-Capitan, se encuentra usted bien?

-Si, como están los pasajeros?

-Pocas bajas, gracias por llegar.

-De hecho fue por casualidad, solo fue una revisión de rutina, Iré con el barón Noah, limpien todo.

-Si capitán.

Aquel joven capitán es Robert Bennett, heredero del marquesado Bennett, hijo de la marquesa que ha contribuido al reino, su hermana está en una misión importante el ahora irá con su madre a otra, este día se han enfrentado a piratas que atacaron un barco de Thaslis, un joven que se sabe atractivo, motivo por el cual tiene muchas admiradoras y una que otra aventura.

-Capitan... Muchas gracias, soy Sofía de Castro, le estoy muy agradecida

-De nada señorita de Castro, si me disculpa, debo irme

-Sí, adelante.

-Vaya es muy guapo, es el hijo de Bennett.

-Madre, crees que tenga una oportunidad?

-Eres bonita y noble claro que sí.

-Entonces él será mío.

Aquella joven queda impresionada por el joven capitán, quien por ahora no piensa en matrimonio.

-Robert, que sucedió?

-Un barco pirata, barón no ha visto a mi hermana?

-Fue a entrenar con mi esposa, han crecido mucho, no has pensado en matrimonio.

-No aún no, tenemos mucho trabajo, mi madre está en la capital y pronto iremos con ella.

-Lo entiendo, aún así deben darte una oportunidad.

-Lo haré.

Robert va a la mansión que tienen en el puerto Parker, ahí descansa hasta que su hermana regresa.

-Que hacer feo.

-Si sabes que somos mellizos y nos parecemos verdad.

-Ten, una joven bonita te trajo está canasta de frutas, huuu, alguien tiene una pretendiente.

-Callate, haber -Lee la nota- ha es ella, una joven que venía en el barco.

-Pues no pierde el tiempo.

-Es bonita

-Si madre se entera de tus aventuras te va a matar, si es una noble no será fácil que sea una aventura.

-Yo sé cuidarme, además si es noble y cumple con los requisitos que más da.

-Es tu problema, voy a bañarme, nos vemos más tarde.

Para sorpresa de Robert que salió al puerto se encontró a Sofía, quien insiste en que vayan a tomar algo.

-Solo un momento tengo trabajo.

-Es muy joven para las responsabilidades.

-Mis padres viajan mucho a la capital

-Entiendo, yo venía de visitar a mis familiares en Terán.

Ambos platican y para Robert ella es amable.

Su hermana los ve de lejos, después se podrá burlar de él.

Así ambos se conocen y de vez en cuando comparten una que otra comida, Sofia está convencida de que puede conquistarlo, un matrimonio muy conveniente para ella pues el es el heredero.

-Hermano, acaso estás enamorado.

-No lo se, estás lista debemos ir a la capital.

-Si, vamos.

Ambos también van y vienen del palacio, así como al Marquesado y a ambos puertos, su madre siempre ha viajado y a pesar de que no está con ellos, no le reprochan nada, al contrario,, le agradecen por hacerlos fuertes.

En la capital Robert también recibe correspondencia de Sofía, su madre solo le aconseja que debe conocerla mejor.

-Eres muy inteligente mi niño, solo ve despacio.

-Gracias madre.

Así Robert va y viene de la ciudad al puerto.

-Joven tiene visita.

-Bien, que pase

-Buen día, me da gusto verte.

La joven lo abraza y el un poco apenado corresponde el abrazo, el corresponde el abrazo, la joven lo besa y el también, poco a poco caen al sillón Pero el se aparta.

-Perdón, no debí lo siento mucho.

-No hay problema, yo también me sentí igual.

-No es correcto, debemos esperar.

-Entiendo, solo que yo tengo sentimientos hacia ti, en todo este tiempo me he enamorado.

-Sofía también me gustas, por eso debemos esperar, dame la oportunidad de hablar con mis padres la próxima vez que vengan.

-Claro que si

La joven sale feliz y sube a su carruaje.

-Eres mala, en serio lo amas.

-Claro que no, Pero él es un Márquez, no pienso desaprovechar está oportunidad, debe entrar en mi cama.

-En eso eres buena me consta.

-Cállate, tú solo eres mi caballero, nadie debe saberlo.

-Como vas a engañarlo?

-Tengo mis métodos, yo seré la próxima marquesa Bennett, una verdadera, no su madre, una mujer que solo entrena.

-Si ella se entera de tu mentira es capaz de matarte.

-Lo volveré loco para que me ame más a mí, no será difícil, su padre fue igual.

La joven solo quiere el estatus de marquesa, no le importa si le hace daño a Robert, que al parecer tiene sentimientos hacia ella.

-Si dígame?

-Es usted hija del conde Nava?

-Así es, puede pasar, el mayordomo llegará en un momento.

-He?

Robert va a visitar a un socio de su padre muy importante, lo que no imaginaba es que la joven que iba saliendo lo ignorara completamente.

-Que fue eso?

-Oh! Robert que grande estás, discúlpala va a la escuela ella es maestra ahí.

-Disculpe están de luto?

-Ja, ja, ja, no ella viste así, ya me acostumbré a verla así, Pero entra, ya tengo los documentos listos.

Robert se queda de ver con Sofía que lo esperaba en el puerto, el va un poco tarde y pasa frente a la escuela, dónde ve a aquella joven en el jardín de la escuela, ahí ella ríe y juega con los niños.

-Que extraña es?

-Llegas tarde.

-Perdón me entretuve con el socio de mi padre.

-Bueno, Pero que no sé repita vamos.

Así ellos empiezan una relación, obviamente los padres de Sofía están muy felices, que su hija se case con un Márquez es muy bueno.

Lo único que no le gusta a Sofía es que no ha podido seducirlo, pero no dejará de insistir, debe lograr comprometerlo, así asegurará el compromiso.

-Sofía, debo ir con mi madre, estaré fuera aún tiempo.

-No, sales mucho y me dejaras sola.

-Debo hacerlo

-Solo no te vayas hoy mis padres llegarán tarde.

-No, no es correcto.

-Yo quiero y tú también.

Así ella por fin logra seducirlo, Robert cede ante sus impulsos y al despertar solo se arrepiente, un poco confundido pues no bebió mucho

-Sigue durmiendo.

-No debo irme, Sofía yo me haré responsable, a mi regreso firmaremos el compromiso.** Maldita sea, presiento que fui engañando**

-Gracias, te amo.

-Me voy.

Robert por su entrenamiento sale a escondidas, no se siente orgulloso por lo que pasó.

-Que cara? Que paso?

-Nada, estás lista.

-Si, espera, espera... Que paso?

-Hermana debemos irnos, no pasó nada

-Bien, bien vamos.

Robert viaja con Su hermana y pasa un tiempo fuera, recibe una misión y la acepta sin pensar siquiera en Sofía

Ella está furiosa pues pensó que llegaría en un par de semanas.

-Maldita sea, que se ha creído.

-Calma, ya pasó por tu cama, regresará.

-Si, lo sé, su madre es la culpable, ella y sus mujeres que parecen hombres.

-Ya deja de hacer rabietas, ve de compras con tus amigas.

Robert realiza su misión con éxito, regresa para firmar el compromiso Pero debe seguir viajando.

-Que bueno que vienes.

-Traje los documentos, mi padre los firmó.

-Gracias.

El marqués Bennett firmo los documentos no muy convencido, Robert le dijo que independientemente de sus aventuras ella es una dama, que le gusta y está dispuesto a casarse con ella.

Sofia está feliz pues su padre la ha felicitado, ahora solo debe esperar a que todo se calme, para su mala suerte hay conflicto con el otro reino, Robert tiene que volver a viajar.

-Lady, acaso está usted de luto?

-Viene a ver a mi padre?

-Si, así es.

-Entonces pase.

-Es usted muy seria.

-Solo con las personas que no me caen bien.

-Que? Yo que le he hecho?

-Usted es un presumido, se de su fama.

-Mi fama?

-Usted tiene fama de mujeriego y ahora se ha comprometido, así que me disculpo.

La joven solo lo ignora porque una de sus amigas le contó sobre él, a ella no le gusta estar en chismes así que mejor se mantendrá alejada.

-Vaya creo que le caigo mal.

-Robert, pasa, no le hagas caso, ven.

-Tus padres, cómo están?

-Bien, hay tensión entre ambos reinos

-Bueno, dile que no se preocupe, yo me encargo de los negocios.

-Gracias.

-Me enteré de tu compromiso, estás seguro?

-Bueno hay un momento en la vida donde hay que sentar cabeza

-Eso si, bueno si ambos se aman serán felices.

-Así será.

-Como que te vas otra vez?

-Mi hermana está en problemas, debo ir con mi madre.

-Puedo preparar la boda?

-Si

-No vemos

-Te amo.

-Cuídate.

Robert se va pues hay tensión entre los reinos, debe ir al norte, para completar su misión, el ahora está enfocado en salvar a dos personas que conoce hace mucho, Pero el destino es así, los Foster no logran sobrevivir, él está triste, pues ellos eran buenas personas, En el ducado solo ve como llega su tía Susan.

-Que sucede?

-Tía, no se, es triste, ellos...

-No te preocupes, ellos están juntos, ahora debemos cuidar del pequeño.

-Él sé quedara con la Duquesa Camila, es solo que no pude hacer nada

-La vida es así, Pero tú cómo estás, irás con tu madre?

-Si debo ir al sur, Pero regresaré al Marquesado.

-Bien, me saludas a tu padre.

-Tía, si te hubieras quedado con mi padre lo amarías?

-No, nuestra relación empezó mal, un matrimonio debe empezar con amor.

-Me comprometí.

-En serio? Y por qué no lo dices tan convencido.

-Ella es una noble, tiene la preparación.

-Robert si no estás seguro estás a tiempo.

-Lo pensaré, gracias.

-Nos vemos luego.

Robert solo prepara sus cosas, irá a la frontera del sur y de ahí regresará al Marquesado.

-Mi señora le traje el uniforme.

-Dime quien es ella.

-Mi señora, ella tiene de amante a su caballero, me costó mucho averiguarlo, ya que nadie se cuestiona que sale juntos.

-Vaya, una lagartona se quiere pasar de lista.

-Que debo hacer?

-Cuando llegué Robert, viajaras con él, si está enamorado se negará a creerme, debe darse cuenta él solo, solo así aprenderá, eso sí si no lo hace deberás mostrarle.

-Bien, cómo ordene.

-esa maldita cree que puede engañarme a mí, de esta ahí torcería su cuello yo misma.

El centinela sale del despacho.

-Sarah, está lista?

-Sí, iré con nuestra hija, porque nadie me hará creer que nos haya traicionado.

-Ve con cuidado, te amo.

-Yo también te amo, por favor habla con nuestro hijo, esa mujer no es lo que parece, te dejo los documentos.

-Bien.

La marquesa sale con los caballeros y el marqués lee los documentos, días después Robert llega con él.

-padre que bueno verte.

-Que gusto verte, descansa, siento mucho lo de los barones, sé que los apreciabas mucho.

-Padre te manda saludos la tía Susan.

-jaja, gracias.

-En serio padre como pudiste ella es muy guapa.

-Era muy joven y estúpido, lo que me recuerda que tu prometida no es la blanca paloma que dice ser.

-Heee?

-ten, tu madre me dijo que no te dijera nada, Pero está vez no estoy de acuerdo, tú eres muy inteligente y sé que el fondo no la amas.

-Por qué piensas eso

-Niño, cuando te firme los documentos solo los guardaste y ya, no me has dicho como es, si la amas o no, esa emoción no se ve en ti.

-Padre, puedo amarla con el tiempo, tu te enamoraste de la tía Susan.

-Eso es diferente, Robert no quiero que salgas lastimado, lo que dice el documento es verdad.

-Si, necesito más que eso para romper el compromiso, tampoco soy tan tonto para casarme con alguien así, yo arreglaré el asunto.

-A veces pones el rostro que hace tu madre.

-No la mataré si no me provoca.

-Bien, solo date la oportunidad de conocer a alguien más.

-Lo haré.

Robert sale un rato a despejar su mente.

-Tarde o temprano lo hubiera descubierto, mi madre no puede ser engañada, hasta miedo me da.

-Hey tu, debes reportarte con el general.

-Disculpa? Me veo como alguien que recibe órdenes?

-Si.

-Que? Y tú quien eres?

-Soy zafiro.

-Tienes katanas eres una rosa del territorio de la baronesa Sandra, ella es de las pocas que maneja katanas. **La primera literalmente**

-Asi es, tu traes uniforme de un capitán, debes reportate.

-Bueno, ya voy, así que Zafiro, por qué tú voz se me hace familiar.

ella solo se da la vuelta y se va

-Pero que grosera...

-Joven su padre lo busca.

-Si ya voy.

-Oye, quien es Zafiro?

-No joven ni la moleste tiene muy mal genio, además no se nada, está cubierta, tiene a su mando 300 hombres y mujeres, fueron mandados para reforzar la frontera.

-Ella trae a todos ellos?

-Si, con lo que pasó regresarán, ya que el duque Andrew moverá al ejército.

-Vaya, vaya, creo que no viajaré solo.

Robert se despide de su padre, viajaron juntos a la capital, Pero el se debe quedar para apoyar en lo que el emperador está lejos.

-Cuidate, se más listo.

-Claro, además viajare con alguien interesante.

Robert señalaba a Zafiro.

-Calmate, ella es un capitán, no es alguien fácil de engañar, además si es plebeya solo tiene instrucción militar.

-Habría algo de malo?

-No en realidad no, las rosas son fuertes e inteligentes, solo no le compliques la vida, muchas son huérfanas o han tenido una vida difícil.

-Padre tampoco soy tan malo, no le haría daño a alguien bueno.

-Entonces controlarte por favor.

El marqués sale a todo galope con sus caballeros, el va con los suyos con los demás, el se descubre el rostro y va junto a zafiro.

-Zafiro, dónde pararemos a comer.

-En tres horas llegaremos al lugar donde comeremos y también dormiremos.

-Bien, entonces...

Robert no pudo seguir hablando pues ella salió a todo galope.

-En definitiva que grosera.

Al llegar al lugar ya los esperaban, Zafiro organiza las guardias, ve a Robert que llega con sus guardias.

-Excelencia su tienda está ahí -Le señala-

-No es necesario, sé acampar.

-Si no la quiere entonces la usaré yo.

Ella se daba la vuelta y él la detiene del brazo.

-Espera, era tu tienda y pensabas dármela.

-Si, no sabía que usted viajaría con nosotros, de todos aquí usted es el único noble.

-Pues no es necesario, ve a descansar.

-Gracias excelencia.

-No me digas así, solo dime Robert.

-No, prefiero que no.

-Que?

Zafiro se va, a decir verdad está muy cansada y solo toma un baño y se duerme.

Robert está frente a la fogata pensando como romper el compromiso, difícil no es Pero esto no se quedará así.

-Ese par me las va a pagar.

-Joven quiere otra manta.

-No, estoy bien, jaja hubiera aceptado la tienda.

-Si hace frío.

-Al menos me hubiera invitado.

-Jaja joven, usted no cambia, como cree que ella lo va a invitar a su tienda

-Puedo intentar.

-Si lo hace saldrá volando, Zafiro es muy fuerte.

-Bueno entonces aquí me quedaré.

Zafiro solo ordena que lo atiendan en lo que ella descansa, en la mayor parte del camino tienen que acampar, solo en algunos lugares les dan hospedaje y pueden dormir en literas, este día hay una posada disponible.

-Marqués, ya está su habitación lista, tenga la llave.

-Y tú?

-Ya está la mía que tenga buena noche.

-No cenarás?

-Cenare en mi cuarto.

-Entiendo.

Robert recogía sus cosas y ella subía las escaleras, el va detrás de ella, ve que abre su cuarto y es junto al de él.

-Espera...

-Si?

-Cenamos juntos?

-Heee? Claro que no.

-Por que?

-No pienso estar con usted a solas, se de su reputación y si lo que pretende es una aventura no pienso ser una más en su cama.

El solo se acerca a ella y le dice en voz baja.

-No solo puede ser una aventura, sería muy ventajoso para ti.

-Si? ¿En qué? ¿En ser su amante? No gracias, por favor no me moleste, si usted está acostumbrado a eso no es mi problema, además debería respetar su compromiso.

Ella lo aleja con sus manos y entra a su cuarto, dónde su cena ya estaba lista.

-Este hombre es un fastidio, ya quiero llegar para no volverlo a ver, como estarán mis niños.

Ella se cambia y duerme un poco al día siguiente continúan, Robert solo la ve de lejos y observa que hace muy bien su trabajo.

-Deja de verla así.

-Heee?

-No puedo evitarlo, tengo curiosidad de ver cómo es.

-Jaja, vamos solo un par de días y estamos en la capital.

-Si debo ir a casa, el trabajo se lo deje aún socio de mi padre pero es mucho.

-Pronto tu padre te dejará todo.

-Si, no quiero pero así será.

En el desayuno a Zafiro no le quedó de otra que desayunar con el pues ya lo había pedido y sería grosero rechazar al marqués.

-Marqués buenos días.

-Zafiro buenos días, toma asiento, dime dormiste bien?

-Si, gracias.

-Cuantos años tienes?

-Tengo 20 años.

-Eres noble?

-No, soy plebeya.

-Si claro **Su forma de agarrar los cubiertos dicen otra cosa, está bien sentada, y puso su servilleta en el lugar correcto** bien, ¿de dónde eres?

-Eso por qué lo pregunta.

-Solo por hacer plática, pero si no quieres responder no importa, supongo que Zafiro tampoco es tu nombre.

-Esta en lo correcto.

Ella comía y responde sencillamente las preguntas de Robert, quien solo la observa detalladamente, ella es una mujer con buen cuerpo y unos ojos muy bonitos.

Ambos terminaron su desayuno y ella le agradece su compañía, se retira para organizar a los caballeros.

-Te fue bien?

-No se, ella casi no dice nada.

-Entonces no vamos.

-Si -Empieza a reir-

-De que te ries?

-No le gustan las papas, no se comió ninguna.

Así continúa y por fin la gran capital se ve, él se separa y va al palacio, ahí está dos días y sale hacia el puerto, no sin antes buscar a Zafiro.

-Como que no está?

-Su misión término, fue a casa.

-De dónde es?

-Esa información no está disponible

-Bueno, gracias

-Rayos! Ella pertenece al ejército del este, lo más probable es que sea de ahí.

Él solo toma su caballo y se va, ahora viaja con sus caballeros y solo se detienen por corto tiempo, él debe llegar para planear su venganza aunque no sabe cómo.

-Hija cuando llegaste?

-Padre buen día, llegué en la madrugada, no quise despertarlos.

-Y tu madre?

-Fue con mi hermana al puerto.

-Por que no fuiste.

-Estoy un poco cansada, cabalgue toda la noche.

-Que buen tenerte aquí, Eleonor me gustaría que salieras más con tu hermana, sé que has entrenado mucho, pero quiero que seas feliz, que tengas una familia.

-Padre, mi madre casi se muere cuando decidí entrenar, ella me llenará de vestidos y joyas no quiero.

El padre de Eleonor es un conde que la quiere mucho, él es socio de los Bennett, los pocos que quedaron desde los padres del anterior duque, la mayoría se alejo tras el escándalo hace años.

-Hija, lo del accidente paso hace años, se que ver morir a tu caballero fue difícil, pero era su deber protegerlas, debes darte la oportunidad de tener tu propia familia.

-Es tan malo no tenerla, me gusta lo que hago, y cuando vengo aquí me gusta ir a dar clases.

-Suspira-Bien, sigue así, solo piénsalo, tal vez cambiando un poco tu vestimenta.

-No, si visto así es precisamente para que nadie me note, te recuerdo que todos me conocen como la hija fea.

-Eleonor! tú no eres fea, tienes los ojos de mi madre, el color de mi cabello, Pero bueno yo solo quiero que seas feliz

-Gracias padre

Su padre fue al puerto a supervisar los embarques, Eleonor también se prepara para salir a dar una vuelta.