Salcoany City 6:00 p.m. han pasado 10 meses.

En medio de un aguacero, un auto se dirige al hospital. Julia y Raúl se encuentran en la parte trasera.

Se escucha una notificación, Julia rápidamente toma su móvil para ver el contenido.

Lo primero que vio fueron (Raúl Greco y Austin Greco: 99.99% de compatibilidad)

El mundo de Julia se desmoronó en este preciso instante.

Desde aquella discusión con Ian, se ha tomado muy enserió todo lo relacionado con su esposo.

Se niega a creer que el hombre que siempre ha amado lo haya traicionado de esta manera.

Cada semana recibe información nueva y detallada, gracias a sus detectives. No puede creer lo que sus ojos están viendo.

Alan Greco (padre de Ian) no es el padre de Austin.

Solo faltaba esta prueba de ADN para que todas las piezas empiecen a encajar.

Denisse Lazzo, la madre de Austin, era la secretaria de Raúl cuando este era el CEO de la Corporación Greco. Ellos dos mantuvieron una relación clandestina.

Cuando Raúl se enteró de esto la mando al extranjero. Así evitar que Julia se entere de su traición.

Después de 8 años, regresó del extranjero con su hijo.

Para poder llevar el apellido Greco. Raúl amenazó a Alan con quitarle el apellido y todas las propiedades si este no aceptaba a Austin como su hijo.

Alan pensando en su pequeño hijo y su esposa. En las dificultades que les tocara vivir si no aceptaba.

No tuvo otra opción, sin embargo, esto lo llevó a destruir su imagen de hombre intachable.

Su esposa Mía nunca lo perdonó, siguieron juntos por el bien del pequeño Ian. Así fue hasta el día en que ambos fallecieron en ese terrible accidente.

La persona más interesada en que Ian y Austin se llevarán bien siempre fue Raúl.

Raúl siempre trato de que ellos dos se llevarán bien. La mayoría de las veces Mía se opuso.

Mía sabe que el niño no tiene la culpa, pero su hijo tampoco lo tenía.

"Julia, Julia, ¿qué pasa?"

La voz de Raúl la trajo de vuelta a la realidad.

Viendo el rostro de preocupación de su esposo, su ira estallo.

"¿No sientes remordimiento, cuando vez a mi nieto Ian de frente?"

Él observa como la mano de Julia tiembla, sin ninguna emoción en su rostro al preguntarle eso.

Sintió que algo andaba mal con ella, nunca le pregunta nada, sea de trabajo o de su vida privada. Siempre se ha mantenido alejada de los asuntos de su esposo.

"¿Qué quieres decir con eso?"

No pudo evitar preocuparse, es la primera vez que ella le habla en ese tono después de varias décadas de casados.

"¡¿Qué dice tu conciencia cuando mencionas el nombre de mi hijo?!"

La paciencia de Raúl se agota, porque no habla claro de una vez.

"Solo dilo"

Julia está por sufrir un ataque, la ira la está consumiendo.

"¡Tienes la cara tan dura en ver a mis nietos!, ¡tú eres el maldito que arrastró por el lodo el nombre de mi hijo!

¡Tú eres el padre de Austin!, ¡porque usaste a Alan en esto!"

Raúl queda en shock, nunca pensó que llegaría este día.

Al no responder, Julia estalla de rabia. Lo empieza a golpear con su bolso.

"¡Escoria!, ¡maldito!... ¡Te odio! ¡Te odio tanto!, ¡muérete!, ¡te odio!"

Trata de defenderse, le quita el bolso a Julia.

Ante esto ella lo empieza a golpear con el móvil.

"¡Julia!, ¡cálmate!"

El conductor no podía concentrarse debido a los gritos de atrás, junto con la lluvia.

Los gritos y los golpes no paran. En el momento en que cruzan el puente colgante, Raúl, al momento de detener a Julia, la golpea.

Ante esto se escuchan los gritos de la mujer. El conductor al momento de voltear a ver la situación.

Ahí terminan chocando con uno de los pilares del puente.

En el hospital de Salcoany, en sala vip.

Liliana se encuentra acostada con el pequeño Ian jr dormido, observa a Gina y Ian que se encuentran muy felices viendo dormir a los bebés.

Hay dos cunas, en cada uno se encuentra un bebé. En la mano llevan pequeñas pulseras: Alĺ Greco y Kadir Greco.

"Papi, tienen el mismo color de tu cabello"

Gina toca suavemente el cabello del bebé. Ian sonríe orgulloso ante el comentario de su hija.

Está por decir algo, justo en ese momento su móvil empieza a sonar.

"Sí, soy yo, ¿cómo?"

Lía vio el momento exacto que el semblante de su esposo cambió, se acerca a ella.

"Sucedió algo, no te asustes. Ahora vengo"

No le quería decir nada, pero la conoce bien y sabe que se molestara si no le cuenta.

"Con cuidado, aquí te esperamos"

Aún no sabe qué ha pasado, pero tiene un mal presentimiento.

Ian sale rápidamente de la sala.

Al salir entra Maya y Laura que venían llegando.

"Hola... ssh shh no hablen fuerte"

Gina les hace la señal para que hagan silencio, debido a que sus hermanos duermen.

"Está bien, Gina, vamos por galletas. ¿Vienes?"

Laura sintió que algo aldaba mal, por ello se lleva a Gina. Lía le da las gracias.

"¿cómo te sientes?, vi a Ian muy apurado, ¿pasó algo?"

Maya se acerca hablando en tono bajo.

"No lo sé, ¿puedes averiguar con Finn?"

Durante este tiempo, "the Shadow" se ha vuelto más fuerte y eficiente.

Todas ellas están más capacitadas para cumplir con la misión que se les asigne.

"Cuenta con ello, espérame. No tardaré mucho"

Maya sale afuera para hacer algunas llamadas, para no despertar a los bebés.

Lía trata de estar lo más tranquila posible, pero los nervios no la dejan.

Acaricia las mejillas del pequeño Ian.

Al momento de hacer eso siente un dolor punzante en su abdomen. Debido a la cesárea.

Se muerde los labios por el dolor.

Solo pasan 30 minutos, Maya entra sin tocar la puerta.

"Los abuelos de Ian tuvieron un accidente, están en estado crítico en este hospital"

Ella no esperaba eso, ahora entiendo la preocupación de su esposo.

"Verifica si fue realmente un accidente, me informas de inmediato"

Solo espera que sea solo un accidente.

"Sí, me pongo en marcha ahora"

Ella sale dejando a Lía sola con sus hijos.

Después de varias horas, Ian es guiado por uno de los médicos a la morgue del hospital.

Acompañado por Finn y César entra al lugar.

Finn levanta la sábana blanca que cubre el cuerpo. Raúl Greco se encuentra sin vida.

Todos salen para dejar a Ian solo con su abuelo.

"No sé qué decirte, espero que tengas un buen viaje. A todos los toca un ajuste de cuentas algún día, por desgracia hoy te toco a ti. Espero que mi padre te perdone"

Ian observa detenidamente el cadáver. La persona que amo y respeto tanto se encuentra en este frío lugar, lo termino decepcionando la mayoría de las veces, pero aun así comparten la misma sangre, sobre todo le guarda cariño.

Asiente en señal que efectivamente se trata de su abuelo.

Sale del lugar, al final llega a la sala de espera.

La luz sigue prendida, Julia se encuentra en el quirófano.

Me pregunto ¿por qué paso esto?, se supone que debo estar muy feliz por la llegada de mis hijos, tuve la dicha de ser padre nuevamente, solamente ayer sentí que volví a nacer con mis hijos... ahora me encuentro en la espera de noticias de mi abuela.

Ya no tengo idea de lo que siento, estoy en medio de la tristeza y la felicidad.

Por un lado, están mis hijos y por otro mis abuelos. No fueron los mejores abuelos, pero me pregunto: ¿hay alguien que los es?

Yo no soy quién para condenar a nadie.

Solo siento un gran vacío en mi pecho. No tengo idea de que significa este sentimiento.

Sentado en la silla con la mirada fija en la puerta. Las manecillas del reloj tardan una eternidad en avanzar.

Al final se abre la bendita puerta, se acerca el médico. Ian se levanta y se acerca.

"Doctor, ¿cómo está?"

Quitándose la mascarilla, niega con la cabeza.

"Logramos estabilizar a la paciente, pero su estado es muy crítico, si le doy mi opinión sincera. No creo que pase la noche, pero esa es la verdad"

Ian se vuelve a sentar, no lo podía creer. Esta consiente que esto pasará tarde o temprano, sin embargo, no pensó que los dos se fueran a ir al mismo tiempo.

Llevo mucho tiempo sin ver a mi familia, mis bebés y mi esposa me necesitan, debo ser fuerte para ellos. Ellos son todo lo que me queda, no pensé en volver a vivir una perdida doble como aquella vez con mis padres. Con forma me voy acercando, desde aquí afuera se escuchan los llantos de mis bebés.

Lo primero que veo al abrir la puerta es a mi esposa alimentando a los bebés.

Liliana sentada observa llegar a su esposo cabizbajo.

Se acerca con la mirada perdida a ella.

"Cariño, ¿qué pasa?"

Ian se sienta en la silla y termina colocando su cabeza a un lado de la cama.

Ella le acaricia el cabello suavemente, dándole consuelo.

Siento una gran roca aplastando mi pecho al verte así, no sé cómo ayudarte, esposo mío.

"El abuelo falleció en el accidente y los médicos me dicen que la abuela no pasará de esta noche"

Al final Ian le da una respuesta, esto a Liliana le cayó como un balde de agua fría.

No pensó que fuera algo tan grave.

"Lo siento mucho. No tengo palabras para hacerte sentir mejor, pero, aquí estamos contigo siempre, nuestros hijos y yo no te abandonaremos"

Se hace un silencio total. Pasan varias horas.

Ian se queda en esa posición por mucho tiempo.

Su mente se quedó en blanco debido a la repentina noticia sobre Julia. No está preparado para algo así, en realidad nadie lo está, pero no hay marcha atrás, hay que seguir avanzando.

"Voy a ver como sigue la abuela y checar como va César con los trámites que se necesitan"

Me gustaría quedarme todo el tiempo en tus brazos, el lugar donde encuentro paz, pero necesito continuar por ti y por nuestros hijos.

"Cuenta conmigo para todo, aunque estoy guardando reposo, mi equipo está a tu disposición... aquí te esperamos"

Ian sabe que cuenta con el apoyo de su esposa.

"Lo sé cariño. Los amo a todos"

Me siento terrible de ver como sufres, me siento inútil verte en este estado. Yo confío en ti, tú puedes con esto, esposo mío.

Ian jr y ambos gemelos están durmiendo por suerte.

Toc toc

"Adelante"

La persona que viene llegando es Maya, seguida por la doctora Claudia y Ben el asistente de Finn empujando una silla de ruedas.

"Esperen afuera un momento"

Maya vio la confusión en el rostro de Lía, por ello sacó a todos para quedar a solas.

"¿De qué se trata?"

Estoy segura de que tengo que ir a algún sitio, pero no sé adonde.

"Julia despertó. Te ha estado llamando, conociéndote, creo que no te vas a negar. Por ello traje a la doctora conmigo. Míriam y Rita están afuera y ellas se quedarán cuidando de los bebés"

No entiendo por qué Julia quiere verme. No somos tan cercanas. Aun así, debo ir para encontrar respuestas. Si la doctora está aquí no habrá ningún problema.

"Bien, que pasen para que me ayuden"

Ella sabía que Lía no se negará, por ello ya venía preparada.

"Pasen y ayuden a la Sra. Greco. Con mucho cuidado"

Con la ayuda de Claudia y Ben con extremo cuidado, colocan a Lía en la silla.

Ben le coloca una manta en sus piernas debido a que solo lleva la bata del hospital. La empieza a empujar en dirección a la sala de Julia.

A lo lejos puedo ver a mi esposo Ian esperando afuera de la sala de Julia.

"¿Te sientes bien?, ¿quieres ir?"

Llega rápido al lado de su esposa y se pone en cuclillas. Para Ian, la salud de su esposa está primero.

"Sí, no te preocupes. Debo y quiero ir"

Al ver que ella está decidida, se levanta del suelo y empuja la silla. La deja muy cerca de la cama de Julia.

"Voy a estar afuera todo el tiempo, llámame si me necesitas"

Lo primero que veo al entrar a una mujer con los ojos cerrados. Tomo su mano y ahí la veo abrir los ojos. Con gran dificultad levanta la otra mano y se quita el respirador.

"Lía... sí, ¿eres tú?"

Julia no pensó que volvería a ver a Liliana.

"Aquí estoy, trata de estar tranquila. No te esfuerces, pronto vas a estar bien"

No pudo evitar sentirse mal por ella.

"No, yo sé que... ya no me queda tiempo"

Ella mejor que nadie sabe que su tiempo se está agotando.

"No digas eso, vas a estar bien y vas a conocer a tus nietos. Ali y Kadir esperan conocer a su abuela"

Ella aún no conoce a los gemelos. "Yo sé que no... pero antes de irme, te pido perdón... perdóname. Lía te he lastimado... necesito contarte algo muy importante antes..."

Por alguna razón tengo miedo, miedo de lo que Julia está por decir.

Se nota que se está esforzando para decirlo.

Ella aprieta mi mano con fuerza.

"No es necesario que sigas. Yo también, me disculpo contigo, siempre he batallado para sostener una conversación con alguien, así que de mi parte no hay problema"

Ya no quiero que continúe con esto.

"No. Tienes que saberlo... no me quiero llevar esto. A mí también me hubiera gustado que alguien me ... Hubiese dicho la verdad"

Liliana, sé que lo estoy por decir te va a romper el corazón. Prefiero que sea así, la verdad duele, pero la mentira mata, así como la mentira y el engaño que acabaron conmigo.

"Gina no es hija de Ian, Raúl y Austin cambiaron las pruebas... él lo encubrió en todo porque Austin es su hijo"

Lo que estoy escuchando no puede ser real, esto tiene que ser una pesadilla.

Siento la garganta seca, no sé qué decir.

"¡¿Cómo es posible?!... no puede ser verdad"

No, no soy capaz de mantener la cordura, esto definitivamente es una pesadilla. Siento un dolor terrible en el pecho. Me niego a aceptar esto.

"Sí, lo es... soy culpable de no investigar antes, confiaba tanto en mi esposo, lo amaba tanto que no pude ver más allá. Me mantuve en mi propia burbuja..."

No sé por qué me lo dices a mí, que se supone que hago con esto. Se lo contaré a Ian o no.

Será que ya lo sabe. Pero si no es así, estoy segura de que esto lo lastimara mucho.

"Lía por favor cuida de mis nietos... no abandones a Ian. Tú sabrás qué hacer con lo que te dije...

Lía tiene la cabeza baja, las lágrimas se hacen presente. En ese momento el sonido de la máquina empieza a sonar, dando a entender que la presión está bajando muy rápido.

Desesperada presiona el botón de emergencia.

La presión sigue bajando. Afuera ven como varios médicos y asistentes corren a la sala de Julia.

Ian rápidamente abre la puerta para ver como está su esposa.

"Señores, por favor, dejemos hacer esto" le insiste el asistente.

"¡No, ayúdela... tienen que salvarla!"

Lía se aferra a los brazos de su esposo.

"Por favor Lía, vamos a salir de aquí... vamos"

La impotencia que siento ahora no se compara con nada. Ver a mi esposa así me hace sentir terrible. Veo como se muerde los labios por el dolor.

Estoy seguro de que sé trata de la incisión.

Voy empujando la silla de ruedas para sacarla de aquí, los médicos están tratando de reanimar a la abuela, pero, yo sé que se ha ido y no hay nada que yo pueda hacer.

Puedo notar la mirada perdida en Lía, su mente no se encuentra aquí. Estoy seguro de que no se trata de la abuela.

Debido a que la última vez trato mal a Gina. ¿La abuela le habrá dicho algo?, si ese el caso, que pudo ser para ponerla así.

"Señora, ¿siente algún dolor?, regresemos a su sala"

Ben y Claudia se acercan viendo el semblante de Lía.

"Cariño ve a descansar, ahora voy con ustedes. Maya ve con ella"

Doy gracias que la doctora Claudia estaba afuera, me preocupa Lía.

No me responde solo asiente, que le pudo decir la abuela para dejarla en este estado.

Todos se retiran a llevar a Liliana, César y Finn se quedan con él.

"Lo sentimos, señor Greco, la paciente acaba de fallecer" informa el médico.

Ya lo sabía, pero no es agradable escucharlo.

"Entiendo, César arregla todo lo más rápido posible. Me retiro"

Él se retira del lugar.

"¿Qué habrá pasado?, la cuñada se ve consternada y el jefe también" Finn no pudo evitar preguntar.

"¿Puedes dejar el chisme aun lado por hoy?, no es el momento. Ahora me voy, porque yo si tengo cosas que hacer" César no pudo evitar regañar a Finn.

Del grupo de amigos, el médico es el más chismoso y casanova.

Ian, sin decir nada se acomoda en el sillón a un lado de la cama de Lía, dándole la espalda.

Ella se queda en silencio, hay momento que es mejor guardar silenció.

Kadir uno de los bebés, se despierta y empieza a llorar.

Solo estaban ellos dos, Ian se levanta y toma con cuidado al bebé.

"No llores hijo, aquí está tu papá... papá no permitirá que nadie te lastime"

Se sienta en el sillón con Kadir en brazos, toma el biberón y lo empieza a alimentar.

Lía sentada aún lado pudo escuchar su voz quebrarse, él se está aguantando las ganas de llorar.

En poco tiempo el bebé deja de llorar.

Puedo ver cuanto amas a nuestros hijos, me pregunto cuál será tu reacción al contarte sobre que Gina no es tu hija.

Porque para mí nada cambia, Gina siempre es y será mi pequeña, ella es mi hija. Desde la primera vez que vi y me dijo mami.

A mí no me importa que mi sangre no corra por sus venas, que sea hija de Sofía y Austin no la define como persona, ella es mi hija... es mi niña y la voy a educar y criar para que sea alguien de bien.

Gina no debe cargar por los pecados de otros, tampoco por los míos. Ningún inocente debería de cargar con los pecados de sus progenitores.

"Lía, ¿cariño que pasa?... dime que ocurre"

Cuando levanta la mirada ve a Ian con el bebé en brazo a su lado, ella estaba perdida en sus pensamientos. No se dio cuenta de que estaba llorando.

Toma con fuerza la mano de su esposo.

"Todo está bien si estamos juntos"

Esa noche se van a la villa Greco.

Míriam y Laura son las encargadas de los bebés. Solo se llevaron a Ben el asistente de Finn.

No pueden confiar a sus hijos a otros.

Después de dos días, Ian vestido de traje negro con gafas oscuras se encuentra sosteniendo dos urnas de madera con los restos de Julia y Raúl.

Ambos fueron colocados en el columbario de la antigua mansión Greco, donde descansan toda la familia Greco.

Lía quería ir, pero Ian no lo permitió. La doctora y Maya se quedaron con ella en villa.

De alguna manera estas dos urnas pesan demasiado para mí, aún no quiero aceptar que ambos se han ido.

Ahora que la he dejado, siento un gran vacío, aun con los presentes aquí, siento como una mano toma la mía.

"Papi, ¿vamos con mis hermanos?"

Es mi pequeña la que sostiene mi mano y me hace volver a la realidad. Mis hijos y mi esposa esperan por mí.

"Así es, solo nos despedimos y nos vamos"

Él se inclina para quedar a la altura con Gina.

A la ceremonia asistieron los más cercanos a la familia, y los que fueron compañeros en la vida milicia de Raúl.