-Mis padres solían alquilar viviendas para poder tener un techo, tenía cuarto año cuando nos mudamos a nuestra casa en un barrio residencial, mamá estaba feliz porque por fin teníamos una casa propia en la cual mis hermanos y yo creceríamos felices, pero no fue así, al menos no para mí.

-Tengo dos hermanos mayores a los cuales aprecio y les tengo cariño aunque admito que no es mutuo.

-Mi hermano Pedro es el mayor de los tres y siempre fue alguien de tener muchos amigos así que él todos los días salía a jugar con los vecinos del barrio. Mi hermana Sami es igual a él (realmente se parecen) pero a ella no le gusta la idea de que le encuentren parecido con nosotros.

-Mi padre Fran trabaja en una fábrica de insumos y mi madre Sol es ama de casa por lo cual tuvimos que asistir a una escuela pública donde los tres nos hicimos de amigos.

-En ese tiempo puedo decir que no la pase tan mal en cuanto a la escuela sobre todo porque cuando ingrese conocí a Carlos un chico rebelde, pero de gran corazón lo quise mucho y lo admiraba era mi hermano de corazón; solía defenderme y cuidarme incluso cuando las maestras me regañaban él les hacía frente contestándoles de una manera poco aceptable para ellas.

-Mis hermanos cuando teníamos que ir juntos a la escuela solían ir molestos, siempre tenía que hacer de cuenta que no los conocía porque simplemente el tener que dar a conocer nuestro parentesco para ellos era vergonzoso, de cierta forma me acostumbré a ese trato, crecer con ellos no fue fácil supongo que el haber nacido parecida a la familia de mi padre marcaba una gran diferencia con la familia de mi madre por eso siempre mis primos y tíos nunca me trataron bien, pero la familia de mi padre tampoco me aceptan como pariente.

-Cuando termine la escuela no volví a saber mucho acerca de quienes fueron mis compañeros durante siete años, con el único que seguía en contacto era Carlos porque todos los días me visitaba.

Hanna- Carlos tu padre se fue a trabajar al Sur?

Carlos- Sí, pronto tendré que viajar donde él está!

Hanna- Porque?

Carlos- Quiere que vaya a estudiar allá

Hanna- Entonces no volveré a verte?

Carlos- Que pasa? ¿Porque te pusiste triste?

Hanna- Porque no quiero que te vayas!

Carlos- Yo tampoco me quiero separar de vos, pero él es mi padre y yo soy menor de edad no lo puedo desobedecer

Hanna- Promete que me vas a escribir cartas y cuando te puedas comprar un celular me llamarás, porque te voy a mandar mi número por carta!

Carlos- Te lo prometo hermanita

Carlos- Te quiero mucho!

Hanna- Yo también te quiero mucho!

Fran- Hola Carlos!, sabía que te encontrabas con Hanna

Carlos- Hola!

Fran- Tu madre me preguntó si te había visto, dice que saliste sin avisar a donde ibas

Carlos- Sí, es que no la vi en la casa pensé que no estaba

Fran- Ya la llamo para avisarle que estás en mi casa

Carlos- Bueno, gracias

Hanna- Cuando tienes que viajar?

Carlos- La semana que viene

Hanna- Dentro de tres días entonces

Carlos- Sí mañana empezamos a empacar las cosas

-Esa noche me la pasé llorando porque mi mejor amigo se estaba por ir al Sur por mucho tiempo.

-El día anterior a su partida se apareció en mi casa para despedirse

Carlos- Hermanita no quiero ir!

Hanna- Hermano!

Fran- Carlos tu madre te está esperando afuera tienes que ir

Carlos- Te voy a extrañar mucho!

Hanna- Yo también!

-Llorando nos dijimos adiós, mi padre nos consoló con un fuerte abrazo a los dos y nos dijo.

Fran- Son mejores amigos verdad?

Carlos y Hanna- Sí lo somos!

Fran- Entonces lo seguirán siendo en la distancia, nadie podrá romper su amistad sincera, ni siquiera el tiempo o me equivoco?

Carlos- No se equivoca! ¿Verdad Hanna?

Hanna- Sí, tienes razón papá

Carlos- Cuídate Hanna, vendré a verte ni bien pueda volveré para quedarme!

Hanna- Vos también cuídate, te estaré esperando!

-Vi a mi hermano subir al auto de su madre y con una tristeza profunda acepte que debía irse con sus padres, mi papá sostenía fuerte mi mano mientras le decía adiós.

-Mis hermanos se burlaban todo el tiempo y siempre me decían que nadie me quería por eso no tenía amigos

-Cuando mi padre los escuchaba se enojaba mucho y terminaba discutiendo con mi mamá a causa de las burlas, pero ella como siempre defendía a mis hermanos apañandolos todo el tiempo.

-Así pasaron los días en casa, no salimos de vacaciones en el verano porque no teníamos demasiado dinero, no nos faltaba para comer y para todo lo esencial, algo que muchas veces a mi madre le molestaba.

Hanna- Papá podremos ir aunque sea un ratito a la plaza del centro

Fran- No puedo llevarte hija, estoy ocupado.

Hanna- ¿Crees que mamá quiera?

Fran- Pregúntale quizás pueda

Hanna- No, mejor otro día

Fran- ¿Segura?

Hanna- Si, otro día mejor

Fran- Escucha hija, se que no te animas a pedirle que te acompañe, te parece si yo le pregunto

Hanna- Está bien, pero mejor mañana todavía está molesta

Fran- Bueno

-Carlos era mi único amigo y sin él realmente estaba sola, lo extrañaba mucho ya me había acostumbrado a verlo llegar a mi casa todos los días con esa sonrisa y sus ideas para jugar.

-Todo el tiempo esperaba por una carta, de su parte para poder saber como estaba, sus aventuras y sobre sus nuevos amigos en ese lugar.

-Yo también escribía cartas contando lo poco que hacía por que aunque me dolía las palabras de mis hermanos sabía que no se equivocaban cuando decían que no tenía amigos.

-Quizás por eso apreciaba mucho a Carlos mi mejor amigo y hermano, no perdía la esperanza de que volvería como lo había prometido el día de su partida, aunque tardara mucho yo iba a esperar su regreso.

-Era tiempo de empezar el colegio, como no quería fastidiar con mi presencia a mis hermanos decidí ir a uno diferente al que ellos iban.

-Estaba nerviosa el primer día, mi madre fue quien me acompaño y decidió quedarse conmigo hasta que terminara el acto de bienvenida para los nuevos alumnos. Todo iba bien para mí hasta que conocí a una de las personas que sin saberlo se convertiría en alguien realmente desagradable con el tiempo su nombre es Amelia.

Amelia- ¡Hola! Mi nombre es Amelia.

Hanna- ¡Hola! Soy Hannah.

Amelia- ¡Vamos a ser compañeras de curso!!, ¿no es genial?

Hanna- ¡Claro!

Amelia- Vivimos en el mismo barrio residencial, mi madre me lo dijo cuando te vio al lado de tu madre, podemos venir juntas!

Hanna- Sí, es una buena idea! ¿En qué parte del barrio vives?

Amelia- Frente a la plazoleta y vos?

Hanna- Una cuadra más abajo.

-Nos hicimos amigas en poco tiempo, realmente parecía una amistad sincera.

-Un día quiso presentarme a sus amigas de la infancia y al chico que supuestamente le gustaba.

Amelia- Vamos a la velada artística de mi antigua escuela hoy en la noche.

Hanna- No lo sé, tengo que pedir permiso a mi madre.

Amelia- Dale será divertido además podrás conocer a mis amigas y a Luis.

Amelia- Vamos, vamos, vamos ¿si?

Hanna- De acuerdo, convenceré a mi madre para que me dé permiso.

Amelia- Esta noche a las 20:30 paso a buscarte. Nos vemos.

Hanna- Sí nos vemos.

-Esa noche le dije a mi madre que solo iba por dos horas nada más, tenía que volver a casa a las 23:00 por suerte la escuela quedaba muy cerca de nuestro barrio. Amelia fue puntual en buscarme parecía estar muy emocionada por ir.

Hanna- Tus amigas ya están en el lugar?

Amelia- Sí nos están esperando junto con Luis, "estoy muy feliz y nerviosa"

Hanna- Nerviosa porque?

Amelia- Porque voy a verlo otra vez! ¡No lo puedo creer todavía!

-Llegamos al lugar y como decía Amelia ya nos esperaban.

Amelia- Hola chicas, ¿cómo están? ¿Me extrañaron? Les presento a Hanna una amiga del colegio.

Amelia- Ella es Miriam.

Miriam- Gusto en conocerte Hanna.

Amelia- Ella es Sandy y ella es Clara.

Sandy y Clara- Hola!

Hanna- Hola!

Amelia- Él es Luis y su amigo Pepe.

Luis- Hola, ¿cómo estás?

Hanna- Bien gracias.

Pepe- Un gusto conocerte.

Hanna- Gracias igualmente.

-Sus amigas se fueron a comprar algo para comer junto con Pepe y yo decidí ir a dar una vuelta por el lugar así quedaban ellos solos para hablar.

-En el pasillo de la escuela había un grupo de chicos que no conocía, cuando pase por allí uno de ellos me quedo viendo.

- Al regresar por Amelia vi al chico que estaba en el pasillo hablando con ella,, pero en cuanto me vio se alejó. No le di importancia en el momento pensé que quizás era otro amigo.

-Pasó una semana desde esa noche y Amelia me pidió que la acompañe a la casa de Luis.

Amelia- Me acompañas a casa de Luis?

Hanna- Para qué?

Amelia- Es que quiero verlo, además ayer me pregunto si quería ser su novia y le dije que ¡sí!

Hanna- ¡Qué bueno, te felicito! ¿Pero yo tengo que ir? ¿No será incómodo?

Amelia- ¡Claro que tienes que venir! Eres mi amiga.

-No estaba del todo segura de ir esa tarde, pero Amelia no dejaba de insistir y terminé yendo a la casa de Luis con ella.

Luis- Hola! Vinieron, vamos a la plaza Pepe también vendrá.

Amelia- Porque no conversas un rato con Pepe mientras Luis y yo hablamos.

Hanna- Mm… Claro ve con Luis.

Pepe- Parece que necesitaban privacidad no?

Hanna- Así es!

Pepe- Tienes novio?

Hanna- No

Pepe- Vives lejos de este barrio?

Hanna- Vivo cerca de la casa de Amelia

Pepe- Entonces no es muy lejos de este

Pepe- Yo vivo a la vuelta de esta plaza

Hanna- Qué suerte! ¡Tienes la plaza cerca!

Pepe- Ja, ja, ja! Sí

Pepe- Disculpa tengo que irme a casa ¿hablamos otro día?

Hanna- Bueno chau!

Pepe- Chau!

-Amelia volvió después de una hora y decidió contarme todo lo que pasó con su novio así que nos quedamos un rato en esa plaza hasta que empezó a oscurecer y decidimos volver a nuestras casas.

-Pero en lo que nos estábamos por ir apareció el chico que había visto en la escuela esa noche.

Amelia- Hola! Alex.

Alex- Amelia vení!

Amelia- Que pasa?

Alex- ¿Es tu amiga? ¿Cómo se llama?

Amelia- Sí es mi amiga, pero sale con Pepe.

Alex- Como se llama?

Amelia- Hanna

Alex- Hanna eres hermosa! ¡Te amo!

-Me sorprendió con sus palabras, pero lo más extraño fue que yo también lo veía a él de la misma forma, mi corazón quería salir de mi pecho cuando lo vi, realmente no imagine que él pensara así de mí.

Amelia- Está loco no le hagas caso, vamos se hace tarde.

-Pensé en eso toda la noche, en sí solo era una broma de su parte o si lo había dicho de verdad, lo único de lo que estaba segura era de que no había sentido algo así por otra persona. Este sentimiento era nuevo para mí.

-Al día siguiente en el colegio nos dieron la última hora libre (podíamos retirarnos antes del timbre de salida).

Hanna- Nos vamos Amelia?

Amelia- Sí, pero nos vamos a casa de Luis hoy no tuvo clases y Pepe me pidió que te llevase

Hanna- Para qué?

Amelia- Quiere pedirte que seas su novia

Hanna- Luis te lo dijo? ¿Por eso anoche dijiste que salía con Pepe?

Amelia- Sí, así es!, y estoy segura de que te va a gustar estar con él

Hanna- No estoy segura, es lindo, pero no sé

Amelia- Por favor es un buen chico ya vas a ver que se van a entender, inténtalo ¿si?

-Fuimos a verlos, aunque no estaba muy emocionada por ir.

Luis- Hola

Amelia y Hanna- ¡Hola!

Luis- Esperen un ratito...

A los quince minutos:

Pepe- Buen día, ¿cómo están?

Amelia y Hanna- Bien gracias

Pepe- Hanna, ¿podemos hablar a solas?

Hanna- Sí

Amelia- Hablen tranquilos , vamos Luis

Luis- ¡Claro!

Pepe- ¿Hanna te gustaría ser mi novia?

- En ese momento sabía que no quería, pero pensé en mi amistad con Amelia, no quería que se alejará de mí, ya que era mi única amiga. A diferencia de ella que tenía muchas más amigas en todas partes.

Hanna- ¡Sí, me gustaría!

- Desde entonces sabía que era mi novio, pero no nos hablábamos mucho. Ni siquiera cuando nos veíamos, el siempre terminaba hablando más con Amelia, incluso cuando estaba Luis presente.

- Los días pasaron y era más consciente que mi noviazgo era falso.

- Al mes decidí terminar con la farsa, para mí no tenía sentido.

- Cuando le dije a Pepe que mejor terminábamos, lo tomo como si lo que le estaba diciendo fuese algo sin importancia, esperaba esa actitud de él porque sabía que el estaba interesado en Amelia.

- Ese mismo día nos encontramos con una amiga de Amelia que se llamaba Yani.

Amelia- Yani ven con nosotros, nos dirigimos a la casa de Luis

Yani- Está bien hace un tiempo que no lo veo

Amelia- Te presento a mi amiga Hanna

Yani- Hola Hanna, soy Yani

Hanna- ¡Hola, gusto en conocerte!

- Cuando llegamos a casa de Luis vimos a Alex aparecer con unos amigos. Él cargaba una guitarra ¡se veía increíble!

Amelia- Hola, ¿ahora te haces el músico?

Alex- Luis, ¿cómo estás?

Luis- Bien, más tarde vamos a jugar a la pelota

Yani- ¡Ja, ja, ja!, te ignoró amiga

Amelia- ¡Cállate!

Alex- Hanna, ¿cómo estás?

Hanna- Bien, ¿y vos?

Alex- ¡Mucho mejor ahora que te veo!

Luis- No digas eso que está Pepe

Alex- ¿Vas a decir algo acaso?

Pepe- Me voy a mi casa

Alex- ¡No vuelvas!

Alex- Hanna, nos vemos

Luis- ¿Ya te vas?

Alex- Sí, me voy a bañar

- Cuando fue hora de volver a casa, Alex volvió a casa de Luis y me pidió hablar un momento mientras me acompañaba hasta mi barrio, Amelia se quedó con Yani un rato más.

Alex- ¿Estás saliendo todavía con Pepe?

Hanna- ¡No!, terminamos

Alex- ¡Es un idiota!, ¿sabías que en realidad estaba con tu amiga a escondidas verdad?

Hanna- Si, ¿Luis lo sabe?

Alex- Le dije que los había visto, pero no sé qué hará, no me dijo

Alex- Hanna quiero preguntarte algo importante

Hanna- ¿Qué es lo que necesitas saber?

Alex- Bueno en realidad... yo...quería saber si te gustaría ser mi novia, la verdad es que desde la primera vez que te vi yo...mm... como te digo, no sé como explicarte con palabras lo que sentí y siento cada vez que te miro mi corazón parece querer salirse, suena tonto lo sé, pero es la primera vez que me pasa con alguien

-En ese momento callé su boca con mi mano y me acerqué a su oído para darle mi respuesta.

Hanna- Acepto ser tu novia y no me resulta tonto lo que dices por qué yo me siento igual contigo

- Alex se quedó sorprendido y se sonrojó tanto que parecía un tomate por lo que había hecho, de los nervios solo nos despedimos con un beso en la mejilla y quedamos en vernos dos días después porque el iba a estar ocupado practicando para un examen.

- Al otro día vino Amelia a mi casa, quería saber de que hablamos con Alex cuando nos fuimos.

Amelia- Cuéntame, ¿de que hablaron?

Hanna- No mucho solo... que..... bueno, él y yo estamos...mm.... somos novios!

Hanna- Acepte ser su novia

Amelia- ¡Qué!, ¿cómo?, ¿de verdad?

Hanna- Sí, se que no te cae muy bien, pero la verdad, ¡me gusta mucho!

Amelia- ¡Está bien, te felicito!, eres mi amiga y si estar con el es lo que quieres trataré de llevarme bien con él

Hanna- ¡Gracias!

- Antes de irse a su casa me dijo que nos veríamos recién dentro de una semana porque se iba con su mamá de viaje.

- Llegó el día de ver a Alex, estaba nerviosa, pero no veía la hora de poder verlo.

- Quedamos en encontrarnos en la tarde del lunes en la plaza de mi barrio, a medida que se acercaba la hora del encuentro mi corazón enloquecía.

- Salí diez minutos antes del encuentro para llegar a horario y para sorpresa mía él ya estaba en el lugar.

Alex- ¡Hola!, ¿cómo estás?

Hanna- ¡Hola!, bien y vos?

Alex- Bien, te extrañé

- Me acerco sosteniendo mi mano hacia él, dándome un cálido abrazo diciéndome;

Alex- ¡Estoy feliz de tenerte a mi lado!

Alex- ¡AAA!, perdón quiero decirle a todos que soy feliz

Alex- ¡Me encantas!

Hanna- ¡Gracias por aparecer en mi vida!

- Esa semana fue increíble disfrutábamos el mayor tiempo posible juntos, caminábamos de la mano o abrazados por las calles del centro de la ciudad a su lado me sentía a salvo, segura realmente era la persona que quería tener en mi vida para siempre.

- Pero no sabía que de repente todo empezaría a cambiar.

- Había llegado el día en que Amelia estaría de regreso en su casa con su Mamá, me pareció extraño que no viniera a buscarme para ir juntas al colegio, pero pensé que quizás estaba cansada por el viaje y no asistiría a clases.

- Decidí ir directamente al colegio y a la tarde pasar por su casa a verla para mi sorpresa ella llegó quince minutos después que yo con una compañera de curso.

Amelia- ¡Hola, Hanna!

Hanna- Hola pensé que no vendrías a clases hoy

Amelia- ¿Por qué?

Hanna- Porque dijiste que irías a buscarme para venir juntas cuando volvieras y no lo hiciste

Amelia- Es que pensé que Alex te acompañaría y no quería molestar

Hanna- Amelia sabes que Alex va a otro colegio como podría si queda lejos de este

Amelia- Pensé que lo haría, ya que no te deja sola en ningún momento, para todos lados van juntos

-Al terminar la clases nos fuimos al patio para hablar