Todavía recuerdo vagamente ese día, era un día caluroso donde todo comenzó. Yo aún era tan pequeño pero recuerdo como ese día conocí la desesperación y el dolor, lo confundido que estaba y la angustia que sentía de no volverla a ver, ese fue el día donde todo mi mundo comenzó a cambiar poco a poco.

17 años atrás vivía con mis padres y mi hermana menor, yo tan solo tenía cuatro años, pero recuerdo que mi padre era un monstruo y mi madre le temía, pero a la vez lo amaba tanto que ella siempre lo excusaba, mi padre solía estar borracho y drogado.

Él era realmente agresivo pero jamás nos había golpeado a mí ni a mi pequeña hermana.

él solía golpear a mi madre hasta cansarse y ella lo disculpaba diciendo que él no era así antes, que solo estaba pasando por un momento difícil a causa de sus vicioso pero que todo cambiaría.

Y si todo cambio...

Cuando yo estaba por cumplir los cinco años mi padre consiguió un trabajo, dejo las drogas y el alcohol, pero él era aún peor que antes, yo solo podía esconderme en el cuarto con mi hermanita y escuchar esos gritos de dolor y desesperación de mi madre.

El día de mi cumpleaños número cinco llegó, por fin era un día diferente a los demás, papá estaba muy feliz no habían gritos ni golpes, incluso papá me compro un pequeño conejo de peluche y mi madre horneó un hermoso pastel de chocolate mi favorito, todo era realmente perfecto hasta que:

llegó alguien era una mujer más joven que mi madre, mi mamá comenzó a gritar y mi padre saco a aquella mujer de la casa.

Mi madre parecía realmente furiosa y que sufría. Yo era pequeño y no entendía porque mi madre golpeaba y le gritaba a mi padre, fue entonces cuando tome a mi hermana y la metí al cuarto, entonces mi padre golpeó tan fuerte a mi madre que creí que la mataría y por primera vez hice lo que nunca me atreví a hacer antes, corrí hasta donde estaba mi padre para tratar de detenerlo, (pero como podrán imaginar todo eso fue inútil). De un solo golpe caí al suelo desmayado al instante, ese fue el primer y el último día que ese monstruo me toco.

Al despertar ya era de noche, mi madre lloraba abrazando a mí hermana, con la cara casi destrozada mientras me pedía perdón, mi padre no estaba y no sabía cuándo volvería lo único que sabía a tan corta edad era que no quería volver a verlo.

Le dije a mi madre que por favor nos fuéramos los tres, que ya no quería seguir viviendo en esa casa con ese monstruo el cual hacia ya mucho tiempo había dejado de ser mi padre, ese padre cariñoso que me arropaba por las noches mientras besaba mis mejillas, que jugaba conmigo y reíamos todos juntos felices, él ya no era ese padre amoroso y tierno que solía ser hace tan solo dos años atrás, él había cambiado totalmente con el nacimiento de mi hermanita...

Esa noche mi madre nos tomó a los dos y a una bolsa con pocas cosas tan rápido como pudo antes de que mi padre regresara, saliendo por fin de esa casa.

Estuvimos caminando por horas hasta que mi madre cayó al suelo. No sabía lo que le pasaba, estaba muy asustado, ella como pudo tomo mi mano diciéndome:

NO TE PREOCUPES, TODO ESTARÁ BIEN, RECUERDA QUE QUE TIENES QUE CUIDAR A TU HERMANITA Y SER VALIENTE POR LOS DOS; LOS AMO PERO MAMI NO PODRÁ VOLVERLOS A VER NUNCA MAS, PERDÓNAME POR ABANDONARLOS Y NO PODER PROTEGERLOS POR FAVOR...

Así dejando caer su mano al suelo.

Le gritaba y lloraba pero ella no volvió a despertar y así sus últimas palabras quedaron granadas en lo más profundo de mi alma.

Sin saber a dónde ir, mi hermanita y yo estuvimos viviendo en la calle, durmiendo en un callejón oscuro y frío.

Ella lloraba mucho mientras que yo era tan pequeño que no sabía que hacer más que abrazarla y llorar también junto con ella.

No habíamos comido casi nada en días y teníamos mucha hambre, pensando que moriríamos de hambre pero al día siguiente un señor se nos acercó, me preguntó por nuestros padres a lo que no le respondí, me preguntó si teníamos hambre le contesté que si ansiosamente, él solo nos miro y saco un poco de comida dándomela, me dijo que lo esperara donde estábamos yéndose de aquel lugar, pensé que no regresaría pero aún así agradecí que aquel hombre tan amablemente nos había dado su comida.

Tenía tanta hambre que yo sólo me podía comer de un solo bocado aquello, pero mi hermanita tampoco había comido, trate de darle pero ella aún era pequeña para comer eso puesto que tan solo tenía ocho meses comenzando a llorar con el pensamiento de que mi hermanita moriría de hambre y yo no podría hacer nada para evitarlo...

*En ese momento yo tenía cinco años y como ya mencioné mi hermana tenía al rededor de ocho meses y lo que aquél hombre me había dado de comer era una torta.*

Después de un rato ese hombre volvió y trajo un poco de leche y plátano para darle de comer a mi hermanita, a si aquel hombre comenzó a volver a aquel lugar día tras día para llevarnos algo de comer, hasta que un día jamás volvió...

Algunas veces pasaba gente y nos daban algo de comida, en algunas ocasiones las personas que vivían en aquel lugar nos dejaban pasar la noche en sus casa pero jamás nos dejaron quedarnos más de una noche ahí.

Así paso un año y cumplí seis años.

El vivir en las calles no era tan malo!.

Comencé a trabajar en un pequeño mercado a los seis años barriendo el lugar y limpiando las frutas, mientras mi hermanita jugaba a un lado mío, a cambio el dueño del lugar nos daba comida y un poco de dinero. Al inicio cuando llegue a pedir el trabajo en aquel lugar no querían darme el trabajo porque era pequeño y vestía muy mal, así que les mentí diciendo que mi madre estaba muy enferma y mi padre había muerto, ellos me compadecieron y me dieron el trabajo, pero como aún era pequeño no sabía ni podía hacer nada así que ellos me enseñaron que era lo que debía hacer y así comenzó todo a mejorar un poco en mi vida.

Cuando me daban el dinero lo llevaba con un joven que también vivía en la calle como muchos otros pero él a diferencia de nosotros era más grande y sabía leer y escribir.

Él en ocasiones nos contaba cuando vivía con sus padres y lo felices que eran, decía que antes vivía muy lejos de aquel lugar, pero que en un viaje sus padres sufrieron un accidente dejándolo sólo al parecer esa clase de historias eran muy comunes en ese lugar, e incluso habian chicos a los que sus mismos padres los habian desechado como basura.

Él me enseñaba y me ayudaba a comprar algunas cosas, también decía que un día se iría y no volvería jamás, así vivimos por un tiempo en la calle, a veces sin comer, con frío y miedo, pero siempre juntos..

Un día aquel niño nos dijo que se iba, él solo tenía 14 años, pero sabía lo que quería y así se fue de aquel lugar en busca de su abuela dejándonos solos

¡Sí, solos otra vez!.

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 Han pasado los días desde que Jan se fue.

Todo sigue igual, yo trabajo en aquel pequeño mercado y mi hermanita está a mi lado, por las noches hace frío, mamá sigue muerta y mi padre jamás nos ha encontrado, no sé si nos extraña o si acaso tan siquiera nos ha buscado alguna vez, en ocasiones me preguntó cómo sería nuestra vida si mamá siguiera viva y todos los días la extraño mucho, pero sé que ella debe de estar orgullosa desde el cielo.

El señor para el que trabajo se molestó mucho conmigo por un accidente y me pidió que nos fuéramos y que no volviéramos, su esposa trato de convencerlo para que no me despidiera, ella sabe que realmente necesitamos ese trabajo, pero él no la quiso escuchar, yo le suplique, pero él está realmente molesto y nos echó de aquel lugar.

No sé que voy a hacer, pronto la comida se nos terminará y casi no tenemos dinero.

Ya tengo 8 años y mi hermanita pronto cumplirá cuatro, hoy el día es más gris y hace mucho frío nadie nos quiso dejar pasar la noche en su casa, creo que todo era más fácil cuando mi madre vivía y mi padre no llegaba a casa.

Esa noche volvimos a dormir en la calle como tantas otras veces, pero cuando desperté mi hermanita estaba enferma, ella estaba ardiendo en fiebre.

Cerca del callejón vivía un hombre, él solía ser un doctor famoso y respetado, pero eso fue hace mucho, él lo perdió todo incluso a su familia por culpa de su alcoholismo. Fui a buscarlo como tantas veces lo había hecho antes para pedirle su ayuda, él realmente era una gran persona a pesar de todo y siempre nos ayudó sin pedirnos nada a cambio.

No podíamos seguir viviendo así, tenía miedo de que mi hermana también se fuera y no regresará jamás al igual que mi madre...

El tiempo a pasado y ahora estamos viviendo con una señora ya mayor que nos ha dado un hogar y mucho amor. Yo le ayudo en casa, ella es muy buena y nos quiere mucho, ella dice que le recordamos a sus nietos que ellos tendrían nuestra misma edad, pero que lamentablemente ellos murieron en un accidente de coche hace ya aproximadamente cuatro años junto con su amado hijo y su nuera, yo no entendía mucho de lo que había pasado la señora al perder a su familia pero lo que si sabía era que ella debió de haber sufrido mucho, ya que cuando yo perdí a mi madre sufrí muchísimo y aún me sigue doliendo su muerte. Pero ahora somos felices con ella y ella con nosotros.

En ocasiones viene su hijo más joven a verla, le trae dinero y comida, se nota que no le agradamos pero ve a su mamá feliz así que no dice nada.

Ya han pasado dos años desde que vivimos con la señora Martha y desde que dejamos de vivir en las calles, pronto cumpliré 12 años, otra vez es otoño la estación que más odio, la estación que más cambios tiene al igual que mi vida, pero estos últimos años al lado de la señora Martha han sido los mejores.

Después de tres años viviendo con la señora Martha ella falleció, el doctor dijo que ya era una mujer de edad muy avanzada y que había estado luchando contra el cáncer ya hacía mucho tiempo y que no había nada más que hacer. Todos estábamos realmente tristes por su muerte.

La verdad es que nosotros la queríamos mucho, pero también estaba preocupado porque con su muerte eso significaba volver a vivir en la calles sólos, ya que su hijo nunca nos quiso...

Nota: Talvez al inicio tengan algunas dudas pero conforme avance la historia muchas cosas cobrarán sentido y también poco a poco irán conociendo los nombres de los personajes, espero está pequeña historia sea de su agrado y recuerden que no siempre todo tendrá sentido ya que los recuerdos pueden ser confusos no exactos. 😊