado y le había maltratado. Por esa razón odiaba a su esposo, es decir, mi tío. Él era muy aprovechado y machista.
En cuanto la vi me acerque a ella y le pregunte que sucedía mientras trataba de consolarla, ella me contaba lo sucedido mientras la abrazaba y le decía que se tranquilizara.
La tomé de sus manos, hablamos y fumamos unos cuantos cigarros, de esta manera al fin logró relajarse. Me dijo que me quería mucho, que era una linda chica y que yo siempre estaba ahí para ella, que yo era la mujer ideal.
De repente se quedó viéndome y me dio un beso en la boca, al principio yo me quise retirar, pero la verdad es que de alguna manera había deseado esto desde siempre, por lo que decidí corresponder ese lindo beso.
Luego de ese beso tan intenso me dijo que si quería más nos encontráramos al siguiente día en la casa de sus papás, que estaría sola.
Así que me fui a mi casa esa noche, no podía dormir pensando en ese delicioso beso y en sí debía ir al día siguiente.
Llegó el momento de decidir si ir o no a aquel encuentro, decidí ducharme y ponerme mi mejor vestido, pues amo usar vestidos y zapatillas… Tomé mi bolso y salí rumbo a lo que sería lo más lindo de mi vida.
Recuerdo haber pasado por la tienda y comprar 2 cajetillas de cigarros FIESTA que por aquel entonces eran muy populares.
Al fin llegué a dicha casa y cuando ella me abrió la puerta la vi con un hermoso vestido, la vi tan linda que mi único impulso fue acercarme a ella y darle un beso.
Este beso fue diferente, fue un beso de pasión, lujuria y deseo, pero sobre todo de amor.
Aún viene a mi mente lo que sucedió después… mientras yo tocaba sus hermosos pechos, ella acariciaba suavemente mi entrepierna, yo estaba muy inquieta de tan solo pensar lo que ocurriría.
Ambas nos despojamos de nuestras prendas mientras nos decíamos cuánto nos necesitábamos y cuantos nos deseábamos.
Ella era la mujer que siempre había deseado que me besara y amara… De pronto ella empezó a besar todo mi cuerpo de arriba a abajo, hasta que llegó justo ahí… Llegó a esa parte donde no pasó mucho tiempo para que me hiciera sentir como en el cielo.
Luego yo decidí hacerle lo mismo… besarle ahí era delicioso… sus gestos eran muy placenteros, pude sentir que la pasaba igual o mejor que yo.
Al terminar fumamos un cigarrillo, ambas sabíamos cuánto nos amábamos… Ese fue el primer encuentro con la esposa de mi tío.
