Cuántas personas se habrán parado a observar el mundo que los rodea, una gigantesca biblioteca con libros sin escribir, un cúmulo de historias que avanzan junto a cada respiración de su protagonista, que se juntan sin dar opción a unirse, convirtiéndose mutuamente en parte de un escenario sin importancia… En extras de historias que coexisten con la suya, y de las cuales son completamente indiferentes.
Historias sin iguales, asombrosas a su manera, lados opuestos que comparten similitudes demenciales, el trabajador pesaroso que atrapado en una rutina duda sobre su vida y se arrepiente de su pasado, o el pequeño estudiante que mira con ilusión su primer día de clase ignorando completamente su futuro.
Rayos dorados iluminan el fondo de estas maravillosas historia, calentando y llenando de ilusión aquellos que se detienen a admirarlo, lástima que pocos se detengan a observar la majestuosidad de este brillo. Un eterno olvidado, que pinta de colores el mundo que los rodea, siendo ignorado por las pobres historias que cayeron en un abismo infinito, y las cuales no han sido capaz de volver a sus coloridos inicios, algunas incluso sin haber tenido el privilegio de verlo, siendo condenados a la oscuridad durante el tiempo que ese caprichoso destino decida.
¿Cuánto tiempo estaré allí?.
Nadie puede saberlo, es… completamente impredecible, un pequeño cambio en la rutina o en el que hacer, o la unión con otra historia podrían ser suficientes, pero a veces nada cambia, incluso después de la destrucción y reconstrucción de toda tu vida, seguirás ahí, preguntándote… para qué hiciste todo, mientras dejas que el miedo se apodere de ti por no saber… como podrás salir.
¿Pero lo haré?.
Ja… pregunta equivocada, en ocasiones no pueden salir nunca, son prisioneros eternos de ese abismo, y en otras ellos mismos son los que se obligan a estar allí. La culpa, el miedo, o la total ausencia de algo importante, cuando se incorporan en una historia, hacen cosas realmente… demenciales, pueden dar drásticos giros en la dirección, encaminando a la historia hacia un destino incierto… su total destrucción o la puerta de salida, no puede saberse.
¿A qué te refieres con pregunta equivocada?.
A que hiciste una mala pregunta, déjame preguntarte algo a ti, ¿Cuánto tiempo puedes aguantar? Eso lo decidirá todo, el número de páginas que tenga tu historia, el sí serás capaz de salir o no, y algunas veces… si decidirás abrasar directamente al abismo sumergiéndote en una absoluta locura.
Infinitos caminos que pueden o no llevarte al final deseado, decisiones constantes que poco a poco lo formarán, dirigiéndolo a un desenlace de su vida que es… completamente impredecible.