cuando Melissa se enteró de la traición le dolió mucho, pero le dolió más pensar que su hija podría crecer sin un padre ella pensó que en perdonarlo y hacer la desentendida de la situación, pero después de meditar y y analizar la situación decidió por el divorcio, Melissa creyó que si lo perdonaba la situación podría regresar a como era antes pero se dió cuenta que lo primordial de una relación es la confianza y por supuesto el amor algo que en al relación de ella ya no existía, podría perdonar a su esposo pero no podría volver a confiar en él y eso le haría más daño que nada y prefería que su hija creciera en un hogar donde la honestidad y el amor siempre predomina se propuso salir adelante por su cuenta por qué el amor que le tiene a su hija es más fuerte que el amor que sentía por su esposo.