______ Mi nombre es Lilit Méndez. 20 años de edad. 1.56 de estatura. Oficio, empleada de un bar a las afueras de la ciudad.
______ Cabello morado claro, tengo algunos tatuajes en mi cuerpo. Dos en mi espalda baja y otros tantos en mis piernas.
_______ Piel blanca, y color de ojos grises, labios gruesos, nariz afilada.
Me sentía extremadamente nerviosa mientras hablaba delante de tantas personas. Era la primera vez en toda mi vida que me atrevía a venir a una audición para un programa de televisión a nivel internacional.
_______ ¿Sabes a lo que vienes? ___ Me pregunto una mujer de cabello negro intenso.
______ Sí. _____ Conteste en seco.
Nerviosa entrelacé los dedos de mis manos. Sabía muy poco de lo que se trataba el programa. Lo único que era cierto era el dinero que íbamos a ganar si sobrevivimos a lo que ellos le llaman "la sombra del mal"
______ Espera nuestra llamada. ____ Otro hombre me dijo sin tan solo voltear a verme.
Respetuosamente, me incline delante de ellos. Y salí del salón donde se estaba llevando a cabo la audición.
Afuera me encontraba chicas de todo tipo, parecía que fueron disfrazadas para una fiesta de Halloween. Sin embargo, yo era la única que iba lo más normal posible.
____ Te equivocaste de Audición. Deberías ir al otro foro ; donde estás las muñequita como tú. ___ Una de las chicas susurró cuando pasé a su lado.
Volteó ligeramente a verla, esa energía negativa que suelta es muy fuerte. Hace quererte alejar de ella.
No dije nada y continúe caminando por el pasillo. La mirada de muchas chicas cayó sobre mí. Era yo la rara, aun así, no le di mucha importancia.
Al salir de la empresa televisiva, tome un taxi. Ya era tarde, por lo cual llegaría media hora más tarde a mi agotador trabajo.
Miraba por la ventana. En todas partes podías ver a la modelo del momento, era una chica gótica, de largo cabello rojo intenso, labios del mismo color y piel sumamente blanca.
Ahora iba entendiendo por qué todas las chicas querían vestirse como ella. Era la moda. Luego de varias horas de camino, por fin llegue a mi agotador trabajo de mesera en el bar.
Hombres borrachos, alcohol, cigarro, y todo tiempo de sustancias prohibidas. El paraíso para muchos hombres y mujeres. El el infierno para otros tantos.
______ 146 dólares. _____ Al escuchar la cifra que el taxista me estaba cobrando me quedé con la boca abierta.
______ ¡Está mal, no me llevé más de 55 dólares! ____ Expresé furiosa.
______ Eso dicen todas, ve lo que marca. _____ Me señala la pantalla, donde decía que yo debía tanto dinero.
______ Ahora paga. ¡No te hagas la tonta!
Furiosa y con el tiempo atrasado, busqué dentro de mi bolso, por suerte, aún traía unos cuantos dólares.
Se los puse en la mano y baje del tonto taxi. Estaba segura que me estaba robando, pero que podía hacer.
Caminé al otro lado de la calle, donde se encontraba el bar nocturno. "La noche del placer" es por demás decir que los clientes que visitan este establecimiento son hombres, y en pocas ocasiones vienen mujeres en busca de compañía femenina.
Al llegar al bar, entre por la puerta trasera, donde entran todas las trabajadoras. Fue a los vestidores a cambiarme de ropa.
Cuando de pronto, entró el jefe, con una cara de pocos amigos.
______ Señorita Méndez, no creer que ya es tarde para entrar a trabajar. Claramente se le indicó la hora de entrada.
Enderece mi espalda, cubriendo mi cuerpo semidesnudo con mis manos. El hombre delante de mí era un viejo asqueroso; el cual buscaba cualquier pretexto para entrar y vernos desnudas.
______ ¡Debió haber llamado a la puerta antes de entrar!
Mis palabras causaron burla en el hombre viejo y calvo.
______ ¿Pedir permiso para entrar? ¡Yo aquí soy el dueño, puedo entrar a donde a mí se me dé la gana!
Da algunos pasos acercándose a mí. Retrocedí con miedo, no era fácil trabajar en este lugar y mucho menos ser acosada por el dueño.
Ante los ojos del mundo, cada chica que trabaja aquí es de lo peor. Sin ver la otra cara de la moneda. Muchas lo hacemos por necesidad. Otras, aunque sí, solo vienen a buscar el dinero, y otras tantas les gustan las adiciones y es el sitio perfecto para todo eso.
Mi espalda golpe contra la mesita detrás de mí, el dolor era un poco punzante, solo pude hacer una mueca de dolor.
________ Eres muy bonita. Tu cabello aroma a frutos rojos. _____ El asqueroso viejo, tomó un mechón de mi cabello y lo olfateó.
Ahí supe que estaba perdida, que no me dejaría salir de aquí sin lograr su perverso objetivo.
El viejo coloca sus manos gordas en mis hombros. Me arrojó contra la mesa e intentó besarme.
El aliento de su boca era sumamente desagradable, sus manos tocan mi piel de una manera grosera.
______ ¡Será rápido y podrás volver a tu trabajo!
No pude más con el asco que sentía. Era un viejo repugnante, lo empujé con fuerza, alejándolo de mí.
Eso lo hizo enfurecer, me soltó una bofetada, la cual me envió al piso. Al estante, me sentí mareada. Todo se movía a mi alrededor, traté de ayudarme a ponerme de pie, pero fui levantada agresivamente por el viejo.
_____ ¡Yo soy tu dueño y debes complacerme!
Me dio otro par de bofetadas, abriendo mi labio inferior. El sabor a sangre se extendió por toda mi boca. Cada instante, me sentía más mareada. En cualquier momento me desmayaría y este infeliz haría conmigo lo que quisiera.
Con las pocas fuerzas que me quedaban, le dio un golpe certero en las pelotas. Me soltó cubriéndose en medio de las piernas.
______ ¡Perra! _____ Expresó adolorido.
Cegada por la rabia de ser casi abusada por este cerdo, tomé lo primero que encontré encima de la mesa. Con rabia golpeé su cabeza.
Mis manos se marcharon de sangre, al reaccionar y verlo tirado en el piso en un charco de sangre, sentí un inmenso miedo.
..."¿Qué hiciste Lilit?"...
Mi cuerpo tembló violentamente. Tarde unos segundos en asimilar lo que he hecho.
Solté un profundo suspiro. El objeto se deslizó por mis manos, me inclinó un poco delante del viejo; estaba muerto.
Iría a la cárcel por el resto de mi vida solamente por defenderme, ¿Quién me va a creer? Escapar era la única opción que tenía en este momento.
Tenía que amarme de valor y escapar, nadie me vio entrar al bar, por lo cual, nadie sabe que estoy aquí.
Cerré la puerta de los vestidores. Entre al baño y me lave las manos, al estar limpia, tomé una bolsa de plástico y recogí el objeto con el que asesine al viejo.
A decir verdad no me sentía culpable, no había ningún remordimiento dentro de mí. No me sentía una mierda, creo que lo que he hecho estuvo bien.
Ese maldito viejo se lo merecía por abusar de tantas chicas. Después de unos segundos, tomé uno de los uniformes de las chicas y salí de los vestidores.
Afuera del bar, caminé como si nada hubiera pasado. Al llegar a un puente, donde abajo hacia agua arrojé la bolsa con el objeto. Seguí caminando hasta volver a mi hogar.
Cansada de tanto caminar, me dejé caer encina del sillón. Arrojé la peluca que llevaba puesta a un lado, cerré los ojos; echando mi cabeza hacia atrás.
A la mañana siguiente, me levanté de la cama, como todas las mañanas, entre al baño y me di un baño.
Al salir, tomé el celular de encima de la mesita de noche, tenía miles de mensajes de mis amigas. Algunas me contaban lo que había pasado con el viejo, y otras me contaban lo felices que eran con su muerte.
Entre a mi correo electrónico, mirando la confirmación de mi participación en el programa de televisión. Una sonrisa apareció entre mis labios, era la oportunidad perfecta para escapar por algunos días.
La cuartada perfecta para que no me culpen del asesinato del viejo asqueroso. Dejé de nuevo el celular a un lado, me vestí, y maquillé un poco mi rostro.
Al estar lista salí de mi recámara. Sentada tomando sol, se encontraba mi hermana Cecilia, lleva algunos meses enferma, y su medicina es demasiado costosa. Es uno de los motivos por los cuales quiero entrar al programa.
A parte de que puedes ganar el premió, también te pagan una cifra por estar ahí. Así que pedí que todo el dinero acumulado se vaya a la cuenta de mi hermana, con ese dinero ella podrá comprar todo lo que necesita mientras esté encerrada.
_____ Hola, hermosa. ____ La saludé envolviendo mis manos en su cuello y dándole un beso en la mejilla.
______ Ya es tarde, ¿por qué todavía no te habías despertado? Llegaste temprano del trabajo.
Solté mis manos del cuello de mi hermana. Al parecer me estuvo cuidando todo este tiempo. Levanté una de mis cejas, no esperaba ser tan controlada por mi propia sangre.
Me desvivía por ella; y Cecilia parecía solo importarle que llegue tarde del trabajo y que me levante temprano hacerle el desayuno.
_______ Iré a preparar el desayuno. ____ Comenté sin ver ninguna expresión diferente en mi hermana.
Fue a la cocina, preparé algo rápido, el celular a un lado no dejaba de sonar, nerviosa de ser descubierta, le eche una mirada rápida a la pantalla. Era un mensaje de Diana, una chica que también trabajo en el club y con la cual hicimos una amistad.
..."Felicitarme, fui escogida para entrar a un famoso y misterioso programa de televisión"...
Deslicé mi dedo por la pantalla del celular. Era el mismo programa donde yo también estaré. Era extraño que a las dos nos hayan aceptado. Pero, igual, me alegro de que no estaré sola.
...****************...
...Narra Cecilia...
Observé por mucho tiempo a mi hermana en la cocina. Veía la pantalla del celular en cada momento, odiaba verla tan tranquila después de haber asesinado a un hombre la noche anterior.
Lo ha hecho de nuevo y no siente ningún remordimiento, la asesina que lleva por dentro, no siente temor de Dios. Es una mujer cruel y despiadada.
Me levanté del sofá, y fui a su habitación. Su laptop estaba encendida, me acerqué a su escritorio y abrí la pestaña que tenía abierta.
El correo electrónico confirma su estancia en el programa de televisión. Rápidamente, me tome el trabajo de memorizar todo lo que decía. Salí de su habitación y fui la sala.
Esperé que el desayuno estuviera listo, para poder desayunar. Jugué un poco con mi celular, hasta que estuvo listo.
______ ¡Ceci, el desayuno está listo!
Fingí levantarme con dificultad y caminar hasta la mesa. Ante los ojos de la asesina, estoy muy enferma, cree que pronto me voy a morir, pero es una estrategia mía para vengarme de ella y hacerla pagar por lo que hizo hace años.
Cada mañana me levantó muy temprano, me maquillo, para verme enferma. Tome clases de maquillaje profesional a escondidas de Lilit.
Ella sigue creyendo que estoy muriendo. Qué siga pensando así, se llevará una gran sorpresa cuando llegue el momento.
_______ Espero que te guste. Fue algo rápido. Saldré más tarde.
Lili pone el plato de comida delante de mí. Un par de huevos, jamón y un té, era el desayuno de esa mañana.
_______ El hambre se me quito. Pediré algo de desayunar por la app. _____ Dije molesta.
No pensaba comer algo tan sencillo como ese desayuno.
_______ No tuve tiempo de preparar algo más rico, el dinero no me alcanzó. Más tarde iré a buscar un nuevo empleo y traeré algo para preparar la cena. _____ Se disculpó.
_______ Soy una carga para ti... Desde que papá y mamá murieron, me he convertido en un estorbo.
_____ No es eso, Cecilia. Solamente, que la actitud que tienes es muy desesperante. Me gustaría que fueras un poco más positiva y me ayudes a salir adelante.
______ Deberíamos ver a otros médicos y escuchar otras opciones, si hay una posibilidad de que te puedas recuperar lo antes posible.
Pasé mi lengua por mis labios, mis puños se apretaron discretamente por debajo de la mesa.
_____ Crees que te estoy engañando. Qué necesitada tengo fingir una enfermedad.
_____ ¡A esto es lo que me refiero, Cecilia! No puedes continuar comportándote como una víctima. _____ Expresó Lilit en voz alta.
______ ¡Niega que soy una carga para ti!... Me ves solo como a un estorbo. Una mujer que no sirve para nada.
______ ¡Un maldito mueble inservible! _____ Grité, mirando a los ojos a Lilit.
______ ¡Deja de verte como a una víctima! Es verdad estás enferma y que puedes morir. Pero quien no lo hará. Nadie es inmortal.
Lilit se pone de pie, arrojando el plato de comida al piso. Está es la asesina a la que siempre he conocido.
Por fin ha dejado de fingir ser buena e inocente. Está es la asesina de su propia familia.
______ ¡Lo siento!
______ ¡Lo siento!
______ Fue un momento de impulso.
Lilit se inclinó a recoger lo que dejó caer al piso. Me puse de pie delante de ella.
______ El hambre se me quito. Iré a mi habitación.
Me di la vuelta, dejando a mi hermana ahí. Las horas se acercan y mi venganza también. Volví a mi habitación, cerrando con seguro la puerta detrás de mí.
Caminé hasta la ventana, mi mirada fría y cortante se perdió. Cerré los ojos un momento, recordando lo que pasó hace un par de años.
Era una noche de invierno. El reloj daba las 9:30 de la noche. Lilit llegó de estudiar un poco más pronto de lo normal.
______ Buenas noches, mamá. ¿Por qué vistes completamente de negro?
______ Ese color no te favorece. Tú eres más de los colores alegres. ¿A caso algún familiar cercano murió?
Mamá se mantuvo sin ninguna expresión en su rostro.
______ Tu padre y yo tenemos una fiesta. Tu hermana y tú se quedarán en casa. No salgan hasta que nosotros volvamos. Tampoco le abran la puerta a nadie.
______ Mamá, ya no somos unas niñas. Te recuerdo que somos todas unas mujeres. Además, aún es temprano. Eso que nos impidan salir de casa, no esta nada cool. _____ Expresó Lilit.
_______ Lilit, ni tú ni tu hermana pueden salir de casa. Es por su seguridad. ____ Al terminar de decir eso, mamá le dio un beso en la mejilla y se dispuso a salir de casa.
Al ver a los dos vestidos de negro, Lilit los siguió sin que se dieran cuenta. Quería saber que era lo que sus padres ocultan.
Cada cierto tiempo, sus padres salen y vuelven hasta el otro día. Al atardecer. Durante todo ese tiempo las dejaban encerradas y así evitaban que salieramos sin su permiso.
Al verla escapar, yo la seguí, necesitaba saber que había detrás de todo aquello que mis padres escondían.
Cada uno los seguimos hasta las afueras de la ciudad en un sitio remoto, alejado de la civilización. Tardamos varias horas en llegar, y el cobro del taxi fue carísimo.
Mis padres en medio de la noche, se reunieron con otras personas, las cuales vestían igual que ellos.
Luego de intercambiar algunas palabras, todos se pusieron una capucha negra, con la cual cubrían sus rostros.
Entraron a una casa abandonada, intente seguirlos, pero fue imposible. Había hombres cuidando la entrada, y solamente, me quedó esperar.
En cambio, Lilit al ser más ágil que yo, logró ingresar. Poco tiempo después, salió discutiendo con mis padres.
______ ¡Soy asquerosos!
______ ¡Mente tan retorcida tienen!
_______ ¡Son inocentes! ¡Cómo pueden tener el corazón tan negro y hacerles esto!
Mi padre le soltó una bofetada, enviándola al suelo.
_______ ¡Cállate!
_______ Volvamos a casa. _____ Papá furioso recogió a Lilit del piso, y la llevó a empujones al coche.
La subió a la fuerza al asiento trasero, luego encendió el auto. No pasó mucho tiempo, el coche de mi padre se encontraba en el fondo de una Barranca.
La única sobreviviente era mi hermana, la cual convenientemente perdió la memoria.
Cuando ella fue hallada no recordaba nada de lo que paso. Era como si hubieran borrado de su cabeza ese momento. Ella solamente, me recordaba a mí, y no a mis padres.
Luego de un año de la muerte de mis padres. Unos hombres se acercaron a mí, me contaron todo lo que había sucedido.
Lilit fue la causante de la muerte de mis padres. Me mostraron varios vídeos donde claramente se ve a mi hermana mover el volante y enviar el auto al fondo de la Barranca.
_______ Tú eres la elegida debes hacer justicia por tus padre. Debes vengar a tu sangre. Nadie mejor que tú para vengarte.
______ ¿Elegida de qué? _____ La mirada de esos hombres causaron escalofríos en todo mi cuerpo.
______ Lo sabrás cuando llegue el momento. Ahora solamente debes esperar.
El hombre vestido de negro, alto, y con una mirada de asesino. Tomo mi mano, ejerciendo mucha fuerza en ella.
_______ Eres la primogénita, eres la escogida para vengar a tu sangre. Debes matar a tu hermana cuando se te sea indicado. De lo contrario, las dos deben morir.
El hombre suelta mi mano, y sacó una daga afilada de atrás de su cintura, la coloca en mis manos, sin dejar de verme a los ojos.
_____ Espera nuestras indicaciones. ___ Luego de decirme eso, se da la vuelta y desaparece.
Durante dos años, recibí instrucciones sin saber de quien. Nos conocían demasiado bien. Nos tenían vigiladas, y me enviaban fotos de todo lo que Lilit hacía.
A través de esas fotos y vídeos, sabía todo lo que mi hermana menor hace.
Abrí los ojos, sintiendo un dolor punzante de cabeza. Me alejé de la ventana y fui al interior del baño.
Preparé la tina con agua extremadamente helada. Desde la muerte de mis padres, me pegan unos dolores horribles de cabeza y solo sumergiéndome en el agua helada se me van quitando.
Me quite el vestido que llevaba puesto. Entrando lentamente a la tina. Me fui sumergiendo hasta cubrir por completo el cuerpo.
Me quedé dentro del agua por mucho tiempo, hasta que sentí ahogarme. Me levanté rápidamente, abriendo mi boca, intentando tomar un poco de aire.
Download MangaToon APP on App Store and Google Play