Deben saber que es una novela BL. (Boys Love) Amor entre chicos. Es de fantasía Omegaverse.
El Omegaverse: es un género de novelas que se inició en distintos fandom donde existen los hombres lobo, licántropos o cambia formas. Es una adaptación particularmente destacada por su división en castas. Son divididos en Alfas, Betas y Omegas.
Alfa (α): Son socialmente como individuos dominantes, físicamente atléticos y fuertes, de temperamento intenso y líderes naturales.
Beta (β): Dependiendo de la historia, pueden ser retratados como humanos comunes y corrientes, sin ciclos de celo, sin feromonas o sin reacción a las feromonas de alfas y omegas, o ser una mezcla de características de alfas y omegas, en algunas obras tienen sus propias características.
Omega (Ω): Son como individuos sumisos y gentiles, generalmente calmados y que buscan mantener la convivencia pacífica.
Espero que hayan entendido, cualquier pregunta estoy aquí para contestarles. Estoy a su orden.
♥Sin más preámbulo❤️
Reencarne En El Cuerpo De Mi Alfa Destinado.
Abel es un Omega que está en la recta final de su embarazo. Hudson es un hombre cariñoso y protector que ha estado a su lado durante todo el proceso. Ambos están emocionados y nerviosos por la llegada de su tercer hijo.
Tienen una hermosa familia, Joshua es el hijo mayor, Isaac el menor y el bebé que esta en camino es un niña.
En la pequeña ciudad, la lluvia cae intensamente, creando un ambiente melancólico.
Abel y Hudson han estado preparando su hogar para la llegada de la bebé, decorando la habitación y comprando ropa y juguetes.
A pesar de la tormenta afuera, el hogar está lleno de risas y amor. Sin embargo, hay una sensación de inquietud en el aire; Abel ha tenido sueños extraños sobre el parto que le causan ansiedad.
Mientras se preparan para dormir, Abel rompe fuente y debido a esto están conduciendo directo al hospital bajo la lluvia. Abel tiene contracciones regulares y la lluvia se intensifica.
Hudson intenta mantener la calma mientras conduce, pero las calles se inundan rápidamente y la visibilidad es escasa. Abel conversa con Hudson sobre sus sueños para el futuro, llenos de esperanza y amor.
Abel trata de que no se ponga más nervioso de lo que él ya está.
Mientras Hudson intenta evitar un charco profundo, pierde el control del vehículo. El coche patina y se estrella contra un árbol. La escena es caótica: cristales rotos, sirenas a lo lejos y la lluvia que no cesa. Hudson queda inconsciente mientras Abel es empujado hacia adelante por el impacto.
Abel despierta en medio del desastre, sintiendo un dolor intenso. A pesar de su estado crítico, logra escuchar los gritos de ayuda y siente las contracciones más fuertes que nunca. Los rescatistas llegan rápidamente y logran sacarlo del coche; su estado es grave pero él está decidido a traer a su bebé al mundo.
En el hospital, mientras los médicos luchan por estabilizarlo, Abel entra en trabajo de parto. La escena es tensa: los monitores emiten pitidos alarmantes y los médicos se mueven rápidamente a su alrededor. Con cada contracción, Abel siente que está luchando por su vida y la de su hija.
A pesar de los esfuerzos del equipo médico, Abel queda en estado vegetativo. En sus últimos momentos de conciencia, escucha el llanto de su bebé antes de perder el conocimiento por completo. Su último pensamiento está lleno de amor hacia Hudson y sus tres hijos.
Hudson despierta en el hospital un día después del accidente sin recordar lo que sucedió. Al principio no entiende por qué está allí hasta que le informan sobre el accidente y la muerte cerebral de Abel, su corazón se rompe al enterarse de la mala noticia.
Hudson enfrenta una montaña rusa emocional mientras lidia con la pérdida de Abel y piensa en la responsabilidad de criar a tres hijos solo, también está la empresa que él y Abel llevaron a la cima. Se siente abrumado por el dolor, pero también por la necesidad de ser un buen padre en honor a su amado Abel.
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Una joven Omega que acaba de dar a luz, estaba luchando por su vida y de repente al quedarse dormido, siente una extraña sensación como si estuviera flotando entre dos mundos. Su mente se agita, recordando fragmentos de su vida: risas, sueños y un amor profundo.
Abel se encuentra en un espacio oscuro, un limbo entre la vida y la muerte. Los ecos de su propio llanto resonaban en su mente, mezclados con sus recuerdos más profundos.
Al abrir los ojos, escucha una voz…
_ Abel, mi querido Abel.
_ ¿Quién Eres? Abel está buscando entre el espacio.
_ Soy Daniel Lewis, era tu empleado y t... tu Alfa destinado.
Abel se cubre la boca con sorpresa.
_ Pero nunca lo supe, no lo sentí.
_ Yo lo oculte, eras tan feliz con Hudson y yo no tenía nada que ofrecerte. El día que lo iba a confesar sufrí el accidente que me dejó en este estado. Ahora quiero darte mi cuerpo, es el último gesto de amor que puedo darte, mi querido Abel.
_ P-Pero...
_ Shhhh... Se feliz, mi querido Abel _ Danielempujó a Abel.
Él no solo ha dado a luz; ahora está ocupando un cuerpo que no es el suyo, el de Daniel , su amigo de la infancia y su destinado que ha estado en estado vegetativo durante 12 años.
De repente, Abel se encuentra atrapado en un cuerpo que no le pertenece. Abre los ojos y observa el entorno. La confusión lo invade;
'¿cómo es posible? ¿Por qué él está allí?'
Mientras intenta comprender su situación, recuerdos fragmentados comienzan a fluir: la alegría del embarazo, la angustia del parto y la conexión instantánea antes de cerrar los ojos con su bebé. Pero también hay ecos del pasado de Lucas: sus risas, sus sueños de ser astronauta y las travesuras que compartieron en la infancia. Las memorias se entrelazan, creando un mosaico de emociones intensas.
Abel siente el deseo urgente de comunicarse, pero su cuerpo no responde como debería. Intenta mover los dedos, abrir los ojos más ampliamente, pero todo es un esfuerzo monumental. En su mente grita por ayuda, por ser escuchado. A través de sus pensamientos, se da cuenta de que tiene que encontrar una manera de conectar con el mundo exterior.
La luz del sol entra por la ventana, algo cambia. Concentrándose intensamente, logra mover un dedo. Es un pequeño triunfo, pero suficiente para encender la esperanza. Cada pequeño movimiento se convierte en una celebración; para Abel, es un paso hacia la libertad.
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En la habitación de hospital, iluminada por la luz tenue de la mañana. Daniel un hombre de 32 años, ha estado en coma desde un trágico accidente automovilístico que le cambió la vida.
En la habitación blanca y estéril, rodeada de máquinas que emiten suaves pitidos, Daniel , yace inmóvil. Su cuerpo ha estado en un estado vegetativo durante años, un cuerpo que ha perdido la conexión con el mundo exterior. Sin embargo, dentro de su mente, algo extraordinario está ocurriendo.
La luz del sol se filtra a través de las ventanas, Abel siente un tirón profundo en su pecho, como si una corriente eléctrica recorriera su ser. Es un momento de claridad asombroso; sus ojos se abren lentamente, y el mundo comienza a enfocarse ante él. Todo es brillante y abrumador.
Al principio, Abel no comprende lo que está sucediendo. Él lucha por procesar lo que significa estar despierto en este nuevo cuerpo y esta nueva vida. Hay confusión y miedo entremezclados con destellos de felicidad.
A medida que Abel se adapta a la realidad, comienza a observar su entorno con más claridad. La habitación del hospital es familiar pero extraña; los colores brillantes que antes le parecían opacos ahora tienen vida. Escucha el murmullo constante de las máquinas.
A través del proceso de despertar, Abel experimenta recuerdos fragmentados: risas infantiles, juegos en el parque y momentos llenos de amor. Sin embargo, también hay sombras: vislumbres de dolor y pérdida que parecen pertenecer a otra vida. Lucha por entender quién es realmente; ¿es Abel o es alguien más?. De repente, Abel siente un tirón en su pecho y una presión creciente
La realidad lo golpea como una ola: no comprende cómo ha pasado a ocupar el cuerpo de Daniel. Su mente está llena de preguntas: ¿Qué pasó? ¿Dónde está todo el mundo?.
Hudson
Abel
Daniel
El cuerpo de Daniel estuvo en cama durante doce años, y cuando abrió los ojos, la luz del sol fuera de la ventana casi cegó sus ojos secos. Los instrumentos médicos a su lado, seguían sonando y el cuidador de rutina le miraba como si hubiera visto un fantasma.
Dios sabe, incluso pensó que sus hombros de Alfa, que para empezar no eran fuertes, estaban a punto de sacudirse. Sin embargo, la resurrección de una persona muerta viviente como Daniel no parecía muy bienvenida. Esperó mucho tiempo con la cintura rígida antes de que el médico entrara con el rostro lleno de ira.
_ ¿Cuándo te despertaste?.
Su tono era tan fuerte, que no le prestó atención con la recuperación de su grave enfermedad. Solo la pobre enfermera habló por él.
_ Dos… No, más de tres horas.
_ ¿Por qué es a esta hora? _ escucho al médico murmurar y Abel puso los ojos en blanco. Dejo que le dijera frases desordenadas y se volvió a dormir.
Abel pensó que se despertaría como un vegetal otra vez, pero en realidad, su estómago hambriento se burló de él severamente y se despertó hambriento.
_ ¡Mi*rda! _ le regaño al techo blanco.
_ ¿Estás despierto? _ era la voz del pequeño enfermero, que parecía tan joven que podría convertirse en su hijo. Puso una pajita en el termo del costado y se la entregó a la boca.
_ Bebe un poco, por favor. Tu cuerpo debería poder beber agua ahora.
Tomó un sorbo de una pajita. Su esófago, que había estado seco durante más de una década, estaba caliente y le dolía. De repente tuvo una sensación de realidad, '¿realmente se despertó?, ¿esto no es un sueño en absoluto?'.
El enfermero le quitó el agua casi tan pronto como vio que casi había terminado, y comenzó a susurrar.
_ A continuación, tienes que hacer una serie de pruebas para evaluar si tu salud es normal.
Abel asintió y él continuó
_ Pero puede que sea lento.
_ ¿Por qué? _ Su voz lo sorprendió de nuevo.
Nadie podría haber imaginado que un hombre vegetativo, que había estado en coma severo durante 12 años, todavía pudiera despertar y hablar de manera lógica y normal tan pronto. Aunque su voz estaba ronca, sonando como una hoja de afeitar raspando contra el vidrio.
_ ¡Porque algo grande acaba de pasar en el hospital esta mañana! _ Los ojos del enfermero estaban muy triste _ El esposo del presidente de Bright Group dio a luz a una bebé, pero hubo una gran pérdida de sangre y quedó en estado vegetativo. Es posible que no se salve.
La noticia lo dejó atónito durante mucho tiempo.
_ ¿Quién?.
_ Oh, lo siento. Olvidé que acabas de despertarte _ El pequeño enfermero se rascó la cabeza _ Conoces a Hudson Steward ¿verdad?.
_ Mmn... _ Sus ojos se oscurecieron. Vivió con él durante tantos años. ¿Cómo podría realmente olvidarlo?.
_ ¡Es su esposo! Ha estado casado con su esposo por más de diez años, y tienen una muy buena relación. Cuando nació el segundo hijo, El doctor, que es mi profesor, estaba a cargo de su cuidado. Los dos se aman mucho _ El pequeño enfermero parecía un poco triste _ Me temo que no se salvará esta vez.
Abel escuchó y cerró los ojos, sintiendo que su corazón se congestionaba.
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Tres semanas más tarde...
Cuando estaba en una de las salas del hospital para el tratamiento de rehabilitación, se detuvo para ver a la pobre bebé que nació sin un padre Omega.
Un cuerpo pequeño que era rojo, el cabello fetal en la cabeza era particularmente negro. la bebé lo miró a la cara, con sus grandes ojos siguiéndolo.
_ Se ve tan linda, esperado de…
_ ¿Esperado de qué?.
Abel se estremeció un poco cuando escuchó la voz, y se estremeció aún más cuando se dió la vuelta y vio a la persona detrás de él.
_ Hud… ¡¿Hudson?!.
El Alfa frente a él parecía tan tranquilo que no podía asociarlo con la muerte de su Omega. Abel miró a su hijo y lo observo por un rato.
Los alfas son criaturas fascinantes. Es obvio que esta persona iba a colapsar, pero aún era muy atractivo. Ese tipo de temperamento, que se ha pulido con los años, era más atractivo que él, que había sido un bello durmiente durante doce años.
_ ¿Qué pasa?.
Tal vez su mirada era demasiado desnuda, y le miró después de un momento.
_ No... No _ '¿Cómo me atrevo a decir que sí sucede algo?'.
_ Entonces... Adiós.
_ Mmmm, adiós _ Y agregó cuatro palabras más, para sorpresa de Abel _ Mejórate pronto.
Había peleado con Hudson durante más de 20 años. Se puede decir que desde su nacimiento hasta convertirse en una persona vegetativa, competía con él cada minuto y cada segundo.
Sus padres eran accionistas de empresas. Como la segunda generación de accionistas con una edad similar, sin embargo, era bastante extraño que nunca hubieran jugado juntos.
Lucharon por el primer lugar, por la altura, por la apariencia... Cualquier cosa que pudiera compararse, competían. Aunque, en retrospectiva, era un recuerdo muy lejano.
Abel miró las bolsas oscuras de sus ojos y el cansancio que no podía ocultar. De repente, le pareció algo sin sentido.
Abel permaneció en el hospital durante un mes y medio antes de que finalmente le dieran de alta. Se dice que la razón por la que podía permanecer en la sala VIP del hospital todo el tiempo era por el esposo del presidente, que estaba entre la vida y la muerte. Quería ver a este Alfa y finalmente se quedo en la puerta de la habitación, pero no se atrevía a entrar.
Se sentía molesto.
Vió a los dos niños, de nueve y cuatro años, dos pequeños y guapos Alfas.
El niño mayor Joshua, tomó la mano del niño más pequeño, Issac y el rostro del pequeño se veía muy serio. La carita carnosa no había desaparecido, y un par de ojos grandes parpadearon.
_ Hermano _ Isaac tiró de la mano de su hermano y preguntó _ ¿Cuándo se levantará papá de la cama?.
Abel vió que los ojos del pequeño adulto Joshua se enrojecieron y, después de un rato, bajó la cabeza y tocó el cabello de su hermano.
_ Papá está cansado de dar a luz a nuestra hermanita. Se levantará después de haber dormido lo suficiente.
_ Ya extraño a papá _ La voz del pequeño era de agravio, y la mirada fuerte de su rostro con los ojos llenos de lágrimas se parecía mucho a Hudson.
Los dos niños entraron en la sala de la mano y Abel sintió que le pinchaban el corazón con una aguja.
A medida que los días pasan y Abel comienza a recuperarse físicamente.
Las sesiones de terapia son difíciles, cada movimiento requiere esfuerzo. Abel lucha por recordar detalles de su vida antes del accidente: amigos, trabajos y sueños olvidados. A veces tiene destellos de claridad; otras veces se siente perdido en un mar de confusión.
Mientras se enfrenta a estos cambios externos, también lidia con una lucha interna: la sensación de haber perdido tanto tiempo lo abruma. Se siente como un extraño en su propia vida y teme no poder encajar nuevamente en el mundo que lo rodea.
A pesar de las dificultades, Abel decide no rendirse.
_ No hay nada más honorable que ser un Alfa. Fuerte, inteligente y guapo. A diferencia de los Betas que son uno más entre muchos, o los Omegas que son delicados y vulnerables. Más honorable aún, soy un Alfa, un Alfa que ha estado en estado vegetativo durante doce años.
Con el apoyo constante de terapeutas, comienza a recuperar habilidades motoras básicas: mover los brazos y las piernas e incluso sonreír sin rigidez. Cada pequeño avance se celebra como un milagro.
A medida que pasan los días, Abel empieza a sentir cómo las feromonas que pertenecen a Daniel cambian a su antiguo aroma. Se da cuenta de que no solo está utilizando su cuerpo; está acomodando su alma. Este cuerpo y su alma forman una conexión íntima donde sus experiencias se entrelazan; cada recuerdo compartido es una forma de compatibilidad.
A medida que Abel avanza en su recuperación, se da cuenta de que tiene una misión: utilizar esta segunda oportunidad para honrar tanto su vida como la de Daniel.
Ahora Abel es un Alfa, un vagabundo desempleado de unos treinta y tantos años.
Volvió a su antigua casa y casi tomó la dirección opuesta. El polvo en la casa era un poco espeso. Barrio mientras maldecía. Sus músculos todavía estaban rígidos. Después de todo, había estado acostado durante doce años. Estaba bien que se atrofiara.
Se llevó un día entero limpiar antes de lograr que fuera habitable. No había nada en la casa. Los alimentos empaquetados, todos estaban vencidos. Algunos de ellos tenían moho verde. Abel se tapó la nariz y los tiró, suspirando al ver la casa vacía.
Daniel antes de su accidente, ya no le quedaba ningún familiar, estaba solo, sin nada. Por eso, Abel se encargo de pagar el hospital durante tantos años. Era su único amigo.
_ ¿Por qué tuve que despertar en este cuerpo?, ¿por qué tuve que despertar? _ se preguntó en su corazón, lleno de vacío. La pregunta quedó sin respuesta.
No comio, ni siquiera tenía efectivo. No tenía teléfono, y el teléfono fijo de la casa fue desconectado hace mucho tiempo.
Más tarde, después de buscar durante medio día, finalmente encontro más de cien dólares en efectivo y las tarjetas de Daniel de antes. Las llevó escaleras abajo y deambulo por las calles comerciales desconocidas para él.
Compró un tazón de sopa. Aunque no le gustó el sabor, fue al supermercado a recoger algunas verduras y carne. Finalmente, fue al banco en el camino. Deslizó sus cosas en una mano y puse la tarjeta en la ranura, ingresando una serie de números que tenía de recuerdos de Daniel.
_ Su contraseña es incorrecta. Inténtelo de nuevo.
Se quedó mirando esa fila de palabras durante mucho tiempo. Claramente, era esta la contraseña. Se quejó y volvió a ingresar.
_ Su contraseña es incorrecta. Inténtelo de nuevo.
_ 266 ... _ Se pellizco el dedo y de repente se tranquilizó. Esas palabras fueron como una bofetada en la cara. Se rascó el cabello y sacó la tarjeta retirada.
No se atrevía a ingresar más la contraseña. Pensó que la contraseña necesitaba ser restablecida. Estaba confundido. ¿Dónde estaba 266 antes?
El banco había ya estaba cerrado, así que solo podía ir a casa. De repente, empezó a llover en la calle y le atrapó una ducha fría.
_ Te dije que trajeras un paraguas cuando salieras y no te acordaste de nuevo.
La pareja a su lado tampoco llevaba paraguas. Escuchó sus palabras y los miró en silencio. El Alfa tocó la punta de la nariz de su Omega y sostuvo al hombre en sus brazos, bloqueando la mayor parte de la lluvia.
El Omega en sus brazos se disculpó a medias.
_ Lo siento, lo siento, lo olvidé.
_ Tú, ah, nunca puedes recordar nada en todo el día.
El Omega puso de puntas con los pies y le dio un beso furtivo al Alfa.
_ Estás aquí, ¿no?.
La cara de Abel estaba mojada y su cuerpo estaba empapado completamente. Ignorando el afecto de otras personas, tiró de sus piernas y corrió hacia atrás.
Llegó a casa...
El piso limpio que acababa de fregar se mojó y se llenó de barro nuevamente. Se apresuró a guardar las cosas y fue al baño con una toalla de baño. Afortunadamente, todavía había agua caliente.
Solo se limpió el cuerpo de manera furtiva en el hospital, así que esta fue su primera ducha real desde que se despertó.
Se sintió bastante bien lavarse el cuerpo con agua caliente. Fue un poco deliberado. Se secó y se envolvió el cuerpo con la bata de baño. Sacó el secador de pelo del armario.
El viento caliente se arremolinaba en su oído. Pasó la mano por la parte superior de su cabello. Era un poco largo, pero estaba duro y un poco espinoso. No era suave en absoluto.
_ Ayúdame a traer mi pijama, cariño _ gritó inconscientemente y no obtuvo respuesta durante mucho tiempo.
El viento caliente sopló la niebla acumulada en el espejo y vió su ceño fruncido y este rostro que tenía algunas líneas de expresión.
_ Ayúdame...
Las últimas palabras fueron interrumpidas por sus lágrimas sin previo aviso. Lloró en el baño, rompiendo su corazón y sus pulmones. Las lágrimas brotaban sin cesar de sus conductos lagrimales. Como lloró tanto, temblaba por todas partes. Se abrazó y se agachó sin control sobre el suelo frío y húmedo.
Por primera vez en su vida, lloró sin aliento, le dolía el pecho. Abrió la boca, pero solo pudo emitir un sonido de ahogo. su estómago era como un pañuelo deshilachado y, con sus gritos, se retorció con fuerza. No tuvo tiempo de levantar la tapa del inodoro y vómito de nuevo en la oscuridad.
Toda la comida desagradable que había ingerido antes salió y sintió que finalmente estaba escupiendo la bilis.
Estos días, las cosas están desordenadas en su cabeza, las charlas de la enfermera, Hudson luciendo así, los dos niños que le hicieron doler el corazón y la pareja amorosa que vió hoy.
_ ¿Por qué, por qué tuve que despertarme de nuevo, después de tenerlo todo?. No puedo, no sé que hacer. Ayúdenme, no se que debo hacer.
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