No importa cuánto me tarde, pero me vengaré de todos y cada uno de ustedes.

Fue lo último que le dijo Victoria Valenzuela, a los que un día creyó que eran su familia.

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Una noche lluviosa, una mujer de nombre Viviana fue echada de su casa, con su pequeña Victoria días después de haber muerto misteriosamente su esposo. Su supuesto amigo, Rodrigo Lascuráin se había apoderado de todo, de la empresa, de la mansión, hizo que el padre de Victoria en su lecho de muerte, firmara unos papeles haciéndole creer que eran asuntos de la empresa, ya que desde que Rafael enfermó lo puso a cargo de su empresa,

_ amigo mío, debes firmar, y recuerda, yo me haré cargo de tu pequeña y de tu esposa

_ prométeme que cuidarás de ellas, quiero morir tranquilo, sabiendo que tú estarás siempre con mi familia

_ te lo prometo, amigo. Rodrigo era su amigo y lo consideraba su hermano tanto así que su hija Victoria le decía tío, nunca imaginó que él siempre quería quedarse con toda su fortuna, así que este hombre ideo su plan malévolo, para apoderarse de todo.

Días después, murió el padre de Victoria, Viviana y su pequeña hija estaban muy tristes por la perdida de su ser amando, lo despidieron como se lo merecía, Rafael Valenzuela, y es que él era un hombre rico, tenía una fábrica de autos muy reconocida, llamada V.V.

Cuando pasaron unas semanas después de la muerte de Rafael, Rodrigo reunió a Viviana junto a su hija, para leer el testamento, el abogado de confianza de Rafael hizo tratos para alterar el testamento, Rodrigo le pagaría una buena suma de dinero por ese trabajo.

_ buenos días señora, vengo a la lectura del testamento, el señor Lascuráin está aquí por pedido de su esposo. Ella no dijo nada ya que sabía el cariño que su difunto esposo le tenía a Rodrigo y si le dejaba algo, ella no se opondria, pues ella también lo consideraba su familia.

_ yo Rafael Valenzuela, dejo toda mi fortuna, a mi querido amigo Rodrigo Lascuráin,

_ cómo puede ser esto posible, esto es un engaño, que hiciste con el testamento de mi difunto esposo, no acepto este testamento.

_ querida esa fue la voluntad de mi amigo, así que lo siento por ti, ya ves que no las amaba tanto como el decía

_ no hables así, porque tú sabes que para el primero éramos nosotras, su familia

_ pues ya ves que no, y como todo es mío, hoy mismo te largas de mi casa, tú y tu mocosa,

_ eres un desgraciado, ya veo que tú amistad era solo por interés, tantos años con nosostros y ahora descubro la clase de persona que eres, me las vas a pagar, escucha bien Rodrigo Lascuráin, un día tú me vas a pagar todo lo que has hecho, esto no se va a quedar así, porque estoy segura que esa no era la voluntad de amado Rafael

_ sueña querida, eso no está a tu alcance, así que ya sabes hoy te largas no me importa a qué hora, pero te vas, mi familia y yo vamos a vivir aquí, y tú ni nadie lo va a impedir y no vuelvas porque como dueño de todo, puedo llamar a la policía y echarte.

Viviana era una mujer hermosa, se casó enamorada de su difunto esposo, aún era joven de buen parecer, piel blanca cabello rubio, ojos celestes y conservaba bien su cuerpo.

Rodrigo, tenía dos hijos, Renato de diez años y Alicia de siete, su esposa Lucrecia, una mujer hermosa, pero ambiciosa, ella sabía los planes de su marido, odiaba a Viviana, porque ella tenía todo cuanto quisiera, le tenía envidia.

_ mami, a dónde vamos, porque tenemos que irnos, vamos a pelear por lo que es nuestro, mi tío no se puede quedar con nuestra casa

_ mi niña, debemos irnos, pero te juro que un día todo esto volverá a ser nuestro,

_ mamá, tío Rodrigo es malo, él no nos quiere

_ no te preocupes por eso hija, vamos a recoger lo necesario y nos iremos de aquí.

Ellas habían quedado solas en casa, Rodrigo se había ido a su casa, esperaba que el regresar Viviana no estuviera en la mansión o las echaría a patadas. Ya de noche, comenzó a llover, parecía que el cielo se iba a caer, tomó la mano de su pequeña hija, salió de la mansión y ya afuera del lugar miró atrás, le dolía dejar su casa, pero ella volvería.

Salieron del lugar, a un hotel necesitaba pensar, que hacer, cómo iba a recuperar todo lo que era de su esposo, de ella y de su hija. Llegaron a un modesto hotel, no podía darse el lujo de gastar, pero a pesar de que ella era rica y vivía bien, tampoco le importaba pasar la noche en un lugar sencillo, ya que ella era de un gran corazón.

_ hija ven, hoy pasaremos la noche aquí mañana ya veo que hago, no tengas miedo de nada, prométeme que siempre serás fuerte, que no dejarás que nadie te haga daño, pero sobre todo, nunca cambies tu sencillez, recuerda, todos somos iguales,

_ te lo prometo mamita, siempre seré fuerte, siempre cuidaré de ti

_ si mi amor, aún eres pequeña, pero un día entenderás todo,

_ mamá, soy pequeña, pero entiendo y sé que mi tío nos sacó de lo que papá nos dejó,

_ hija, recuerda esto, él no es tu tío, él no es nuestra familia, solo somos tu y yo, y tu papá en nuestros corazones, ya no le llames tío

_ está bien mamá, solo tu y yo, siempre.

Victoria se había dormido y Viviana se sentó junto a la venta, tenía que pensar en lo que debía de hacer, su hija estaba creciendo y entendía lo que estaba paseando, pero no quería llenarle su corazón de odio, pero si un día ella quería hacer algo por recuperar lo que un día su padre le dejó ella no se iba a oponer, más bien la iba a apoyar.

No tenía donde ir, y el dinero que tenía era poco, pensó, lloró en silencio, pero tomó la decisión de buscar ayuda, por la mañana haría una llamada, él era el único que lo podría ayudar, siempre fue su mejor amigo, siempre estuvo enamorado de ella, pero Viviana lo vio solo como amigo, porque su amor siempre fue Rafael.

_ buen día, mamá, dormiste bien?

_ buen día mi preciosa, la verdad no hija, pero vamos a salir de todo esto, no te preocupes, ve a darte un baño, mientras yo voy a la recepción del hotel hacer una llamada, no salgas de la habitación por favor

_ ve tranquila mami, yo me portó bien siempre, tú lo sabes, aquí te espero

Viviana se vistió y salió a hacer la llamada que la ayudaría a ella y a su hija.

Arthur Dubios, es un hombre millonario dueño de hoteles, restaurantes y clubes en Francia, muy guapo, cabello castaño, ojos color avellana, una barba de días, pero bien cuidada aunque tenía su par de años se conservaba muy bien, conoció a Viviana en la preparatoria, pero él y Rafael eran amigos y cuando supo que su amigo le gustaba la misma chica y que ella también gustaba de él, no se interpuso en la relación, siempre estaban juntos en las clases, a la hora de receso, o de la salida, en ocasiones salían a fiestas juntos, hasta que ellos se casaron y se fueron de Francia a Nueva York, él siempre les dijo que podían contar con él, porque siempre sería su amigo y Arthur era un hombre de palabra,

Después que Rafael y Viviana, se fueron del país, fueron pocas las veces que se vieron, Arthur se casó con una joven, el día que ella iba a dar a luz a su hijo, falleció unos minutos después de dar traer a su niño al mundo, solo lo vio y luego cerró sus ojos. Arthur nunca se volvió a casar, y se dedicó a amar a su pequeño hijo.

_ buenas, me puede comunicar con Arthur Dubios.

¿_ si, de parte? Se escuchó decir al otro lado de la línea

_ Por favor dígale que es de parte de Viviana de Valenzuela

_, espere un momento por favor, ya le comunico

Ella estaba nerviosa, tenía años que no sabía de Arthur, ella sabía que él era un hombre bondadoso y bueno, que les prometió a ella y a su difunto esposo, que si un día necesitaban de su ayuda, no dudaran en llamarlo

_ señor una llamada, por la dos, dice que es la señora Viviana de Valenzuela, Arthur al escuchar ese nombre se sorprendió, pero se sintió, feliz de volver a saber de su viejo amor,

_ si gracias, _ aló, Viviana, ?

_ si Arthur, disculpa que te llame, un día nos dijiste a mí y a mi amado Rafael que si necesitábamos de ti te buscáramos y hoy necesito tu ayuda.

_ si Viviana, dime en qué puedo ayudarte,

_ mi esposo murió hace unas semanas. Se hizo un silencio

_ lo lamento mucho, pero dime qué necesitas, lo que sea que pueda ayudarte lo haré

_ necesito salir del país, no tengo dinero, quiero que me saques a mí y a mi hija de aquí, cuando nos veamos te contaré todo, pero me urge por favor.

_ cuenta con eso hoy mismo salgo para allá, iré en mi jet privado, dame la dirección de dónde estás y allí estaré, no te preocupes por nada, quédate tranquila yo iré.

_ te lo agradezco mucho Arthur,

Viviana estaba contenta, aliviada, porque su viejo amigo le iba a ayudar, ella iba a contarle todo para que le ayudara a recuperar lo que era suyo

_ mamita, volviste, estás bien?

_ si mi niña, todo va a estar bien, ya hice la llamada y pronto nos iremos de este lugar, vendrá un viejo amigo mío y de tu padre, y nos va a sacar del país

_ que bueno mamita, siempre le vamos a agradecer a tu amigo lo que está haciendo por nosotras,

_ así es mi princesa, nos vamos de aquí, con la promesa de volver, Rodrigo Lascuráin va a pagar por esto, eso ya te lo prometí y lo voy a cumplir,

_ si mamá, vamos a volver y ese hombre, tendrá que arrepentirse de lo que nos ha hecho

Viviana y Victoria, se prometieron volver, y recuperarían todo lo que se les fue quitado, su venganza apenas comenzaría en contra de Rodrigo Lascuráin.

Ya de madrugada, Viviana escucha un toque a la puerta de la habitación del hotel,

_ quien?.

_ Viviana soy yo, Arthur

ella se apresuró a abrir, y allí estaba su viejo amigo Arthur Dubios, ella lo abrazó y se puso a llorar

_ que gusto verte, ven pasa

_ el gusto es mío, pero no llores ya estoy aquí, después de tantos años nos volvemos a encontrar, dime dónde está tu pequeña hija.

_ está bien y duerme, gracias por venir, sé que eres un hombre muy ocupado, disculpa si te hice salir de todos tus compromisos, pero de verdad es urgente.

_ mira Viviana, yo quiero que sepas, que no estás sola, sabes que soy de palabra y también sabes que en un tiempo fuimos amigos muy cercanos, pero tomamos caminos diferentes, pero el cariño y la amistad nunca se ha perdido de mi parte, Rafael fue mi gran amigo, nos distanciamos porque él quería empezar de cero aquí y yo también tenía que hacerme cargo de la empresa de mi papá, pero siempre los he tenido en mi corazón, lo que necesites, en lo que yo pueda ayudar, cuenta conmigo.

_ que bueno saberlo, cómo ya te dije Rafael falleció, fue algo que no se explica el porqué su salud se deterioró y luego murió, nunca supimos de qué, porque los médicos no encontraron nada y no se explican el motivo de su enfermedad.

_ y porque no me llamaron, para que juntos buscáramos una solución, llevarlo a otro país

_ la verdad yo quería hacerlo, pero Rodrigo me dijo que él buscaría otros médicos, pero días después Rafael falleció.

_ y quién es Rodrigo,

_ pues un supuesto amigo, que me mostró sus verdaderas intenciones, me echó de mi casa, y se quedó con todo

_ haber explícame eso, como que con todo

_ si, no sé cómo lo hizo, pero hace poco se leyó el testamento de Rafael dónde decía que le dejaba todo, es claro que él no le dejaría todo a su amigo, porque murió creyendo que él era su amigo. Una lágrima salió de sus ojos al recordar a su esposo

_ claro que él no haría eso, sé cuánto te amaba, así que yo dudo que él le dejo todo

_ quiero recuperar todo, pero no tengo nada, saqué mis joyas y mañana iré al banco a sacar el resto de dinero que se estaba guardando para mi niña, es lo de sus estudios.

_ no te preocupes, mira lo que vamos a hacer, las dos se van conmigo, no toques el dinero de tu hija, déjalo allí si está a tu nombre él no podrá tocar eso, yo me voy a hacer cargo, vivirán en mi mansión, tu hija estudiará en los mejores colegios, así como sé que lo estaba haciendo aquí, dejaremos pasar él tiempo, el por curiosidad va a querer saber de ustedes y como tiene dinero puede pagar para que las busquen, saldremos del país y pagaré para que borren su salida,

_ sé que puede hacer eso?

_ con dinero todo se puede lo sabes,

_ y luego que vamos a hacer,

_ tu hija va a vengar la muerte de tu esposo, porque según lo que me cuentas, yo estoy seguro que ese tipo tuvo que ver con la muerte de Rafael,

Viviana volvió a llorar y es que de tanto pensar ella también había llegado a esa conclusión, pero pensó que nadie le iba a creer si decía eso

_ como va a hacer eso mi hija, no quiero que ella crezca con odio en su corazón, es una niña aún,

_ no creas que soy un monstruo que quiere usar a tu pequeña o algo así, pero si debes estar clara que ella escuchó todo y no va a olvidar, va a querer volver a este país a recuperar lo que es suyo y si resulta que es cierto lo de la muerte de Rafael, menos va a querer quedarse de brazos cruzados y yo voy a estar allí para apoyarla en todo

_ está bien, vámonos, dejemos pasar el tiempo que él crea que nos venció y cuando él menos lo piense le vamos a dar su merecido,

_ así es, la voy a querer como mi hija y va a tener todos los privilegios como si lo fuera, ambas tendrán todo, así como Rafael sé que las tenía, podrán disponer de lo mío, yo me encargaré de que la muerte de mi amigo no quede así,

_ Arthur, muchas gracias por todo, y tomo lo que me des a mí y a mi hija, solo tiene siete años y me dijo que ella entiende todo

_ lo ves, te lo dije, sé que ella va a volver aquí, pero primero vamos a prepararla, tú también debe prepararte, porque también volverás

_ pues entonces vamos, y que el tiempo sea nuestro aliado

_ que así sea, lo vamos a lograr.