Me desperté por un ruido muy fuerte que provenía de fuera de mi habitación, me levanté de mi cama y me asomé por la puerta, ahí se encontraba el cuerpo del guardia que cuida la entrada de mi habitación pero no encontré a nadie al rededor. Algo malo estaba pasando, corrí por el gran pasillo que separa mi habitación con la de mi padre tratando de no desorientarme del camino, pero mientras más avanzaba más raro se sienta todo, no logré encontrar a ni un guardia o doncella durante todo ese trayecto.
Mientras más cerca me encontraba de la habitación de mi padre todo se ponía más extraño, si hubiera un ataque de un reino enemigo hubiéramos sido capaces de identificarlo y detenerlo antes de que llegue a la capital.
La habitación de mi padre se encontraba semi abierta, lograba ver aquella luz que provenía de dentro, entré para ver si mi padre se encontraba bien y así podía explicarme lo que suspendía. Al momento en el que mi padre me ve este me agarra y me esconde.
— Brie mi niña, nos están atacando — Él me mira con cara de preocupación temiendo de que algo me pase — Toma este arco y protégete —.
Trate de hablar con él, porque por más que lo pensaba no le encontraba sentido alguno de lo que estaba susediedo. Pero en un abrir y cerrar de ojos me encontré fuera del castillo, seguramente habrá utilizado algún amuleto mágico para trasladarme fuera.
Corrí con todas mis fuerzas para que lo que haya hecho mi padre no sea en vano.
......................
Ya llevo más de una hora corriendo, pero prefiero alejarme lo más posible de la capital, y luego así descansar.
Nunca he estado sola y tan lejos del castillo, pero ahora eso no es importante, solo me interesa alejarme de acá. Menos mal que me quedé dorrmids con mis pendientes puestos, pro que de otra manera no sería capaz de conseguir dinero para el día de hoy.
......................
Ha pasado otra hora más, ya estoy agotada pero a lo lejos puedo ver un pueblo, así que no me puedo detener. Como todavía no amanece las tiendas no se encuentran abiertas.
Al adentrarme en en pueblo logro identificar una casa de hospedaje, al entrar me quito los pendientes y me acerco al mesón.
— Hola, vengo en búsqueda de una habitación en donde quedarme
Ni idea lo que esté pensando el empleado, pero su cara no era muy agradable, se veía que no habían muchos empleados que decidan trabajar a esta hora.
— Si bueno, ahora no se encuentra ni una habitación disponible
Que, como no se ve a encontrar ni una disponible, tiene que ser una broma, todavía no amanece y quiero descansar.
— Como no va a haber una habitación disponible, mire este lugar, seguro que tienen algo
— No, hace unas pocas horas llegó un grupo de caballeros del castillo, no se que hacen acá, pero se tomaron todas estas habitaciones. Si quiere intentar suerte puede ir a otro hospedaje, queda cerca de acá
......................
Seguí las instrucciones que me dio el hombre y llegué a otro hospedaje, si bien este se encontraba igualmente completo, un señor se fue dejando una habitación libre.
Al entrar a la habitación me di cuenta que no era ni de un cuarto de mi habitación, pero para descansar sirve. Había un espejo de cuerpo completo cerca de la cama, al mírame supe porque el empleado anterior me miró de esa manera. Tengo el pelo enredado, sucio, estoy vestida con mi pijama y me encuentro descalza. Probablemente creyó que era una loca que había escapado.
Me recosté en la cama y como todavía no amanecía cerré mis ojos para descansar el tiempo que me quedaba.
Una luz muy fuerte me llega en la cara, estoy tan agotada que no quiero abrir los ojos pero recuerdo que tengo que levantarme para seguir con mi camino
Todavía no se adonde quiero llegar pero por el momento voy a caminar sin rumbo, lo único que me importa es llegar a un lugar lejos de la capital.
Me levanté y me dirigí al baño, si bien no es grande tiene los implementento necesarios como para funcionar como baño. Mientras me lavaba el cuento recordé que no tenía una muda de ropa que no sea mi ropa de cama. Así que luego de limpiarme me vestí con esa ropa y me arreglé el pelo. Mientras miraba mi reflejo pensaba en mi padre y que habrá pasado ayer en el castillo.
Mis ojos, morados, como los de mi padre, demuestran que soy la heredera, necesito algo para ocultarmelos así no me reconozcan. Existen ciertos artefactos que ayudan con eso, hay algunos que son para el pelo, otros para los ojos incluso para el color de piel. Así que decidí que tengo que conseguir uno hoy antes de que se caiga la noche nuevamente.
Tampoco tengo el dinero suficiente para hacer muchas cosas hoy, porque ya sue uno de mis pendientes para este hospedaje, necesito vender el otro, así de esa manera podré compárame una muda nueva, el artefacto para cambiar mis ojos y comida, necesito comer algo igualmente.
Al salir oí bullicios, ya era de mañana, algunos puestos de vendedores ambulantes se ubicaron en el camino principal para conseguir suerte, pero lo que yo buscaba es una tienda de joyas y calcular cuánto puedo ganar con solo un pendiente. Espero que no es poco.
Identifique una y al entrar se veía de cierto modo, deteriorado. Me acerqué al mesón donde se encontraba un hombre que atendía.
— Hola, buenos días. Quería ver cuánto me puede ofrecer por este pendiente
— A ver, préstemelo
Y ahí se veía como el hombre miraba con unos y todo al pendiente, no se que buscaba pero si es importante para ganar plata espero que lo encuentre.
— ¿De dónde se robó este pendiente?
Que, como va a pensar que lo robe, que le pasa en su cabeza.
— Disculpe, no lo robé de ni una parte, era mío, pero ahora solo tengo ese del par…
— Que quiere que le diga, es muy poco creíble su invento, le doy pora oportunidad ¿De dónde lo sacó?
No importa lo que le diga, no me va a creer mejor le invento algo.
— Lo encontré tirado, pero eso ni importa. ¿Cuánto me da por este pendiente?
— Si no tiene el par no le voy a poder ofrecer la suma de dinero que espera
— Bueno, pero cuánto podría dar por él
— unas siete monedas de plata, pero no más
Sabia que no valía solo eso, pero entre nada a siente monedas de plata prefiero las monedas.
Las acepté y me las entregó. Luego salí del lugar y me acerqué a los vendedores ambulantes. Ahí vendían todo con monedas de cobre. Una de plata son diez de cobre así que espero no utilizar todas.
Al final me terminé comprando dos mudas nuevas de ropa y comí comida en puestos, solo utilice una moneda de plata y de hecho, me sobraron dos de cobre.
Ahora tengo que buscar lo más importante, un amuleto para mis ojos, tuve suerte que hasta el momento nadie me haya reconocido, creo que fue porque no miraba al frente, lo que dificultaba que me vieran a los ojos. También he tratado de buscar información sobre lo que ha pasado en en palacio, pero a pesar de que este pueblo está relativamente cerca de la capital no ha llegado ni una información sobre lo ocurrido.
......................
Como no encontré ni una tienda que venda amuletos decidí continuar con mi viaje y por obra suerte en otro pueblo, como recién llevo media hora que partí caminando no he visto alguna señal de vida, por lo que me da un poco de miedo. Porque a pesar de ser la heredera de este reino no conozco todos los caminos, ahora solo se que me dirijo hacia en este, pero no se que pueblos hay hacia allá.
......................
Ha pasado una hora, mi estómago me está pidiendo que lo alimente. Ahora no me encuentro tan desesperada porque mientras estaba camianado me encontré con un hombre y me dijo que si seguía por este camino durante cuarenta minutos llegaría a otro pueblo, quizá sea que no camine a un ritmo veloz y por eso todavía no llego al pueblo, pero si el hombre no mentía significa que me encuentro relativamente cerca.
Y como supe, el hombre estaba en lo correcto. Pude divisar el siguiente pueblo, al llegar me dirigí a un local de comida donde comí arroz con carne, me costó una moneda de plata, por lo que todavía tenía lo suficiente como para compararme el artefacto, aun que puede que para el hospedaje no me quede dinero. Solo me queda confiar en mis instintos.
Al salir encontré una tienda de artefactos, al entrar en el local no logré identificar el olor que tenía, pero era relativamente agradable. Me acerqué a la señora que atendía.
— Hola, estoy en búsqueda de un artefacto que me ayude a cambiar el color de mis ojos
— ¿Si, de qué color los quiere?
Hasta tiene variedad, he encontrado el lugar correcto
— Cafés oscuros — El color más común entre todos los plebeyos, así no me encontrarán fácil.
— Mire, aquí tiene todos los artefactos que le pueden cambiar el color de sus ojos
Me mostró desde anillos hasta calcetines, nunca había imaginado que se podía hacer artefactos tan exóticos, para no llamar tanto la atención tengo que elegir algo que sea más común.
— La pulsera, por favor— Si tengo una pulsera será difícil que se me caiga como un anillo y no necesito dos iguales como un par de aros
— Bien, serían tres de plata
Se lo entregué y me ofreció un espejo para poder ver cómo se me cambiaban los ojos. Al ponerme la pulsera mis ojos dejaron de ser morados y ahora eran cafés, como la gran mayoría de los que viven por acá.
Me quedé con dos monedas de plata y dos de cobre, usé las de cobre para el hospedaje de hoy, y así me acosté para descansar.
Ahora me llamo Gabriela, porque así voy a ser más capaz de camuflarme con el resto, me llamo Abriella, creo que no lo había dicho. Mi padre, la gente que mejor me conoce y me tiene confianza me dice Brie, pero ahora no soy una princesas, asi que para poder seguir así elegí ese nombre, que no es muy diferente al mío así no se me olvida como me puse.
Miro mi reflejo y me doy cuenta lo mucho que he cambiado en estos dos días fuera del palacio, si bien me preocupo en arreglarme puedo ver cómo se me van formando ojeras bajo los ojos, no creo que sea capaz de seguir de esta forma, pero necesito sobrevivir. A diferencia del reflejo que veía diariamente en el palacio veo que mi pelo va a necesitar un cambio, no puedo decir cine set pelo largo, porque ahora la última preocupación que tengo es eso, quizá me lo corte pero no se cuando pueda.
Arreglo el bolso que tengo, donde está mi ropa de cama, y la que uso para salir, me ato el cabello en una cola y salgo del lugar donde me estaba quedado. Fuera se escuchaba mucha bulla, veo como hay un grupo de gente agrupada observado algo, al acercarme leo los avisos que hay.
...“Hace dos días el marqués Ronald, primo de la princesa Abriella Ravenshield y sobrino del Rey, usurpó la corona y asesino al rey. La princesa se encuentra actualmente desaparecida, por lo que el único heredero a la corona que queda es el Marqués” ...
Se me bajó la presión, como es posible que mi primo haga eso, el nunca le interesó la corona. Me siento mariada, la gente a mi alrededor me mira, que, no puede ser que me hayan reconocido, me siento en un banco que hay y espero a calmarme.
Mi padre está muerto, mi primo fue el causante de eso, no lo puedo creer todavía. La noticia se va propagando poco a poco, ya que todavía es muy temprano. De a poco la gente que rodeaba el tablero fue disminuyendo, por lo que decidí volver a acercarme a seguir leyendo. Ahí pude ver una imagen mía
...“Se busca viva o muerta”...
Supongo que cambiarme el color de los ojos fue buena idea ya que ahora todos saben cómo luzco, lo más probable es que también me corte el cabello así complica más mi búsqueda. Seguí leyendo a ver que más dice en el aviso.
...“El marqués a pesar de ser el único heredero que está presente no tiene permitido gobernar hasta que aparezca la princesa.”...
...“Hay dos grupos de nobles, los que apoyan al marqués y los que esperan a que llegue la verdadera heredera, están todos esperando a ver qué pasa próximamente”...
Okay, ahora si tengo que tener mucho cuidado, todavía no estoy preparada para poder derrocar a mi primo, no tengo el poder suficiente para hacerlo. Se que hay gente sufrido ahora ya que no estoy, pero si aparezco ahora no más probable es que me asesinen como lo hicieron con mi padre.
......................
Luego de calmarme me dirigí a un local de comida, ahí volví a pedir arroz con carne, ya que es lo suficientemente económica para que me alcance para comer y dormir. Pero claro pronto me quedaré sin dinero, ni idea cómo voy a conseguir más, ya me estafaron la primera noche, cuando ultilice el pendiente para una dormir.
Mientras esperaba a pedir dos hombres se sentaron en una mesa cercana a la mía, hubo uno que me llamó la atención, ya que estaba encapuchado, y por lo que me enseñaron, al comer uno no debe utilizar nada que le cubra la cabeza. De aquí puedo ver su espalda, se ve relativamente grande, como si la trabajara diariamente.
Luego de pedir espere la comida mientras pensaba en que podría hacer para conseguir dinero, quizá trabajando en algo, pero eso va a significar que me tengo que quedar en un pueblo sin poder seguir el camino, que en todo caso, lo único que tengo en mente es irme lo más lejos para que no me encuentren. Como ahora mi primo tiene a los caballeros los ama probable es que dirija a grupos en mi búsqueda, y no creo que les pida que me lleven en mi voluntad, lo más probable es que me corten la cabeza y se la lleven a mi primo. Por lo que prefiero alejarme lo más posible, si no me equivoco, si sigo caminando hacia el sur voy a llegar a un puerto y así luego irme a otro reino, eso dificultará mi búsqueda.
Cuando llegó mi plato me di cuenta que ni fue lo que había pedido, eran espaguetis con salsa boloñesa. No es mi comida favorita, pero si no me cobran más de lo que yo pedí, que es una moneda de plata, me lo puedo comer. Pero cuando estaba cerca de llevarme el primer bocado el hombre misterioso habla con la mesera de algo y me apunta. ¿Qué hice ahora?
El hombre misterioso junto a la mesera se me acercan
— Ey, ese plato es mío ¿Tú pediste ese arroz?
Me quedé mirándolo, nunca en mi vida me habían tratado de esa manera, que le pasa ¿Nunca le enseñaron los modales básicos?
— ¿Si? Bueno, tome, tampoco me gusta esta comida
La mesera se disculpó con nosotros por el error de los platos e intercambiamos los platos para que cada uno coma a gusto.
Ahora que lo pienso, la cara de ese hombre, no estaba mal, pero con ese gusto de comida y modales no merece mi interes.
Luego de terminar de comer pagué y me quedé con una moneda de plata. Ahora si necesitaba concentrar una forma de conseguir dinero.
......................
Llevo siete horas sentada con el carcaj de mis flechas delante mío para que me dejen monedas, mi dignidad ahora se encuentra por el suelo, pero de esta manera puedo conseguir algo de dinero e irme, ya llevo veinte monedas de cobre, no está mal, ya que no he hecho nada interesante, solo dar pena.
Tomé el carcaj con la monedas y me dirigí donde un señor
— Disculpe ¿Sabe a cuánto estamos de la cuidad puertera?
—Si, está a unos noventa y siete kilómetros de aquí, son unos diez días camianado más o menos
Perfecto, no soy buena para caminar a si que supongo que serían unos veinte días para mi, no creo que sea la mejor opción.
—Y al este ¿Qué tan lejos se es cuenta el siguiente pueblo?
— Oh, el siguiente pueblo está a unas dos horas caminando más o menos
— Muchas gracias
Y así partí mi nuevo recorrido, hacia el siguiente pueblo, ya que no está tan lejano.
Download MangaToon APP on App Store and Google Play