Primero debo convencerme de que algo así es posible. Segundo, pensar en cada arrepentimiento que tengo, y que afecta a otros. Tercero, elegir por orden.
En el pasado fui una niña muy torpe y cobarde, tan naturalmente malvada en mis pensamientos...incluso si mis profesores y familiares dicen lo contrario, ellos no leían mi mente así que no se puede confiar en el juicio de carácter de otros si apenas compartías.
Digo, claro, fui valiente en muchas ocasiones y mis intenciones eran buenas la gran mayoría de las veces, pero el camino al infierno está pavimentado con buenas intenciones.
Entre mis 3 y 7 años. Las veces que ignoré el sufrimiento de otros compañeros, y de mi propia familia, por pensar que yo estaba bien entonces todo estaba bien. Lo recuerdo.
Las veces que traicioné a alguien por alguna razón egoísta, en un parque de atracciones donde envié unos matones a molestar a mí primo tres años menor que yo porque quería que me dejaran en paz. Qué basura eres yo del pasado. Ahora, ahora nunca lo haré, ¿debe haber indulgencia porque entonces yo tenía 10 u 11 años? Esta culpa nunca se va, incluso si ya me disculpé con él. Cada vez que veo su cara lo recuerdo.
O aquella vez en que mi hermano menor tuvo un accidente automovilístico justo detrás de mí, y yo "no me di cuenta" entonces no volteé con mi bici y no me enteré hasta que mi madre llamó 20 minutos después...porque yo tenía prisa por llegar a un lugar y él me siguió imprudentemente. Yo me di cuenta de que me seguía, y nunca pensé que sería tan tonto como para pasar sin fijarse en los semáforos. No escuché nada pero sentí que debía darme la vuelta, no lo hice y a veces pienso que fue lo mejor, ya que no soy médica y no podría haber hecho nada realmente. Pero también pienso en qué habrá pensado él al verme alejarme del accidente sin voltear atrás. Nunca le dije, pero nuestro vínculo afectivo no volvió a ser el mismo. Aunque quizás eso sólo fue él madurando. Como sea, es irónico, él siempre me estaba siguiendo y me sentí muy amada, ahora sólo yo siento este amor hacia a él como agradecimiento y porque es mi hermano. Lo recuerdo cada vez que pienso en cuanto lo quiero y él se pone molesto.
Por el momento no creo que sea adecuado volver allí, quizás evitar que sucedan sería lo mejor, o tal vez no. Tal vez esas experiencias a las que sobrevivieron los hizo mejores. Necesito creer eso.
Quizás cuando le pedí a mis padres que me enviaran de vuelta a nuestro país, me sentía abrumada a mis trece años con la escuela, pensé que ya no sabía cómo continuar. Tal vez mis padres lo vieron y por eso estuvieron deacuerdo. Tal vez debí quedarme, los estudios allí eran más avanzados aunque más caros...este es el punto en el que me planteo volver en el tiempo. El momento en que muchas cosas cambiaron.
Ya no veo a mis padres, y eso creó un muro tan grande que al final decidí dejarlo como lo que representa mi amor por ellos. Acepté que los amaba más que a nada. Luego empezamos a vivir otra vez como antes pero mucha cosas son diferentes.
Cambia todo cambia, incluso los sentimientos.
Empecé la universidad, o mejor dicho, no empecé la universidad. Este es el momento, el momento más importante para mí futuro y el futuro de ayudar a mis padres con las facturas haciendo algo que me gusta, aprender y leer, estudiar mucho. Fallé el examen tres veces.
Ah, si pudiera volver a mi segundo intento...iría a por otra carrera, cómo no se me ocurrió que obviamente esa no era para mí. Digo, química, física y matemáticas se me daban mejor que biología, y ¿decido irme a medicina? Era un error tan obvio, entonces¿por qué nadie me lo dijo? ¿No era obvio? Yo no lo vi, y soy la que está en mi cabeza, supongo, no debo esperar mucho de otros siendo así.
Como sea, probé la decepción de mi familia, siempre los enorgullecí con mis notas. Duele más cuando caes desde más alto. Lección aprendida. Decido arrastrarme como el gusano que soy, con cuidado y con humildad en el lodo. No sé en qué punto pasó de eso a odiarme y pensar que bendita sea la muerte.
Y a veces cuando traté de hablar con mis padres y estos se enojaban cuando empezaba a decir cosas terribles...y me odiaron, lo vi en sus ojos. También me seguían amando, el amor viene con el dolor, es cuando te das cuenta de que es verdadero. Entonces antes de empeorarlo me tragaba mi propio veneno esperando ya ser inmune. Tal vez debí esforzarme más con ellos y el autocontrol.
En conclusión, dejando de lado mi obvio deseo de blablablá, regresaría al 10 de octubre de 2018, porque está el momento más importante que cambiar sin afectar negativamente a otros. El momento en que pienso "sólo la muerte es peor". Perdería ciertas cosas que tengo ahora, pero creo que mi salud mental e independencia finaciera que viene con la profesión, lo valen.
Nota: la imagen representa que las cosas pudieron ser mejor, pero sólo queda seguir adelante. Si esta es la realidad, debo seguir.
En la ficción todo es posible.