CAPITULO 1

“Lo que mas amo de ti”

Era pasada la puesta de sol, Miel y Fred estaban juntos en su cama después de haber tenido relaciones y él le comenzó a acariciar el pelo, a ella no le gustaba eso, separándose le dijo…

-No hagas eso

-Porque no? Si me gusta tu pelo, es lo que mas amo de ti

Ella se aparto y solo dijo…

-Me tengo que bañar

-Te acompaño?

-No gracias

Y caminando hacia el baño dijo…

-Ya te di lo que querías ahora también interrumpirás con mi ducha?

Cerro la puerta tras de ella, Fred solo frunció el ceño y se tiro de nuevo en la cama a revisar su celular, Miel solo quería que la ducha le borrara sus besos y olvidar lo que había pasado, llorando por haber sido casada a la fuerza y buscando en sus adentros algo que la ayudara a sentirse mejor, algo por lo que luchar y que no hiciera sentir su vida tan miserable, ella tardo bastante en la ducha por lo que Fred decidió salir del cuarto dejándola sola…

Al escuchar que se había cerrado la puerta, miel pudo vestirse y salir de la ducha tranquila, pensando y pensando como una mujer como ella que siempre había hecho lo que deseara a quien sus padres consentían tanto como es que ella se había casado con alguien a quien no le tenia ningún cariño ¿Cómo había pasado eso?

Después de vestirse, Miel empezó a cepillar su pelo, era un lindo pelo en realidad podría decirse que era lo primero que destacaba en ella, sus hermosos rizos castaños, eran largos y abundantes eran de acuerdo a su madre un regalo de su abuelo ya que pocos en su familia tenían el pelo rizado y en la familia de su padre nadie tenia el privilegio de una cabellera así, Miel lo sabia y por eso nunca se dejaba tocar el pelo por nadie mucho menos del que hoy era su esposo Fred.

Fred salio solo al patio de la casa y cerro con llave la puerta principal ya que para él el pensar que Miel tuviera una sola oportunidad de escapar le resultaba horrible pues era la unica mujer que el amaba a pesar que ella lo habia dejado en el pasado y escuchaba de sus amigos en común que ella salia con mas chicos, a el le parecia una niña que no sabia lo que quería de la vida y que necesitaba de su ayuda ya que a su parecer si ella era su esposa lo tendria todo, una casa propia, no tendría que trabajar, tendría un apellido respetable que la respaldaría a donde quiera que fuere y mas aun a él como esposo que besaba el piso por donde ella pisaba y no deseaba mas que complacerla en todo lo que pudiera ella pedir, aunque Fred sabia muy bien que Miel no le amaba no entendia que el haberla forzado a casarse y mas aun a acostarse con él, hacia que en el corazón de Miel solo existiera odio y asco por su persona pero lo que mas le quebraba dia a dia era que sus propios padres la hubiesen entregado en ese matrimonio y la obligaran a cumplir con su papel de esposa.

“La razón es tu pasado con él”

Después de prepararse un té ella comenzó a recordar el día que Fred había hablado con sus padres y el negocio que hizo con ellos pues para ella eso era ese matrimonio un negocio en el que ella era un objeto y la que mas perdió de todos, perdió su libertad, sus sueños, su hogar y todo lo que a ella le hacia feliz.

Ese día…

- Ya regrese, termine mi trabajo temprano, dijo Miel mientras entraba en su casa.

- Ven un momento, grito su padre

- Que pasa?

- Vino alguien a verte

- Quien?

- Fred Casares

Miel se sorprendió ya que tenia dos años que vio a Fred por ultima vez y no pensó que volvería a saber de el, ya que no habían quedado como amigos ni menos después de una breve relación de noviazgo por tres meses, algo que para ella solo había sido parte de crecer y de las experiencias de la vida, así que sin mucho interés pregunto…

- A que vino?

- A pedirte en matrimonio, dijo su padre mostrando una seriedad que ella nunca antes vio en él, pero sin alarmarse dijo…

- Le abras dicho que no ¿cierto?

- Dije que si

- ¡¡¡¡¡¿Queee?!!!!! Vamos papá no bromees así jajaja con tanta seriedad casi te creo

- No es broma hija

- ¡¿Qué?! ¿Cómo es que según tu me voy a casar con el?, dijo Miel totalmente molesta…

- Porque fue tu novio

- ¡¿Y eso que?! , mas enojada que nunca y con la cabeza dando miles de vueltas sin saber como entender tal noticia siguió alegando…

- No me pienso casar con el, el tipo esta mal de la cabeza esta obsesionado no lo puedo creer y menos que le dijeras que si, así que crees papá lamento mucho decirte que no puedes darme en matrimonio solo porque ese chiflado te lavo la cabeza y … ella iba a seguir hablando cuando su madre por sorpresa le dio una bofetada…

- Silencio, ya basta ya fue suficientemente, Te casaras quieras o no

- Es el único muchacho decente que as conocido y el único que nos ha pedido permiso para verte, desde que tienes edad he querido que te comprometieras al menos con alguien que te respete no como esos chicos con los que sales igual de inmaduros y estúpidos con los que sales…

- Pero mamá papá por favor noooo, Dijo Miel con apenas poca voz y llorando…

- Escucha a tu padre, no sabemos cuanto vamos a estar para cuidar de ti…

- Te di libertad hija para que buscaras a alguien de tu gusto…

- No digan eso, nooo mamá seré mejor hija lo que me pidan menos eso

- Tu padre ya dio su palabra y así va a ser tu ya tienes un pasado con el ya lo conoces así pronto te harás a la idea

- Mamita por favor noooooo noooo hablan enserio dime que no… dijo Miel hecha un mar de lagrimas y de rodillas… vean como me tienen no jueguen así conmigo, les perdono les perdono esta broma pero ya díganme que no es cierto… dijo abrazando las piernas de su madre.

- Suficiente ya dije que te casaras, me estas irritando con tanta lloradera si no lo aceptas habrá consecuencias, le dijo su padre tomándola del brazo y levantándola… te quitare tus amadas mascotas y si no aceptas esto al fin de semana te casare con el primero que me parezca si no es con Fred buscare a otro.

La soltó y la dejo saliendo del lugar, su madre al igual salió de allí al parecer tenia otras cosas que hacer, Miel no supo mas que llorar hasta que se quedo sin fuerzas y subió a su habitación donde se quedo dormida.

Eran las doce del día Miel apenas había despertado pues por la noticia y discución con sus padres el dia anterior la trsteza de saber lo que le pasaría se apodero de ella y de su cuerpo al grado de vencerla un gran cansancio, al percatarse de lo tarde que era reviso su celular y llamo a su trabajo para explicar su ausencia ...

- Hola?

-Hola, Miel? Donde estas?

-lo siento jefa, me quede absolutamente dormida y... dijo Miel con una voz diferente lo cual noto su jefa asi que...

-estas bien cariño?

-si Mony, te contare todo mañana ¿esta bien?

- de acuerdo cariño, te estamos extrañando por aca, no faltes mañana o me volvere loca con tanto trabajo para mi sola, le dijo Mony riendo y esperando así levantar el animo de Miel ...

- Claro mañana sin falta estare allí, bye te quiero...

- te quiero corazón .

Miel se tiro de nuevo en su cama y penso que Mony sin duda tendría alguna buena solución ya que para ella era la mujer mas sensata de todo el mundo, era su unica amiga aunque era mayor que ella había una quimica entre las dos que las hacia inseparables, Miel le agradecía tanto a la vida el haberse topado con Monica, ella le dio un buen trabajo del que estaba enamorda y le llenaba el alma de felicidad además cada dia que pasaba junto a Mony en su clinica veterinaria aprendia cosas nuevas por eso pensaba que la sabiduría de su mejor amiga seria la salida a su espantoso compromiso así que pensar en eso le tranquilizo los nervios, para ella ahora esa era la unica esperanza era la unica amiga a la que podría recurrir con esa confianza y seguridad.

Despues de tanto rato pensando su estomago le reclamo atención y con justa razón ya que desde el dia anterior no había probado nada de alimento del descontento... como no escucho a sus padres cerca, bajo a la cocina para prepararse algo delicioso pues Miel era de buen comer aunque era una chica delgada y pequeña en estatura no se notaba a donde iba toda la comida que entraba en su boca y para tener ya mas de doce horas sin probar nada, su apetito era del tamaño de su resentimiento.

Despues de un buen cena-desayuno-almuerzo se escucharon unas voces en el patio de la casa eran las voces de sus padres y una mas que se unia a una animada converzación, una voz masculina, leve pero con cierta fuerza y serenidad, al reconocerla se erizo su piel era Fred.

En cuanto entraron sus padres se sorprendierón al verla relaivamente calmada pero sabían y conocían bastante bien a su hija que ese gesto de tranquilidad era porque ella tenía algun plan en mente...

-buen día Miel... dijo Fred interrumpiendo el silencio entre miradas de Miel y sus padres... te ves mas hermosa de lo que recordaba.

Miel no respondio solo lanzo una sonriza llena de sarcasmo

-Fred te trajo flores... dijo su madre...los dejaremos para que hablen.

-¿Hablar de que? nada tengo yo que hablar con el, mejor hablen ustedes ya que se llevan tan de maravilla como nunca antes... dijo Miel lanzando una mirada acusatoria a sus padres mientras se dirijia a su habitación ... su madre alcanzo a tomarla del brazo y le susurro...

- te aviso que escaparte no es una opción

-ya lo se... dijo Miel con sarcasmo y burla mientras se safaba del agarre de su madre... y dijo en voz alta

- solo les quiero decir que aun no me rindo así que sera mejor que dejen de hacer planes.