Salí del colegio y me fui a casa, no quería estudiar así que abrí el ordenador y me metí a la página de la cual me habló una compañera de clase.
Armo mi perfil y espero impaciente a que alguien responda. Pasa un buen rato en el que me distraigo viendo videos de gatos hasta que una notificación salta en la pantalla. Tengo un mensaje.
Lo abro y leo que es un tal Alex que me invita a la pista de bicicletas, que me espera en un rato más y que me da a entender que le ha gustado mi perfil.
Viendo que no hay nadie en casa que me retenga, me cambio el uniforme y me voy a la pista en su encuentro.
Una vez ahí doy la vuelta y paso por el lado de un grupo y luego de otro y otro, así por un buen rato hasta que siento que alguien me observa desde lejos, siento su mirada pero no le veo, doy otro giro y ahí está un hombre de unos cuantos años que me mira fijo, me acerco y digo "Alex?", me mira de nuevo y asiente en respuesta, luego me dice que vayamos a un sitio más apartado dentro del parque en que está la pista, bajo de la bici y camino a su lado, se le ve nervioso y yo también lo estoy, sé que no debo hablar con extraños y mucho menos con hombres adultos que conozco en la red, pero me hago la valiente, repito en mi mente que soy ya grande y que me se cuidar sola, que no me va a pasar nada, pero mi cuerpo tiembla y mi corazón late como si quisiera salir de mi pecho y escapar.
Vamos en silencio, de pronto caigo en cuenta que todo está en silencio, ya no se escuchan los chicos que están en el parque, ni las hojas que se mueven en los árboles, solo hay silencio y Alex no dice nada solo camina junto a mi.
En un momento me hace señal para sentarnos en el pasto, dejo mi bici a un lado y me siento, él lo hace también y luego clava sus ojos en los míos y siento que me habla sin hablar, lo escucho pero su boca no se mueve y su voz está en mi mente como si fuera un trueno.
Me saluda por mi nombre, el real no el que usé en la página, me sobresalto pero no me voy, porque a pesar de que me da miedo lo que pasa, siento que es el lugar y la hora en que debo estar ahí.
Vuelve a hablar dentro de mi cabeza y me dice "tranquila, todo va a estar bien, ya no hay nada de que preocuparse, los demás están arreglando todo para que ya no te hagan más daño".
Mis ojos se abrieron como platos y sentía un amargo sabor en la boca, creía comprender hasta cierto punto lo que éste extraño me estaba diciendo, pero no puede ser posible, nadie sabe lo que pasa, no puedo decir nada y eso es lo que ha hecho que éste secreto sea eso, un oscuro secreto.
- Cómo lo sabes? - pregunto con voz a penas audible.
- Solo lo sé, quisiera que no fuese así, pero no puedo más con ello y por eso hoy es el fin. - dice sin palabras.
- Qué es lo que va a pasar?
- No te preocupes, ya todo está en marcha, no hay vuelta atrás. Debes saber algo antes de que te vayas y necesito que me perdones por lo que pasará en un par de minutos, pero quiero que sepas que no busco lastimarte más de lo que ya te han lastimado, es importante que entiendas eso.
- Porque dices eso? Y cómo es que puedo hablar contigo sin hablar, sin palabras te oigo en mi cabeza? Y qué se supone que me va a pasar en un par de minutos?
- Me oyes porque quiero que me oigas, no necesito hablar con palabras porque lo que tengo que decir, no debe ser dicho y muy pronto te atropellará una camioneta roja, te arrastrará pero no tendrás más que un par de golpes, pero perderás el bebé que llevas en el vientre si es lo que decides.
- Me dices que estoy embarazada y que me van a atropellar y lo perderé si así lo quiero?
- Si, es exactamente lo que te digo. Es tu decisión si quieres tenerlo o no.
En lo profundo lo sabía, quizás sin certeza pero lo intuí desde el principio, el solo hecho de pensar en que cargo con su bebé me repugna y llena de odio, no sobre la criatura sino que contra su padre, entiendo que es un inocente y que como tal no debo desear su muerte pero no quiero tenerle y se lo digo a Alex.
- No puedo tenerlo, no es que quiera matar a mi hijo, solo que no puedo.
- Está bien, todos entendemos y por eso estoy aquí, para ayudarte, hoy todo terminará y empezará un nuevo tiempo para ti, será difícil pero no estarás sola, eso te lo aseguro, no lo has estado nunca, incluso cuando creías que nadie sabía lo que pasaba, que nadie veía tu sufrimiento.
- Eras tu verdad?
- Si y otros también, pero siempre estoy ahí.
- Porqué?
- No lo sé, no importa realmente la razón, solo pasa y eso pesa sobre mi y mi batallón pero ya no más. Estás lista?
- Creo que no lo sabré hasta que llegue el momento. Por donde debo ir?
- Sube a tu bici y ve hacia la izquierda y luego gira en la siguiente calle una vez salgas del parque.
- Gracias, supongo que debo decidir en este momento pero tengo miedo, solo prométeme que no sufriré.
- No puedo prometer que no sufrirás, pero no será peor que lo que ya has vivido, sufrirás pero ese dolor te ayudará en lo que viene, te hará fuerte y te dará la vida.
- Supongo que es el adiós.
- Supones mal, pero ten calma ya tendrás noticias de mi.
Subí a la bicicleta y tomé el camino para salir del parque, a medida que me alejaba empecé a oír el ruido de la gente, la música, los árboles, etc. Doblé en la esquina y de la nada la camioneta roja me impactó, destrozando mi bici y dejándome a mi tendida en el camino.
Poco a poco se juntó una pequeña multitud y varios de ellos comenzaron a llamar a la ambulancia, la que llegó luego de unos minutos.
Una vez de camino, la paramedico que me estaba atendiendo, notó que tenía un poco de sangre en la entrepierna de mi pantalón y que estaba fluyendo con rapidez, me preguntó si estaba embarazada y no supe qué decir solo la miraba sin dejar de llorar.
Al cabo de unos minutos, llegamos al hospital y me ingresan por la urgencia, la camilla iba a toda velocidad por los pasillos, los paramedicos que me llevaban dan paso a los que me esperaban en el hospital y estos comienzan a revisar mi cuerpo, me hacen preguntas pero no me sale la voz y solo tiemblo, escucho sin escuchar y veo sin ver nada en particular, solo un par de figuras borrosas al fondo, solo están ahí paradas y las distingo entre los movimientos de los paramedicos que me atienden.
No siento dolor pero si estoy incómoda en la tablilla de la ambulancia, aun no me cambian a una camilla, pero siento que me mueven, que me revisan buscando algún indicio de las marcas que hay en mi. Cortan mi ropa, toda mi ropa y el espectáculo al que se enfrentan los detiene por un momento, luego vuelven a la acción, me hacen un ultrasonido y ven que hay rastro de que estuve embarazada y estoy perdiendo el bebé, ya es tarde para intentar salvarlo, sobre eso no hay nada que hacer, ven que tengo marcas, golpes, quemaduras, cortes y heridas pero ninguna atribuible al accidente, así que solo me llevan al pabellón para ayudar a salir los restos de lo que fue mi embarazo.
Estoy sedada aún y me hablan a lo lejos, es una enfermera vestida de celeste con traje de plástico que me invita a abrir los ojos y a volver, tras de ella y a mi alrededor un gran grupo de figuras borrosas.
El sueño me vence otra vez y ella otra vez me insta a despertar, una vez que lo consigue, me lleva a una nueva sala, en ella hay una cama más y el espacio para la mía, pero no hay nadie más ahí. La enfermera me dice que descanse que pronto vendrá el doctor, que no me levante y que si la necesito que oprima el botón de la pared. Sale y cierra la puerta tras de sí.
En eso reparo en que hay otra puerta, supongo que es el baño, esa se abre y sale Alex, otra vez habla sin hablar.
- Cómo te sientes?
- Creo que bien, pero tuve miedo.
- Nos viste?
- Eso creo, solo vi sombras, figuras en el fondo de la habitación.
- No temas cuando eso pase, solo estamos ahí y en el momento indicado actuaremos, pero principalmente solo estaremos ahí.
- Gracias a todos por estar conmigo, por ayudarme.
- Aún no hemos terminado, recuerda que esto es sólo el principio, es como una segunda parte de un plan más grande.
- Lo sé, solo que sin tu ayuda aún no saldría de la primera.
- Descansa ahora, estaremos por aquí cerca, tenemos trabajo que hacer pero si me necesitas sólo di mi nombre y vendré.
Así me quedé mirando la ventana de la habitación, no sabía que hora era pero sabía que era de noche, afuera estaba oscuro y en silencio.
Comencé a pensar en mamá, en que quizás me estaba buscando o quizás no, cuál sería su reacción cuando me encontrara, pero por un extraño motivo me alegraba estar en esa cama de hospital, me sentía como nunca antes, sentía que no me importaba como reaccionara, si no que incluso esperaba que no lo hiciera.
Con eso en mente me dormí otra vez, cuando desperté ya era de día y una enfermera me saluda desde la puerta, y me acerca una bandeja con el desayuno. Me preguntó mi nombre y no pude hablar, me dijo que no preocupe que no me esfuerce, veo que mis brazos están descubiertos y que las marcas están a simple vista, ella no me dice nada sobre ellas, solo me pide que extienda uno para medir mi presión. Está normal, tampoco tengo fiebre y hasta el momento no he tenido problemas por el golpe. Me indica que en unos minutos vendrán algunos doctores que quieren hablar conmigo y que todo está bien, que coma y que no me preocupe por nada.
Ella sale y entra una doctora, se llama Laura Shaid y es ginecóloga, ella me explica que tenía un embarazo de algunas semanas, que era ectópico y que era cosa de tiempo antes de que lo perdiera. Me preguntó si había tenido relaciones con mi novio o algo así, pero no me salía la voz, no podía decir nada, solo lloré en silencio, ella me dijo que estaba preocupada porque tenía marcas de haber sido violada y también indicios de abuso y que debía hacer la denuncia a la policía, que es su responsabilidad y obligación.
Me dijo que estaría bien, pero si la necesitaba que le pidiera a la enfermera que le llame y ella vendría.
Una vez ella salió, entró un doctor, un señor ya mayor que se sentó en mi cama, sin hablar me tiende la mano, dudo si tomarla pero lo hago, el toma la mía con cuidado, examina mis dedos, luego mueve mi muñeca, está dolorida y me quejo, lo hace de nuevo más suave y vuelvo a quejarme, luego toma mi codo, y finalmente el hombro, ese duele más y al moverlo suena. Hace lo mismo con el otro brazo y finalmente con mi cuello y cabeza. Me miró con la cara relajada y me sonríe, ha visto mis marcas y cortes, lo entiende, no son del accidente, acaricia mi mejilla y con voz suave me dice que se llama Jorge Henry y que es traumatologo, tengo algunas lesiones en la muñeca, el codo y el hombro, que debe informar de mi situación y que por ahora debo descansar y que pronto me pondrá en lista para tomar exámenes detallados. Se despide y hace un gesto tierno de tocar mi nariz y sale de la habitación.
Al cabo de un rato entra otra mujer, me dice que es una trabajadora social, se llama Ely Michaelson y que si hay algo que quiera contarle, que cuál es mi nombre, que si tenia miedo o si estoy amenazada.
No sabía qué o cómo responder solo juego con el borde de la sábana. Ella me dice que la policía viene en camino que hablarán conmigo y que ellos se encargarán de atrapar a quien me ha hecho daño, cuando lo oigo pregunto:
- Realmente lo atraparán?
- A quien deben atrapar linda? Quién te ha estado lastimando?
- Raúl, el esposo de mamá, él vive con nosotros pero solo me lastima a mi, mi hermano aún es un bebé y mamá está en su cuarto todo el tiempo.
- OK linda y cual es tu nombre?
- Me llamo Danielle Green y tengo 13 años.
- Muy bien Danielle y cuéntame dónde vives?
- Mi casa está a un par de cuadras de el parque de bicicletas, en la Avenida principal en el 483.
- Perfecto Danielle, entregaré estos datos a la policía, ellos se harán cargo de todo ahora. Ahora descansa y vendrá la enfermera a verte.
Al cabo de unos minutos, la enfermera entró con una pizarra pequeña con mi nombre escrito y me dijo que tenía un bello nombre que ella es la enfermera Ali y me dio un chocolate y me dijo que estaba en la lista que había dejado el doctor Henry, sonreí y me dijo que estaba muy linda y que sonriera mucho así la tristeza se iría de mi lado.
El resto de la mañana pasó y por la tarde llegó a mi habitación la policía, dos señores de traje azul marino, el primero alto y moreno ya mayor y el otro más joven, también alto pero con rasgos asiáticos, se presentaron, eran Fuelles y Kim respectivamente, querían saber los detalles y se los di.
Mamá se casó con Raúl hace 4 años, al principio él era abusivo con mamá y yo sentía miedo de él, luego mamá se embarazó y así comenzó a hacer cosas conmigo en las noches mientras mamá estaba dormida, él la drogaba para que ella se durmiera, luego nació mi hermanito, él es un bebé especial y Raúl los encierra a ambos en su habitación, ahí pasan la mayor parte del tiempo juntos, mientras yo voy a la escuela y al volver hago algunos deberes, pero cuando no lo hago Raúl me golpea, me hace cosas asquerosas, no me gusta estar cerca de él, su olor me da asco y por más intento que me deje, viene cada noche a mi cama.
Solo quiero no tener que volver a esa casa, no me importa lo que pase con mamá o con mi hermano, yo solo quiero que me lleven lo más lejos que puedan de ahí.
-No te preocupes, vamos a ayudarte, ahora debes recuperarte y una vez estés bien veremos donde vas a estar, pero por ahora te quedarás en el hospital - dijo Fuelles.
En eso entró la enfermera Ali y les dice que deben dejarme descansar, los señores de van y me quedo sola, llamo a Alex y él viene.
- Tengo miedo
- Está bien, no te preocupes estamos contigo.
- Qué pasará ahora?
- Estas personas irán tras él y verán lo que ha hecho, lo llevarán a prisión y ahí sufrirá su castigo.
- Qué pasará con mamá y el bebé?
- Ellos hace mucho que ya no están?
- Qué pasará conmigo?
- Tendrás una vida, aún no es tu momento, ahora solo tienes que esperar y aceptar que tu camino recién comienza, lo que te pasó es parte de ti, pero te hará fuerte, todo lo recordarás con dolor, pero ese dolor será el motor que te hará ser feliz, has tu camino en paz porque esta pesadilla ya termina.
- No entiendo todo lo que dices.
- A su debido tiempo lo harás.
Así Alex se despidió de mí, pero no sentí que me abandonara, solo sentí que una paz desconocida se desbordó dentro de mi corazón, no sabía que pasaría conmigo desde ahora en adelante, pero si sabía que fuera lo que pasara, todo estaría mejor que como estaba.