Comisaría 3:00 am

Un chico salía seguido de su madre que no dejaba de darle golpes furiosa.

- es increíble que de nuevo terminaras en la comisaría, estas destruyendo tu carrera, a este paso nadie va a querer trabajar contigo -

- ya nadie quiere trabajar conmigo de todos, así que, que importa -

-¿que, que importa? ¿Quien va a pagar las cuentas? -

- papá y tu pueden trabajar, no lo han hecho nunca, e trabajado desde que soy un bebé haciendo comerciales, tengo más experiencia que cualquiera - dijo el chico, y subió al auto

-aun así, debes dejar de pelearte con medio mundo, la próxima vez, no pienso sacarte - lo riño su madre

-no me saques tampoco es que necesitaba que lo hiciera, habría salido en 48 horas - respondió el chico mirando por la ventana

-entonces ¿por que llámarme? - le cuestionó su madre

-solo quería avisarte donde estaba - respondió el, y fue todo lo que dijo, el resto del camino estuvo en silencio.

4:00 am

 Casa de Noel

-la estrella en decadencia ataca de nuevo, eso es lo que dicen los titulares - le dijo su padre nada más entrar

 - ¿por qué sigues despierto? ¿No podías esperar hasta mañana para gritarme? - se dejó caer en el sofá y se cubrió la cara con el brazo, mientras escuchaba el sermón de su padre.

Desde hacía un tiempo ya Noel se sentía cansado, toda su vida fue trabajar creció en un set de grabación, ni siquiera fue a la escuela, se educó en casa, eso era aburrido, así que de puro milagro termino la preparatoria.

Él siempre supo que no le gustaban las mujeres, pero desde que se los dijo a sus padres estos lo obligaron a guardar el secreto, pero el año pasado su orientación sexual salió a la luz, y si bien una parte de sus fans lo apoyo, también recibió mucho rechazo, más que nada por parte de los fans de su co-estrella de su última serie, ya que desde el comienzo de esta fue vinculado sentimentalmente con ella.

Lo acusaron de estar usándola para ocultar la verdad, después de tantas quejas del público él fue sacado de la serie, y su vida comenzó a ir en picada.

-si ya terminaste de gritar apaga la luz - le dijo el chico a su padre - quiero dormir.

-disculpe su majestad por mostrarlo - le respondió su padre y se fue dejando la luz prendida, solo para demostrar que tenía un punto

12:00 Pm (día siguiente)

Agencia

- no me gusta ese papel, no pienso Audicionar -

Desde que salió a la luz su orientación, no hacían más que ofrecerle papeles de personajes gay bastante estereotípicos, eso molestaba al chico, sabía que era la manera en la que la industria se vengaba de él, por dejar mal a una de las actrices jóvenes más queridas del país.

- por cierto tu abuela quiere verte - le dijo a Noel, su Manager.

El dejo el libreto sobre el sofá, se levantó, acomodo su ropa y fue a buscar a su abuela.

Esa mujer era la dueña del lugar, todo mundo decía que gracias a ella Noel era una estrella, pero la realidad era al revés, su abuela fundó ese lugar a base del trabajo del chico, cuando la fama de este fue creciendo su abuela fue fundando las bases de lo que hoy era la agencia de entretenimiento que lo representaba.

Tocó la puerta al llegar a la oficina de su abuela, y después entro.

-¿para qué me necesitas?-

-tomate unas vacaciones - le soltó la mujer nada más verlo

-¿me mandas de vacaciones por qué no puedes despedirme? -

-puedo despedirte, no creas que estás exento de eso solo por ser mi nieto -

-se te olvida que esté lugar lo tienes gracias a mí -

-puede ser, pero yo lo convertí en lo que es hoy, y no voy a dejar que tú lo arruines, tomate un descanso, ya tengo todo listo para que te vayas -

Cuando dijo eso el joven noto que había una maleta en la oficina, una maleta que le pertenecía.

-¿me estás mandado de vacaciones sin preguntarme, o decirme a dónde? -

-así es, perdí mucho dinero por tu culpa, tuve que pagar multas por cancelación de contratos y demás, es hora de que me regreses un poco de eso, vas a ir a la granja de una buena amiga mía, ya hablé con ella, va a recibirte, el chofer te está esperando abajo -

El chico estaba harto de todo esto, así que tomo la maleta y fue hacia la salida, en efecto ahí estaba el chófer esperando, así que se subió, sin preguntar exactamente adónde iban y sin despedirse de nadie.

3:00 PM

Del mismo día (la granja)

-¿estamos esperando a alguien? - le pregunto un joven a su abuela, cuando vió llegar una camioneta

-¡ah!, así - le dijo ella - lo había olvidado, estamos esperando al nieto de una vieja amiga -

-¿y me lo dices ahora? - se quejo el joven

-se me olvidó, ya sabes soy una vieja olvidadiza - dijo la mujer quitándole importancia, y abriendo, la puerta que tenían, para evitar que pasaran los mosquitos.

-en serio, abuela, ¿cómo pudiste olvidar algo como eso? Te estás volviendo olvidadiza -

- ya Leonel, el chico está aquí, este no es momento para que me recrimines - le riño la anciana a su nieto.

Salió tras ella para ver quien era la supuesta visita de su abuela, se detuvo en los escalones, y vio a un hombre de unos cuarenta años tal vez, sacar una maleta de la cajuela, después de lo que pareció una eternidad, se abrió la puerta del auto una vez más, y se bajó un chico, más bajo que él y de constitución delgada, su cara le parecía familiar, pero no pudo recordar donde lo había visto.

-tú debes ser Noel - dijo la abuela de Leonel sonriendo

-lo soy - respondió él

- yo me retiro - dijo el conductor del vehículo - con su permiso - se despidió con un asentimiento de cabeza, se subió al auto y se marchó.

Leonel no se movió de dónde estaba, solo se quedó mirando al chico frente a él, mientras se preguntaba. ¿Qué hacía un blandengue como ese en su granja?

La granja

Seis de la mañana, del día siguiente...

Noel no durmió mucho la noche anterior, la cama era pequeña e incómoda.

Además, los gallos no dejaban de cantar, el joven se tapó la cabeza con la almohada, para intentar dormir una vez más, de pronto dejaron caer algo encima de él.

Así que se sentó molesto - ¿cuál es tu problema?- le reclamo al joven que lo miraba desde el día de ayer como si fuera una enorme molestia.

- mi abuela dijo que venías aquí a trabajar, así que levántate, es hora de comenzar el día - dicho esto, el joven se salió, dejando a Noel confundido.

Se quedó al rededor de cinco minutos viendo la ropa de trabajo, esto no era de su talla, y para él no tenía sentido usarlo.

así que lo dejo a un lado y se acostó de nuevo, para volver a dormir, ni bien puso la cabeza en la almohada, alguien le jalo la sábana, y lo dejo al descubierto.

-levantate, mocoso mimado -

-¿cuál es tu problema? - le dijo Noel al chico, frente a él.

-tu, tu eres mi problema - respondió Leonel furioso.

Dos días después...

Noel estaba exhausto, nunca se dormía temprano, Pero aquí la vida comenzaba a las seis de la mañana y terminaba al rededor de las diez de la noche.

Se dejó caer en la cama, a medio vestir, le dolía la espalda, aunque de alguna manera agradecía estar tan cansado, así no pensaba demasiado en su vida en la ciudad.

Cerro los ojos, no pensaba terminar de vestirse, de todas maneras hacía calor. Escucho que tocaron la puerta, pero él no pensaba levantarse a abrir, y tampoco respondió.

La puerta se abrió y escucho pasos, él estaba boca abajo en la cama.

- ponte esto - Leonel dejó caer algo a un lado de la almohada

Usando un poco de la energía que esté aún tenía, lo tomó, eran parches para dolor de espalda.

-¿cómo esperas que me los ponga yo solo, genio? - le respondió a Leonel

Noel sintió el peso, cuando Leonel se sentó a la orilla de la cama, escuche como este rasgaba la envoltura del parche, y después lo sintió en su espalda.

Le sorprendió que él estuviera siendo amable, no lo había sido, ni una sola vez desde que llegó aquí, era más bien hostil, lo que era bueno para él, por qué lo encontraba realmente atractivo, y comenzar a tener sentimientos por este habría sido problemático para él.

-listo - dijo Leonel una vez que termino

-mmm... gracias... supongo - respondió Noel - aunque no sé por qué haces esto por mí, si es obvio que no te agrado -

-no necesito que me agrades, para hacerlo, además si estás todo adolorido no me sirves para nada - respondió el otro chico

-¡vaya! Que considerado eres con tus empleados - le contestó Noel, sentándose con cierta dificultad

-por supuesto que lo soy, no soy un mal jefe, aunque ciertamente me sorprende que sigas aquí, creí qué saldrías corriendo en menos de 24 horas -

-espero que no hayas hecho apuestas, de lo contrario ya perdiste - dijo Noel, mientras buscaba su camiseta, pues de repente se sintió un tanto intimidado por la presencia del otro joven

-estuve a punto de hacerlo, pero supongo que tuve un poco de fe en ti, eres tan flacucho que al principio creí que no podrías con este trabajo, pero supongo que tienes tu orgullo, como sea, ya duérmete, mañana será un largo día -

Noel se sentía confundido, sus sentimientos por este hombre eran muy confusos, por un lado, lo detestaba por la actitud que este tenía para con él, la gente no solía tener este tipo de actitud con el joven actor.

Pero por alguna razón le molesto ser llamado flacucho, pues desde que tenía uso de razón Noel fue obligado a cuidar de su peso, ya que también incursionó en el modelaje, era considerado atractivo para muchas personas, tanto hombres como mujeres, y de repente para el ser llamado así, fue una ofensa.

La mañana siguiente...

Leonel

Mientras Leonel se encontraba desayunando, después de recoger los huevos de las gallinas como todas las mañanas, el "flacucho" como comenzó a llamarlo él, bajo a desayunar.

- no creí que durarías tanto en este lugar, me sorprende que sigas levantándote cada mañana, creí que saldrías corriendo el primer día - dijo Leonel poniendo un huevo estrellado en su plato.

- si, Buenos días, para ti también - respondió el otro chico mal humorado, mientras tomaba una taza, y servía café

-¿cómo quiere tus huevos, revueltos o estrellados? - le pregunto Leonel a modo de ofrenda de paz.

- no gracias, así estoy bien -

- por eso estás tan delgado, entiendo que las personas en la ciudad encuentren atractivo eso, aquí no sirve de nada, y tampoco creo que sea muy saludable - Leonel apagó la estufa, puso la sartén en la lava trastes, y se sentó molesto a comer.

-si, ya te escuché, pero no soy un niño pequeño, puedo cuidarme solo - esa respuesta grosera, solo molesto más al chico mayor.

-¿cuántos años tienes? Por qué esa respuesta solo la daría un adolescente, debes tener unos 19 años.

-tengo 25, hace mucho deje de ser adolescente, así que sí, puedo cuidarme solo- esa respuesta provoco que el grandulón, casi se ahogara con la comida.

-eso me sorprende aún más, eres demasiado viejo para ser tan caprichoso -

La puerta de la cocina se abrió, y entró Carlota, la abuela del muchacho - Leonel, deja de molestar a las visitas, ya vete a trabajar, se hace tarde -

Leonel se comió el resto de su comida, se bebió su jugo, se puso de pie, y coloco ambos trastes en el fregadero.

-¿qué esperas? Muévete se hace tarde - Noel, se tomó su café, y dejó la taza sobre la mesa, para después ir tras él.

Mientras Leonel se ponía sus botas de trabajo, sentado en los escalones, el joven delgado saco un cigarro y lo encendió, para después darle una larga calada.

-¿ese es tu magnífico desayuno? Un café y un cigarro, vaya que quieres morir joven -

-no tengo planeado tener una larga vida - fue la respuesta que obtuvo, el fortachón, además el humo del cigarro casi en la cara.

- tienes una cara bonita, lástima que tu actitud, y tus hábitos sean una mierda - fue la respuesta de Leonel, quien tomó sus guantes de los escalones y comenzó a alejarse.

Hacía mucho tiempo que Noel no se sentía tan afectado por las palabras de alguien, así que sin ánimos de seguir fumando, el chico apago el cigarro, tomo sus guantes, y siguió al chico, del cual ya no se veía ni la espalda, pues sus piernas eran largas, al igual que sus pasos.

Este lugar era una granja que se dedicaba a la venta de quesos, y de conservas como mermelada de diferentes sabores, como la de durazno o naranja, así que desde el día uno que comenzó a trabajar.

Noel que en su vida había hecho otra cosa aparte de estar frente a las cámaras, había estado cortando duraznos, cosa que era bastante cansada para alguien que no estaba acostumbrado al trabajo físico extenuante, esto era una tortura, pero al menos estaba tan ocupado pensado en su cansancio que su mente no daba para nada más.

Cerca del medio día Noel, sentía el sudor escurrir por todas partes de su cuerpo, tenía un pañuelo atado al cuello, y lo usaba para limpiar también el sudor que caía por su frente, y le hacía escocer sus ojos.

Al bajarse de la pequeña escalera que usaban para alcanzar los más altos, el chico sintió un mareo, bueno después de todo no puedes sobrevivir solo de café.

Pero como era un joven demasiado orgulloso se negó a pedir ayuda, y siguió en lo suyo, pero de repente empezó a ver borroso, cuando se bajó para sentarse un piso mal, habría caído al piso, pero unos brazos fuertes y bronceados por el sol, lo sostuvieron.

-debiste haber desayunado cuando te lo ofrecí - le dijo Leonel, cerca del oido.

Noel se quedó viendo al chico que lo sostenía.

- si desayunaras bien, esto no pasaría - lo reprimió Leonel soltándolo

Noel lo miro molesto, y se dejó caer en el césped - eso no es asunto tuyo -

-claro que es asunto mío, en este momento trabajas para mí, si te pasa algo, tendré que rendirle cuentas a tus fans - León, se sentó a su lado, y le ofreció agua.

-¿mis fans? ¿Así que sabes quién soy? - pregunto Noel, mirándolo, sin aceptar aún el agua que este le ofrecía.

- quien no lo sabría, eres un problemático, por esa razón, hasta yo que casi no consumo redes sociales, sé quién eres - Leonel se estaba secando el sudor con un pañuelo de tela que traía.

-eso aclara las cosas, tú no te preocupas por mí, no realmente, solo no quieres problemas - Noel, por fin acepto el agua, pues moría de sed.

- no sé por qué estás aquí realmente, y tampoco voy a preguntártelo, eso es asunto tuyo - León no lo estaba mirando, tenía la vista fija al frente.

-¿no es obvio? - Noel, le devolvió el agua, pero como el otro chico no lo veía, la dejo a un lado - me exiliaron aquí por portarme mal -

Cómo era la hora de la comida, los trabajadores iban y venían, una chica de vestido floreado, iba hacia ellos, Noel no la soportaba, no creía que fuera tan inocente como parecía.

- ¡Leonel! - llamo la chica, sosteniendo su sombrero, con la mano que tenía libre, en la otra traía una canasta - aquí estás, te estaba buscando para darte tu almuerzo - le dijo ella, y Noel le puso mala cara, por qué la chica prácticamente lo ignoro.

Cuando llegó frente a ellos, destapo su canasta, y se la mostró a Leonel, este tomo la canasta - gracias, Coral - ella sonrió

- no agradezcas Leo, ya sabes que no hay problema - Noel estaba observando todos los gestos y movimientos de Coral, y le fue fácil llegar a la conclusión de que ella estaba enamorada de Leonel, lo que no él quedaba claro, era si eso era recíproco, ya que el chico en cuestión no parecía darse cuenta en absoluto, fingía no darse cuenta.

Cuando Coral se fue, si despedirse de Noel, por supuesto, pero tampoco era que él quisiera que está lo tratara como un amigo.

Leonel destapó la canasta, y saco un sándwich, y se lo dio, al joven sentado a su lado - cómetelo todo, no quiero que te desmayes aquí -

Noel tomó el sándwich y le dio un mordisco, realmente le supo delicioso, no sabía si era por qué estaba muriendo de hambre, o por qué de verdad era el mejor que había probado en su vida.

-¿de todos modos cuánto pesas? - pregunto Leonel de repente, te sentí bastante liviano.

- ¿por qué eso te importa? - Noel respondió a la defensiva

- eres un mocoso no deberías preocuparte por algo como tu peso -

-tengo 25 años, ya te lo había dicho está mañana- fue la respuesta de Noel - no soy un mocoso -

Leonel estaba mordiendo su sándwich, y se le quedó viendo con los ojos bien abiertos, El chico más delgado sintió la mirada del más robusto, y a pesar de estar vestido, sintió ganas de cubrirse más.

- no te creo, ¿de verdad eres solo dos años menor que yo? No creí que lo dijeras enserio-

- ¿por eso eres tan condescendiente conmigo, y me tratas como si fuera un niño?- Noel sabía que se estaba portando como idiota, y que estaba siendo grosero, no sabía por qué lo perturbaba tanto que el sujeto sentado a su lado lo viera, y tratara como a un niño pequeño.

- con mayor razón, deberías pesar más, no creo que sea sano que peses tan poco, comete otro sándwich -

El chico menor tomo el sándwich de mala gana, no por qué el otro se lo ordenará, si no por qué aún tenía hambre, hacer trabajo físico todo el día, abría mucho el apetito.

Leonel se puso de pie, y se sacudió las migas de la ropa, recogió todo, excepto el termo de agua, tomo la canasta, y le dio una última mirada al pequeño chico sentado en el pasto.

-voy a dejar este termo aquí, no olvides llevarlo contigo después - Noel se quedó ahí sentado, confundido, mirando a Leonel irse.

era un hombre extraño pensó, además de que encontraba molesto que fuera tan guapo.

Ese mismo día por la tarde…

Noel solo quería darse un baño al final de la jornada, estaba tan sudado y pegajoso, iba con su termo, camino a donde estaban los demás, ya quería volver a casa.

El lugar era más grande de lo que él pensó al principio, pues en la granja también se criaban gallinas, y se vendían los huevos de estas, además de que tenían algunas vacas lecheras, todos los productos, que aquí se producía, se vendían al mercado local.

Noel llegó al final de la arboleda, y se detuvo al ver a coral con Leonel, el chico no supo por qué verlos juntos le parecía tan molesto.

-¿puedes llevarme a mi casa? - le preguntaba la chica, tocándole el brazo

-lo siento, pero aún tengo trabajo por hacer, no se a que hora voy a terminar aquí - Noel sintió cierta satisfacción al escuchar eso, esa chica no le caía para nada bien.

- no importa, yo puedo esperar lo que sea necesario -

-creo que deberías irte con el señor y la señora Rojas, como siempre, ya sabes que si llegas tarde tus padres van a molestarse conmigo -

Los Rojas eran un matrimonio ya algo mayor, que no tenían hijos, ambos trabajan ahí, y venían en su propia camioneta.

- bueno ya que insistes, me voy con ellos - dijo la chica de mala gana

-perfecto, entonces nos vemos mañana, aún debo ver las vacas - Leonel se dio la vuelta y se fue dejando a la chica con el brazo estirado.

Noel no pudo evitar reírse, Coral volteo y lo vio - ¿y tú de que te ríes? -

-es gracioso ver como te rechazan -

-él no me está rechazando, solo que sabe que mis padres son muy estrictos -

-ni tan estrictos, porque si lo fueran no creo que te dejarían trabajar, aunque tal vez ellos también esperan que consigas un buen marido aquí, me imagino que una pueblerina como tú tendría la vida resuelta, si logra conquistar al futuro dueño de la granja - le dijo Noel, a quien a veces le gustaba soltar veneno solo para entretenerse.

La chica se puso roja del coraje - ¿pueblerina? ¿A quién le dices pueblerina? Tú que no eres más que una estrella en decadencia, además de un rarito - respondió esta.

-qué rápido sacas las garras, sabía que esa pinta de niña buena y pura, solo era pantalla -

-yo no saque las garras, solo me estoy defendiendo, me llamaste pueblerina, tú que eres el menos indicado para criticar a alguien, ya no eres ni la sombra de lo que eras, por eso estás aquí, porque ya no eres relevante -

-para no ser alguien relevante estás muy al pendiente de mi vida - respondió Noel, y siguió caminando, se había aburrido ya de esa pelea infantil.

Pero Coral no quería perder, así que fue tras él, y lo tomo del brazo, para detenerlo - mira rarito, no me importas tú, ni tu carrera en decadencia, solo mantente lejos de Leonel, el es mío -

Noel, miro a la chica por encima del hombro - ¿qué, te preocupa que le pegue lo gay? - le dijo para molestarla, y ella lo soltó como si la piel de este lo quemara, él sonrió complacido, lo sabía esta chica era homofóbica, y él pensaba divertirse con eso.

-no te atrevas a meterte con él, te lo advierto, aléjate -

-¿y como vas a impedírmelo? Si él apenas y te da la hora, y yo vivo en su casa - dándole una última mirada, sonrió al ver la reacción de la chica, escandalizada por su respuesta.

Noel no sabía cuanto tiempo estaría ahí, pero ya tenía una nueva diversión, pasaría un buen rato, a costa de esta chica ignorante, y prejuiciosa, que creía que a Leonel se le pegaría lo gay, solo por pasar tiempo con él.