chén: ¿cuanto tiempo me ignorará?

Qiang: ...

chén: si antes me amabas ¿Cuál es el problema ahora?, dime y lo cambiaré.

Qiang: En el pasado no sabía que te ibas a casar, (solloza) en el pasado no me tenías encadenado y atado a una cama, obligándome a vivir como un animal en este lugar.

chén: ¿Como un animal?, ¡aunque esta casa es pequeña, tiene sus lujos y no te falta nada!... y si te tengo encadenado es porque sé que en el momento en que te suelte huirá y si lo haces me muero.

Qiang: Si encierras a una persona y la abusas por meses, ¿qué piensas, que es lo que esperas que haga?, quiero irme.

Chén: A donde? Al moridero de donde te saque ja ja no me hagas reír.

Dame un hijo y te dejaré libre.

Qiang: ¿Lo dices enserió?

chén: Sí, te quitaré las cadenas y te podrás ir a donde quieras. Pero el bebé se queda conmigo.

Qiang lo pensó, si le daba un hijo sería libre, podría empezar de nuevo y olvidarse de todo, después de todo no cree que le tomara cariño a un bebé producto de una violación, además ese hombre es demasiado poderoso el bebé jamas extrañara a su padre.

Qiang: está bien, pero a cambio por favor no me des más golpes... duele cuando lo haces.

chén: si no te resistieras no te pegaría, pero no cedes y a golpes es que entiendes.

Qiang solo cerro sus ojos y con resignación acepto su destino después de todo solo sería un año el que le tocaba soportar todo esto.

Ahora bien ¿como empezó todo esto?

2 años antes.

Qiang: otra vez mi padre está alcoholizado, desde que mi madre murió este hombre perdió el sentido de la vida... pienso que hasta olvido que tiene un hijo.

El padre de Qiang se acerca y le acaricia el rostro a su hijo.

— Tienes el aspecto de un alfa, tu aroma e incluso tu fuerza es igual a la de uno. No me produces ningún beneficio.

Si hubieras nacido como tu madre una omega perfecta ya te hubiera entregado al mejor, después de todo ya casi están extintos y pagan una buena cantidad por uno.

Qiang se sintió asqueado.

Qiang: padre, ¿por qué habla como si ellos fueran mercancía o producto de cambio? Son seres humanos y sienten como usted y como yo.

— ¿Sientes, de verdad sientes algo? Te recuerdo que tu madre murió por tu culpa engendro del demonio.

En ese momento Qiang sintió como si un puñal atravesara su corazón y con un nudo en la garganta replicó.

Qiang: Yo no la mate.

El padre de Qiang empieza a darle golpes en la cabeza mientras repite.

— Si no hubieras pegado la vela a la cortina tu cuarto esté no se hubiera incendiado, si no hubieras gritado tu madre no te hubiera escuchado y tu estarías muerto, pero ella estaría aquí podríamos haber tenido más hijos, pero ella se sacrificó por ti, si no hubieras nacido yo no hubiera enterrado a la mujer que ame si hubieras muerto mi mundo tendría colores en lugar de un paisaje gris.

Qiang recibió muchos golpes ese día pero les puedo jurar que ninguno dolió tanto como sus palabras.

Su madre murió cuando el tenía 6 años y aunque estaba pequeño recuerda todo lo que paso ese día, incluso lo último que le dijo ella: "No importa que tan dura sea la vida siempre habrá una razón por la que vivir" mi razón eres tú, y hoy aunque pierda la vida siento que gane porque pude salvar la tuya.

No recordaba como fue la relación de sus padres lo único que si recuerda es el viejo diario de su madre, de vez en cuando ve a su padre con el en las manos, En esos días su humor empeora al igual que su adicción a las bebidas.

Qiang a los 14 años empezó a trabajar en un bar de mesero, en ese lugar eran muy frecuente las faltas de respeto, que un borracho te tomara de la cintura o incluso tocaran partes que no debían tocar y aunque Qiang tenía esa edad su cuerpo estaba bastante desarrollado así que era difícil saber que tenía 14 años. Una de esas noches le pidieron atender a una persona muy importante en la suite superior en la que solo pueden entrar las personas más influyentes.

Era la primera vez que le decían que subiera, tenias que ser "perfecto" en lo que hacías para que el jefe de diera esa "oportunidad ", era la oportunidad de tu vida te ibas a relacionar con personas de "alto nivel".

Qiang: Buenas noches, hoy seré yo quien lo acompañe.

Ese hombre no responde y solo lo mira de arriba abajo.

Qiang: puedo ofrecerle un D'Amalfi Limoncello Supreme.

chén: ¿Tú estás en el menú? (sonrisa)

Qiang se sonrojo.

Qiang: No señor (su voz se escucha agitada)

chén: tu edad.

Qiang: ¿perdón?

chén: ¿cuántos años tienes, pregunte?

Qiang sabía que no podía decir su edad real pues fue la primera advertencia que le hizo el dueño del lugar.

Qiang: 18 recién cumplidos, señor.

chén: trae la bebida y acércate.

Una vez que se acercó él lo tomó por la cintura y lo sentó en sus piernas.

chén: No tienes que mentirme, es obvio que no tienes más de 15 años, ¿verdad?

Qiang se asustó, pensó que había cometido un error y ahora lo echarían.

chén: No te asustes, no pienso acusarte.

Desde ese día Qiang era requerido por este hombre que tenía aproximadamente unos 22 años, empezaron con una amistad en la que se desahogaban ambos y de vez en cuando sus miradas manifestaban el deseo de sus cuerpos.

Cuando Qiang cumplió los 16 años chén lo espero con una sorpresa.

Qiang: Hola de nuevo.

chén: ven aquí.

chén le entrego un anillo con un diamante grande.

Qiang: y esto?

Chén: ¿te casarias con migo?

Qiang acepto sin pensarlo. No pueden culparlo es lo mas cerca que a estado del sentimiento llamado amor.

chén: ¿puedo besarte?

Qiang: Sí.

Lentamente sus labios se unieron y fueron sumergirnos en algo más que pasión, deseo, amor u obsesión

Sus grandes manos apretaban con fuerzas las piernas de su amante quien en cada caricia soltaba gemidos envueltos en suspiros Lentamente desabrocha su elegante traje y con su suave lengua besa su pecho Qiang estaba nervioso era la primera vez que dejaba que alguien tomara su cuerpo de esa forma y él estaba dispuesto a ceder Baja su pantalón y lo toma en su boca, Qiang se asusta pero él lo calma acariciando su pecho con sus manos Por un momento la mente de Qiang ya no razonaba y entre gemidos y placer termino en la boca de chén.

Chén: ¿puedo llegar al final?

Qiang: ¿final?

chén: Sí, quiero entrar en ti.

Dice mientras lo frota con sus manos, por supuesto Qiang lo duda, pero sabe que en cualquier momento le tocara y además el ama a chén y a este punto ya tenía apego emocional hacia él.

Qiang: está bien (nervioso)

chén: todo estará bien, solo respira profundo y no cierres abajo.

Solo lo había puesto cuando recibió una llamada él miro la pantalla y su rostro cambió le pidió a Qiang que se vistiera y lo esperara un momento en el mueble que debía contestar esa llamada luego de unos momentos volvió.

Chén: Me tengo que ir, acaba de pasar algo muy importante.

Qiang: Te vez muy feliz

Chén: Lo estoy, hace mucho esperaba esta respuesta.

Le acaricia el rostro y le besa la frente con ternura. Qiang no puede evitar sonreír cuando está con Chén, todo lo malo en su vida se olvida y su mundo se llena de esperanza.

Después de esto se fue, dejando a Qiang con la esperanza de volver a arreglar todo lo relacionado con la boda.

Los meses transcurrieron con normalidad. Qiang se preguntó por qué Chen no había regresado, pero miró su anillo de compromiso y eso lo consoló. Él regresará. Soy su prometido. Él fue quien me pidió que me casara con él y no le importa que no sea mujer ni omega. Él me amaba, por lo que soy.

— Te vez muy feliz últimamente.

Qiang: Así es padre, quizás nuestra vida cambie en el futuro.

— Lo dudo.

Qiang: Algún día dejarás de tomar?

— Ese no es tu problema.

Qiang: Así es.

Su padre notó que siempre miraba el calendario y se emocionaba cada vez que abría la mesa de noche que guardaba. Se preguntó si tal vez le estaba ocultando dinero. No me parece. Ahora ya no me importa. Además, su cuerpo parece estar cambiando. Incluso parece femenino. Dicho esto, llega un ligero olor a Lima.

— ¡Qiang ven aquí!

Qiang: señor.

Él lo mira de arriba abajo y sonríe mientras se le salen las lágrimas.

— Lo siento.

Qiang está confundido y no sabe qué pasa.

— Ve a la habitación de tu madre todo lo que esta allí te pertenece y en su mesa de noche hay unas cápsulas tomate una cada 12 horas.

Qiang estaba confundido, pero era la primera vez que su padre le decía algo de forma linda.

Al entrar a la habitación de sus padres, estaba muy oscuro, encendió la luz y se dirigió a la mesa de noche y tomó el medicamento como le indicó su padre. Al lado de la lámpara estaba el viejo diario, desgastado y arrugado, por un momento pensó en tomarlo, pero se arrepintió. Cuando regresaba, su padre estaba recostado en un rincón de la habitación y con una sonrisa forzada le dijo que podía tomarlo y que aceptaría las consecuencias.

Qiang toma el diario y con reservas se va a su habitación cierra con llaves y comienza a leer las desgastadas y sucias páginas. Unos párrafos en específico llamaron su atención.

pagina 30

Después de 10 años de casados pensé que mi vida era perfecta hasta que de un momento a otro he tenido un golpe de realidad que acabo conmigo.

Quien es esa mujer? No soy suficiente esas preguntas me acababa en la oscuridad de mi habitación.

pagina 39

Hoy tome valor y le pregunte por ella y no supo que decir, puedo soportar la verdad aunque él piense que no.

Por la tarde mientras doblaba la ropa de Qiang vi a mi esposo hablando con una mujer baje tan rápido como pude y me oculte detrás del rosal, mi corazón late rápido y mis piernas tiemblan ¿acaso es miedo?

Escuche lo que hablaban: dice que ya me va a entregar los papeles del divorcio y además le afirma que Qiang no es su hijo. De mí puede decir lo que quiera, pero con mi hijo nadie se mete mi corazón está roto, si, pero ya no importa soy fuerte.

página 40.

por primera vez en todos estos años me dio un golpe

Y no sé que me ha dolido más si su agresión o que no reconozco a mi esposo. Es tan difícil dejar ir a una persona?, me digo diariamente que debo salir que no merezco esto, pero cada vez que se arrodilla y me suplica pienso que esta vez será diferente. Acaso es verdad?, esa mujer lo llama y él corre a sus brazos ya ni disimula en ocultarlo ya sabe que soy débil a su ser, tengo que cambiar tengo que ser mejor para él.

pagina 48.

Soy bastante patética

página 53.

No escribiré más, me avergüenzo de mí cuando vuelvo a leer lo que escribo, deje mi dignidad a cambio de nada hoy me grito que no me ama y se fue a dormir con esa mujer. Prendí una velas en mi habitación con la intención que dios me dé fuerzas para no rendirme y Qiang será mi fuerza no lo he dicho, pero le hice el examen y me dijeron que es un omega como yo aunque su cuerpo no cambiará hasta que se desarrolle.

Te amo qia

Estas fueron sus últimas palabras el nombre de Qiang estaba a medio escribir debió ser el momento en el que su cuarto se envolvió en llamas.

Ese sentimiento de desilusión invadió su ser ¿por qué ella aguantó tanto?, ¿por qué vas a amar a alguien por encima de ti?

Su padre tocó la puerta.

— ¿hijo?

Qiang: Si tanto la amabas ¿por qué la lastimaste?

— Fui débil

Qiang: No, eso no es ser débil, se necesita coraje para lastimar a alguien de esa forma y luego tener la osadía de decir que lo que sientes es amor.

— De verdad, no sé si llegues a perdonarme, pero en verdad lo siento….

Qiang: Si de verdad hubieras sentido lo que le hiciste a mi madre no hubieras hecho lo mismo conmigo, desde los 6 años lo único que escucho de tu boca es que no merezco estar vivo y hoy de la nada se te da por ser un buen padre, de verdad no te creo nada.

Nadie respondió.

Ese mismo día en la noche se dispuso para ir a trabajar. Su padre siempre estaba sentado en el mueble de la entrada mirando por la ventana y extrañamente esa noche no estaba (Tal vez fue al bar de la esquina por licor) pensó.

— Qiang hoy es tu día de suerte, han solicitado personal de nuestro bar para trabajar en la boda del año y por supuesto pensé en ti. Aunque para ser sincero ya la novia había pedido que fueras tú.

Qiang: ¿de verdad jefe? (emocionado)

— Claro, eres el mejor en tu trabajo, te has hecho de buena fama la novia pidió en específico que fueras uno de ellos. Ya todo está listo el carro te está esperando.

21:12 hrs

Entran a un salón digno de la realeza. Todo estaba perfectamente organizado estar en ese lugar te hacía sentir superior…

El sonido de una melodiosa sinfonía suena y todos se ponen a la expectativa por ver a la novia, el novio se encontraba en el fondo así que no se lograba ver bien su rostro.

Entra la novia. Era perfecta, su vestido en corte de princesa con una cola de unos 6 metros, un hermoso velo blanco que le cubría ligeramente el rostro era la novia perfecta.

El padre comienza con la ceremonia hasta que llega el momento de dar los votos y el novio comienza a hablar.

Qiang reconoce esa voz y lentamente sin saber por qué se acerca al altar sus compañeros tratan de detenerlo, pero él está determinado a llegar. Su corazón latía con fuerza y sus piernas temblaban.

Qiang: ¿Acaso fue así cómo te sentiste madre? (pensó)

Un silencio abrumador cubrió todo ante la mirada de todos los invitados.

Hui Ying: ¿Amor quien es él?

El silencio era tan extremo que su pregunta fue escuchada con bastante claridad.

Chén: No lo sé, ¿No fuiste tú quién escogió el personal de trabajo?

Hui Ying: Es cierto (sonríe) Ahora que lo recuerdo él es el encargado de servirnos el vino luego de nuestros votos... Acércate y párate en esta esquina así podrá ver bien y cuando terminemos nos pasas las copas.

Qiang miro a chén a los ojos y este lo ignoró totalmente. Su corazón se encogió camino a la esquina que le habían señalado y sostuvo la bandeja con las dos copas, sus manos temblaban y sus ojos se llenaron de lágrimas. Nadie lo noto a nadie le importo, en ese momento todos los ojos estaban sobre los ahora esposos dándoles sus buenos deseos mientras que en ese mismo momento una persona perdía la esperanza y se sumergía en el dolor. Aunque su padre fue cruel con él toda la vida jamás lo habían lastimado tanto.

Las horas transcurrían y él tenía que atender a los novios ese tiempo parecía eterno y más cuando el novio presumía todas las cualidades de su esposa incluso todo lo que tuvo que rogarle para que lo aceptara y que un día estaba en el bar "aburrido" cuando recibió una llamada de ella aceptado ser su esposa no pude con la emoción y volví enseguida.

Qiang soltó la bandeja de las bebidas sin querer un ruido sordo lo puso en la mira de todos, un compañero suyo lo tomo del brazo y lo saco de allí.

— ¿Qué demonios te pasa hoy? Hoy debías sobresalir y casi echas a perder todo ¿Qué hubiera pasado si las bebidas hubieran caído encima de alguien?

Qiang no respondió nada su mente aún no procesaba lo que acaba de pasar.

— Está bien debes estar cansado, espera aquí nosotros terminamos con el evento.

Cuando se vio solo comenzó a llorar mordiendo fuerte el pañuelo en sus manos. Mirando el camino hacía el evento con la esperanza que el novio saliera y lo consolara el amor a veces parece un mal chiste, y como era de esperarse nunca llegó.

Qiang: dijiste que estabas aburrido cuando ella te llamo, ¿Acaso no estabas haciendo el amor conmigo en ese momento?, ¿tan insignificante fue para ti?, yo pase todo este tiempo pensando en lo especial que fue y de como debía prepararme para cuando volvieras.

El evento acabó y los novios salieron por la puerta principal y él se encontraba él la puerta trasera así que no los vio, sus compañeros recogieron todo y luego se marcharon.

— ¿No era ese el hombre que siempre pide que tu lo atiendas?

Qiang: Sí

— ummm y que rayos te paso allá dentro.

— La novia lo explico, yo debía entregar el vino...

Qiang llego a su casa, se acostó y solo lloró, no se dio cuenta en que momento se durmió por la mañana escucha a su padre pelear con alguien en la entrada se levanta rápidamente y ve a varios hombres con trajes negros.

— ¿papá, que sucede?

— Es usted el señor Qiang?

— Sí, soy yo.

— Debe acompañarnos ahora.

¿— A donde?

— El señor chén ha mandado por usted.

Lo que en un momento fue dolor en ese instante se volvió ira.

— ¡Largo de mi casa!, díganle a ese hombre que no quiero saber de él.

— Si no viene por las buenas tenemos orden de llevarlo por las malas.

— Y ese hombre ¿quién es para decir que se va a llevar a mi hijo así nada más? ¡Largo!