Como cualquier otra historia, esta era sobre como los protagonistas se enamoran y deben luchar por su amor, por supuesto, había una villana la cual quería separarlos, esta era la prometida del príncipe heredero, el protagonista, quien se enamoro de una joven de bajo estatus, por lo que su prometida se convierte en la villana, jugando trucos sucios contra la heroína, pero siempre llegaba el valiente príncipe para defender a la joven, hasta que finalmente en un intento de asesinarla, la villana es capturada y encerrada en el calabozo, donde sufre malos tratos, siendo golpeada por otros presos que intentan abusar de ella, pero la villana no era tan débil, aún así no se salvaba de las palizas y además, los guardias no hacían nada, alegando que se lo merecía por intentar dañar a la pobre y dulce protagonistas, al final, la villana es abandonada por todos, esos que ella considero amigos, le dan la espalda, sus padres la exilian de su familia, quitando su apellido y renuncian a su paternidad.
Ante tal suceso, la villana es condenada a un exilio del reino, ¿por qué no fue ejecutada? Porque la dulce protagonistas aún no era la prometida oficial del príncipe y este cree que exiliarla era mucho peor que ejecutarla, porque así tendría una muerte dolorosa y lenta, ya que sería llevada al territorio desértico, donde sería abandonada sin agua, ni comida y así, la villana encuentra su final después de vagar por días en ese desierto.
Mientras que en el reino, se celebra el compromiso de los protagonistas y siguen enfrentando algunas dificultades, entre ellas, la protagonista, quien debe aprender mucho antes de poder casarse, ya que será la reina y debe tener la confianza del reino, así como de los nobles, aunque al principio los nobles más ancianos no la aceptan, pero ella logra ganarse su cariño. Enfrentan también una disputa contra otro reino, donde el rey de este lugar se enamora de la protagonista y se la desea llevar, pero el príncipe heredero lucha por ella, ganando así la guerra y finalmente uniendo sus vidas en matrimonio alcanzando su final feliz.
Pero justamente en el momento en el que la villana perdía la vida, un alma nueva se adentraba al cuerpo de esa miserable joven, un alma que en su otra vida fue alguien sin compasión hacía sus enemigos y que fue traicionada por alguien en quien confío. Ella abre los ojos sintiendo el intenso sol contra su rostro, se giro y se reincorporó apoyando sus manos sobre la arena, lo cual la sorprende, además sus manos se veían delgadas, casi en los huesos, las uñas quebradas y con sangre seca, no entendía donde estaba o que pasaba. Entonces se arrastra hasta donde puede ver como una formación de rocas y se acomoda bajo la sombra de estas, notando su cuerpo pequeño y delgado, con heridas frescas y otras secas, entonces un dolor en la cabeza la hizo caer sobre la arena mientras sostiene su cabeza, gritaba de dolor y una seriedad de eventos comenzaron a rondar su cabeza como si se tratase de una película sobre su vida.
Todos aquellos momentos que había vivido la villana invadían su cabeza, mostrando que la villana solo luchaba por no perder su compromiso, ya que de hacerlo, sus padres no le tendrían consideración, pues toda su vida fue educada con crueldad para ser la "esposa perfecta", ya que sus padres querían que ella subiera al trono, así que el intento por alejar a la protagonista del príncipe era por su desesperación, por evitar recibir una paliza de su madre, incluso fue esta la que la empujo a crear un plan de asesinato, fue su madre quien contrato a los mercenarios que se llevaron a la protagonista, pero cuando fue salvada, su madre dejo que toda la culpa cayera en ella.
La joven se levanta tras recibir todos sus recuerdos, el dolor se iba disipando, pero ahora, ¿como saldría de aquel lugar? Era un desierto, no había comida, ni agua, su cuerpo estaba débil, 10 días vagando por ese lugar eran ya demasiados. Se puso de pie, necesitaba analizar todo, además, estaba furiosa, sus propios padres la abandonaro y seguramente la protagonista esta por alcanzar su final feliz. Frunce los labios, era una verdadera molestia todo.
Ella camina cerca de la zona rocosa, buscando un mejor sitió para descansar, logrando dar con lo que parece una cueva, así que entra en ella y se sienta observando la entrada.
《¿Por qué justamente en ella? Al menos debió ser antes de ser abandonada, tendría más posibilidades de vivir.》se queja para si misma.
Apenas y puede creer que haya reencarnado en esa historia tan tonta, con un par de protagonista egoístas y odiosos, que en lo único que pensaron es en su felicidad y no se detuvieron a pensar en el daño que ellos causaban.
《Los mataré, si sobrevivo de esta, los acabaré a todos.》piensa con enojo.
La noche llego y esta se hacía más fría, lo cual era una molestia al no tener nada con que cubrirse, de pronto, escucha los cascos de caballos, el galope se detiene y varias voces de hombres se escuchan por cerca, ella se esconde tras una roca al notar que alguien entra, ella sabe que si la ven, siendo hombres es probable que intenten abusar de ella. Aquel hombre que ha entrado se veía mayor y por sus ropas quizás era un noble, ¿pero porqué un noble estaría en ese lugar?
"Señor, no encontramos nada del otro lado, quizás...quizás es mejor detener la búsqueda." Menciona nervioso el hombre joven que se acercó.
— no, seguiremos, en algún lugar debe de estar, no descansaré hasta encontrar a mi sobrina.— menciona el hombre mayor.
La chica se sorprende al escuchar aquellas palabras y al intentar ver mejor a ese hombre, porque se le viene a la mente quien podría ser, ella resbala cayendo de aquellas rocas donde se esconde, ante el ruido, aquel hombre levanta la linterna de piedra mágica, alumbrando a la joven.
— Ch-Charlotte...eres Charlotte...¿verdad? Dime que no solo es una alucinación...— el hombre estaba al borde de las lágrimas.
— yo soy Charlotte...usted es...—
— soy yo, Charlotte...tu tío Oscar, el conde Layton...— se acerca despacio.
Sin duda esa era su sobrina, pero se veía tan mal, delgada, sucia y llena de heridas, cuanta crueldad en contra de una joven tan frágil. El hombre trata de acercarse pero ella retrocede, no sabe si debe confiarse.
— tranquila mi niña...he venido para llevarte a salvo...—
— ¿llevarme a donde? Mis padres me han abandonado, mis amigos, mi prometido, todo el reino me ha mostrado su verdadero rostro.— Charlotte fingió una expresión de tristeza.
— no con ellos, se lo que hicieron, lamento no haber estado antes para salvarte, pero ahora no dejaré que ellos te hagan daño, nos iremos lejos, donde nadie te haga daño.—
Charlotte observa al hombre, sus palabras parecen sinceras, tal parece que la verdadera Charlotte al menos tenía alguien que si la apreciaba, pero en la historia, ese hombre debió llegar tarde, además, nunca fue mencionado en la novela, lo cual era extraño, ¿por qué aparece hasta ahora? ¿Quizás si la busco, pero solo encontró su cadáver? Son dudas que no saldrán de su cabeza tan pronto, pero al menos, con ayuda de ese hombre, ella podrá salir de ese desierto y después pensará en lo que hará.
...
Charlotte seguía desconfiada, pero si piensa bien, si en verdad ese hombre se preocupa por ella, es su boleto de salida de ese horrible lugar desierto, ya cuando este fuera de este, pensará que hacer. Así que toma la mano del hombre y este sonríe, así que primero quita su chaqueta para cubrirla y le ayuda a salir de la cueva, anunciando que finalmente la ha encontrado, los casi 50 hombres que van con él se alegran por el conde.
Charlotte se queda sentada sobre una manta que pusieron en el suelo cerca de una fogata y le dieron agua y un plato pequeño se sopa, como ha estado sin comer durante días, lo mejor es que no coma nada pesado, entre esos hombres iba uno que sabía un poco de medicina y tras revisarla, limpio sus heridas y las vendo, mientras lo hacía le comentaba lo preocupado que estaba el conde cuando supo lo que paso, estaba furioso con los padres de la chica por permitir tal atrocidad de abandonarla en ese desierto, además por medio de la fiel doncella de Charlotte, el conde supo lo que ella vivió en esa casa.
— si tan solo se hubiera enterado antes, esto no habría pasado.— menciona el médico.
— ¿como es posible que no supiera? — murmura Charlotte.
El médico la mira sorprendido debido a esa pregunta.
— lo siento, hay cosas que no recuerdo bien...— se disculpa.
— esta bien, es normal. El conde no vive en el reino, él es de Ruman, solo va a Lotel cada dos años. Pero nunca vio señales de malos tratos y usted lo oculto muy bien.— explica el médico.
Charlotte no dice nada, pero tiene sentido, ella estaba bajo el dominio de sus padres, era obvio que no pediría ayuda, porque creía que nadie la podía ayudar. El conde le preparó un colchón más cómodo dentro de unos de los carruajes que traían, le dice que vaya a dormir y que al amanecer comenzarán su viaje a Ruman.
— Mary ya debe de haber llegado, ella fue la que me contó todo.— le menciona el conde.
— entiendo, se lo agradezco, sin usted no podría haber salido de aquí.— hace una reverencia.
El conde solo le da una pequeña palmada en la cabeza y le hace subir al carruaje, dejándola descansar, mientras que el médico le informa sobre la salud de la joven, realmente no entiende como unos padres pueden causarle tanto daño a su propia hija, pero él se encargará de cuidarla y no dejará que todos esos que la traicionaron le hagan daño de nuevo.
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Pasaron casi cinco días de viaje hasta finales dejaron ese desierto y llegaron a un pueblo fronterizo, donde pasaron a descansar y abastecer sus víveres, ya que deben seguir su viaja para volver a Ruman, lo cual les tomara otra semana, debido a que estuvieron en ese desierto, pues si van por un camino diferente toma menos días. Oscar puede notar a su sobrina callada, pero el médico le dice que debe de ser por el trauma de todo lo que paso, incluso puede que ahora le resulte difícil confiar, pues en los que ella confío la traicionaron.
— como estas fuera del registró familiar de tus padres, podré darte mi apellido, podrás vivir sin preocupaciones.— le menciona el conde.
— se lo agradezco, no quiero que me vinculen más a esa familia.— responde de manera fría.
Mientras van en el carruaje, ella cierra los ojos, los recuerdos de ese cuerpo aún pasan como una pesadilla en su cabeza, aunque eso no le afecta del todo, ya que no suele ser alguien sentimental, en su anterior vida también vivió traiciones y aprendió a sobrevivir sola, olvidándose de los sentimentalismos, de modo que así no tendría pena por deshacerse de quienes la traicionaron. Incluso no puede creer que haya terminando reencarnando en ese libro que leyó solo para tener de que hablar con su objetivo, ya que era fan de la historia y eso la acercaría a ella para poder infiltrarse en su familia y descubrir sus secretos, lamentablemente esa fue su última misión.
Aunque el viaje fue largo, finalmente llegaron a Ruman, en la mansión de Oscar, ella se instaló fácilmente y los sirvientes eran corteses con ella, incluso había una biblioteca, lo cual le sirve muy bien para aprender más de ese mundo, esperando tener un don mágico, según la historia si lo posee, pero la verdad no solía usarlo, ya que sus padres solo querían que fuera una "dama perfecta".
— escuche que estabas practicando magia, puedo traer un maestro.— le ofrece el conde.
Ambos cenaban juntos, para el conde era una forma de poder ganarse la confianza de su sobrina para que ella pueda volver a ser sociable y no quedarse solo en casa practicando en exceso.
— si eso es posible, estaría bien, hay cosas que no vienen en los libros y me gustaría aprender a manejar mejor la magia.— responde con tranquilidad.
— ¿que elemento has podido usar? Lo común es que un mago se base en un solo elemento. Por ejemplo puedo controlar el fuego.— el conde señala una vela en medio de la mesa y este prende.
— no sabia eso, entonces supongo que mi don es el viento.— levanta la mano y se enfoca en la vela.
Una pequeña ráfaga sopla hasta apagar la llama.
— perfecto, tienes un buen control, serás una excelente maga. — la felicita.
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Dos años después...
En un pueblo fronterizo entre Ruman y Lotel, un grupo de bandidos estaban atacando una pequeña aldea, reunieron a todos en el centro, separando a mujeres y hombres, mientras que a los niños los suben a unas carretas con jaulas, el líder dice que no los lastimen, ya que si están intactos pagan mejor por ellos, los hombres intentan detenerlos, pero los bandidos son más ágiles en combate, las mujeres lloran por sus hijos, suplicando que no se los lleven.
"Cierra la boca, a donde te llevaremos olvidarás incluso que tuviste hijos." Le grita el líder a las mujeres.
Todas se asustan, porque seguramente querrán llevárselas para venderlas a burdeles. Pero de pronto, la cabeza de ese líder se separa del cuerpo, cayendo al suelo y las mujeres al ver como la cabeza rueda cerca de ellos gritan. Los bandidos no pueden creer lo que ha pasado y enseguida preguntan quien ha sido.
— he sido yo, ¿algún problema?— responde una voz femenina.
Los bandidos pueden ver a una joven de cabellera negra y ojos esmeraldas, de pie arriba de una de las azoteas. Ella se muestra confiada debido a lo que acababa de hacer.
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El segundo al mando ordena que disparen flechas contra la chica, pero tan pronto ella levanta la mano, las flechas pierden velocidad.
"Vayan por ella. Ustedes, llevense a todos." Ordena el segundo al mando.
Los bandidos comienzan a moverse, pero pronto se dan cuenta que estaban rodeados por caballeros, aunque estos no parecían ser de Lotel, así que era probable que sean de Ruman y aun así estaban en ese lado de la frontera. Los caballeros rápidamente atacan a los bandidos, viéndose en la obligación de dejar su "mercancía" y huir. Charlotte baja de esa azotea, como si bajará las escaleras gracias a su magia de viento. Estando ya abajo, ataca a los bandidos usando una espada, como los caballeros eran más lograron detener a todos y arrestarlos.
"Gracias por salvarnos, aunque no sean de Lotel, les estamos agradecidos."
"Gracias señorita, sin ustedes habríamos sido separadas de nuestras familias."
"Señorita estaremos eternamente agradecidos."
— no ha sido nada, pero, ¿que hay de los caballeros de Lotel? Se que ellos cuidaban esta zona.— pregunta el capitán.
"Oh señor, este pueblo ha estado abandonado por el reino desde hace un año"
"Desde que el príncipe heredero subió a trono, el reino es un caos."
Charlotte escucha atenta la información, pero no entendía porque pasaba eso, no se suponía que el reino sería prospero durante el reinado de los protagonistas. La gente les cuenta que desde la guerra contra el reino de Weler, los caballeros del reino dejaron de proteger las fronteras y aunque han pedido ayuda, nadie los escucha, siempre reciben de respuesta que el reino no tiene recursos suficientes.
— había escuchado algo de parte del conde, pero no creí que llegará a tanto.— menciona el capitán.
— si ellos solo siguen esperando, nada pasará.— responde de manera desinteresada.— nos vamos nuestra misión acabo.
Charlotte ordena que suban a los delincuentes a las carretas con jaulas, la misión que el rey de Ruman les encargo era ese grupo de bandidos, además esa gente pertenece a Lotel, lo cual a ella no le importa.
...
El capitán se sorprendió ante el desinterés de Charlotte por la gente de aquel pueblo, pero una de las chicas que estaban entre las tropas, le menciona que se debe a su pasado, antes de ser hija del conde Layton, ella sufrió mucho y fue traicionada por la gente que ella creyó la apoyaban.
Charlotte iba hacía adelante en su caballo, seguida por los demás caballeros. Todos ellos pertenecen al escuadrón de guardia del palacio de Ruman, su trabajo es ir por el reino a misiones en las que deben encargarse de atrapar o eliminar delincuentes que hayan escapado. Charlotte logró entrar a esa guardia hace ya un año, después de pasar por las diversas pruebas y gracias a que el conde Layton le explicó al rey sobre el pasado de la chica, este al escuchar todo, sintió que fue ella fue castigada de manera injusta y permitió que ella pudiera ingresar a las pruebas, pero ya dependía de sus habilidades si lograba pasarlas.
Y así, Charlotte ascendió a general del escuadrón Diamante, gracias a sus grandes habilidades en combate y magia. Ahora iban de regreso a la capital para entregar a los delincuentes que capturaron, donde recibirán su sentencia por sus crímenes.
"Oye, tú, te me haces conocida...¿de donde eres?" Pregunta uno de los bandidos al observar a Charlotte.
— cierra la boca. — Charlotte hace una seña.
Ante esto, los chicos cubren la jaula con una lona, mientras que otros colocan el campamento. Charlotte se sentó cerca de la fogata y la chica de antes le ofrece una taza de sopa.
— ¿cree que sea verdad que Lotel esta en crisis?— pregunta la chica.
— quizás sea cierto, tal vez es hora de volver y pagarles por lo que me hicieron, ¿tú que crees Mary?—
— que la apoyaré en lo que sea, y siendo sincera, quisiera darle un par de golpes al príncipe.— levanta el puño con enojo.
— te dejaré matarlo si eso quieres.— responde Charlotte.
— eso sería demasiado, solo permitame abofetearlos y luego usted hará lo que quiera.— aún se le complica un poco matar, aunque sean malas personas.
Mary era la guardia de Charlotte desde que estaba con su familia, la pusieron a ella, porque sus padres no querían que sea protegida por escoltas varones, para proteger la pureza de la chica, ya que su propósito era que se casará con el príncipe.
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Después de un largo viaje, sin más contratiempos, los bandidos fueron entregados a la guardia real para que se encarguen de su condena. Como su misión tuvo éxito, tenían dos días de descanso, ya que hicieron un largo viaje. Al llegar a la mansión de su tío, este la recibe feliz, además de que le hace entrega de un obsequió el cual esta envuelto.
— en mi viaje encontré este libro, creí que te gustaría, es sobre magia.— agrega emocionado.
— se los agradezco, le daré buen uso. ¿Le parece bien si cenamos? Tiene días que no nos vemos.—
El conde estaba encantado de cenar con su sobrina, para él, era casi una hija, le alegraba verla sobresalir y tener éxito en lo que ella quería, sin tener que imponerle nada. Al terminar la cena, Charlotte fue a su alcoba, recordando el libro, por lo que lo saca de la envoltura, la portada del libro era de cuero con un símbolo extraño y sin título. Charlotte lo abre, notando que las páginas eran antiguas por el aspecto del papel, además era un idioma extraño, uno muy diferente al que se habla en ese mundo.
Charlotte sigue pasando las hojas, pero al ver un hechizo junto a un pentagrama, ella siente una energía recorrer su cuerpo y al observar mejor las palabras, se da cuenta que puede entenderlas a la perfección. Charlotte desliza las manos sobre el símbolo, repitiendo el conjuro que viene escrito en la página, al terminar la última frase, ese mismo pentagrama se forma en medio de la habitación y el aire se hace presente, tirando las cosas que hay en la habitación, también se esparcen plumas negras y del pentagrama se puede ver salir algo, notando que se trata de un hombre que intenta liberarse de unas cadenas rojas. Charlotte puede ver que tiene un par de alas negras y cuernos, dejando ver también que se trata de un hombre atractivo.
Las cadenas que estaban deteniendo su cuerpo desaparecen y este se mantiene quieto, mirando a Charlotte con sorpresa. Lucifer observa el lugar, tratando de asimilar lo que estaba pasando, incluso mira bajo sus pies, viendo el pentagrama brillas bajo él.
— una bruja...— menciona.
—¿que? ¿como que bruja?— pregunta confundida Charlotte.
— solo las brujas pueden invocar de esta manera un demonio.— observa las cadenas sobre su cuerpo.
Charlotte puede notar que el hombre se veía bastante molesto. Lucifer estaba furioso, si bien sabe que las brujas invocan demonios para tenerlos bajo su mando, jamás en toda su existencia ha existido una capaz de invocarlo a él a la fuerza.
— ¿así que eres un demonio? Entonces ese libro.— señala el libro que debido al viento ha quedado en el suelo.
Lucifer observa el libro y con su magia lo levanta del suelo para tenerlo en sus manos, reconociendo su portada de inmediato.
— ¿como carajos acabo esto en tus manos? ¿Quien eres?— pregunta.
— fue un regalo, me llamo, Charlotte Layton y espero una explicación de lo que ha pasado.— Charlotte toma la espada que tiene sobre la cama.
— ¡ha! ¿Crees que ese juguete me asusta?— Lucifer levanta la mano.
Y al hacer un movimiento la chica es empujada por una energía oscura contra la pared, evitando que se mueva. Lucifer camina hacía ella y le sostiene de la barbilla.
— ahora ligerame, porque estás cadenas no evitan que pueda matarte.— ordena molesto.
— no se como se hace eso, yo solo leí lo que venia en el libro.— responde, tratando de mantenerse calmada.
— ¿eres un maldita bruja y no sabes como? Entonces romperé tu cuello...—
Charlotte aprovecha para liberar su magia de viente, empujando a Lucifer lejos de ella y liberándose de la magia del albino. Charlotte aprovecha para atacarlo con su espada, pero el demonio se defiende cubriendo su brazo con su energía para evitar que el filo de la espada le hiera.
— nada mal bruja, pero eso no es suficiente para acabar con el gran emperador del infernal.—
Lucifer usa las cadenas rojas que aun siguen sobre él y la enreda en el cuello de Charlotte estando detrás de ella.
— bien, si no vas a liberarme, entonces solo te mataré.— aprieta la cadena.
— y-yo no sé como...no soy una bruja...— trata de evitar que le apriete la cadena sosteniendo esta con sus manos.
— ¿que no eres una bruja? Me has invocado, has leído el libro, claro que eres una bruja.— y no piensa ser el esclavo de una.
— ba-basta...no lo soy...l-liberame ahora..— ante lo dicho, las cadenas brillas y desaparecen.
Charlotte aprovecha esto para alejarse de Lucifer, mientras que él ve como las cadenas se enredan por su cuerpo y desaparecen.
— maldita sea...— expresa con enojó.
Que las cadenas haya desaparecido, significaba que el ritual había sido un éxito, ahora él estaba obligado a quedarse con Charlotte, siendo ahora ella su ama.
— tú, bruja...— apunta a Charlotte.— me liberare y pagarás por esto.
Charlotte seguía sin comprender que pasaba, pero al ver el libro, lo agarra pasando las páginas hasta donde esta el conjuro que leyó, pasa la página y en un breve texto, explica que se trata de un ritual para invocar un demonio para que este sea su compañero, el demonio será atado con cadenas que lo obligarán a estar cerca de la bruja, para que este la obedezca y solo será liberado cuando la bruja cumpla su cometido, es decir, la razón por la que se vio en la necesidad de crear esa unión.
— ¿entonces soy una bruja y tu mi mascota?— pregunta.
—¿a quien llamas mascota? Escucha bruja, no soy la mascota de nadie, Lucifer no es esclavo de nadie.— se queja.
— ¿Lucifer? ¿El ángel caído? ¿El emperador del infierno?— Charlotte lo observa de arriba hacía abajo, ahora que se fija bien, es atractivo, aunque su forma de vestir, parece un darketo de la época de donde ella viene.
— por supuesto, ese soy yo. Pero no me explico como una mocosa pudo invocarme de esta manera.— chasquea la lengua.
Realmente lucia molesto, pero Charlotte también estaba confundida, ella no sabía que podría ser una bruja, hasta ahora ha sido buena en la magia, pero nadie le ha mencionado el hecho de ser bruja y por lo que leyó en la academia, las brujas se extinguieron hace siglos o eso se cree. Hasta el día de hoy solo se tiene registro de unas pocas y éstas pertenecen a la misma familia, la familia imperial del imperio más grande del mundo. Mientras permanecen en silencio, Mary entra trayendo consigo la cena de Charlotte, pero al ver a Lucifer en la habitación, la cual esta toda destruida y Charlotte tiene toda la ropa y cabello revuelto, Mary suelta la bandeja de comida.
— ¡OH POR LOS DIOSES! ¿que es lo que ha hecho? Nisiquiera están casados.— grita y se cubre los ojos con las manos.
— no es lo que piensas, Mary.— responde secamente.
Lucifer solo hace un gesto de desagrado ante las insinuaciones de aquella niña.
...
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