Hacía dos años había terminado su universidad... Ahora trabajaba en la empresa de su madrastra quien había iniciado en una pequeña floristería... Ahora era la dueña de una empresa de jardinería y diseños de interiores... Y ella trabajaba para ella.
- ¿Ya tienes el diseño que te pidió el cliente Michelle? - le preguntó Adele.
- Sí, ya hice el boceto, hoy me reúno con ellos para que definan los últimos detalles o si lo dejo así
- ¡Muy bien! - firmaba unos documentos - ¿Qué harás el fin de semana?
Michelle ocupaba una de las sillas frente al escritorio de Adele.
- Pues la verdad es que nada, sabes que no tengo más amigas que Carmen y tú...
Adele la miró sonriendo, pero con tristeza
- ¿Y no crees que es hora de que tengas una?
Michelle se puso de pie, dio varios pasos por la oficina de su madrastra la cual estaba en un piso superior desde donde se divisaba un lago muy bonito.
Se detuvo frente a la ventana y con la vista fija en la masa de agua...
- Los verdaderos amigos son difíciles de encontrar, cualquiera ríe contigo en buenos momentos pero no cualquiera es capaz de llevar tu carga...
Adele sentía mucha pena por su hijastra, ya tenía veintiséis años y nada que socializaba con otras personas...la experiencia de sus trece años le fue suficiente al parecer... Ahora se dividía entre su trabajo, su familia y su pequeño hermano con el cual le encantaba estar.
- ¿Y no quieres un novio? - Michelle la miró horrorizada - ¡Eres muy linda¡ ¡Debes tener más de un pretendiente!
- ¡No me interesa! - tomó su bolsa - Y ya me voy o llegaré tarde a reunirme con los clientes
Besó la mejilla de su madrastra y salió del despacho rumbo a una cita laboral
No era su primer trabajo desde que se había graduado, pero era un proyecto único hasta el momento, estaba diseñando la casa y jardines de un nuevo rico... Así que debía esmerarse porque él quería que su futura esposa amara su hogar.
Aunque el dueño era un misterio... ella había recreado todas sus exigencias así que esperaba que estuviera satisfecho.
...****************...
Llegó al restaurante donde la esperaban, de seguro volvería a reunirse con el secretario... así que iba formalmente vestida.
Alguien que trabajaba allí le recibió
- ¿Tiene cita?
Ella miró hacia varios lados... No parecía haber llegado aún
- La verdad es que vengo a reunirme con un cliente, pero parece que no ha llegado.
- ¡Sígame por favor!
El camarero la llevó hasta una mesa para dos un poco reservada.
- ¿Va a beber algo mientras espera?
- Solo agua por favor - le pidió cortes
El camarero no se hizo esperar y sirvió el preciado líquido.
Cuando el camarero se marchó miró su reloj con algo de impaciencia...
<< ¡Típico en estos nuevos ricos, no tienen palabras! >> pensaba para sí.
Entonces por casualidad se acercó un hombre con traje, muy bien arreglado y perfumado...
-¿Michelle del Monte? - preguntó para confirmar
Ella entonces lo miró y abrió como platos sus ojos azules... Era irreconocible prácticamente
- ¿Fernando?
él entonces se sentó frente a ella quien trago secamente ante el asombro...
- ¡Sabía que volvería a verte! - sonreía ampliamente
La verdad es que se veía fabuloso vestido con traje y corbata, sus hombros anchos, su barba leve bien cortada...su cabello peinado...en fin...
- No quiero incomodarte, pero estoy esperando a un cliente
- ¡Ah! - se desilusionó un poco - ¿Puedo hacerte compañía mientras él llega? ¿Te invito a beber algo?
- ¡No, no gracias! - se apresuró un poco - mi cliente no demorará mucho, ya me confirmó
Mentía descaradamente.
- ¿Ya terminaste tu universidad? - le preguntó él haciendo caso omiso a su verborrea
- Si, ya hace dos años que me gradué
- Yo también estudié, sabes.
- ¿Ah sí? - un poco intrigada - ¡Me alegro mucho!
- Entre nosotros queda pendiente un café, la última vez que nos vimos dijiste que sería cuando te graduaras de la universidad...y aquí estás.
- Sí, pero...
- Yo soy el cliente que esperas Michelle - le soltó de plano haciendo que ella derramará el vaso con agua
- Disculpa - le dijo al camarero apenas se acercó a limpiar - ¿qué has dicho? - le preguntó a Fernando
- Soy el cliente que esperas, el nuevo rico que desea diseñar una casa para su futura esposa ... - Michelle no salía del asombro - y espero que esa futura esposa seas tú.
¿Estás bromeando? - fue lo que se le ocurrió preguntar cuando pudo volver en sí de su asombro
- ¿Crees que bromeo con algo tan serio para mí?
- Este era un proyecto importante para mí
- ¡Ahora lo será más! - le afirmó - Estarás diseñando el interior de tu hogar futuro, dónde crecerán nuestros hijos...
Ella se puso de pie algo nerviosa...
- Creo que ya te pasaste un poco Fernando... - tomó su bolso - Gracias por la oportunidad pero debo negarme
- ¿A cuál de ambas?
- ¿Qué?
- ¿A cuál de ambas te niegas? ¿Ser mi diseñadora o ser mi esposa?
Ella sintió que el rubor y la rabia le encendieron el rostro de repente y apoyó con violencia las manos sobre la mesa
- ¿Crees que puedes volverme a manipular con tus palabras melosas? ¿Piensas que soy aquella tonta niña que conquistaste fácil? ¿Eso crees?
Más de un par de ojos les observaban, ya que ella había alzado su voz un poco
- No, no es eso lo que creo... De hecho te has convertido en una mujer hermosa y talentosa lo que me hace amarte más...no puedo olvidarte Michelle, nunca lo hice.
Michelle sintió que las rodillas se le volvían gelatina de repente, tomó aire y se armó de valor para poder irse de allí...
- Te estoy agradecida Fernando, pero no… no deseo ser tu esposa.
Y se marchó de allí mientras él solo la veía irse.
...****************...
Adele la vio entrar como relámpago, sin siquiera saludar... frunció un poco el ceño ante la duda y fue tras ella... ¿Habría salido mal el proyecto?
- ¿Puedo pasar? - preguntó desde la puerta
- ¡Es un acosador! ¡Un engreído! - caminaba de un lado a otro de su oficina como fiera enjaulada - ¿Sabes que me propuso? - se detuvo de repente frente Adele. - ¡Que sea su esposa! ¿Acaso pensó que sería tan fácil?
Su madrastra estaba más curiosa aún...
- Puedes respirar despacio y tratar de calmarte, cuéntame que sucedió por favor.
- ¡Sucedió Fernando! - gritó algo histérica mientras q agitaba las manos al aire - ¡Es él el cliente!
Adele abrió su boca ante el descubrimiento
- ¿Fernando?
- ¡Sí, el mismo que estás pensando! - entonces se dejó caer en el sillón giratorio detrás de su escritorio - No pensé volverle a ver jamás... dice que estudió...
- ¿Fernando es el nuevo rico que te pidió el proyecto de diseño? - no salía de su asombro
- ¿Acaso no me escuchas? - exasperada - ¡Seguro hizo su fortuna a través de las drogas que vendía!
Adele se quedó pensativa por un momento
- ¿Te dijo que estudió? ¡Tal vez cambio un poco! ¿No opinas lo mismo?
Michelle volvió a ponerse de pie y miró a través de su ventana
- ¿Crees que cambiara? - sonrió - ¡No lo creo!
Adele la miraba, en su rostro reflejaba una emoción indescriptible... ¿Era miedo? ¿Amor? ¿Miedo a amarle otra vez?...
Es cierto que en la adolescencia las jóvenes se enamoran en ocasiones de tipos malos o inalcanzables... pero... ¿sería este el caso de Michelle y Fernando?
- Michelle - se puso de pie y le pasó un brazo sobre los hombros - no juzgues por el pasado de alguien, a veces cambiamos de personalidad hasta en un par de meses...
Michelle la miró confusa
- ¿Por qué eres así?
- ¿Así cómo? - sonrió
- ¡Así! Siempre encontrando siempre lo positivo... en el pasado no era el mejor candidato
— Todos merecemos segundas oportunidades… antes él no era para ti…
- ¿Y ahora sí? - se burló
Adele se dirigió a la puerta y la miró antes de marcharse
- Te ha demostrado que te ama... eso para mí es suficiente
Y sin decir más cerró tras de sí dejándola sola en el Interior de su oficina.
¿Debería darle una oportunidad?
¡No! ¡No podía ser así de fácil! ¡si Fernando de veras la quería debía demostrarlo un poco más!
Esa noche cenaron en un restaurante de lujos... Su padre había cerrado un gran negocio y para celebrar sus nuevos socios les invitaron a comer... ¡Cómo negarse!
- ¡Waoooo! - exclamó Adele apenas la vio...- Te ves hermosa, y así quieres envejecer encerrada...
- No es para tanto - se ponía labial modestamente - es un viejo modelo de Carolina Herrera... Nada del otro mundo
- ¿Bromeas? - le hizo girarse - ¡Te ves fabulosa querida!
- ¡Adele síempre de exagerada! - se quejaba - Realmente iré porque papá así lo quiere.
- Somos una familia, y como tal debemos apoyarnos.
- ¿Ya está listo mi hermano?
- Sí, ya lo está y a ti te esperamos abajo... No tardes
Michelle sonrió
- Está bien, bajo en breve.
Y nuevamente se quedó sola.
Se miró en el espejo una vez más, sí que se veía radiante, tanto como hacía tiempo no se veía …
Suspiró resignada y se dirigió a la planta baja para reunirse con su familia.
...****************...
Una vez en el restaurante, los nuevos socios de su padre le presentaron a su único heredero
- Él es nuestro hijo David, mi orgullo - palmeaba su hombro - Hijo mío, Edwin del Monte, su esposa e hijos.
- Es un enorme placer conocerle señor del Monte, mi padre habla maravillas de usted.
- Muchas gracias por tan alta estima.
Luego de las presentaciones comenzaron a beber y hablar de cosas materiales mientras cenaban... pero Michelle estaba algo aburrida allí y el joven David no lo pasó desapercibido.
- ¿No te ha gustado la cena señorita del Monte?
Ella le miró ante la pregunta directa y miró luego al resto de los comensales
- Sí, está muy buena... Es que pensaba en trabajo
- ¿Algo importante?
- Michelle tiene un gran proyecto ahora mismo - mencionó su padre - Es algo que le hará muy bien a su carrera
- ¿Ah sí? - le causó curiosidad al joven - ¿Puedo saber de qué trata?
- No es tan importante como dice papá - trataba de restarle interés - Solo un proyecto
- Me encantaría saber más de él... ¿Puede ser en otra ocasión?
¿En serio estaba cortejándola allí mismo?
- ¡Sería buena idea! - exclamó enseguida su papá - Deberían conocerse más
- ¿Imaginas que en el futuro no solo seamos socios? - bromeaba el papá de David a
Michelle sonrió algo tímida... David a no estaba mal pero... ¿Era lo que ella quería?
- Michelle está enfocada en su trabajo ahora mismo - salió a su rescate Adele - ya habrá tiempo para parejas y esas cosas ¿No?
- Amor, pero una cita no le hará mal... Pueden irse conociendo hasta que ella esté lista para dar otro paso.
Se veía que Michelle estaba bastante incómoda con el tema...
- ¡Ya basta de trabajos y planes futuros! - dijo David - ¿Te apetece tomar algo de aire Michelle?
Ella lo miró algo suplicante... sería bueno salir de allí
- ¡Claro!
Y se puso de pie tomando su bolsa entonces acompañada de David salió a la calle.
...****************...
- Disculpa a mi papá - le dijo mientras caminaban por la acera - Solo planea casarme desde que cumplí los treinta. - sonrió
Llevaba las manos en los bolsillos mientras caminaba
Michelle se acarició el brazo con la mano libre, entonces David se quitó el saco y se lo puso encima
- Tienes frío
- Gracias
- ¿Eres entonces diseñadora de interiores y jardines?
- Si
- ¿Y de qué proyecto hablaba tu padre? ¡Claro si puedo saber!
- Diseñar el interior de una mansión y un jardín para un nuevo rico
- Esa gente que se hace rico de la noche a la mañana no tiene gusto... Solo dios sabe cómo hacen su fortuna tan rápido
- ¿Invirtiendo? - trato ella de justificar
- No siempre es así, muchos están en negocios ilícitos.
Eso a ella le sonó conocido... ¿Fernando sería rico por la droga?
- De todos modos solo es trabajo - sonrió un poco
- Si, claro. ¿Qué ideas tienes para ello?
- No lo sé, el dueño tiene algo específico en mente
- ¡Y no estás de acuerdo al parecer!
Ella lo miró de repente
- No, no estoy de acuerdo con él en todo... pero como ya te decía es trabajo.
David se quedó un poco pensativo antes de responder
- ¿Te gusta algo más además de diseñar?
- Si, pasar tiempo con mi hermano menor, estar al aire libre con él - sonrió dulcemente
- ¿Te gustan los niños?
- Me gusta mi hermano - rio - No estoy segura de si todos los niños me sean agradables...
La conversación estaba tomando un rumbo más personal...
- Te invito a tomar algo ¿Aceptas?
- Otro día...
- Ella es especialista en evadir invitaciones - le dijo alguien atrás de ellos
Esa voz le era más que conocida así que ella se volteó aprisa...casi cae en su giró así que terminó en sus brazos...
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