Soy Aurora, crecí con mi padre que es un biólogo marino, ha estudiado eso todo su vida junto con mi madre que era una zoóloga marino, se enamoraron a primera vista al tiempo se casaron, hasta que yo nací éramos una maravillosa familia feliz hasta que un día mi madre le diagnosticaron cáncer cerebral tan solo cuando tenía 7 años, mi madre murió años tiempo perdió la batalla contra el cáncer y mi padre desbastado por la noticia y cuidar a una niña de 7 años sin su amada esposa, mi padre me crió enseñando todo sobre la naturaleza marino me he criado en el océano y lo disfrutaba con él, hasta que llegó un horrible día que el clima anunciaba un mal tiempo, pero mi amado padre estaba ansioso por investigar una nueva especie que salió lo más rápido que pudo para estudiarlo, le dije que no saliera tenía un mal presentimiento fuerte con tan solo a mis 17 años, pero no hizo caso y me prometió volver ante que me de cuenta, lo espere todo el día hasta un momento llegó la Guardia Costera dándome una mala noticia, mi padre colisionó su barco en un arrecife oculto hundiéndose y murió atrapado en su propio barco, no sabía que hacer realmente a esa edad me fui con unas de las hermanas de mi madre, pasaron tres años me gradué como bióloga y zoóloga también, me aleje del mar porque me traía bellos recuerdos y tristeza que quiero que mis padres estén conmigo de nuevo, y disfrutar de nuevo esos bellos momentos, en el funeral de mi padre había un muchacho que lo había visto también en el funeral de mi madre,  me llamó la atención porque tenía algo particular que quiero descubrir, un día trabajando en el centro de rehabilitación marino le estaba explicando a un grupo de persona sobre las ballenas y me pregunta un muchacho muy peculiar que me parecía conocido pero no sabía de donde, pero por protocolo le respondí su pregunta y seguí mi recorrido y el chico me seguía haciendo preguntas que eran obvias de contestar, al final del recorrido el muchacho me siguió preguntando y yo le digo: ¿por qué hace preguntas tan obvia que lo puede contestar un niño de 7 años y casi todas las personas lo saben?.

El chico: Bueno no hay preguntas tontas sino el tonto que no la hace verdad, solo quería saber si es verdad mi información o estoy lo incorrecto, también quería saber ¿si te conozco de algún lado?.

Aurora: Yo también me hacia la misma pregunta creo que te ví en el velorio de mi madre y el de mi padre, estoy en lo cierto.

El chico: Bella dama si me hablas así con acertijos no voy entender nada lo que me dice.

Aurora: Ah lo siento mi madre era Elena Ferrer y mi padre era Alexander Hernández.

El chico: Por supuesto eres su única y amada hija, el Señor Hernández hablaba mucho de usted, cuando tenía tiempo libre iba con él y quería aprender las cosas del océano junto con la Señora Ferrer era todo mágico para tú padre cuando me enteré lo que pasó con tú madre y me quedé acompañarlo, él me inspiró a estudiar marino mercante, cuando estaba terminando mís pasantías cuando me entere de la muerte de tú padre me quería despedir de él y darle las gracias por su ayuda y apoyo, que mal educado soy, yo soy el Segundo Oficial Andrés Montero un gusto bella dama.

Aurora: Un gusto para mí también Segundo Oficial yo soy Aurora Hernández.

Andrés: Hermoso nombre para una bella dama como usted (le besa la mano).

Aurora: Muchas gracias Cadete Andrés.

Andrés: Jajajaja como sabes eso si usted debe saber más de animales y habitad marino, que en mi área de trabajo jajajaja.

Aurora: ¡Que!  Una chica también investiga un poco para saber pequeñas cosas de la vida.

Soy Andrés, he crecido con mis amados padres, mi madre se dedicaba a bienes raíces y mi padre un maravilloso pescador gracias a él aprendí a pescar, como sobrevivir en el océano en búsqueda en alimento, etc y aguantar la respiración por más tiempo bajo el agua, mi madre aunque casi siempre estaba ocupada en su tiempo libre salíamos a la playa a disfrutar un poco del Sol, la arena y del mar, cuando iba creciendo despertó un interés por los habitantes marinos mi padre tenía un amigo que estudiaba exactamente esa área era el Señor Alexander Hernández era un biólogo muy reconocido por todos, mis padres me dejaban pasar un tiempo con él y su amada esposa la Señora Elena Ferrer, ellos me trataba como su hijo y me habla de su amada hija que nunca la conocí en persona porque ellos la dejaba con sus hermanas si era un viaje largo y difícil o si ella tenía que hacer unos estudios para estar más preparada a futuro, de igual manera disfrutaba esos momentos con ellos de estudio, hasta que un día voy a visitarlos y me entero de una desagradable noticia que la Señora Ferrer había muerto por cáncer, solo pensaba lo desbastado que debería estar el Señor Hernández, fui al funeral para darle apoyo moral y que ve que no está solo, cuando allí note su hermoso angelito, la hija amada por ellos, sus ojos eran idéntico a los de su madre, te miraba con esos ojos es como que viera lo profundo del océano no sabes que hay allí o que clase de secreto hay,  solo quería descubrir cada uno de esos misterios no podía con esa mirada te derretía con solo que te viera, al tiempo seguía visitando al Señor Hernández al ver como estaba y seguir estudiando, él me ánimo a estudiar marino mercante porque el veía en mis ojos que quería ser si yo darme cuenta y le doy gracias por eso,  me alentó, me ayudó en algunas cosas que no entendía cuando cumplí mis 17 años de edad hice la prueba de aceptación juntos con mis exámenes médicos y me aceptaron sin ningún problema, de igual manera lo visitaba para seguir estudiando o hablar lo que me había pasado en la Universidad si era algo serio o divertido, mi madre esta orgullosa de mí por escoger una carrera tan hermosa que le hacia recordar como conoció a mi padre, ellos se conocieron cuando mi madre estaba un día de playa con sus amigas, cuando chocó torpemente a un pescador más o menos despistado al ver la hermosa dama se disculpó si fue él que la tropezó, mi madre apenada también se disculpó por eso que no fue su intención de allí se fueron enamorando y hasta ahora siguen junto apoyándose entres ellos, cuando mi padre se enteró que quería estudiar marino mercante se lleno de gozo porque seguía la tradición de los hombres parte de su familia ser fiel al mar y a las mujeres es nuestro lema, seguí estudiando y cuando termine mi etapa teórica ahora me tocaba mi etapa laboral me sentía nervioso y ansioso solo tenía 21 años de edad, era el mejor de la clase y conseguí mi pasantía muy rápido por mis notas excepcionales, paso un año de trabajo duro que solo faltaba días para poder bajarme e ir con el Señor Hernández y darle las gracias por haberme enseñado tanto, pero cuando baje del buque mis padres me dieron una mala noticia que él había muerto, lo único que quería era despedirme de él y darle unas de mis piochas como agradecimiento por todo lo que había hecho por mi,  cuando fui a su funeral, otra vez me conseguí a la hermosa hija de ellos, que me volvió a mirar con esos hermosos ojos que derritia mi corazón, pasaron tres años y ascendí con la empresa privada que estoy trabajando de Tercer Oficial a Segundo Oficial, llegaron mis semanas de vacaciones por una extraña razón quería visitar el centro de rehabilitación y me puse en camino, cuando llegó al centro veo una chica con los más hermosos ojos y una hermosa sonrisa, no sabía sí era ella o no, pero lo quería saber por eso que cada parte del recorrido le hacia una pregunta tonta para hacerme notar por la multitud, cuando llegamos al final del recorrido le hice una última pregunta, que me la contestó dulcemente con esos ojos hermosos y esa sonrisa bellísima, a la final aclare mis dudas con ella si era hija de los mentores más dulce que pudieron existir disfrutaba de su compañía y al parecer ella también.

Andrés: Esta bien bella dama hay que saber un poco más del mundo que esta solo en su área, y cuando la puedo volver a ver de nuevo.

Cuando me decía eso lo mire fijamente a esos ojos zafiros que brillaba más con la luz del atardecer y me agradaba esa sensación.

Aurora: Disculpa me quiere invitar a una cita y, porque todavía me hablas así y que fuera una princesa.

Andrés: Yo no le diría una cita sino una salida de amigos y disculpa si mi vocabulario correcto te incómoda un poco es que me enseñaron como tratar a una mujer correctamente.

Aurora: No me incómoda sino no estoy acostumbrada a esa clase de trato, seguro que quiere solo eso.

Andrés: Si señorita solo quiero solo amigos porque realmente no la conozco, solo conozco una parte de la personalidad suya gracia a sus padres que son mis únicos mentores y si quiere puedo cambiar un poco mi vocabulario a uno que sea más cómodo para usted.

Aurora: Gracias mis padres eran mis más apreciado tesoro, ellos me enseñaron todo lo que se y me gusta que te hallan enseñando su hermosa sabiduría valiosa.

Andrés: Sí, sí considera mi propuesta aquí está mi número de teléfono, me llama o me manda un mensaje.

Aurora: Lo pensaré un poco y te daré mi respuesta por cualquiera de los dos medios.

Andrés: Prefecto entonces voy a esperar su respuesta que sea pronto ( le da un beso en la mano)  hasta luego señorita.

Aurora: (toda sonrojada) hasta luego buen hombre.

Cuando se fue Andrés mi corazón no dejaba de latir tan rápido sentía que se me iba salir del lugar, no sentía el estómago de tanto cosquillas, como un hombre tan correcto como él se interesó en mi en una chica que ha vivido todo su vida en el océano y con animales marinos, me hago tantas preguntas, ¿Cómo reconoció? ¿Por qué me quiere conocer? ¿El siempre ha sido así un hombre correcto o no?, necesito respuesta de tantas dudas, dos días pasaron desde aquel encuentro inesperado, pensando ¿Sera bueno darle la oportunidad?, pero si quiero aclarar mis dudas ya debo tomar la decisión.

Aurora: Le voy a llamar para darle mi respuesta. (Agarra el celular y le marca).

Andrés: Aló buenas tardes.

Aurora: Hola buenas tardes ¿como estas?.

Andrés: Bien porque escucho una hermosa melodía que sale de una dama tan hermosa y ¿como esta usted?.

Aurora: Bien no es para tanto no exagere un poco.

Andrés: Vale esta bien, que le parece mi propuesta del otro día, ¿lo pensó bien?.

Aurora: Sí lo pensé bien y bueno si esta bien vamos a salir como amigos nada más.

Andrés: Excelente, ¿quiere que te recoga mañana como la 2 de la tarde?.

Aurora: Sí esta bien mañana es mi día libre.

Andrés:  Que bueno me pudiera dar su dirección para poder buscarla hermosa dama.

Aurora:  Te lo mando por mensaje de texto.

Andrés: Vale esta bien.

Aurora: Dale adiós que pases una bonita tarde.

Andrés: Para usted también bella dama.

Ya no aguantaba la emoción y contenía los nervios, le acaba de decir que sí a su propuesta pero ahora que me pondré, busque en mi armario una ropa casual que no se viera elegante ni fea, a la final conseguí un vestido floral con la falda que llega hasta las rodillas y con cuello en V, lo combine con unas sandalias casuales con detalles de color plata y unos accesorios color plata.

Aurora: Espero que no sea demasiado.