2 años atrás
Narra Vanesa
Vanesa- Dante baja a desayunar por favor, se hace tarde para irnos
Dante va bajando las escaleras- Porque debo ir al doctor, ya sé que me va a decir, no quiero
Vanesa- Dante por favor no me hagas todo más difícil, quiero asegurarme que tu condición no empeore
Dante- Vanesa no tenemos dinero, ya no soy un niño entiendo bien eso, tengo 10 años
Vanesa- te prometí que conseguiría dinero y eso are, no importa que deba hacer, pero tú vivirás, ahora desayuna
Dante tiene razón, de donde sacaré tanto dinero para su tratamiento, ya ha pasado un mes y ni siquiera he podido encontrar otro trabajo
Narra Enrique
Enrique- que es esto- digo enojado a mi secretaria, me acaba de entregar un papel equivocado
Secretaria- lo siento señor, me equivoqué, no volverá a pasar
Enrique- junta tus cosas, estás despedida
Secretaria- pero señor
Enrique- LARGO
La secretaria sale y quien entra es mi amigo Emiliano- te carreas un humor de perros hermano, es la segunda secretaria que hechas en un mes, porque eres tan exigente
Enrique- porque quiero alguien que sirva, no una tonta
Emiliano- es eso, o que no has encontrado una secretaria que se baje la falda para ti
Enrique- de que hablas
Emiliano- Enrique, es tu secretaria, no tu novia, no tu mujer, ni mucho menos una prostituta, si quieres eso, sal de noche y consigue una, pero deja a las secretarias en paz, un error lo comete cualquiera
Enrique- de acuerdo, te aré caso, a ver que consigo de noche, pero buscame otra secretaria que valga la pena
Narra Vanesa
La salud de Dante va en deterioro, no le he dicho nada, no quisiera preocuparlo, verlo jugar me hace feliz, estoy sentada en el patio pensando, hasta que llega mi amiga y me quita de mis pensamientos
Micaela- no le fue bien a Dante verdad
Vanesa- si no lo hago tratar a tiempo, necesitara un trasplante, no soy compatible con él, soy su media hermana, mi madre no está, su padre tampoco, que are, mi única solución es empezar su tratamiento, pero con que dinero
Micaela- conseguí más ventas en la florería hoy y tuve un bono ten- me lo pasa- no es mucho, pero ayuda
Vanesa- gracias Mica, la verdad tú y Dante son lo único que tengo, no lo quiero perder, tendría que tener dinero asegurado, necesita tratarse en el hospital privado, los medicamentos, las químios, ni siquiera sacándome la lotería alcanzaría
Micaela- no has conseguido trabajo y yo solo tengo el de la florería y la señora que limpio su casa
Vanesa- no alcanza Mica, debe haber forma de hacer dinero fácil
Micaela- Ahí dos formas
Vanesa- no venderé drogas, ni lo pienses, no soy así y tú tampoco
Micaela- bueno, entonces una forma
Vanesa- ¿Cuál?
Micaela- siendo una chica de la noche, una chica de la calle, Rocío ganaba bien, gracias a eso se pagó sus estudios y hoy tiene trabajo
Vanesa- yo, chica de la noche, una prostituta, no duraría ni una hora, además quien se fijaría en mi
Micaela- vestida como monja nadie, pero si te arregló, puedas parecer a una y tratar de probar
Vanesa- no tengo opción, un mes ya paso, no puedo esperar a que pase otro, arréglame Mica, trataré de hacerlo por salvar la vida de mi hermano
Mica me abraza, ni yo misma sé que acabo de aceptar, pero ya no tengo opción, un mes más de espera y puede ser tarde para Dante y con trasplante sería más complicado salvarlo, tendré que convertirme en algo que no soy, por no perderlo
Mica me consiguió ropa con Rocío nuestra vecina, una pollera negra corta, apenas tapa mis nalgas, un top rojo que se usa sin corpiño, Mica me maquilla y me dejo el cabello suelto, me miró al espejo y no puedo creer como me veo, de verdad parezco una prostituta, a Dante le mentí, le dije que tenía entrevista de trabajo en un restaurante, jamás le diría en lo que me convertiré por salvarlo. Salgo de la casa y voy camino a la plaza, es donde todas las chicas se juntan.
Narra Enrique
Salgo de la empresa y subo a mi coche con chófer, preferí así, es un coche blindado, oscuro los vidrios, la parte del chófer está separado a la de atrás, por lo tanto, me puedo ir divirtiendo en el camino con la chica que escoja
Narra Vanesa
Llego a la plaza, estoy temblando, decido sentarme en una banca y trato de calmarme, así dudo poder hacer algo, hace 1 año estoy sola y no porque quiera, mi novio murió en un accidente con su bicicleta y preferí mantenerme así, pero hacerlo con un extraño por dinero, siento que no podré, veo dos mujeres de unos 30 años acercarse a mí
Señora- nos podemos sentar y hacerte compañía
Asiento con la cabeza, no me sale pronunciar palabra de tan nerviosa que estoy
Señora- me presento me llamo Sofía y ella es mi amiga Candela, ambas trabajamos de esto hace 10 años y jamás te hemos visto por aquí
Vanesa- es mi primera vez, tengo miedo, pero no tengo opción
Candela- alguien te está obligando
Vanesa- mi hermano tiene 10 años y está enfermo de leucemia, si no consigo dinero y lo hago tratar morirá
Sofía me abraza y Candela saca un pañuelo de su bolso y me lo pasa
Sofía- como te llamas
Vanesa- Vanesa
Sofía- mira, aquí mayoría trabajamos de esto, por cosas similares, yo tengo dos niños, su padre me dejó y para sacarlos adelante y verlos felices me dedico a esto
Candela- yo tengo a mi mamá enferma, es mi única familia, por verla bien entre en esto y me quede por la buena paga, no nos dan trabajo por nuestra edad o bien no tener experiencia
Vanesa- soy joven, pero sin experiencia, no conseguí trabajo, quiero salvar a mi hermano
Sofía- entonces te ayudaremos, te daremos consejos, primero debes tener en tu mente porque lo haces y por quien, ese debe ser tu motor
Candela- segundo, siempre pregunta a tu jefe que quiere, como le gusta, que espera que hagas, según eso empezarás a trabajar
Sofía- la paga lo pones tú, en este momento nuestra tarifa es alta, puedes usar nuestro precio si lo deseas
Vanesa- que pasa si no puedo hacerlo
Sofía- ese es el problema, una vez que aceptes, no te puedes negar, ni echar para atrás
Candela- que tú si, sea un sí y tú no, sea un no
Narra Enrique
Llego a la esquina de la plaza, veo muchas mujeres desde adentro del coche, afuera nadie ve, fijo mi mirada en una chica, cabello suelto y negro, pollera negra corta, está con dos señoras un poco más grandes, creo que son amigas
Enrique- la quiero a ella, no me importa cuanto tengas que darle, la quiero para mí- le digo a mi chófer
Chofer- si señor
Mi chófer se baja y veo que se acerca a ellas
Narra Vanesa
Vemos que un chófer se baja de un coche elegante y se acerca, Candela se levanta y se acerca
Candela- buenas, guapo, estás buscando diversión
Chofer- mi jefe la quiere a ella- dice señalando por mí
Sonia- no creo que sea conveniente, es su primera noche y preferiría que por hoy no trabaje
Candela- tienes más chicas disponibles, si quieres pido que se acerquen y que tu jefe escoja
Chofer- le doy el triple de la tarifa
Agrandó mis ojos, Sonia me dijo cuanto es la tarifa, si me da tres veces más, podría llevar a Dante al hospital y empezar algún tratamiento
Sonia- la oferta es buena, pero creo...
Vanesa- acepto
Sonia y Candela me miran
Sonia- estás segura
Vanesa- tengo sus consejos, sé cuál es mi motor, con ese dinero ya podría empezar su tratamiento
Candela- de acuerdo, mira agenda nuestro número, cualquier cosa nos llamas, cualquier duda o inquietud
Vanesa- gracias
Me pongo de pie y Sonia me arreglo mi cabello, Candela me coloca un poco de su perfume y decido caminar hasta el coche, estuve toda la tarde tratando de caminar con tacones, al final logré conseguir uno no muy alto, jamás me he vestido así y menos usado taco, así que camino con paciencia, el chófer abre la puerta de atrás y antes de subir una mano se extiende, la agarro y subo.
Tengo frente a mí un hombre guapo, musculoso, de bonitos ojos, creía que estos servicios lo pedían la gente de edad, no muchachos, me hace seña y me siento junto a él, trato de calmarme, el chófer sube y procede hablarle
Chofer- señor la chica acepto a cambio de que se le pague el triple de la tarifa, me tomé el atrevimiento de ofrecerle eso
Enrique- está bien, no te preocupes, cierra con seguro y también tu ventanilla, llévame al hotel, me iré divirtiendo con mi prostituta.
El chófer cierra con llave, arranca el coche y cierra la ventanilla que separa la parte de atrás con la de adelante, es en este momento que me estoy arrepintiendo y empiezo a temblar, el muchacho agarra mis manos y me toca la mejilla, más nerviosa me pone
Vanesa- creo que fue mala idea, no debí aceptar, disculpe, me quiero bajar
Enrique- jajaja, que tenemos aquí una prostituta arrepentida, acaso vez poco lo que te daré
Vanesa- puede quedarse con su dinero, pero déjeme bajar
Enrique- eso no pasará, una vez arriba del coche, eres mía, que quieres a cambio de aceptar, más dinero, te puedo dar un coche si lo deseas
Vanesa- no, no quiero más dinero, tampoco un coche
Enrique- entonces
Vanesa- es mi primera noche- le digo mientras agachó mi cabeza
Narra Enrique
Genial lo que me faltaba, se hace la indignada, se quiere bajar, no quiere más dinero del ofrecido, no quiere un coche y me acaba de decir que es su primera noche, no me importa tener que hacer todo yo, con más razón, seré su primer cliente y dependiendo la noche, el único.
Enrique- alguien te está obligando
Vanesa- no, de verdad necesito el dinero
Enrique- entonces la mejor forma, es hacer valer el dinero que te daré, ven en mi regazo
Al parecer mucho no le convence, pero ya está en mi coche y lo que quiero lo obtengo, la quiero a ella no me importa si la tenga que atar a la cama, obedece y se sienta de costado en mis piernas, dejo mi mano en su muslo y la otra en su cintura
Enrique- pasa tus manos por mi cuello y bésame, déjate llevar y no pienses tanto
Narra Vanesa
Estoy sentada en su regazo, me está tocando, quiere que pase mis manos por su cuello y que lo bese, las chicas tenían razón, no estaba lista y una vez aceptado no hay vuelta atrás, me toca obedecer y rogar que la noche termine pronto
Paso mis manos por su cuello, me acerco a sus labios, siento su mano en mi cabeza haciendo presión y ya solo decido ceder, comienza a besarme mientras su mano sube por mi muslo, siento una sensación extraña para mí, no soy virgen, con mi novio lo perdí y varías veces lo hicimos, pero sentir esto con un extrañó.
Enrique- siéntate mirándome con las piernas abiertas
Obedezco, solo me queda obedecer, me siento con las piernas abiertas y el beso sigue, me toca mi espalda y mis nalgas, si no fuera porque el chófer habla, seguro me tendría aquí mismo.
Chofer- señor ya llegamos
Enrique- hora de bajar
Salgo de encima de él, él baja primero y me pasa la mano, bajo detrás de él, vamos hasta él elevador, veo que marca último piso, al llegar el pasillo es largo y se divide en 3, agarramos la de la izquierda, abre la puerta y al entrar veo lo hermoso que es, una suite de Hotel, entramos y el coloca llave, se saca el saco, la corbata y los zapatos, se da vuelta mirándome
Enrique- acuéstate en la cama
Me quito los tacones y me acuesto, él se acerca y más empiezo a temblar, tengo miedo
Narra Enrique
Veo que tiembla, si es su primera noche es comprensible, pero yo pague por ella y no le tendré compasión, aunque para que se encienda más y se convenza qué si quiere, tengo mis tácticas, mis formas, por supuesto usaré todas si con eso calmo sus nervios y logro lo que quiero, que es tenerla
Narra Enrique
Me acerco a ella, la estiro de las piernas a la orilla, bajo el cierre qué tiene al costado de su pollera y se la quito junto a su ropa interior, agarro con mi mano su cintura y empiezo hacerle un oral
Narra Vanesa
No sé que planea hacer, tengo miedo, me estira de las piernas y me quita mi parte de abajo, agarra con sus manos mi cintura y veo que mande su boca a mi zona, antes que pueda reaccionar empiezo a sentir toda su boca en mí entre piernas, jamás sentí esto, siento su labio y su lengua apoderarse de mi zona, no tiene compasión lo hace con fuerza, ahora empieza a estirar con su boca y a chupar, no puedo aguantar y suelto un gemido, él no para, sigue como esta, no le importa si algo sale de mi boca o no, me estoy aguantando el no gemir, me da pena, me mira fijo y me dice
Enrique- deja de morder tus labios o te vas a lastimar, quiero escuchar tus gritos y gemidos, así que deja de aguantártelos o verás que te hago
Prefiero obedecer, no quiero saber que es capaz de hacer, sigue con su juego y yo no aguanto, empiezo a gemir y clavo mis uñas en la sábana, empiezo a temblar y tener calor, creo que estoy por llegar, efectivamente mi cuerpo se libera y él me suelta
Enrique- acuéstate en el lugar que corresponde
No tengo fuerza, pero me arrastro y me acomodo donde pide, él se quita el pantalón, su camisa, corbata y su parte íntima, sube arriba mío, me estira de mis brazos a lo qué me sienta, me quita el top y de un empujón me tira a la cama, levanta mis piernas y se coloca en el medio, ya no ahí vuelta atrás, siento que va ingresando en mí, es grueso, duro y largo, por alguna razón suelto un gemido cuando hace tope, se tira encima mío y mientras mueve sus caderas besa mi cuello y mis pechos, se divierte con ellos, no puedo callarme, sigo gritando sin parar, él empieza a ser más bruto, sale y entra de golpe a lo que me duele, se apodera de mis labios sin dejarme gritar, agarra mis manos por encima de mi cabeza con una de el, la otra lleva a mi zona mientras me embiste, me besa mientras su mano se divierte en mi zona, no aguanto, quiero que pare, saca su mano y agarra mi nalga, empieza más rápido y siento que se vacía en mí, siento todo mi adentro caliente, que bueno que tengo chip, sale de encima mío y pienso que paró, pero se levanta y de la cajonera saca una crema, no sé que sea
Enrique- ponte en cuatro, cabeza y manos en la almohada, rodillas flexibles y nalgas arriba.
No sé que ara, pero decido obedecer, siento que me coloca algo frío y entiendo que ara, quiere entrar por detrás, me pasa su corbata
Enrique- pon en tu boca y dame las puntas
Obedezco, pongo en mi boca y le paso las puntas, agarra con una mano y empieza a entrar, quiero gritar, llorar, pedir auxilio, me duele todo
Enrique- más te vale relajarte, ponerte liviana, porque solo te lastimaré y te aseguro que de todas formas no me detendré
Obedezco líbero mi cuerpo y dejo de hacer fuerza, me estira para atrás con su corbata, empieza a ser más rápido en sus embestidas cuando ve que ya no me duele, con la otra me da de nalgadas, ya no aguanto, pero se sale y entra en mi zona de nuevo de forma bruta, empieza a moverse sin tener compasión, hasta que llega de nuevo, me suelta y yo tiro mi cuerpo en la cama acostado, me duele todo, se levanta y se coloca su parte de abajo, se carga una copa y se sienta en el sillón, me siento en la cama y busco mi ropa
Enrique- nadie dijo que te podías vestir
Vanesa- mi hora termino
Veo que se ríe y no entiendo el porqué
Enrique- te recuerdo que pague el triple, yo decido a que hora se termina
No digo nada, solo agachó la cabeza
Enrique- ponte tu parte de abajo, tu pollera aún no, tampoco tu top, puedes ir al baño si quieres y después vienes a sentarte en mi regazo, entendiste
Vanesa- si señor
Tiene razón me dará tres veces la suma que corresponde, lo tengo que obedecer, voy al baño y siento que todo me duele, pero me relajo y salgo de nuevo, me hace seña y me acerco a él, me siento en su regazo, el suelta su vaso en la mesa y con una mano toca mi muslo y con la otra agarra uno de mis pechos
Enrique- no me digas señor, me llamo Enrique, porque haces esto
Vanesa- necesito el dinero
Enrique- para que, acaso alguien te obliga
Vanesa- lo hago por mi hermano
Enrique- el te amenaza
Vanesa- mi hermano tiene 10 años, está enfermo de leucemia, se la detectaron hace un mes, no he conseguido trabajo y su condición empeora, esta era mi última opción
Enrique- entiendo, pero ahora ahí un problema, soy el primero y único
Vanesa- no entiendo
Enrique- mañana entenderás, por el momento, a la cama, sigue la otra ronda
No digo nada solo me levanto y me acuesto en la cama, me quita mi ropa interior y la suya, sube y entra de nuevo en mí, creo que no me dejara ir hasta el día siguiente, solo tendré que aguantar, al menos se que se llama Enrique
Download MangaToon APP on App Store and Google Play