Umbra era el país habitado solo por humanos, a diferencia de otros donde se establecen seres sobrenaturales, vampiros, hadas, elfos, sirenas, lycan y demás, cada ser tenía su propio imperio, por siglos, estos estuvieron en paz con otros imperios, ellos no molestaban a otros imperios y estos no hacían nada en su contra.

Todo estaba bien, en total paz, hasta que se desató una guerra, una declarada por los habitantes de un imperio cercano, este era el imperio de los Lycan. La guerra inició, el emperador de los lycan deseaba tomar el imperio de los humanos debido a sus grandez riquezas.

Y así, iniciaron una guerra contra el imperio humano, pero nadie esperaba algo increíble, entre la familia imperial, había una guerrera excepcional, gracias a ella, las tropas humanas lograron avanzar, eran imparables y las batallas que ella guiaba eran exitosas, esto ocasionó celos, envidia y odio de parte de sus hermanos, pues el emperador la favorecía debido a sus logros, ya que ella iba ganando la batalla contra los lycan, el emperador de estas, sabía que era cuestión de tiempo para que su imperio fuera tomado por esos humanos. Pero, algo paso, justamente en la batalla final, quien apareció guiando el ejército era la hermana mayor de su enemiga principal.

Nadie sabía porque, pero esto, solo favoreció a los lycan, porque en cuestión de meses, ellos lograron echar de su territorio a los humanos y pronto tendrían el imperio completo, pero la corte del imperio humano preciono a su actual emperador para pedir un pacto, uno donde ellos le darían el territorio de las minas, pero a cambio acabaría la guerra y firmarían un tratado de paz. La princesa mayor no quería, ella aseguraba que ganaría, pero la corte no se dejo manipular, sabían que ellos estarían perdidos sin la princesa menor, esto enfurecia mas a la princesa mayor, pero ya nada se pudo hacer, el emperador actual fue convencido y se entregaron las minas con todo el territorio cerca de éstas. El emperador de los lycan acepto el trato, ya que ese territorio era rico en minerales y joyas.

Tras este tratado de paz, el emperador lycan se enteró de la verdad y de lo que había pasado con su principal rival, la princesa menor, mientras que la princesa mayor que lideró la batalla se sintió humillada, todos hablaban de lo patética que fue al liderar la batalla y que por su culpa, los lycan ahora tenían su territorio más importante y rico. ¿Pero porqué paso esto?, ¿por qué la hermana mayor lideró la batalla y no la princesa menor?, ¿que paso con la princesa menor?, todo tiene respuesta y es justo antes de la batalla decisiva.

La princesa mayor celosa de la fama de su hermana menor, creo que un cruel plan para quitarla de su camino.

El hijo de un duque influyente, se acercó a la princesa menor, la enamoró, le pidió ser su esposa, prometiendo juntos llegar a la victoria. Ella creyó en él, aceptó un compromiso, el cual fue bien aceptado por su padre, ya que el duque era influyente y su ejército sería de gran ayuda para sus tropas.

Incluso propuso coronar a la princesa menor como la emperatriz, ya que de todos sus hermanos, ella era la más apta. Ella estaba feliz no solo se casaría con el hombre que amaba, también sería la emperatriz. Y así, la ceremonia se hizo, ella y el joven duque se casaron, el emperador la coronó emperatriz y a su esposo, el nuevo emperador. Todo parecía perfecto, hasta que una noche, su padre, el ex emperador sufrió un intento de asesinato y de inmediato la princesa mayor presento pruebas que culpaban a la joven emperatriz como la autora de dicho acto, el ex emperador también creyó en la primera princesa así como los de la corte, porque ella había presentado días antes pruebas donde la joven emperatriz planea aliarse con los lycan y entregarle el imperio.

El emperador corroboró eso, estaba molesto por dichas pruebas, incluso planeaba quitarle la corona a su hija menor y creyó que este fue el motivo por el cual la joven emperatriz quiso asesinarlo, para que nadie presentará las pruebas de su traición.

Y así, la que una vez fue la heroína del imperio, fue encerrada en una sucia celda sin comida ni agua, hasta que recibió la visita de su hermana y su esposo. Es ahí donde la joven princesa lo supo, su esposo y su hermana mayor habían conspirando contra ella, su hermana se burlaba de ella por lo estúpida que fue y el nuevo emperador solo presumía como ahora la mujer que en verdad ama, sería la emperatriz y serían felices juntos, después de que la princesa mayor ganará la batalla contra los lycan.

Por supuesto, ambos estaban totalmente equivocados y por culpa de la ambiciosa princesa mayor, habían perdido un territorio sumamente importante para la economía del país. Sin saberlo, ellos mismos se condenaron por su ambición y envidia.

Mientras que la joven princesa, pereció sola en la sucia celda, abandonada por la gente que protegió, ella murió odiando a todos aquellos que la traicionaron y abandonaron. Pidiendo que si es posible, ella entregaría su alma con tal de que los traidores obtengan un final miserable.

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Y así, unos preciosos ojos rojos se abrieron repentinamente, la vista nublada poco a poco se hizo clara y podía ver un techo elegante con el candelabro colgando en medio de este, ella se reincorpora y al llevar su mano a la cabeza, sus finos cabellos negros se deslizan hacia abajo, la joven se sorprende ante esto, en especial al ver que estaba en una cama, cubierta por una sabana de tela fina.

Levanta la vista, observando a su alrededor, ella no reconoce ese lugar, hasta donde recuerda, murió en una vieja bodega donde se desangro debido a una fea herida. Se pone de pie hasta llegar ante un espejo, notando que esa, no era ella, era el rostro de otra persona. Era una bella joven de cabello negro, largo y hermoso, con un par de ojos de un intenso color rojo, su piel era pálida y una figura que cualquiera envidiaría.

《¿Que esta pasando?》se pregunta entre sus pensamientos.

Repentinamente, siente un mareo y una serie de recuerdos se reproducen en su memoria, desde el momento en el que ella nació, hasta el momento en el que murió en una sucia celda. Era los recuerdos pasados, presentes y futuro de la dueña del cuerpo. Ella siente el inmenso deseo de venganza del alma, entre sus recuerdos ve a esa joven ante ella, ambas eran identificas.

— mi alma por venganza...hazlos sufrir...acaba con ellos...— pedía aquella alma atormentada.

Ella asiente y así, aquella alma desaparece y ella despierta, se había desmayado sobre el piso, incluso siente un leve dolor en la cabeza por el golpe. La puerta se abre y era una mujer mayor quien entró, esta lleva una bandeja.

— alteza, ¿que hace?, ¿se encuentra bien?— pregunta la mujer preocupada.

— estoy bien...– se pone de pie.— ¿tienes agua?

La mujer asiente y le sirve un vaso, mientras que la chica se sienta en la orilla de la cama, aún estaba un poco confundida de lo que pasaba. La mujer sirve la comida que había llevado y con sumo cuidado le entrega una copa con un líquido rojo, al sentir el aroma, ella se sobresalta.

— beba rápido alteza...—

La chica sostiene la copa por mero instinto y se lleva a la boca el líquido que contenía. Al tocar su lengua, ella supo de inmediato lo que era, incluso sus ojos dieron un brillo leve al pasar todo ese líquido, era tan dulce y sentía su cuerpo estremecer. Al acabar devuelve la copa y la mujer la guarda.

— la dejo descansar y aquí le dejo algo de comida por si desea alimentarse.— menciona la mujer.

— te lo agradezco, Moira...— responde rápidamente.

El nombre de la mujer resonó en su cabeza. Pero, lo que ha pasado hace unos segundos la desconcertó un poco. Lo que había bebido era sangre, pero se supone que es un imperio humano, ¿que estaba pasando? Pues por el actuar de la mujer asume que nadie más sabe. Necesita indagar más en su memoria para saber más del cuerpo que ahora posee.

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Victoria Blackwood, la princesa más joven e hija de los emperadores de Umbra, desde pequeña demostró su destreza en la batalla, su fuerza y agilidad la hacían un arma letal. Como en Umbra las mujeres tenían más libertad, sus padres nunca se opusieron a que ella entrenará con sus hermanos mayores, después de todo, la primera princesa también lo hacía.

Y así, Victoria creció demostrando sus habilidades, pero con ello, también crecieron los celos y la envidia de sus hermanos, en especial de la primera princesa, Lethia Blackwood, quien detestaba que Victoria destacara incluso en belleza y ese fue el principal motivo por el cual la pobre Victoria perdería todo. Pero no ahora, porque la Victoria actual conoce todo ese futuro y el secreto de su inusual fuerza y agilidad, ella, no era humana, ella solo era la hija adoptiva de los emperadores, una niña que el emperador recogió cuando exploraba el bosque, la emperatriz al ver a la pequeña sintió pena al saber donde había abandonada, así que junto a su esposo, decidieron adoptarla y recibió el mismo amor que los hijos biológicos.

Después de asimilar que había reencarnado en un mundo diferente, en el cuerpo de una mujer diferente, ahora tenía que poner en marcha algún plan para evitar la tragedia. Cuando Victoria salió de la habitación después de cinco días de reportarse enferma, todos se sorprendieron al verla caminar por los pasillos del palacio, no llevaba su habitual traje de batalla, por el contrario, portaba un llamativo vestido color negro y algunos accesorios que resaltaban la belleza de sus ojos carmesí. Pero su andar fue interrumpido cuando la primera princesa, Lethia, se interpuso en su camino.

— ¿acaso vas a un funeral?, dejaste el traje de batalla para vestirte como un cuervo...— se burla.

— aunque te burles, con o sin traje de batalla, puedo cortarte esa lengua afilada, así que, cuídala o la perderás.— responde con una sonrisa burlona.

— ¿tú?, el hecho de que hayas ganado algunas batallas, no significa que puedas contra mí, yo ya habría ganado esta guerra.— presume con la mirada en alto.

— sueñas en grande, hermana, pero esto es la vida real y por algo, no lideras las tropas.— se burla.

Lethia solo se muestra molesta, mientras que Victoria la aparta para seguir su camino, no tiene tiempo que perder con esa basura.

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Victoria llego a la sala de reuniones, donde se estaba llevando a cabo los planes de defensa contra los lycan. El emperador regaña a Victoria por llegar tarde y por no haber asistido durante dos días. Victoria solo observa al emperador, ese que fácilmente se dejo engañar por Lethia.

— me disculpo majestad, la próxima vez pensaré primero en mi deber antes de enfermar.— hace una reverencia agachando la cabeza.

Su voz sonó cortada, causando desconcierto en los generales y puso nervioso al emperador. Este garraspea para continuar con la reunión, mientras que Victoria observa todo, aunque prefiere no aportar ninguna idea, incluso cuando le preguntan, ella dice que no pensó en nada más, pues el único camino para entrar al país es aquel istmo, por lo que duda que los lycan tengan otra ruta.

Al finalizar la reunión, el emperador le pidió a Victoria estar preparada para la batalla, ella será la que guíe las tropas esta vez, pues gracias a sus habilidades se ha ganado ese "honor". Victoria agradece y se retira también.

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Más tarde, Lethia se ha enterado que es Victoria quien guiará las tropas, lo cual la enoja, porque para si misma, ella es mejor guerrera que Victoria, ella es la primera princesa y quien debe de tener ese honor. Lethia no dudo en expresar su descontento durante la cena familiar, ya que siente que ella es quien debería guiar a las tropas.

— padre, si Lethia desea tomar el control de las tropas no me opongo, temo no hacerlo bien debido a mi salud.— expresa preocupada Victoria.

Lethia y todos en la mesa se sorprenden por las palabras de la más joven. El emperador mira a Victoria con preocupación.

—¿tan grave es lo que tienes?— pregunta preocupado.

— no padre, estuve con fiebre, pero, mi cuerpo aun esta débil y temo no poder desempeñarme bien en el campo de batalla.— explica.

— ¿Victoria enferma?, eso si que es una novedad.— se burla Abel, el primer príncipe.

— tal vez solo es una excusa para no ir a la batalla.— agrega Byron, el segundo príncipe.

— Byron, Abel, suficiente. Si Victoria aún no esta lista, entonces podemos esperar, no nos podemos arriesgar, esta batalla es importante.

Lethia aprieta las manos molesta al escuchar las palabras de su padre.— ¡yo puedo guiar las tropas!, soy lo suficientemente fuerte, ¿por qué hay que detener todo solo para esperar?, los lycan no esperarán.— expresa enojada.

El emperador se queda en silencio, así que se queda pensando, pues Lethia tiene razón, los lycan podrían aprovechar la ausencia de las tropas para atacar.

— bien, Lethia tendrás una oportunidad, pero ten en cuenta que si fallas, tendrá consecuencias.— le advierte.

— no fallaré padre, le demostraré que soy la indicada para esta batalla.— asegura Lethia.

La princesa mayor estaba emocionada y feliz, finalmente puede demostrar que es mejor que Victoria, ella les hará ver a todos que los lycan se rendirán ante su poder. Victoria por su parte, solo sonríe ladina, siendo visto esto por la propia Lethia, pero le resta importancia, piensa que solo esta fingiendo que no le importa.

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Después de la cena, mientras Victoria iba camino a su habitación es interceptada por Byron, quien dice no creer que ella este enferma, de estarlo, el médico ya habría ido a revisarla y hasta ahora, nadie ha visto médico visitarla.

— Moira me dio un remedio, ella sabe sobre eso. Pero mi cuerpo aún duele.— responde.

— si sabes que Lethia fallara, ¿verdad?, todos saben que eres más fuerte que ella, has estado guiando las tropas desde hace dos años, tienes más experiencia en el campo de batalla.—

— entonces quien se enfrentará a las consecuencias es ella. ¿Te preocupa?— sonríe ladina.

Byron niega y cuando Victoria llega a su residencia, Byron se despide, siguiendo su camino hacía su propio lugar.

•••

Victoria espero a que la noche avanzará, fue entonces que decidió salir, salto desde su ventana sintiendo su cuerpo ligero hasta tocar el suelo, seguramente es una habilidad de su cuerpo. Ella corre hacía el bosque, necesita probar las habilidades que posee como vampiro.

Se movía más rápido que cualquier humano, su agilidad era buena que pese a la velocidad en la que corre, no choca contra los árboles. Ella aprovecha esto para dirigirse hacía la zona donde se establece el campamento de los lycan, aunque tuvo que moverse con sumo cuidado, en especial cuando pasa por el campamento de los humanos, ella pasa por la zona del bosque, pero, el amanecer de acerca, por suerte dejo dicho con Moira que no quería que nadie la molestará. Victoria busco una cueva donde descansar un poco, pues en la noche seguiría su camino.

Cuando el anochecer llegó, Victoria siguió su camino, llegando cerca de media al área de los lycan. Ella se mueva entre los árboles como una sombra, hasta que escucha algunos aullidos, así que tenía que cuidar sus pasos hasta llegar a donde desea. Ya que, si la verdadera Victoria fue acusada de traición, ella, si planea tracionarlos, después de todo, ¿por qué luchar por gente que no conoce?, ella no tiene ningún lazo emocional con esos humanos y disfrutará acabar con Lethia y su amante.

Victoria iba descuidada, hasta que repentinamente escucha pasos por el lugar, por lo que intente esconderse, pero, algo la derriba llevándola a golpearse la espalda con fuerza contra el suelo. Al abrir los ojos un enorme lycan estaba sombre ella, presionando sus garras en sus muñecas mientras mientras sus caninos y sus ojos furiosos.

— encontré un cachorro salvaje.— sonríe ladina.

Sus ojos brillan y de un momento a otro, empuja el cuerpo del lycan con sus pies, logrando liberarse. El lycan se lanza al ataque de nuevo, pero ella lo esquiva y logra saltar para sostenerlo del cuello con el brazo. El lycan se sacude causando que Victoria sea lanzada y ella logra evitar un golpe contra el árbol. El lycan gruñe debido a que la chica le estaba dando batalla, mientras que Victoria muestra sus colmillos y garras.

— mejor detente cachorro, no vengo a pelear, vengo a entablar una pequeña charla con el emperador lycan.— le habla.

El lycan observa a la joven, no comprende el porque una vampiresa querría venir al territorio lycan, sola y pidiendo ver al emperador. Victoria ladea un poco la cabeza y sonríe, las memorias de la verdadera Victoria le hacen saber de quien trata aquel lycan que esta ante ella, no solo por su apariencia, también por el aroma que este tiene, al parecer los vampiros al igual que los lycan tienen un buen olfato.

— eres tú, te he visto en el campo de batalla.— menciona Victoria.— su majestad, el emperador de los lycan, Wolfram Von Der Heide.

El lycan la observa fijamente, sorprendido al reconocerla. No la había visto antes fuera del campo de batalla donde luce un uniforme de batalla y siempre lleva el cabello recogido y una capucha. El lycan comienza a perder estatura mientras toma forma humana nuevamente, dejando ver a un atractivo hombre de ojos purpura y cabello largo del mismo color que su pelaje de lycan. Por supuesto el hombre no lleva nada de ropa encima, pero, la vergüenza de ser visto desnudo no era algo que este sintiera.

— quien diría que la princesa de los Blackwood en realidad es una chupasangre...— comenta el hombre manteniendo la guardia.

— larga historia que no me interesa contarte, he venido por otro asunto.— responde Victoria.

El hombre solo sonríe ladino ante la respuesta de Victoria, aunque si le da curiosidad de saber como una vampiresa forma parte de la familia imperial de Umbra.

— valiente, debo de admitirlo. ¿Que buscas?, ¿es esto una trampa?— se mantiene alerta.

— no, pero se de una que los humanos tienen lista para ustedes, la primera princesa Lethia guiará a las tropas para un ataque sorpresa.— Victoria al igual que Wolfram se mantiene en alerta.

— ¿como se que dices la verdad? ¿O solo haces un berrinche porque no te dejaron guiar el ejército?— después de todo, durante estos dos años, esa mujer ante él, es quien más problemas le ha dado.

— digamos que sí, que lamentaran haberme hecho enojar.— se encoge de hombros.

— digno de un chupasangre, son viles ratas traidoras.— comenta con burla.

— si, quizás sea traidora, pero tengo mis razones.— responde con calma.

Victoria le lanza algo y al recibirlo, Wolfram ve que se trata de un pergamino, al abrirlo, era el mapa, donde se marca la zona en la que las tropas humanas entrarán.

— comprueba por ti mismo si lo que digo es verdad, entonces búscame.— lo observa de arriba hacía abajo, era todo un deleite ver a esa hombre, pero era ya momento de retirarse.— y no mates a la primera princesa, esa perra yo misma la mataré.

Victoria le hace un guiño y desaparece en la oscuridad del bosque como una veloz sombra. Wolfram observa el mapa, pero, no sabe si sea real o solo es una trampa de esa mujer.

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Victoria había logrado volver al palacio sin ningún inconveniente, justo cuando Lethia ya se preparaba con las tropas para salir, mientras que Victoria observa todo por el balcón. Lethia levanta vista hacia Victoria y le sonríe con burla, aunque la joven princesa solo mueve la mano en señal de adiós mientras deja ver una sonrisa maliciosa, ante esto, Lethia se extraña, no sabe el porque Victoria actua tan tranquila.

Las tropas se marcharon y al cabo de dos días ya han llegado a la zona donde entrarán para el ataque sorpresa, aunque la sorpresa se le han llevado ellos, los lycan ya los esperaban y se defendieron muy bien, causando la retirada de las tropas humanas, Lethia insistía a los generales seguir, pero ellos sabían que avanzar era solo un fracaso seguro.

Mientras que Wolfram recibía el informe, en efecto, las tropas de Umbra estaban en aquella zona marcada del mapa, al parecer, aquella joven princesa dijo la verdad, pero, ¿por qué traicionar a su gente?, aunque claro, era inusual que siendo ella una vampiresa, haya estado con los humanos por mucho tiempo, ¿por qué ahora los traiciona?, no podía confiar en ella fácilmente, podría ser parte de algún plan para llevarse la gloria de la batalla.

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Bienvenidas a esta nueva historia ❤️

Espero les este gustando, estos han sido los 3 capítulos de estreno y ya saben, todos los días hay capítulo ❤️

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