En la prestigiosa academia de Magia de Perima, se llevava a cabo el rutinario entrenamiento de espadas de los estudiantes varones, sin embargo el enfrentamiento de ese día provocó un grave accidente. Gisselle calló bruscamente hacia atrás golpeando su cabeza, el impacto contra el suelo incluso logró hacer revotar el cráneo.

el profesor de espadas se apresuró a socorrerla de inmediato.

hubo un gran alboroto cuando los demás estudiantes vieron al enorme hombre cargando al inconsciente joven con sangre chorreando por su cabeza, las desgracias parecían perseguir al marquesado de Ignis.

Rápidamente fue interceptado por Ashley, la hermana pequeña de Gisselle antes de llegar a la enfermería.

-¿QUE ES LO QUE HA OCURRIDO?- Preguntó alarmada la jovencita de largo cabello castaño y hermosos ojos azules, la angustia y sorpresa emanaban desesperadamente de su ser.

-El joven Marqués Gillbert tropezó durante el entrenamiento- respondió nervioso el caballero.

-RAPIDO, LLÉVALO A SU HABITACIÓN- dijo con prisa haciendo que el caballero confundido la mirara como a una tonta.

-lady Ashley, debemos llevarlo a la enfermeria-

-NO!!- negó inmediatamente -Tenemos una piedra de sanación en nuestro poder- continúo en un tono más bajo, estaban llamando la atención del resto de los estudiantes ya que el profesor novato había sido algo imprudente.

El caballero llevó a Gisselle hasta su cama y la joven Ashley de inmediato se sacó el discreto collar de plata, un insignificante cristal transparente colgaba de el, lo puso justo en el pecho y de inmediato comenzó a emanar una pálida luz azul, la sangre se detuvo y la expresión de dolor en el rostro de Gisselle se relajó por completo.

-es un alivio que cuenten con una piedra de sanación- Suspiró aliviado el caballero, la castaña también suspiro largamente, un cristal de esos era sumamente valioso y casi imposible de conseguir.

Mientras tanto Gisselle tenía un sueño de lo más extraño.

Al despertar, horrorizada vio a todos lados tratando de procesar lo que estaba ocurriendo, aquel accidente había provocado que recordará una parte importante de su vida anterior, un juego otome de fantasía donde su adorada hermana era la villana principal y ella un personaje secundario, la pobre ahora entendía por qué en su vida anterior ese personaje tan atractivo no era un objetivo.

-Debe ser una broma....no es posible, Ashley no va a morir!!.... primero papá y Gilbert...ahora también ella? -

Gisselle sentía un gran pesar en su corazón, la desesperación que sintió en el momento la hizo precipitarse a la habitación de su hermana, salió por la ventana y cruzó hasta los dormitorios de damas. Abrió la puerta con su llave, Ella dormía con una expresión de angustia en el rostro, tenía los ojos hinchados.

al verla se tranquilizó y calló de rodillas al lado de su cama, ella abrió sus amplios ojos azules.

-Gi...Gisselle??..q...quiero decir...-

- No hay nadie tranquila- interrumpió la mayor

-despertaste!!, estaba tan preocupada- Exclamó soltando lágrimas de alivio.

- Estoy bien- abrazó a su hermana dulcemente dando ligeras palmadas en su espalda.

[Sea real o no, no permitiré que nada te ocurra a ti o a mamá]

pensó mientras escuchaba los débiles sollozos de Ashley, aquel aterrador sueño le había dejado un amargo sabor de boca.

[si pasa igual que en el juego, solo queda una semana antes de la llegada de la heroína a la academia, y mi hermana es la única que saldrá lastimada...o muerta. No..no no no, debo hacer que rompa su compromiso con el príncipe,....vital vez mejorar las cosas entre ellos pero, para empezar ni siquiera se hablan correctamente]

determinó claramente su objetivo, ella sabía que su hermana no amaba al príncipe, únicamente quería el apoyo y respaldo del futuro emperador para ayudarla, si descubrían que su hermano era realmente una mujer no dudarían en quitarle la herencia y dársela a su infame y ambisioso tío Daniel.

[desde un principio le dije que no era necesario, pero es tan gentil...aunque en esa cursi historia romántica es una obvia villana ambisiosa de poder]

esperó a que Ashley se quedará dormida y regresó a su habitación sin mayores problemas, de inmediato comenzó a escribir todo lo que recordaba en una libreta negra y mandó una carta urgente a su madre.

Gisselle había sido acorralada un año atrás, su padre y su hermano gemelo, Gillbert, murieron trágicamente en un "accidente de camino"

El carruje fue reducido a cenizas, seguramente por obra de algún usuario de magia de fuego, pero eso no podía ser probado y se dedujo que un rayo había causado todo.

La Marquesa estaba devastada y tremendamente asustada también, su esposo había peleado recientemente con su hermano Daniel, en el pasado el incompetente y ambisioso hombre había rechazado el marquesado a pesar de ser el primogénito debido a su pobre estado económico, sin embargo Calixto gustoso heredó el patrimonio de sus padres y lo hizo florecer espléndidamente, convirtiéndolo en el territorio más próspero de la región. fue entonces cuando el oportunista Daniel llegó, reclamando la herencia que según el le correspondía.

Calix obviamente no cedio ante su demanda y lo hizo enfurecer, siguió insistiendo he incluso le ofreció comprarle sus tierras y fábricas a un monto ridículo, la muerte de Calixto y su único hijo varon le cayo como anillo al dedo.

Magnolia por otro lado había quedado viuda y sin un hijo. aunado a eso las mujeres no tenían permitido recibir herencias y seguía bajo la sigilosa amenaza de su cuñado Daniel.

Al día siguiente de la muerte de su hermano Gisselle fue vestida con ropa de luto masculina y le cortaron el cabello hasta las orejas.

-Gisselle, a partir de ahora deberás tomar el lugar de tu hermano- dijo Magnolia amargamente tragándose la impotencia que sentía, tratando de lucir fuerte y dura frente a su hija que poco antes había llorado devastadora mente la muerte de su padre y su hermano -ahora tu tendrás que proteger a Ashley ¿de acuerdo?, así que debes ser fuerte como Gillbert-

-si madre- Respondió sorbiendo los mocos de su nariz.

-eres una excelente niña mi amor- la abrazo con dulzura disimulando su desesperación, ella no quería poner sobre su hija una carga tan pesada como fingir ser su hermano muerto, pero no tenían otra opción, de lo contrario todo caería a manos de Daniel irremediablemente, incluidas sus vidas, bien podía obligar a sus hijas a comprometerse o abandonarlas a su suerte.

Gisselle aceptó suplantar el papel de su hermano no por obligación sino por amor, ella conocía la malicia de su tío.

...................,....,.......

al día siguiente que Gisselle recuperará sus recuerdos y notará que su mundo era idéntico al de un juego otome en su vida anterior, afortunadamente aún estaba a tiempo de impedir el fatídico evento que desencadenarìa las desgracias de su familia, pero sobre todo de su hermana.

Con 16 años de edad estaba en segundo años de la prestigiosa academia de Perima, el reconocimiento de la institución era necesario para recibir cualquier herencia noble. la bella Gisselle asistía ocultando las florecientes curvas de su cuerpo, pero su cabello negro brillante y ojos grises como un cielo nublado por una lluvia gentil no la dejaron pasar desapercibida.

inevitablemente atraía las miradas de hombres y mujeres a su paso, caminaba velozmente hacia la oficina de correos con una carta dirigida a su madre pero entre la multitud su fastidioso cuñado le tapó el paso.

- Lord Gilbert, me alegra ver qué se ha recuperado debidamente pero, no debería ir tan rápido por los pasillos, podría volver a caerse- dijo con sarcasmo el príncipe de cabello plateado como la luna y ojos profundamente negros dándole una brillante sonrisa falsa.

-Gracias por su preocupación Majestad, por favor disculpe mi descuido, caminaré lentamente desde aqui- se dispuso a irse pero fue inmediatamente detenido.

- No puedo dejar solo a alguien que acaba de despertar de un coma

-solo ha sido una siesta muy larga alteza, nada que deba preocuparlo

-Ni hablar, lo acompañaré hasta su destino- dijo con la clara intención de fastidiarlo, su relación podía describirse como la de dos enemigos obligados a convivir.

a lo lejos vislumbro la figura de su hermana acercarse velozmente, el príncipe quitó su agarre en el momento y dio media vuelta con apuro.

- acabo de recordar que hay algo urgente que debo atender, una disculpa y valla con cuidado- dijo sin voltear.

[por esto es que causas tantos problemas, cobarde] pensó al ver la obvia reacción del príncipe, de algúna manera había caído enamorado profundamente de Ashley y no podía actuar normalmente frente a ella, en el juego ese amor fue un potente detonante cuando se enteró que solo lo quería por interés.

-Gillbert- saludo Ashley mientras caminaba rápidamente hacia su hermana-¿cómo te sientes?¿te duele algo? - preguntó con preocupación.

-me siento bien, he dormido bastante-

-gracias al cielo, ¿le envías una carta a mamá?- notó el destinatario en el sobre blanco que sostenía.

-si, seguro ya le informaron todo pero, hace mucho que no le escribo

-si, se ha quejado mucho este último mes- río disimuladamente la castaña.

-debo darme prisa, la clase comienza en 10 minutos- aceleró Gisselle mientras se despedía con la mano.

-no vallas a tropezar otra vez-

.....

llegó hasta la oficina de correo de la academia y rápidamente depósito su carta en el buzón con la petición de urgente.

ese mismo día por la tarde, una carta con petición de urgencia llegó a manos de la marquesa viuda de ignis.

Magnolia lo abrió de inmediato y comenzó a leer su contenido abriendo cada vez más los ojos a medida que avanzaba.

..."Madre, me temo que Ashley está siendo objetivo de una conspiración, aún no he confirmado nada pero el peligro puede llegar a ser considerable, el príncipe Esteban sospecha algo de ella, considero que sería adecuado alejarla un tiempo hasta que se enfríe la situación, sugiero que la envíes a un intercambio cultural a Azeta, tenemos parientes lejanos ahí....

...Entre más pronto mejor o podrían caer sospechas sobre mi también"...

La marquesa puso manos a la obra de inmediato, hacia mucho tiempo que varios nobles inconformes con la elección de la princesa heredera habían tratado de desprestigiar al marquesado de Ignis, por fortuna siempre habían sido capaces de lidiar con las difamaciones, pero su punto débil era el mismo pilar del marquesado, el joven Marqués Gillbert y su hermana Ashley.

...........

En la academia, antes del toque de queda de las 7 los bellos hermanos discutían un asunto importante.

-Ir a Azeta por 3 meses?

-si, te quedarás con la Tía Demeter.

-¿Estarás bien sola? si vuelve a pasar algo como ayer no estaré para cubrirte, si te descubren será un desastre-

-Tendré mucho cuidado

-esto es muy repentino ¿por qué estás insistiendo tanto?

-te servirá para practicar otro idioma.

un apuesto joven de ojos intensamente negros no pudo evitar parase en seco al ver a los hermanos discutiendo.

-puedo practicar Arimeo estando aquí, ¡¡no es necesario ir hasta Azeta!!

el joven príncipe soltó la libreta que llevaba en sus manos y abrió los ojos ampliamente, los hermanos voltearon de inmediato ante la perturbación.

-Majestad, ¿se encuentra bien?- preguntó la castaña.

[¿desde cuándo está ahí?] pensó alarmada Gisselle.

-Si....si, estoy bien- dijo con nerviosismo, Ashley estaba más cerca de lo acostumbrado, evitando su mirada se armó de valor y continuo hablando - ¿vas a ir a Azeta?

-Gillbert está insistiendo para que lo haga, parece que me quiere lejos de el

-Majestad, haga la entrar en razón, es importante que la futura emperatriz sea versada en varios idiomas y el Arimeo es especialmente difícil, usted mismo hizo una estadía en Azeta el año pasado-

Esteban quedó mudo, su cuñado tenía toda la razón pero no quería que su bella prometida estuviera lejos de el donde quizá algún zorro pudiera arrebatarsela sin que pudiera hacer nada.

-Creo que Ashley ya entiende Arimeo bastante bien

-¿Ves?-replico la joven.

-ella lo entiende muy bien pero su pronunciación y fluidez al hablar es como la de un niño de 5 años, para completar su dominio debe practicar.

la pareja quedó en silencio ante la observación de Gisselle, su figura era menuda pero podía llegar a ser bastante imponente.

-Solo se irá por 3 meses

[es el tiempo en el que transcurre la desgracia]

pensó la mayor meticulosamente.

-supongo que es inevitable entonces- dijo resignado el de pelo plateado.

-MAJESTAD, ¿Usted también?-

-Para un soberano es de vital importancia saber Arimeo a la perfección, no me gustaría ver qué pasas por dificultades en el futuro-

-¿Tengo derecho a negarme?

-NO- respondió tajantemente Gisselle- solo intentaba que fueras por las buenas-

ambas hermanas se miraban de manera desafiante generando una pesada atmósfera que incomodó y alertó al príncipe.

-Debiste decirlo desde un principio, habría ahorrado mucha energía, incluso involucraste a su Majestad- reprochó resignada poniendo una mano en su frente con fastidio.

-¿cuándo me voy?-

-en 3 Días

-¿QUÉ?- exclamó sumamente descolocado el príncipe.

-¿por qué siempre eres tan precipitado? siempre es lo mismo contigo hermano- dijo con calma Ashley que esperaba una respuesta de ese tipo.

el príncipe por su lado tenía una clara desesperación en el rostro.

-Majestad ¿hay algo que quiera decir?- preguntó desafiante Gisselle

-...No, me encargaré de que mi prometida sea bien recibida en Azeta-

- Eso no será necesario, tenemos parientes lejanos que la recibirán con los brazos abiertos-

-ya veo, no tenía conocimiento de eso

-si, aunque no nos unen lazos de sangre con los duques de Rosal ellos son muy apegados a Gisselle desde que era pequeña- dijo con algo de malicia la pelinegra- especialmente su hijo mayor-

el príncipe palidesió ligeramente ante esas palabras, sabia perfectamente de quien hablaba su cuñado.

-seria mejor que la atendieran en el castillo real, después de todo es la futura emperatriz de Perima- insistió con apuro.

-No majestad, los duques Rosal la conocen y sabrán atenderla correctamente, además será más cómodo para ella ¿verdad Ashley?- Preguntó con una clara presión en sus palabras.

la menor suspiró de resignación -Si, estaré más cómoda con la tía Demeter- dijo con una amplia sonrisa.

-.....- el príncipe permaneció en silencio, quería decir algo más, impedir que se quedará en semejante lugar "peligroso" pero no había nada que replicar.

-bueno, te irás en 3 días así que, será mejor que empieces a avisar a todos, no queremos rumores extraños-

El sol comenzó a ocultarse y el "hermano" mayor se dispuso a acompañar a Ashley a los dormitorios de señoritas, pero el príncipe heredero que de pronto había recibido semejante alertadora noticia, tenía que decirle algo importante a su prometida.

-por favor, permita que sea yo quien acompañe a lady Ashley-

-....de acuerdo- aceptó tranquilamente Gisselle ante la mirada confundida de su hermana, el príncipe nunca había hablado tanto frente a ella ni mucho menos habían estado a solas,

Gisselle se quedó observando como se alejaban.

- Majestad, gracias por acompañarme, estoy alagada-

-.....- un silencio incómodo reinó entre la joven pareja

-Ashley....yo....quiero que nos llevemos bien

-¿disculpe?

-yo se que nuestro compromiso es por interés- dijo haciendo a su prometida alarmarse.

-así son los matrimonios en la nobleza ¿no?, pero, tu ......yo......quiero.... me gustaría que te enamoraras de mi- continuó titubeando con un intenso rubor en su rostro.

Ashley estaba muda, no se había planteado tener un interés amoroso ya que lo que más le importaba era ayudar a su hermana, la repentina petición la tomó con la guardia baja.

-Majestad....

-Esta bien si no puedes hacerlo ahora, pero, por favor intenta no ver nuestro compromiso solo como una unión de intereses, tampoco pienses que no me interesa lo que hagas [no seas tan amable con todos]- pensó lo último sin valor a decirlo en voz alta, desde su compromiso no se había atrevido a hablarle correctamente y sería muy descarado de su parte mostrar abiertamente sus celos.

-Esta bien, si usted me lo pide consideraré ver nuestro compromiso de manera diferente- dijo con gentileza mirándolo tiernamente con sus profundos ojos azules, el príncipe entendía que ella no tenía el más mínimo interés romántico en el.

se acercó a ella y la despidió con un beso en la mejilla, ella sorprendida se sonrojó ligeramente

-deberíamos empezar por algo como esto- dijo completamente colorado evitando la mirada confundida de su prometida.

el se fue a paso veloz mientras ella entraba ensimismada a los dormitorios, esa noche dormir fue muy difícil para ambos.