Mi nombre es Celin, tengo 16 años, soy hija de Andrés Altamirano y Cenife Bustamante surit.

Vivo con mis abuelos Hilarión y Constanza Bustamante, mi padre nos abandono por su secretaria Sonia Fernández. Mi madre perdió una batalla contra el cáncer de mama desde entonces vivo con mis abuelos y mis dos hermanos Lois y Luigi.

Siempre pensé que el matrimonio de mis padres era estable, al menos era lo que ellos demostraban, un día comienzo de otoño acompañe a mi madre al médico, dónde le dieron la noticia de su embarazo, ella muy emocionada quiso compartir la noticia con mi padre y nos fuimos hasta la empresa, cuando llegamos los empleados nos veían como con preocupación, en mis escasos 15 años me daba cuenta de eso, subimos al piso donde quedaba el despacho de mi padre, para darle la noticia y lo encontramos teniendo sexo con su secretaria, era la primera vez que veía algo tan asqueroso, nunca me imaginé algo así, mi madre casi se desmaya de la impresión, mi padre al vernos solo le dijo a mi madre, ya que te enteraste , no tengo que fingir más, asi que dame el divorcio y sal de mi vida.

Recuerdo como mi madre dió la vuelta y nos fuimos a nuestra casa, ella no pudo hablar en todo el camino, cuando llegamos nos encontramos que los abuelos acababan de llegar de viaje, yo me abrace de mi abuelo y le conté todo lo que pasó.

Mi madre, no articulaba palabras del dolor tan grande que sentía, mi padre nunca pensó que los abuelos estaban de vuelta.

Esa misma tarde, ellos nos sacaron de la casa y nos llevaron a otra ciudad y el abuelo llamo a una reunión de accionistas pidiendo la destitución del cargo de papá.

La empresa era de mis abuelos y ellos designaron a papá por mamá, él pensaría que lo dejarían como presidente y eso nunca le pasó por la mente. Los abuelos mandaron a cerrar nuestra casa y las cosas de papá se las mandaron a casa de sus padres.

Seis meses después estaban divorciados. Estando mi mamá embarazada le detectaron cáncer de mama, lo tenía muy avanzado, por su embarazo no pudieron aplicarle el tratamiento, los médicos pensaban que se podía encapsular por el embarazo, pero eso no sucedió. Ya mi mamá esta a punto de dar a luz a mis hermanos son gemelos, le van a inducir el parto por su condición, mis abuelos y yo estuvimos esa mañana con ella antes que la llevarán a quirófano, ella nos pidió que cuidáramos a los bebés que no se lo entregamos a nadie, yo le prometí que sería su tutora con apoyo de los abuelos. La operación de mamá duro cuatro horas, salió bien, mis hermanos estaban sanos y fuertes, ella les escogió el nombre y me hizo prometerle que cuidaría de ellos, yo solo le dije que los cuidaremos las dos.

Cinco días después del parto a mi madre le dio un paro respiratorio, no pudieron salvarla y lo que más tenía llegó, mis abuelos sufrieron mucho la perdida de su hija, yo sin querer me convertía en madre y hermana de esos angelitos.

Su funeral fue en la estricta intimidad familiar, solo la familia por parte de mamá.

De mi padre no supe más de él, ni siquiera se enteró que tuvo dos hijos más, mis abuelos nos protegieron al máximo, mis hermanos no llevan el apellido de mi padre ya que nacieron después del divorcio, yo le pedí a mi abuelo que me ayudara a quitarme el apellido de mi padre no quería saber más de él, solo me dijo espera un poco y prepárate, tu serás mi sucesora.

Ya han pasado diez años de la muerte de mi madre, hoy asistiré con mis abuelos y mis hermanos a un funeral a su memoria, ya los gemelos tienen diez años, próximos a sus once, son super inteligentes, muy maduros para su edad, ellos me ayudan mucho con las redes sociales, desde hace tres años estoy al frente de las empresas de los abuelos, hoy tendré que asistir a una convención de empresarios, no quería asistir, pero no me queda de otra. Es en mi ciudad natal donde pensé que no volvería a estar nunca más, me toca supervisar esa sucursal aprovechando mi estadía.

Llegó en el vuelo de las diez de la mañana, ya Victor Hugo mi amigo y asistente me espera en el aeropuerto, vamos a almorzar, ya que no me dio tiempo de desayunar en casa, me informa mi itinerario aquí en la ciudad antes de la convención que comienza a las seis de la tarde en un prestigioso salón de conferencias de la localidad. Estando en el restaurante mis ojos se fijan en un hombre que nunca desearía haber visto, su arrogancia está intacta, pero por encima se nota que no le ha ido muy bien en los negocios, está en compañía de la misma mujer de hace 10 años, ella mal vestida se nota que no les fue muy bien.

Él voltea y se me queda viendo, pensará que me le parezco a alguien, pero estoy segura de que ni se imagina quien soy, terminamos de almorzar y le digo a Víctor Hugo que debemos irnos, ya que tenemos que pasar por la empresa, mi estadía aquí es corta, está ciudad me trae muy malos recuerdos.

Cuando voy pasando cerca de la mesa de Andrés Altamirano, él susurra un nombre Cenife, yo lo escucho pero no le doy importancia, pensará que soy ella ya que dicen que soy su viva imagen.

Nos dirigimos a la empresa y los empleados al verme piensan que soy mi madre, pero la sorpresa me la llevo cuando veo llegar corriendo a la recepción a la misma mujer que estaba con Andrés Altamirano, la reconocí inmediatamente y le pregunté a Víctor Hugo que hacía ella ahí, y es que me informa que trabaja de recepcionista desde hace tiempo, yo solo le digo bótala hoy mismo no la quiero aquí.

Víctor, no entiende, pero me obedece, emana la orden directa de la presidencia, Sonia no sabe el motivo de su despido, pero esa mujer no la quiero en esta empresa.

Cuando entre al despacho vino a mi mente el día tan bochornoso que encontré a mi padre con esa mujer y le pedí a Víctor Hugo que mandara a remodelar está vieja oficina, el noto mi molestia, pero no me dijo nada, recibimos una llamada de recursos humanos pidiendo una explicación del despido de Sonia Fernández y Víctor Hugo solo respondió es por orden de la presidenta de la compañía, el hombre titubeo, ya de que sabía que no era persona de creer en nadie y menos del que la tenía trabajando aquí, ese mismo día me entero de que mi padre estaba buscando empleo aquí en la compañía, cosa que desaprobé y le niego el cupo a la empresa

Después de estar en la empresa por dos horas, le pido a Víctor Hugo una reunión con los directores de departamentos para mañana a primera hora, sin falta .

Llamo a mis abuelos y hermanos y les notifico que tardaré dos días más aquí, por problemas en la empresa, mis genios me preguntan en qué me ayudan y es cuando les pido un informe de dos direcciones administración y recursos humanos, creo que ahí existen raras componendas con el antiguo gerente, ellos solo me dicen que a primera hora los tendré. Salgo al hotel donde me estoy quedando para arreglarme para el evento ya casi son las seis de la tarde.

Victor Hugo pasa por mi y vamos rumbo a la gran convención, no me gustan esos eventos, porque no solo asisten empresarios si no oportunistas en busca de negocio para sobrevivir y ese es el caso de Andrés Altamirano, anda en busca de una oportunidad, si supiera que llegó el clavo de su ataúd no se le ocurriría ponerse frente a mi.

Desde que baje del avión no se me olvida el sufrimiento de mi madre, lo que tuvo que pasar por culpa de ese hombre y esa mujer, lo que yo tuve que ver por parte de mi padre y la manera tan vulgar que nos trató, eso no se lo puedo perdonar.

Llegamos al salón, viene Manuel Bracamonte y al verme me abraza y me pregunta por los diablitos, yo les digo que están con los abuelos , me acompaña a mi mesa y nos Sentamos a recordar varias anécdotas con mis traviesos hermanos, me pregunta por los abuelos y aprovecho de llamar para contarle al abuelo algunos detalles de la empresa y es que me habla de una perdida continua de dinero, yo le pido que hable con mis hermanos para que investiguen todo lo relacionado con esa perdida, ya que estoy segura de que la tal Sonia tiene algo que ver en esto al igual que mi padre.

Hablé con Bracamonte, para pedirle información, con respecto a él y su conducta y es cuando me cuenta, que nadie lo busca por estafador, que muchas veces trato de vender la empresa de mis abuelos, pero que no pudo hacerlo ya que el no es dueño a pesar que decía que era accionista principal, ese señor está loco de poder y no tiene nada, el dinero que le dió tu abuelo para que le diera el divorcio a tu madre le duró muy poco, tal vez no pensó que ya estaba acabado, ya que lo que le hizo a tu madre corrió por toda la ciudad, ese es el motivo de que nadie lo acepta para trabajar en las empresas, mi amigo me pregunta si lo he visto, le dije que hoy en un restaurante, pero que creo que no sabe quién soy, es cuando me dice que no me extrañe si lo veo en el evento de esta noche ya que se hace pasar de empresario y dueño de empresas Bustamante.

Que no se le ocurra venir con ese cuento, porque yo lo mando preso y lo hago salir esposado de aquí mismo, Bracamonte me dice que me prepare ya que eso lo hace todo el tiempo y la mujercita que carga se hace pasar por su asistente, lo único que la pobre anda ahora mal vestida y hablando del rey de Roma y el que se asoma, volteo y los veo llegar, le hago señas a Víctor Hugo, para que esté alerta con nuestro personal de seguridad, lo veo hablar con unos empresarios amigos míos de Canadá y les hecha el mismo cuento que es el accionista mayoritario de empresas Bustamante y mi amigo se me acerca y me pregunta si vendimos y yo le digo que se cuide de ese estafador. Es cuando Bracamonte me dice que llegó la hora de quitarle la careta al payaso, yo me río, ya que así hablan los gemelos y le digo cual es el plan y me dice que cuando llamen para recibir los premios, dejamos que suba y delante de todo el mundo le quitamos la careta al payasito ladrón, jajajaja esa actitud de Bracamonte me dió mucha risa en verdad, pero ya llegó el momento de decir a todo el mundo que el no es nadie.