«Es necesario», «es por el bien de todos», Gloria se repetía estas palabras intentando darse valor para lo que se avecinaba.
En ningún momento de su vida pensó que el día de su boda sería el día más triste de su vida, pero era necesario, su padre necesitaba el dinero o la empresa se iría a la ruina y con ella todo el estilo de vida que su hermana y madre habían tenido.
Amaba demasiado a su familia como para dejarlos sufrir y como la hija mayor tenía que ayudar.
Una melodía interrumpió sus pensamientos y al momento siguiente entro en pánico, era el momento de que la novia hiciera su aparición.
Nerviosa y temblando, fue hasta la entrada de la iglesia y justo allí se dió cuenta de algo, su futuro esposos debería se muy rico para poder haber tenido acceso a tan bella iglesia.
Jamás conoció en persona quien o como sería su esposo, solo sabía que su nombre era Pablo.
Vio que su padre se acercaba y con paso firme llegó hasta el, su padre sonreía alegremente y al momento de entrelazar los brazos el le dijo «sonrie hija, tu sacrificio salvará a toda tu familia».
En el momento que la novia hizo su entrada todos los acompañantes empezaron a susurrar, la novia sin duda era hermosa y afortunada, rubia de ojos verdes y figura envidiable estaba próxima a casarse con el hombre más rico y guapo del país.
Gloria después de escuchar los comentarios levanto la vista hacia el altar y entonces lo vio, ojos de un azul profundo y un rostro tan varonil, un pelo negro tan oscuro como la noche sin luna,y por lo menos agradeció que su esposo era atractivo, la noche de bodas no sería un problema .
Cuando su padre ofreció su mano al hombre y dijo unas palabras ella levanto de nuevo la vista y de repente sus ojos se encontraron con sus ojos zafiro de el y por un momento todo desapareció.
Fue un instante mágico y fue ahí donde todo comenzó, sin duda alguna ese día fue el día en que todo cambio.