Si pudiese volver el tiempo, hubiese reconsiderado abandonar al hombre que amaba, quien a su vez también me amaba, pero, fueron muchos los errores cometidos por el, era un hombre mujeriego, que en realidad no estaba seguro de si mismo, lo ame como nunca pude amar a nadie más, viví sumergida en dos mundos, mi mundo donde creía en el amor perfecto y el mundo real, donde veía dia a día como mis ilusiones, mis sueños, mi vida entera se consumía amando a alguien que no valoraba todo lo que yo representaba, hui, escape de ese dolor, deje todo atrás para no volver, cerré el pasado, empezando una nueva vida, pensando que esta vez sería diferente cayendo en manos de alguien mucho peor, quien me dio una vida miserable, haciéndome pagar por los errores de su pasado, humillada, ultrajada y menospreciada, concebi el cual fue y es mi vida entera el que me dio valor de continuar, de luchar, de vivir, mi antiguo amor volvió después de tantos amandome aún, yo amandolo quizás, pero ya para que, el siempre esperara por mi, yo no se si volveré, esto es solo la punta del iceberg de mi triste historia. Mi novio, era un hombre imponente, muy guapo de rasgos prominentes y de buena estatura, a su paso, dejaba una sensación de alboroto, ya que era muy popular, las chicas suspiraban por el, yo me sentía orgullosa de estar a su lado, yo una chica, aunque muchos me catalogaban como una mujer hermosa, yo me veía, como alguien de facciones normales, nunca fui vanidosa, ni creída, más bien me piropeaban y yo los creía tontos, ya que no me sentía digna de tantos elogios, si estaba segura que tenía una personalidad imponente, pero me decia que no era para tanto, llegaba a casa de mi novio ya que el trabajaba en casa, tenia su negocio allí y terminaba de trabajar muy tarde, yo iba a buscarlo para salir y lo conseguía con sus ex mujeres en las piernas, daba la vuelta y me iba, sin decir una palabra, me enojaba con el por un tiempo, pero siempre me buscaba, me pedía perdón y yo regresaba una y otra vez, solo por una promesa que me hice, que el no me dejaría hasta que yo lo decidiera, ya que una de sus tantas ex me dijo un día, que nosotros no llegaríamos muy lejos, yo me dije que le demostraría lo contrarío, y asi continúe, por seis largos años, hasta que decidí que ya era suficiente, que debía alejarme, yo había descubierto que tenia una chica nueva, fui a su casa un día y el iba saliendo a buscarla, le pregunte. -¿A dónde vas?- me dijo, -voy a hacer una diligencia ve a tu casa, yo pasaré por ti-. Yo sabía que mentía, ya que en otras ocasiones me mandaba a casa y me pasaba horas esperando y no iba por mi. Le dije.- Se acabó, ya no volveré a tu lado, hoy será el último día que veras mi rostro, cerca de ti.- Jajajaja- se rio- ya veras que volverás, a mi ninguna mujer me deja-. Le dije.- Ya veras, que yo si-. Me fui, y nunca más volví, el me busco, lloró, rogó, pero yo tenía un dolor muy profundo en mi corazón, no pude perdonarlo, pasaron dos años, aunque el seguía buscándome, atravesandose en mi camino, llamándome yo algunas veces me vengaba, le decía, esperame en casa, que hoy iré, lo dejaba esperandome, eso me satisfacía un poco por todo lo que sufrí, en el transcurso de esos dos años conocí a un hombre, estaba pasando por una situación difícil, una separación con su esposa, quien siempre le fue infiel, el la descubrió y estaban en proceso de divorcio, senti pena por el, en parte me identifique con su dolor, salimos un tiempo como amigos, tres meses, desde allí empezamos una relación, en la cual quede embarazada, yo nunca me cuide, ya que pensaba que era estéril, porque con mi relación anterior nunca quede en estado, luego me enteré que fue porque mi ex, era el estéril, rl lo sabía, nunca me lo dijo, lo que si me decía era, que el día wue tuviera un hijo, quería que fuera conmigo, yo no lo deseaba, ya que no me atrevía a tener una relación seria con el, por su conducta, me imaginaba en una casa, con mi hijo esperándolo, hasta que el decidiera llegar a casa. Bueno total que ya tenía yo veintiocho años y ahora si estaba embarazada de otro hombre, a quien pensé que sentía algo de amor por el. Allí empezó mi calvario, lo que temí que me pasaría con mi ex, me paso con mi actual marido, yo embarazada sola en una habitación donde me hospedó, el llegaba embriagado, a medianoche, ofendiendome, comparandome con su ex, poco a poco, fue matando el poco aprecio que le tuve, yo me sentía acorralada, sin saber a quien acudir, a donde ir, sin querer involucrar a mi familia, aunque nunca me golpeo, porque sabía que eso no se lo permitiría, las ofensas verbales, eran cuchillos que desgarraban mi alma, lo odie, lo desprecie, como el lo hacía conmigo, llore, abrazada a mi barriga, a mi bebe, quien fue que me dio la fuerza para aguantar, para luchar, nació mi hijo, muy enfermo, quizás a causa de tanto dolor, el sintió todos mis temores, mis lágrimas, sufrió junto a mi. Así empece un nuevo calvario con mi hijo en brazos, llevandolo sola a hospitales, clínicas, ya que el pagaba sus consultas, pero no me acompañaba, su ex, enviaba a sus hijos a perturbarnos, el con ellos era amoroso, con el mio era distante seco, así fue creciendo mi hijo en medió de este conflicto, de palabras obscenas de parte de su padre para conmigo, un dia decidí ya no continuar, y lo converse con el, ya que sobrio, podías dialogar con el, era ofensivo solo cuando se embriagaba, pero sobrio era muy calmado, le dije, que era suficiente, que ya no podíamos seguir, que por el la estabilidad mental de mi hijo y la mía, era mejor separarnos, el decidió cambiar, porque según me amaba, yo decidí ponerlo a prueba por un tiempo, aunque ya no sentía amor por el, por ser el padre de mi hijo y por no darle un padrastro más adelante a mi hijo, o quizas por miedo a enfrentar la vida yo sola, total que en realidad cambió fue diferente conmigo, pero, con mi hijo no cambió, el decía que era por como a el lo habían criado, pero en realidad no se que tan cierto era, porque cuando veía a sus otros hijos era diferente, después de veinticuatro años mi ex sigue intentando reconquistarme, nunca en el transcurso de ese tiempo dejó de intentarlo, y yo descubrí que no e dejado de amarlo, pero para mí ya es muy tarde, ya decidí una vida, pensaba que el no me amaba ya, que solo era capricho, pero el sigue soltero, esperando por mi, pero yo decidí mi destino, ya no hay vuelta atrás, mi historia es muy triste se que lloraré aun muchas veces, y se que quizás no sea del todo feliz pero aprenderé a vivir con ello, mis cuentos de adas se fueron, de príncipes montados en caballos blancos, de amores de primaveras, mis sueños, se convirtieron en pesadillas, y ya no quiero volver a soñar, la vida o quizas mis errores me llevaron por caminos diferentes a los que nunca pensé llegar, pero que sin saberlo, fueron mi destino, o el destino que yo me forje, ya no tengo ilusiones, ya no hay otro lugar a donde ir, o a donde quiera ir
