Cuando tu cuerpo te despierta...

4.17 am

Abro los ojos repentinamente al sentir esa tan conocida opresión el el pecho. Mi corazón late a mil, como si se fuera salir de mí. Me despiertan las taquicardias y la excesiva transpiración de mi cuerpo...

_¡¡La put@ madre que lo re mil parió!!_ reniego entre que me levanto para poner mi cuerpo en orden.

Como odio sentirme así, ¿cuándo carajo va a terminar esto? O sea ya son muchos años, ni la anemia duró tanto, pienso.

Me levanto al baño con diarrea, va en realidad es una sensación en el estómago como de nervios, miedo o que sé yo que inevitablemente hacen que me vaya de cuerpo.

Un extraño cosquilleo en mis manos, como si tuviera una pequeña descarga eléctrica que tiemblan junto al resto de mi cuerpo. Mi cuello estremecido y endurecido como si tuviera la peor de las contracturas, mi presión arterial por el suelo.

A todo esto falta la peor parte, esa desagradable sensación de ahogo en mi garganta, como si el aire no pudiera entrar a mis pulmones, o peor, como si unas manos estuvieran estrangulándome lentamente hasta no dar más.

Realmente quiero llorar, quiero desmayarme y olvidarme de estas sensaciones. ¡Pero no! Soy fuerte, lo sé.

Ya me paso tantas veces que se me hacen imposibles contarlas, pero tengo que admitir que hace meses que no me agarraba tan fuerte esta mierda, a pesar de que normalmente lo sé controlar, esta vez me agarro con todo.

¿Qué hago ahora? Me pregunto.

Primero lo primero, empiezo a controlar mi respiración como aprendí en clase de yoga, porque si no controlo eso primero siento que ¡me voy a colapsar!

Después de mantener el control de mi respiración, trato de relajar mi cuerpo y así controlar las taquicardias y esos choques eléctrico que me carcomen los huesos. Una vez medianamente estable, el mejor remedio para que no avance es la distracción, entonces me pongo a terminar un diseño a mano, pero no, todavía tengo temblores. Me decido por ponerme a escribir en mi notebook una novela que hace un tiempo empecé. Es fundamental y necesario distraer mi mente y mi cuerpo, hasta que este momento terrorífico pase.

Se que no tengo nada, se que estoy sana, realmente soy consciente de eso, pero no lo puedo evitar.

Las primeras veces que me pasó, hace unos años, me asusté, realmente me cague en las patas, flaye que me moría, o que era un infarto, un principio de ACV no sé. En dos oportunidades me desmaye incluso, todos corriendo al hospital pensando lo peor, pero no, no era nada, tan simple vomo u ataque de ansiedad...

Después de un tiempo me animé de ir a un médico, va en realidad fue porque mi vieja me obligó en ese momento. El profesional me explico como funcionaba toda esta mierda de "LA ANSIEDAD Y EL PÁNICO" no estoy completamente seguro de con que nombre lo llamó en aquel momento. En fin me dijo que si bien no es nada grave, ni cuerpo me estaba queriendo decir algo y a futuro lejano si podia provocar otro diagnostico, al final me derivaron a un psicólogo para ver si necesitaba medicarme, pero no quise ir... me propuse superarlo sola, como todas las cosas que me tocaron pasar en la vida... Y bueno acá estoy, lo controlo, pero todavía me hace mierda.

A veces pienso que quizás el cuerpo me esta pasando factura por tener una mente tan activa y atormentada, necesito descansar, pero no puedo, soy de esas personas que necesitan controlar todo, una maniatica del control, y el hecho de no delegar ninguns tarea a nadie termina en el estrés que ser así provoca, y eso es lo que no ayuda mucho en mi, me juega en contra.

Esta vez la vida me juega una mala pasada, estoy cansada profundamente, al principio te asusta saber que tenes que vivir con esto y pensas que no lo vas a soportar. Sin embargo ¡acá estamos!! Paso el tiempo, pasaron años y acá estamos... luchando cansada pero peleandola.

Me he encontrado en miles de estados y pensamientos diferentes, las peores veces son cuando me deprimo y se me van todas ganas de vivir, siento que duele vivir así, la angustia me consume y pierdo todo brillo en mi.

Pero siempre logro poner lo pies sobre la tierra cuando me doy cuenta que no solo mi vida depende de mi, si no también la vida de mis hijos. Cuando sos madre es inevitable que la importancia hacia uno misma pase a segundo plano.

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Parecía que nada estaba funcionando muy bien, por que me seguía sintiendo como la puta mierda!!

Después de un tiempo, un par de horas supongo, los síntomas extremos se van calmando, mi cuerpo queda cansado, muy cansado... me animo a volver a mi cama y aunque me costo un poco, en cuestión de minutos, me duermo, por fin...

Despues de una madrugada tormentosa y un profundo sueño que duró 5 horas...

Ring! Ring!

Ring Ring!

_la puta madre! ¿Quien mierda llama a esta hora?_ Me despierta el puto sonido del celular, pero me doy cuenta que es la alarma.

_Jajaja ¡¡que tarada que soy!!_ me dijo, olvide que puse de alarma con el sonido de llamada para despertarme si o si, hasta que me acostumbre y ya no me despierte ni eso.

Miro la hora y son las 11 a.m., ni ganas de levantarme tengo, otro noche tormentosa me dejó muerta, ya no se como tratar esto y tener energíapara todo lo que toca...

_ ¡¡NO ME QUIERO LEVANTAR HOY!!_ grito pero despacio, no quiero que se despierten mis hij... no termino de pensar que escucho:

_Maaaaaa_ escucho a mi poroto mayor.

_Maaaaaaa_ otra vez.

_ ¿Que pasooo hijo? Veni vos_ le grito desde mi cama.

Normalmente me llama para nada, de pesado que es no más. Es como un radar, necesita ubicar donde estoy jaja.

Así son los tres, mis tres bebés. Viven atrás mio. Teo tiene 11 años, todo un preadolescente. Después le sigue Milo, de 8 años, este pibe es todo un tema, difícil tema. Y por último Gala, de 3 años, la mimosa.

_ ¡Si despertaron todos vengan a mi cama!, no me quiero levantar todavía_ les grito desde mi habitación.

En cuestión de segundos, se suben los tres a mi cama y encienden el televisor (esto es de todos los días, y es costumbre) pero no me molesta para nada, les doy un beso a cada uno y me dispongo a seguir durmiendo...

Después de más o menos unos gloriosos 20 minutos...

_ Mama... mamá!!!_ escucho la vos de Teo.

_¿Que? ¿ QUE PASO?_ digo entre dormida.

_ la abuela mamá, está en el teléfono vieja, dice que es URGENTE!

_Uhhh... que mierda pasó ahora lpm!.._ atiendo el telefono_ Hola mamá ¿qué paso? No me asustes...

_ Hija, la abuela, ella..._ se escucha la voz quebrada de mi mamá al teléfono.

_ ¿QUE LE PASO A LA ABUELA, MAMI?_ le pregunto con extrema desesperación, y mi palpitación a mil._ ¡por favor! decime que pasa..

_ Tranquila hija tranquila, esta viva la abuela, pero tuvo un infarto, esta internada y en coma... hija tenemos que estar preparados, ella... ella ya es muy grande y...

_ ¡¡Para mamá!! ¡Para! que tengo que digerir primero lo que estás diciendo..._ mis lagrimas caen sin previo aviso sobre los brazos de mis hijos que me abrazan con mucha fuerza, no lo puedo creer... ella no, no ella.

Se escucha un silencio al otro lado.

_ Llamo a Andru y voy para allá mami_ le digo después de unos segundos, que necesite para poner mi mente fría._ ¿en qué hospital están?_ pregunto.

_...es estamos en el privado, ese que siempre me atiendo yo_ contesta mi mamá, se nota que esta muy histérica por el momento_ ¡no me acuerdo como mierda se llama!

_ Oka ma, es Clínica Belgrano.— le informo— en minutos estoy allá, espérame y tranquila.

_ Dale hijita te espero— me dice—... te necesito.

— ya se mamá no te desmorones, llego rapido— la consuelo y me despido— Beso mami..

Me quedo en silencio mirando un punto fijo en la pared, mis ojos parecen la Cataratas del Iguazú, no puedo pararlos.

Entonces pienso y trato de no exaltarme demasiado, aunque me muero por llorar, romper, gritar, golpear la paredes... en fin desahogar esta angustia que me carcome por dentro.

Pero no, no puedo... mirando a mis tres engendros que me abrazan y lloran con tristeza, se que debo mantener la cordura, por más que me desgarre el alma.

Es que ella no, NO ella!!!.

Amo a mi abuela, mi viejita, ella es una luz en la vida de la familia completa, cada uno nosotros la adora con su vida, hijos nietos y bisnietos, ella lo es todo, es el sostén que nos mantiene unidos, el pilar de la pirámide, sin ella todo se derrumba.

Es nuestra reina, es la mamá de todos.

Jeanet es su nombre, pero mamita le decimos todos en la familia, mi abuela, es el ser humano más bello del mundo, inoscente y tierno. Perdió a mi abuelo cuando sus nietos todavía no habíamos nacido, por lo qui mamá siempre nos contó, a partir de ese momento dedicó su vida entera a sus descendientes, sin importar nada.

Siempre nos mostró el amor más sincero y transparente en el mundo, ninguno de nosotros teníamos defectos para ella, nos brindó su amor y comprensión sin ninguna regla.

Y ahora..

Se esta por ir... no lo puedo creer, no lo quiero creer!... No puedo ser racional en este momento. Aunque soy consciente que esto iba a pasar en algún momento, nunca llegué a hacerme la idea. Me cuesta aceptar la muerte, y más la de ella...

Agarro mi celular y Marco el número de mi mejor amiga, mi hermana no de sandre, Andree.

_Mami ¿a quien llamas?— Pregunta Milo, mi pequeño travieso.

_ Estoy llamando a tía Andru, así se viene a quedar con ustedes bebotes..— le contesto, me mira y asiente con su carita triste.

_ ¿ Que paso trola?_ me dice Andree al contestar (con cariño y confianza obvio).

_ Che negra, la internaron a mi abuela. — trato de sonar tranquila, respiro profundo—¿ No podes venir a casa y quedarte con los chicos así voy al hospital?

_¡Ya! cambio al piojo y rajo para allá _ me contesta.

_Genia total, sos de fierro hermana...— le digo.

_ Para eso estamos ¿o no?— dice— en minutos estoy en tu puerta.

— ¡Obvio!... aca te espero, te adoro— y cuelgo.

Tengo una familia enorme, pero solo con ella puedo contar en un momento así. La vida nos hizo hermanas... no existe nada que una no sepa de la otra.

Y ella sabe mejor que nadie, lo que mi abuela significa para mi.

Dejo a los nenes tranquilos en la cama, me baño y cambio rápido para salir a penas llegue Andru... Necesito estar allá, necesito estar con ella.

FLASHBACK

— ¡Hijita!, no quiero ir al medico otra vez— me reclama mi abuela.

— Viejita linda, ya teníamos turno, a tu edad tenes que hacerte todos los chequeos necesarios...— le contesto— ¡vas a ir quieras o no mamita!..

— Todo en ti me recuerda a mi, hija— dice y me mira con amor.

— jeje ¿porque lo decís abuela?, vos sos un SOL, yo no..

— ¿como que no? Sos fuerte, trabajadora, amas a tu familia ante todo... podes con todo, hasta me cuidas a mi...— es tan dulce..

— te cuido porque te amo, y te quiero en mi vida para rato— la abrazo fuerte.

— Si hija, lo sé, pero no es tu deber, vos tenes tres hijos y un trabajo— pone una mirada triste— estoy siendo una carga.

— no lo no señorita, no diga esas cosas feas, que usted no es una carga para nadie ¡eh!— la abrazo más fuerte todavia.

— Yo presiento que todo esto es en vano.— me dice resignada.

— ¿porque lo decís abuela?

— ya tengo 89 años, hija, ya cumplí. Tengo una hermosa y gran familia, a parte...— se queda pensando—... se que en algún lugar, mi viejo me está esperando.

— ¡abuela! no digas esas cosas que me ponen triste, seré adulta pero no estoy preparada para no verte mas— realmente no quiero ni pensar en eso...

— es el ciclo de la vida, es lo que nos toca a todos, hija mía...

FIN DEL FLASHBACK

No puedo evitar romper el llanto al recordar sus palabras, el taxista me mira nervioso.

¿ Será que nunca más volveré a escuchar su voz? no puedo evitar martirizarme...

Llego a la clínica, le pago al chófer y bajo volando.

— ¡Mamá! la veo a mi vieja y la abrazo con todas mis fuerzas, hace mucho que no la abrazaba.

— ¡llegaste mi amor!! — llora desgarradamente— ¡te necesitaba mucho mi vida!!

— ya estoy acá mamá, ¿papi? — le pregunto al no ver a mi padre.

— fue a comprarme un agua y algo para comer...

— ¿y los tíos?—le pregunto por sus hermanos. Tengo dos tíos y una tía.

— andaban por acá no sé, los perdi de vista, estaban los tres... no se capaz se fueron, o capaz los llamo el doctor ¿Y si los llamó por que algo le paso a mamá y no medi cuenta?..— pobre esta perdida.

— mamá, tranquilízate, no pasó nada... yo estoy acá ahora— la consuelo..

— Eve, corazón llegaste— me abraza mi tía.

La señora es más falsa que las zapatillas de marca que me compro, pero en fin, es familia, y la familia no se elije... Aparte este momento no es para diferencias.

— ¿las chicas no llegaron?— le pregunto por sus hijas, mis primas Lucia y Macarena...

— .. Todavía no, ya deben estar por llegar— debe ser mentira.

— mamá ¿con Gabriel te comunicate?— Gabriel es mi hermano menor.

— No hija, no pude, no me atendió cuando lo llamé.

Es más que seguro que amaneció de joda el muy pelotudo, 24 años al pedo tiene el pendejo de mierda. Que bronca me hace dar..

— Sientensen voy a preguntarle al médico, si puedo entrar a ver a la abuela...

Me siento desilusionada de que no estén todos acá todavía...

Golpeo la puerta de la guardia y la enfermera que me atiende llama al doctor que la recibió.

Cuando hable con el doctor, el me dio a entender que me estaba esperando, al parecer ya mis tíos le habían avisado que era yo la encargada de los chequeos médicos.

Habre estado 15 minutos hablando con el y explicándole los estudios anteriores que le habíamos hecho y mostrándole todos los examenes, tomografías, etc... Despues me dijo.

— Señorita debo decirle esto porque es mi obligación..

— Digame por favor— le respondo.

— Usted ya está informada que ella tuvo un paro cardíaco, a partir de este su corazón no funcionó más, en este momento esta conectada a la máquina y solo por eso sigue viva. Lo que le quiero decir es que no podemos hacer más nada, con sus casi 90 años ella ya no está luchando... Lo lamento mucho solamente queda... esperar.

El mundo se me vino abajo, siento una angustia y una opresión en el pecho que desgarra mi alma... Lo sabía, se que lo sabia, pero tenía una pizca de esperanza de que solo sea una pesadilla y pronto despertar... Una hermosa ilusión de volver a verla despierta y que esto solo sea un mal trago pasajero.

Se me enfrió la nuca y un escalofrío pesado inundó todo mi cuerpo...

— mu muchas gracias, pu puedo pasar a ... ve verla un minuto— las palabras no me salen con facilidad, solo puedo llorar sin emitir sonido, en este momento lo unico que quiero es verla..

— por favor este tranquila, la enfermera la va a acompañar... lo lamento mucho...

Ya estando en la habitación...

Por unos minutos veo todo oscuro, solo escucho un leve pitido en mis oído...

Al abrir mis ojos ahí está ella, recostada en una cama de hospital con un montón de cables en el cuerpo. Se ve tan reluciente, incluso parece un Ángel... Noto su delgadez, como si hubiese bajado de peso en dos dias que no la vi, su piel esta tan palida y fina que te da la impresión de que se va a deshacer con solo tocarla. Esta muerta, solo está cosa la mantiene latiendo. ¡Esta muerta! y yo no pude hacer nada para evitarlo...

Recuesto la mitad de mi cuerpo sobre la cama, entrelazo mi mano con la suya, y apoyo mi cabeza en su pecho... No quiero soltarla, no quiero aún.. Sus manitos estan frías y no reaccionan al sentir mi tacto..

—¡¡No puede ser!!, no voy a volver a escucharte, ni a ver tus ojitos brillar de amor, no voy a volver a verte! ABUELITAAA, no voy a volver a verte mi viejita— no puedo evitar sollozar.

Hubiese preferido mil cosas antes que llegar al día que tenia que dejarte ir, hubiese preferido mil cosas...

Soy consciente de mi egoísmo, soy consciente que te querías ir, solo no lo quise ver, ni admitir.

Decido salir de ese lugar, no puedo ser egoísta, los demás querrán verla igual que yo, y despedirse.

Es una mierda saber que esta va a ser la última vez que la veo respirar.

Poso un beso en su frente, y con las lágrimas más sinceras de dolor me despido y salgo de esa fría habitación.

"Te amo abuela"

...Adiós.