Es qué
Si buscas respuestas no las hallaras. Es simple pasa por que tiene que pasar. Por cosas que son naturales y se dan. Somos humanos, eso no va a cambiar. Quizás simplemente puedas encontrar la respuestas si buscas el ¿Cuándo? Pero jamás el ¿Por qué? Así fue. Es complejo de saber, pero sencillo de sentir. Amar en sus miles de formas, se da no te tienes que preocupar. Pero es casi inevitable que te preguntes, con respecto sobre quien tienes esos sentimientos. Solo no insistas en querer saber, ¿Por qué esa persona? Eso no lo sabrás, tampoco lo entenderás. Buscaras con lógica, tu parte racional querrá mandar por sobre algo que es emocional. Y perderás la guerra. Por que donde manda el corazón jamás lo hará la cabeza. Y así caerás. Aprendiendo la lección que te da el paso de la vida. Por que estamos en la tierra para aprender. Puede que a veces tengas que repetir las lecciones hasta que las entiendas. O quizás no? Quien sabe errar es humano.
Cientos de pensamientos. Pasaban por la cabeza de Kim SeokJin en estos momentos. Acostado en la cama. A oscuras, observaba el techo de su habitación, sin siquiera verlo en realidad. Su teléfono a un lado de la cama. Se encontraba apagado. No quería ser molestado. La soledad era todo lo que anhelaba en estos momentos. Dejarse llevar por su propio torbellino de pensamientos sobre lo que le pasaba. Podrían las cosas distintas? Las señales eran obvias. Mas que claras. Pero no las quería ver, o por lo menos no quería ser consiente de ello. Engañarse no era la mejor opción, pero si la que dolía menos.
Tenia que ser sincero consigo mismo. Era lo mejor. Ya no sentir lo que sentía, pero era imposible. Soltar esa parte que lo mantenía. De alguna forma feliz.
Es qué ¿Cómo lo dejas ir sin que duela? Como te arrancas algo que es parte de ti? Como soltar sin sentir que te mueres en el intento? Que todo lo que construiste, se desmorona ante tus ojos y no lo puedes detener? Sacrificaras un parte de ti. Para no perder lo que queda.
Amarte…
Su corazón ya no aguantaba. Intentar mantener algo que ya casi estaba derrumbado. Y lo sabia, la venda de sus ojos. Comenzaba a caerse lentamente. Ya no era lo mismo. Su relación, cambio. Todo en esta vida pasa por algo y sentía que de su pareja las cosas no eran las mismas. Su sentimientos. Habían cambiado. Kim NamJoon, estaba ahí para el pero a la vez, se encontraba lejos. Era un amigo, confidente y lo quería… pero no lo amaba. Ese sentimiento era unilateral. Quizás en un pasado si podía haber sentido amor. Pero ahora, ya no era él quien ocupaba el espacio en su corazón, y eso dolía. Lastimaba. Porque no lo quería dejar ir. Aún no. No estaba listo. Lo necesitaba, era su parte mas querida. A la que se aferraba intentando solucionar, aquello que salió mal. Aquello que hizo que todo se convirtiera en lo que es ahora. Una relación de amigos, mas que de una pareja que se ama. Kim SeokJin, solo podía llorar en silencio. Como podía estar triste, sentir que se rompía en mil pedazos y no derramar una lagrima. Por la persona que amaba. Y aun ama. No hay peor ciego que el que no quiere ver. Y es que la esperanza es lo ultimo que se pierde. Se daba ánimos a si mismo. Y lo intentaba de nuevo. Salir a pasear, una que otra cena romántica en la que entablar una conversación amena. Chistes ocasionales, gustos particulares. Recordar lo que antes los unía, y lo que los sigue uniendo sabiendo que puede que no sea del todo cierto. Viajes despejar la mente, compartir el tiempo del otro, demostrando que estarás para el otro en las buenas y en las malas. Que siempre podrían contar con un consejo. Momentos que estarán en el corazón del contrario demostrando, lo hermoso que es ser amado.
Realmente lo harás, que todo funcione para que no dejes ir lo que antes tenias. Darías todo de ti por algo que puede que no vuelva, lo sabes y aun no lo aceptas, dolerá pero deberás soltar para poder sanar. O esto te consumirá, y de ti nada quedará. No te pierdas a ti mismo. Por un amor que ya no será correspondido.
Es un…
No hay nada mas que decir. No hay nada mas que hacer. Ya todo fue puesto sobre la mesa, y nada a cambiado. Gritas, lloras, te tiras al vació. Te deprimes y sonríes para que otros no sepan que la tristeza te consume por dentro. Que vives en automático. Por que tu mente controla tu cuerpo. Observas desde lejos. Eres un espectador en tu propia realidad. No eres consiente de lo que te sucede. La opresión en tu pecho, no te deja respirar. Sientes que te mueres lentamente. Que solo vives, mas no estas vivo en realidad. Pero lo aceptas, lo vas aceptando poco a poco. Gota a gota. Intentas que las heridas sanen y puedas volver a ser tu mismo. Ya todo termino y no puedes hacer otra que cosa que soltar.
Tus amigos te contienen, no te sueltan. No quieren perderte. No saben lo que sientes, pero no te abandonan. Por que te quieren. Esa parte es la que aun te mantiene, sabes que sin ellos realmente no podrías afrontar todo lo que sientes. Son tu sostén, pues familiares ya no tienes. Y el dolor es aun mas persistente. Otra herida que aparece. Pues de nuevo perdiste a esa familia que tenias. Ya no esta se fue. Y no volverá. Tu compañero de vida, Kim NamJoon. Tu pareja. Es el final…
Juego…
Sales, ves la luz. Reconstruyes el romper cabeza que eras. Lo armas, te mejoras. Afrontas la vida, vuelves a sonreír. Eres una nueva versión de ti mismo. Te superas, la lección es aprendida. Kim SeokJin, sonríe, es feliz. Ya no esta en ese lugar en donde no veía el fin de la oscuridad. Lagrimas saladas no adornan sus mejillas rosadas. Esas de tristeza y melancolía que solía dejar salir tiempo a tras. Jugar, se siente bien.
