Scarlett es una de los dos herederos de la fortuna Donovan. La joven pelirroja es alegre y entusiasta; estudió derecho en la mejor universidad de Italia, se graduó con excelentes notas, siendo la mejor de su facultad. Su hermano Niccolò Donovan es su mayor apoyo después del fallecimiento de sus padres y abuela en un accidente de tránsito un tanto extraño, que para los policías solo fue eso, un accidente. Scarlett es una pelirroja de ojos azules, es gordita; no se puede decir que no es bella, por supuesto que lo es. Sin embargo, tiene ciertos complejos por su cuerpo, cosas que enojan un poco a su hermano, quien, según Scarlett, es perfecta tal y como es.

En la universidad, los chicos simplemente no se interesaban por ella; siempre que se acercaban, era para invitar a su amiga Claudia, quien era una rubia hermosa con un cuerpo de infarto. Esto acomplejaba más a la joven Scarlett, quien solo podía sentirse rechazada debido a su cuerpo un poco ancho. Pero un día todo cambió, cuando Gianluca se acercó a ella para pedirle salir. Esto emocionó a la joven y a su amiga, quien le decía que fuera. Así iniciaron sus salidas, idas al cine y demás. Las chicas que admiraban al joven Gianluca no entendían cómo podía tener de novia a una joven con el físico de Scarlett, pero él solo decía que ella tenía algo que otras no. Por lo que Scarlett se sentía cómoda con él.

Luego de graduarse, Scarlett ingresó a trabajar en el bufete más prestigioso de la ciudad. Si bien podía trabajar para su familia, ella quería ganarse las cosas por su propio esfuerzo, cosa que su abuelo no aprobaba, pues sentía que la joven se estaba alejando de su familia, y todo por defender al joven Gianluca. Tanto fueron las discusiones de Scarlett con su abuelo y hermano que se había alejado por completo de estos, pues ella estaba enamorada de aquel joven. Su amiga y compañera de trabajo también trataba de aconsejarla, pero Scarlett siempre decía que debían conocerlo mejor. Por lo que la joven Valentina decidió mejor solo ser su apoyo en cuanto abriera los ojos y viera al verdadero Gianluca.

Scarlett se encontraba en su despacho, cuando su jefe ingreso con unos papeles, y de la manera más indiferente le pidió revisarlos.

— Encárgate de estos papeles, revísalos y ordenalos — El hombre iba a salir Pero Scarlett le llamo

— Espere, este no es mi trabajo... yo soy también abogada, esto es trabajo de secretaria — Le dijo señalando lo obvio

— ¿Cree que me importa? Le di un trabajo solo hágalo —

El hombre ni siquiera se inmutó mirando con enojo a la joven

— Me disculpara, pero estoy en un caso que requiere...

— No me importa lo que está haciendo, obedezca mis órdenes — El hombre se acercó al escritorio de Scarlett — Que sea la prometida de uno de los dueños de este buffet, no la hace intocable, asi que tenga cuidado.

Sin más el hombre se marchó dejando a Scarlett furiosa, ella nunca se había aprovechado de ser la novia de Gianluca, es más siempre lo mantuvo en secreto, hasta que este llegó un día con rosas para ella. Valentina quien había escuchado todo ingreso con cara de apenada, de verdad que su amiga le soportaba demasiado a aquel imbécil.

— Es un idiota, Pero no entiendo por qué aguantas esto, puedes trabajar para tu familia — le dijo está

— No, quiero hacerlo por mi propio esfuerzo — Le dijo

— Por amor a Dios, es lo mismo que haces aquí, ellos te tratan como si escaleras solo por ser la prometida de Gianluca, ¿acaso no puedes solo ir y trabajar desde abajo con tu familia? — Le dijo la joven un poco exasperada por lo tonta que era su amiga — Te diré la verdadera razon, no quieres separarte de Gianluca, por eso aceptaste este trabajo solo para estar cerca de el,Pero lo niegas diciendo que lo haces por qué no quieres el apoyo de tu familia

Scarlett solo miro a su amiga mal, ella no debería meterse en su vida personal.

— No quiero hablar más del tema, tengo mucho trabajo — Sin más Scarlett salió dejando a Valentina sola

— Huye, cuando alguien te dice la verdad —

Después de ese momento, Scarlett solo siguió las indicaciones de su jefe y se encargo de todo los papeles también termino su casó a tiempo, ahora solo debía volver a casa. Bien tarde, salió del edificio, siendo la última en despedirse del guardia, quien siempre le daba un sonrisa. Scarlett manejaba hasta su casa, hasta que una llamada de su hermano Niccolo encendió la pantalla de su teléfono. La joven solo lo colgó, en ese momento no deseaba pelear con nadie, solo quería ir a descansar, al día siguiente era sábado por lo que no tendría que trabajar, además el domingo era su boda con Gianluca.

Toda la organización de la boda fue sencilla, la madre de Gianluca se había hecho cargo de todo, ella había escogido hasta el vestido, que para Scarlett era un poco soso, Pero no dijo nada solo con tal de agradar a su suegra.

Al bajar Scarlett sonrió, al fin estaba en casa, lista para descansar y mañana ir por el regalo de su prometido, sabía que Gianluca había estado esperando desde hace mucho tiempo por aquel reloj exclusivo y ella le daría la sorpresa, gracias a una amiga que tenía en la agencia logro conseguir ese reloj limitado. Scarlett se cambió de ropa, un poco triste cuando se vio al espejo, Pero luego sonrió al recordar que su adorado prometido siempre le gustaba, aunque ella no se había entregado a él, pues tal y como sus padres le habían enseñado, esperaría hasta el día UE se casara y tuviera su luna de miel, que sería en París junto al hombre que amaba y el hombre que la valoraba.

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(Scarlett)


(Gianluca)


(Claudia)


(Valentina)


(Niccolo)

Nota:

Está es mi nueva novela, espero que sea de su agrado, no sé si les guste Pero decidí tomar otro rumbo con el estilo de novelas que estaba escribiendo, en esta ocasión no será ni de época, ni de fantasía. Les traigo un primer capítulo de algo nuevo que quiero probar.

Besos..

Amilkar

Familia Donovan:

Son reconocidos en toda Italia, Su empresa se dedica a la moda, sus diseños han llegado a todos los rincones del mundo, siendo una marca reconocida internacionalmente.

Las cabezas y fundadores de la marca Donovan son los esposos y ancianos de la familia; Giorgio y María Donovan, juntos iniciaron con un pequeño negocio en su pueblo natal, Pero la calidad y buena costura de sus diseños enamoraron a las personas, María se encargaba de los diseños y ella a mano los cocia y les daba su toque especial, poco a poco la marca Donovan fue tomando fama y por ende el trabajo se suplicaba, Pero gracias a su amabilidad y esfuerzo, tenían trabajadores dispuestos a todo con ellos, llegando a ser la marca de renombre que es hoy. María con el pasar de los años esperaba tener a su hijo, Pero los médicos no les daban esperanzas de que esto ocurriera, Pero un milagro los sorprendió, la mujer estaba embarazada, los médicos les advirtieron de que era un embarazo muy arriesgado en el que podrían perder la vida tanto la madre como la criatura, Pero el deseo de María era ser madre y no le importaba arriesgar su propia vida, por lo que Giorgio no tuvo más que acompañarla en todo el proceso su esposa era bastante terca.

Todo el proceso de su embarazo fue bastante complicado, Pero logro tener a un pequeño varón, por suerte todo había salido bien, y la mujer junto a su pequeño disfrutaban de buena salud, el pequeño Ricardo Donovan creció en un ambiente familiar cálido y amoroso, rodeado de todas las comodidades y se preparaba para llevar en su cargo el negocio de sus padres.

Ricardo se preparó en administración, negocios e incluso un poco de leyes, se convirtió en un tiburón de los negocios, haciendo la marca reconocida internacionalmente, ya no solo era en Italia, sino que tenían sucursales en distintos países, además, de sus tiendas en línea. Ricardo conoció a Alessandra De Luca, una mujer pelirroja encantadora que le robó el corazón en el momento que la vio, por lo que duro un buen tiempo enamorándola, ya que no era una chica fácil de conseguir, Pero Alessandra conociendo al gran hombre que era Ricardo Le dio una oportunidad, una de la cual no se arrepintió. Ambos se casaron y tuvieron dos hijos, el mayor Niccolo Donovan, un joven curioso por el mundo, Pero responsable en sus deberes y a la pequeña pelirroja Scarlett Donovan, una chica tímida al principio y poco sociable a diferencia de su hermano, era la luz de sus padres.

Siete años después del nacimiento de su última hija, los esposos Donovan y la madre de Ricardo volvían de una reunión que habían tenido fuera de Milán, al regresar venían charlando cuando un camión los embistió lanzándolos fuera de la carretera, esa noche los tres fallecieron sumiendo en tristeza a sus otros seres amados.

Giorgio se encargó de sus nietos, Niccolo tomo las riendas de la empresa a los 20 años y hasta el momento ha realizado un gran trabajo, es igual a su padre, no solo físicamente, en cuanto a Scarlett es un tema que lo tiene tenso, ese prometido que tiene no es de su agrado, Pero su nieta está empeñada en casarse con él, así que decidió que lo mejor era que ella misma se diera cuenta de su error y aprendiera de él, puesto que a veces es necesario sufrir una caída para levantarte y no volver a caer.

El anciano está sentado en su despacho mirando a su nieto Niccolo, quien le marca a su hermana, pero esta simplemente le cuelga.

— Al parecer tu hermana sigue enfadada por querer meternos en su vida — Dice el anciano

— Es demasiado joven para saber cómo es realmente el mundo — Niccolo vuelve a marcar, recibiendo la misma respuesta que la anterior

— Ya déjalo, solo espero que esto no termine en una tragedia —

— Tranquilo abuelo, estaré al tanto de ella, la vigilare si es necesario —

— Hazlo, no quiero sorpresas más adelante —

Sin más el anciano se retiró a su habitación, dejando a Niccolo sumido en sus propios pensamientos.

A la mañana siguiente Scarlett se levantó muy temprano, tomo su bolso y se marchó, debía reunirse con su amiga y conseguir aquel objeto que sabía alegraría a su futuro esposo, además, por la tarde debía ir al salón de bodas a terminar de revisar que todo estuviera en orden, por un momento se sintió triste, ya que su abuelo se había negado a entregarla al altar, Pero ella estaba decidida en casarse así sea que su familia no lo apruebe, ella ama a Gianluca.

Al recoger aquel regalo para su prometido lo guardo y se subió al coche, pensó en ir directamente al salón de bodas, Pero luego pensó que mejor le daba la sorpresa a su prometido así que empezó a conducir hacia el apartamento de él.

Al llegar a recepción, la mujer que siempre estaba sonriente la recibió, Scarlett le dijo que le quería dar una sorpresa a su novio por lo que la joven le dio una llave, ya que conocía a la señorita.

Al ingresar Scarlett vio ropa tirada en la sala, y un ruido proveniente de la habitación de Gianluca la alarmó, se suponía que su novio debía estar en el trabajo, Pero al parecer no había ido, la joven se acercó con paso decidido, Pero lo que escucho la paralizó.

— Scarlett es muy tonta al creer que alguien como tú puedes casarse con una gorda como ella —

Esa voz, Scarlett la reconoció, no era otra más que su mejor amiga Claudia, el corazón le latía muy rápido. No podía creer lo que escuchaba.

— Cada vez que tengo que besarla me da un asco, todo esto ya quiero que se termine — Gianluca fue quien hablo — Solo hago esto hasta que mis abuelos vean que estoy casado y que he sentado cabeza para que me den las riendas de la compañía

— Así es, solo espero que sea pronto, ya no soporto verte con ella. Es tan repulsiva —

— Tranquila mi amor, apenas me entreguen la compañía me desahogo de ella y tú serás mi esposa, Pero por ahora necesito sus apellidos —

Eso fue el detonante para que Scarlett terminara soltando sus lágrimas, ¿Acaso era tan repulsiva para que hablarán así de ella?

— Ya dejemos de hablar de ella y mejor disfrutemos un poco más — La voz seductora de Claudia se escuchaba claramente

Scarlett con el corazón roto, se limpió las lágrimas e ingreso a la habitación donde Gianluca y Claudia se besaban apasionadamente, con el ruido ambos voltearon viendo a una Scarlett con los ojos rojos.

Gianluca se levantó de inmediato, dejando a Claudia en la cama.

— No es lo que parece — Dijo este

Claudia solo rodó los ojos, tomo las sabanas y se puso de pie

— Por favor Gianluca, esto es más que obvio... es imposible negar lo que estaba pasando — Le dijo esta con indiferencia, mirando a la gorda de su amiga.

Scarlett la miro enojada, no podía creer el cinismo de su supuesta mejor amiga.

— Eras mi mejor amiga y tú mi prometido ¿Cómo pusieron engañarme de esta manera? — Les gritaba Scarlett

Gianluca al ver la situación, pensó que quizás y era lo mejor, estar casado con aquella mujer solo empeoraría su reputación, ya vería como solucionar los problemas que le lleguen con sus abuelos, por lo pronto estos solo sabrán que la víctima fue él y no la pelirroja chillona frente a él.

— Por amor a Dios Scarlett... Mírate y mírame, crees que alguien como yo en verdad estaría dispuesto a casarse con alguien ¿Como tú? — Una mueca se poso en los labios de Gianluca — Eres sosa, Gorda y mojigata para colmo, jamás estaría enamorado de ti, solo necesitaba tus apellidos para que mis abuelos me dieran la compañía y no a mi tío, Pero supongo que tendré que empezar a idear otro plan

— No lo puedo creer eres un idiota — Scarlett se acercó dispuesta a darle una cachetada

Gianluca tomo su mano antes de que lo tocara, luego se colocó a su espalda y la guío al espejo, dónde levantó su mentón con fuerza.

— Eres gorda, no estás a la altura de la alta sociedad, cada vez que te mires en el espejo, recuerda que no eres nada, ni tus apellidos pueden hacerte ver distinta... A menos de que te operen — Luego acercándose a su oído — Ahora vete de aquí y no te acerques a mi familia, por qué entonces me conocerás en verdad

Luego la soltó

— Largo — El grito de Gianluca la sobresalto

Humillada y enojada Scarlett salió del edificio y condujo a su departamento, dónde la soledad la envolvió, todo el resto del día estuvo tirada en el suelo de su habitación llorando ante los recuerdos y en cómo la burla de aquellos dos habia Sido ella.

Los recuerdos de sus salidas con Gianluca llegaban a su mente, creía que era feliz a su lado, se había acostumbrado a que el fuera el centro de su universo.

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Debora Vitale y madre de Gianluca le gritaba a su hijo por ser tan estúpido y descuidado con respecto a la heredera de los Donovan.

— Eres un tonto, ahora que les diremos a tus abuelos — La mujer estaba en verdad furiosa — Solo tenías que amarrar tus pantalones por un día, ya después le serías infiel si te daba la gana, Pero tenías que ser tan imbécil

— Fue un accidente, ella no debía estar allí, esa gorda estúpida daño mis planes —

La mujer caminaba de un lado a otro

— Todo por esa mujerzuela de Claudia, perdiste el respeto de tus abuelos, definitivamente tu tío Massimo es quien se quedará con todo. — la mujer parecía estar pensando en algo — Espera la hija de los Bianchi aún está soltera, no es fea y menos gorda y siempre ha estado enamorada de ti, solo es cuestión de que sepas lavar su cerebro. Joder, ya todo estaba listo

— Esa mujer es otra sosa y su apellido no es tan importante como el de los Donovan — Le dijo este

La mujer le lanzó un libro

— Pues es lo que hay, ni creas que te casarás con la zorra de Claudia, esa no entrara en mi familia, prefiero que Massimo se quede con todo a qué tu te cases con esa mujer — Le dijo esta con advertencia — Yo me encargaré de dejarte como la víctima frente a la familia y tú te irás de viaje, cuando vuelvas te encargaras de conquistar a Ivana.

— Bien, me voy —

Gianluca salió de la mansión de sus padres, subió a su auto y marcó un número de teléfono

— Encárgate de que Massimo no se case, no se que tengas que hacer Pero si el imbécil se casa antes que yo, te mato ¿entendido? — luego colgó y golpeó el volante

— Maldita sea —

Sin más arranco, debía salir del país y divertirse un poco antes de volver y enamorar a aquella estúpida que le serviría para quedarse con todo lo de sus abuelos.

Mateo Vitale hermano de Massimo y padre de Gianluca estaba sentado frente a sus padres, quienes escuchaban a Deborah, quien les decía que la boda de su hijo se cancelaba debido a que Gianluca había encontrado a su prometida con otro hombre, los ancianos estaban conmocionados, Pero el hombre que conocía a su esposa, no le creía nada, el conocía a su hijo; sin embargo, no dijo nada.

— Es terrible por lo que tuvo que pasar mi querido Gianluca, está destrozado — La mujer se secó una lágrima — lo envíe fuera del país con el escándalo que se va a armar, he pensado que solo digamos que se canceló y no dar motivos a la prensa, para que mi hijo no se vea como un estúpido

El hombre mayor y cabecilla de la familia Vitale miraba la situación

— Bien que así sea, Pero que esa chica no se vuelva a acercar a nuestra familia, Gianluca hizo bien en alejarse —

— Así es, su amor por esa niña puede hacerlo perdonar algo como esto, no quiero ni imaginarme los doloroso que ha Sido para el — La anciana se veía triste por su nieto.

— Papás solo les pido discreción con esto, que la familia tampoco lo sepa, no quiero más escándalos sobre todo con la llegada de Massimo a casa — Hablo por primera vez Matteo

— Tu hermano está feliz de volver a casa, su boda se realizará dentro de unas semanas, su prometida es un amor. — Dijo su madre sonriendo

— Por supuesto, solo espero que mi hermano sea feliz, Massimo se lo merece —

— Bueno, ya sabemos que hacer frente a la situación de nuestro nieto y para no opacar la felicidad de nuestro hijo Massimo, lo mejor es guardar silencio —

Debora y Matteo iban de regreso a su hogar, y a pesar de lo que su esposa le había dicho a sus padres, el pensaba averiguar que era lo que había pasado realmente, no había dicho nada par no verse como un idiota que no puede controlar a su familia, no frente a sus padres.