En una escuela común se encontraba una niña que parecía de tan solo seis años, la niña tenía en su cabeza orejas de... ¿de gato?, ¿Y una cola de perro también?, Bueno... Su cabello era color azul y en el medio hasta el final tenía un color verde agua, aquella niña se veía preocupada, tan preocupada que hasta murmuraba cosas en voz alta.

—tranquila, nada malo ocurrirá, piensa en positivo—murmuro aquella ojisrosa. Pero luego de pensar un poco entrecerró los ojos—, ositivamente algo malo ocurrirá.

La ojisrosas dejo de lado sus pensamiento negativos y solo siguió su camino, pero se detuvo un momento al darse cuenta que no sabe donde está su aula, ella no sabía por una simple razón: al inscribirse los demás no la trataban con propiedad al saber que especie es.

—he... Me perdí—dijo desanimada.

¿Debería pedirle indicaciones a alguien?.

Pensó, pero luego de pensarlo mejor comenzó a plantearse más preguntas que hacían quedar en duda aquella idea.

¿Pero si me preguntan que soy?, ¿pensaran que sólo soy un maldito fenómeno? ¡Ag!.

la cara nerviosa de la niña cambio bruscamente al soltar un gran suspiro.  Miro el suelo un rato e inalo y exalo para calmarse un poco.

Devo pensar menos eso me hace daño.

Los ojos de la chica se posaron en dos figuras. Dos niñas más que estaban hablando entre ellas tranquilamente.

—tal vez... ¡No! Debo hacerlo—y con valor comenzó a acercarse a ellas.

Ojos negros como la noche, su cabello rosa con un poco de color celeste en el medio, arriba orejas de gato y para lucir más linda su cabello estaba sueltos sin la necesidad de atarlo con una coleta, el típico uniforme escolar de colores blanco y azul mientras mostrando una cola de gato color rosa. Se veía muy hermosa y amable pero... las apariencias no siempre importan.

Ojos azules fuertes, hasta se podrían confundir con un negro oscuro, cabello rosa muy igual al de la otra chica con una diferencia de que un poco más claro y en el medio tiene un color crema, rara combinación, en su cabeza tenía orejas de oso, también tenía una cola de la misma especie que se asomaba en el uniforme de la escuela, su uniforme sólo era un conjunto de azul oscuro con blanco junto con una falda igual, no mostraba las piernas por unos pantalones que la cubrían, Era muy diferente a la otra chica por: sus cabellos, especie, uniforme y ojos. Pero había ciertas cosas que las hacían iguales.

La de ojisrosas aún dudaba de si preguntar o no. Pero se armó de valor para tocar el hombro de la de ojos oscuros para llamar su atención.

—¿Se te ofrece algo?—pregunto la de ojos oscuro mientras hacia una sonrisa forzada que la ojisrosa no noto.

—h-he si, me e perdido. Soy n-nueva y...—la ojisrosa sacudió su cabeza al darse cuenta que solo balbuceaba cosas que ni ella entendía—Directo al grano, ¿No saben donde está el salón 1B?.

La cara de la chica de ojos oscuros  cambio a una cara de asco que hizo que la ojisrosas baje un poco sus orejas.

—¡¿eres uno de esos monstruos?!—grito con enojo mientras la otra chica de ojos azules miraba a la ojirosas con la misma cara de enojo que su compañera. Aquellos rostros hicieron dejar en completo silencio a la peliverde por unos largos minutos.

—Creo que si—contesto apartando la mirada y bajado ya completamente sus orejas.

La mirada oscura de la chica no cambio hasta que miro a la de ojos azules la cual asintió con la cabeza. Se notaba que planeaban algo pero la ojirosas no pudo ver esas acciones ya que su mirada aún seguía apartada mientras se mostraba algunos sentimientos en ella.

Enojo y tristeza.

Enojo.

Por la clase de persona que es.

Y triste.

Por la clase de persona que no pudo ser.

La ojisrosas intentaba no llorar, era muy sensible con esas clases de temas pero las siguientes palabras de la de ojos oscuros se lo dificultó demaciado.

—por cierto, ¿como estás con el tema de tu madre?.

La de ojos rosas estaba sorprendida. Sin palabras, le diriguió la mirada a la chica con los ojos muy abiertos.

—veo que ya sabes de lo que habló.

La ojisrosas no reaccionaba, se quedaba parada con su miranda clavada en la chica. Su cabello de colores verde y azul comenzaron a tornarse oscuros. Con pasos lentos retrocedió para alejarse de ella pero mientras retrocedía, la chica caminaba con pasos lentos hacia ella. Los pasos de la ojirosas se detuvieron al sentir el tacto del suelo. Un fuerte dolor se hizo presente en su espalda e hizo lo posible para no gritar o llorar del dolor.

—eres sólo un error, no debiste nacer. Los de tu especie sólo son un estorbo para nosotros, gente a tenido que morir por su maldita culpa. ¡Tu madre no tubo que morir!, ¡Tu debiste de estar en su lugar!, ¡Tú tenías que morir en su maldito vientre!—grito molesta sin importarle para nada el estado de vulnerabilidad en el que se encontraba la peliverde.

Esos ojos color rosa se comenzaron a inundar de agua salada que se desbordaban por sus mejillas. Ya se le eran costumbre estas cosas a la pequeña peliverde pero por más veces que pasen sigue doliendo.

—¡Perdón!, S-se que todo es mi culpa y-y lo tengo en cuenta—y la niña se cambió de posición para estar en una fetal—, ¡Tengo conciencia de ello, lo tengo!—continúa diciendo mientras lloraba más fuerte.

Sólo un silencio se hizo presente. La chica de ojos oscuros no estaba para nada convencida o satisfecha. Su semblante se empezó a poner más frío y serio.

—un perdón no arregla nada—dijo y levantó una de sus piernas para estar dispuesta a golpearla con la misma a aquella inofensiva peliverde.

Lo que no sabían las tres chicas presentes, era que había una persona mirando toda la escena desde el principio. En un rápido movimiento, el personaje misterioso se pone en el medio y se quita la capucha, al quitarse la capucha se pudo comprobar que era una mujer. Sus ojos eran raros, de diferente color; el derecho rojo lo mas parecido a sangre y el izquierdo blanco como las mismas nubes o como lo que muchos llamaban "la nada", su cabello era azabache y terminaba en sus hombros, arriba a demás de tener sus orejas de perro—que no eran muy notarias— había unos cuernos raramente del mismo color que sus ojos pero con la única diferencia de que los colores están en distintos lados. Lo que llevaba puesto era un suéter suelto y un poco ancho junto con unos pantalones, se podía ver su cola de perro y unas especie de alas en la parte de atrás colores negras las cuales estaban extendidas muy alto.

—¡Alejense de ella!—ordeno aquella azabache  y sus dientes se asomaron. Aunque no eran demasiado filosos... Una mordida con ellos dolería demasiado.

—¡Corre!, ¡Es uno de esos fenómenos!—grito la de ojos azules oscuros intentando que la de ojos negros reaccione y comienze a correr lo cual funcionó porque la de ojos oscuros grito desesperadamente y al igual que la de ojos azules sus piernas empezaron a moverse automáticamente para salir de allí a las corridas.

La chica de ojos extraños comenzaba a reír para que las chicas se asusten y corran más rápido para irse de ese lugar pronto y tal como lo pensó, si funciono. Al no ver a las abusivas, la de ojos extraños miro a la ojisrosas la cual estaba igual que antes, llorando en el suelo con varias lágrimas resbalando por sus mejillas hasta caer al suelo pero está vez estaba temblando.

¿La abre asustado?.

Pensó con sorpresa aquella azabache. No sé fijo el estado tan sensible en el que se encontraba la ojisrosa por eso se sorprendió al verla.

¡Da igual!, ¿Desde cuándo me importa lo que los otros piensan?.

Y a pasos lentos se acerco a ella.

—oye, ¿Estás bien?—pregunto y se agachó para estar cerca de la peliverde.

—e-es m-mi culpa—siguió diciendo la contraria, aún con lágrimas en los ojos—, perdón.

—hey, no es tu culpa. No te sofoques a-

—¡Si es mi culpa!—grito y se sentó de rodillas mirando a la azabache—, ¡Ella no hubiera terminado así si yo no hubiera nacido!.

—tranquila, no pierdas el control.

Esas palabras hicieron poner muy estresada a la chica de las de ojos rosas. Recuerdos le pasaban por su mente, recuerdos horribles, tristes y terroríficos que dejo aún lado, recuerdos que fueron la razón de sus llantos por la noche, los culpables que hacían creer que ella era la culpable cuando era la víctima de esos recuerdos. En ese momento, en las manos de la ojisrosas comenzaron a salir unas garras filosas y sus orejas se hicieron más peludas y cortas.

—no dejes que te domine el miedo y la tristeza—seguía hablando la azabache intentando así que la contraria deje de sentirse tan estresada o alterada.

La ojisrosas con cada palabra que decía aquella chica solo la hacia sentir peor haciendo que por último salgan unas alas parecidas a las de un murciélago pero con unas púas en los costados dónde terminan. Eso ya le agotó la paciencia a la de ojos extraños. Su cara cambio a una de enojo y le fue inevitable gritarle.

—¡¿Acaso quieres morir?!.

La ojisrosas solo bajo sus orejas, cola y alas para quedar completamente en silencio. Un acto que sorprendió a la azabache y dejo sin palabras. La azabache se sentó a 2 centímetros de distancia de la peliverde y soltó un gran bocado de aire.

—yo... Lo siento—y al decir eso se acerca un poco más a la ojisrosas quedando ya a 1 centímetro de distancia—. Solo... Es que... No quiero que nadie pase por lo que yo pasé—siguió hablando mientras formaba una abrazo—lo siento, no era mi intención hacerte sentir así.

Ya no había centimetros, la distancia ya no existía. Aquel fue un acto que sorprendió demaciado a la ojisrosas. Las palabras de la chica desconocida la hacían sentir triste pero protegida al mismo tiempo. Sin saber que hacer, solo correspondió el abrazo y apoyo su cabeza en el hombro de la azabache sintiéndose más aliviada.

Sus garras desaparecieron junto con sus alas, el color de su cabello volvió a su color azul con verde agua mientras que sus orejas volvieron a ser grandes y menos peludas. La azabache al ver que la ojisrosas estaba calmada se levantó y extendió su mano para ayudar a su contraria para que este de pie, la cual acepto la ayuda y se levantó con un poco de dificultad pero al menos estaba bien. Al estar de pie, los ojos rosas se clavaron en los ojos de distinto color de la azabache. Nunca había visto algo así, pero al verlos le parecieron fantásticos. En cambio, la azabache al ver los ojos de la contraria se sorprendió. Sus ojos eran de distinto color, el derecho era color rojo y el izquierdo de su color natural, rosa.

se ve que en la transformación sus ojos cambiaron de color. Un minuto más y perdía el control.

—¿Pasa algo?—pregunto la ojisrosas con incomodidad. Sacando de sus pensamientos a la de ojos extraños.

Cuando la azabache iba a abrir la boca para responder el ruido agudo del timbre se escuchó por todo el pasillo sobresaltado a la ojisrosas que pego un pequeño brinco.

—olvídalo—dijo en un suspiro y se volvió a poner la capucha del abrigo que tenía. Miro a la contraria por unos segundos para luego hacerle una seña para que la siga.

(...)

La chica de capucha se detuvo y se dispuso a mirar a los ojos a su acompañante lo cual empezó a poner nerviosa a la contraria al pensar que tenía algo malo. Al mirarla, la encapuchada noto que los ojos de la chica volvieron a la normalidad. El ojo rojo ya no estaba, en lugar estaba un color rosa. La azabache solo aparto la mirada y se dirigió a la puerta del salón y la abrió mostrando a un hombre. Aquel hombre parecía tener unos 35 años. Su cabello era rubio con un mechón verde, sus orejas eran las de un oso, usaba lentes y uniforme que parecía ser los que usan los profesores.

La expresión del rostro de aquel hombre no parecía ser de alegría.

—miren nada más quien llegó tarde—anuncio con una sonrisa falsa—, ya encerio, ¿Cuál es la escusa de hoy?—pregunto mirando a la encapuchada.

—Lizi y Luz molestaron a...—y la azabache se detuvo para mira a la ojisrosas—esta indefensa alma—apunta a su compañera—por eso exijo justicia.

El profesor solo miraba a la chica con una ceja levantada y la ojisrosas con una cara confusa.

—propongo—y en su boca se formó una sonrisa—¡Una ejecución!.

—... Luan, ve a sentarte y deja que ella hablé—ordeno mirando a la ojisrosas.

—como sea—murmuro con poco interés mientras se retiraba.

La recién nombrada solo se fue, dejando sola a la ojisrosas la cual comenzó a tener nervios.

—vamos pasa, no seas tímida y cuéntanos lo que pasó—animo el profesor con una sonrisa.

La ojisrosas con un poco de confianza se adentro al aula y noto que no solo eran ella, el profesor y la tal "Luan", en uno de los pupitres delanteros se encontraban sentados dos chicos más, los cuales la miraban con una sonrisa. Bueno... Solo uno de ellos.

El primero tenía el cabello hasta la nuca y en la parte frontal lo tenía más largo, su ojo era de un color raro, era como rojo o marrón pero solo se le veía el izquierdo ya que el derecho lo cubría con la parte larga del cabello, el color del cabello lo tenía de un color muy raro que la peliverde nunca vio; rosa con puntas celeste y mechón amarillo. No puede faltar sus orejas de conejo y su cola de... ¿Zorro?, Por aquel color tan raro la ojisrosas no identificó bien que era, puede ser un zorro o hasta un lobo, quien sabe pero lo más interesante era el color fucsia de esa cola.

El segundo chico tenía el pelo corto y sus ojos eran de una forma muy circular, eran de un color con apariencia morada pero un poco más oscuros, sus orejas parecían ser que eran de zorro y su cola de...

¿Galagidea?, especie nocturna que son de África, es muy raro verlo en este lugar y más de día.

Pensó la ojisrosas, pero otra cosa que le pareció raro era su color de pelaje, era de color verde oscuro, en las puntas de su cabello naranja oscuro, la cola que tanto le sorprendió ver era de color crema con líneas rojas, otra cosa que le llamo la atención a la ojisrosa fue el tapabocas negro que usaba.

—bien, ahora preséntate y dinos cuál es tu nombre, tu clase y si quieres, tu especie también—dijo el profesor sacando a la chica de sus pensamientos.

—bueno... Mi nombre es Lily y... Soy de la clase 1B—se presento Lily con un sonrrojo. No era de presentarse en sus escuelas y no estaba segura si está era la segunda vez que se presentaba luego de mucho tiempo.

—bien, en ese caso, bienvenida al salon 1B—dijo con una sonrisa cálida el rubio.

—¿Este es mi salon?—pregunto confusa a lo cual recibió un asentimiento de cabeza como respuesta—oh...—y en su cara apareció una sonrisa tierna—ojala ser una buena compañera y alumna en este lugar.

—seguro lo serás Lily, mi nombre es Fede y ellos son Sebas—apunto al pelirosa—, Will—apunta al de tapaboca—y Luan que ya la conoces—y luego de apunta por último a la azabache, miro a Lily la cual saluda a los otros dos chicos.

—Tengo una duda—dijo Lily mirando al profesor.

—¿Cuál?—pregunto el contrario con curiosidad.

—¿Aquí critican a la gente por la especie? O... ¿Por la clase de persona que es y fue?.

El silencio no se pudo evitar hacerse presente. Fede por unos minutos se quedó en completo silencio pero luego termino soltando un gran suspiro.

—la verdad... Si—contesto el rubio apartando la mirada.

Los tres menores apartaron la mirada y bajaron sus orejas junto con sus colas, pero Fede. Por otro lado. Sonrió.

—pero en este lugar siempre serás bienvenida y te apoyaremos cuando necesites ayuda. Seas lo que seas, siempre vamos a estar ahí para ti.

—gracias—agradeció Lily con una sonrisa y volvió a elevar sus orejas—, y... Sobre mi especie... Soy un Catperr—confeso con una sonrisa a medias.

—tu especie es muy común, pdero no se ven mucho por que... Ya sabes, la reglas del odio mutuo que se tienen los felinos y caninos—comento sonriendo.

—si...

—¿Pero tu mamá es felina y tu papa canino? ¿o al revés?.

—no, mi madre era un catperr, mi abuela felina y abuelo canino, pero... mi padre es... Un demonio.

Todo el aula se inundó de silencio

No se escuchaba ni un ruido, ni siquiera una mosca. Lily creyó que así seguiría todo y estaba a punto de hablar pero por fin el silencio se acabó.

—¡¡¡SIIII UNA NUEVA EN EL GRUPO!!!—grito el pilirosa, levantó su asiento y lo lanzó  pero le terminó golpeando a Will—¿y a ese que le pasó?—pregunto mirando al de tapabocas en el suelo y adolorido.

—eres un idiota—lo regaño el rubio apareciendo repentinamente atrás del pelirosa para luego golpearlo en la cabeza.

—p-pero ¿cómo es que?—pregunto Lily super confundía al ver cómo repentinamente el rubio estaba parado cerca de Sebas siendo que hace unos segundos estaba junto a ella.

—un mago no revela sus secretos—fue lo único que recibió como respuesta de parte del rubio.

—es un hechizo de teletransportación—confeso Sebas frotando con su mano la parte donde fue golpeado.

—wow, ¡Amo este lugar!—exclamo Lily emocionada mientras sonreía.

Fede se quedo un rato en silenció al escuchar el timbre de la escuela haciendo eco por todos lados.

—vallan al descanso y luego vuelvan—ordeno mientras caminaba hacia su escritorio, pero detuvo sus pasos para mirar al pelirosa—y Sebas, ¡No te metas al baño de mujeres!—grito enojado.

—¿Disculpa?, yo soy un ciudadano y estudiante responsable, nunca aria tal cosa que involucra una cosa tan per-

—sólo no cometas una locura—y sus pasos siguieron su camino.

(...)

Habían unos chicos sentados en una banca con una vista muy buena del exterior del lugar, parecía que estaban en una clase de terraza.

—¿Crees que quiera ser nuestra amiga?, Se ve de confianza.

—habla por ti. Hasta el más mínimo demuestro de confianza te matara—contesto fría una azabache que tenia la mirada perdida.

—no seas asi y si eso es verdad, ¿Por qué somos amigos?.

—literalmente no quería ser tu amiga, pero me habías dejado sin opciones.

—por la fuerza de la amistad—dijo el pelirosa y se aferro de la parte donde tenía ubicado su corazón en una pose exagerada.

—no, en realidad fue porque me seguiste a mi casa y el mismo día a las 3 de la mañana comenzaste a lanzar rocas a mi ventana la cual aún sigue rota—sus ojos se clavaron en el pelirosa para dedicarle una mirada fulminante—solo para seguir repitiendo: "¿Podemos ser amigos?".

—ay si, que lindos recuerdos—dijo para sacarse una lágrima falsa.

La chica con enojo solo aparto la mirada para mirar al otro presente—¿Qué piensas al respecto Will?—pregunto solo se le quedo observando al recién nombrado que escribia en un papel para luego extenderselo a la azabache la cual no duda en tomar el papel y empezar a leerlo en voz alta—"Mi opinión es que tienes miedo de que nos pase algo y que no quieres admitir que no hay alma tan pura como Lily". ¡Eso no es verdad!—grito y miro a Will con una mirada furiosa.

El peliverde solo rodó los ojos y le arrebato el papel a la azabache para escribir en el y dárselo de nuevo a la chica.

—"Aunque luego digas lo contrario, sabes perfectamente que es verdad, pd:Sebas también me siguió a mi casa y mi madre le dio con la escoba pensando que me estaba acosando y era un pervertido jaja".

—lo malo es que la mamá de Will golpea super fuerte y después se le unió su abuela y todas las otras madres del barrio—menciono Sebas recordando aquel momento con una cara de horror.

—hicieron lo correcto.

Will asintió con la cabeza haciendo que el pelirosa haga una mueca.

—y a lo que escribiste, es cierto y estoy segura que no hay persona tan buena, ni yo me considero una buena persona pero se que sólo se quiere ganar nuestra confianza para luego atacarnos por la espalda.

Will con cierto enojo, le arrebato el papel a Luan para escribir otra cosa y se lo da a la azabache nuevamente.

—"Nadie es bueno en su punto de vista, tu te consideras mala persona por las cosas que cometiste en el pasado y por ser así, pero tu no eres mala persona por los errores que cometiste, te vuelves mala persona cuando no te arrepientes de ellos" Deberías ser poeta.

—razón no te falta—afirmo Sebas.

El peliverde fulminó con la mirada a los otros dos y apunto de nuevo el papel.

—bien, bien, pero hablando encerió, ¿Tu que sabes de ella?, ¿La conoces?, ¿Sabes lo que es?, no sabes nada de ella, y además, no sabes su forma de pensar, no sabes de lo que piensa o quiere hacer.

El peliverde le arrebato el papel a la azabache y escribe rápidamente en el para dárselo desesperadamente a la chica.

—hey, más lento que si leo quiero leer algo que no este mal escrito—la azabache tomo entre sus manos el papel y volvió a leerlo—"tu también no la conoces y no sabes su forma de pensar. Tal vez ella no se considera buena, tal vez ni siquiera se da cuenta lo amable que es, tal vez piensa igual que tu. Sabes perfectamente que les pasa a los Nekos que se juntan con uno de las tierras de Demonios o Ángeles y más si de su vientre hay una criatura inocente involucrada en toda esa regla y castigos, sabes perfectamente lo que se siente liviar con ese peso de culpa. Los niños son separados de su madre o padre y los ven morir en su maldita cara y el/a de las otras tierras sólo se aparta de su hijo sin llevar ningún castigo pero esta con la orden de que nunca vuelva a las tierras de los Nekos". ¿A qué quieres llegar con todo esto?—el de tapabocas le apunta el papel haciendo que la chica lo mire de nuevo—"Pero sabiendo todo eso la pregunta es, ¿Por qué ella no está de igual forma?, puede que nos ataque por la espalda, pero también puede ser que sólo quiera sentir el amor de un ser querido y tener a alguien importante en su vida como un amigo"—la azabache solo suspiro frustrada—. Ag, bien lo tendré en cuenta, pero no dije que si—y su mirada se clava en Will el cual tenía una expresión feliz.

-—¿Entonces puede ser bienvenida al grupo?—pregunto Sebas feliz.

—no dije eso, sólo dije que puede ser su amiga pero no dije que puede ser parte del grupo—contesto enojada.

—¿Su? ¿No querrás decir nuestra?—pregunto confundido.

—no, va a hacer su amiga, no mía, no quiero a nadie como amiga, tres ya es un número muy alto.

—¿y uno ya no lo era?.

—eso es diferente.

—es lo mismo.

—hola, perdón por interrumpir p-pero-

—¿tu que haces aquí?—pregunto enojada al ver la recién presente del lugar.

—perdón, encerio no quise interrumpir, pero-

—pero lo hiciste—le interrumpió la azabache apartando la mirada.

—pe-perdón, encerio.

—tranquila, Luan ya es así, no te preocupes—dijo Sebas con una sonrisa.

—esta bien... Pero y-yo quería saber s-si—la ojisrosas al sentir la mirada de Luan en ella no pudo evitar ponerse nerviosa y sentir temor al soltar alguna palabra que no debe—he... Olvidenló, creo que a nadie le importa—finalizo. Estaba a apunto de irse pero el pelirosa detuvo sus pasos.

—espera, ¿Qué hay en esa bolsa? Por curiosidad—pregunto Sebas mirando la bolsa que tiene Lily en sus manos.

—comida, quería compartirla pero...

—pues... si era para compartir—y el chico se acerca a ella un poco—a comer—y le arrebato la bolsa.

Will golpeo al pelirosa en la cabeza y luego le extendió el papel al pelirosa.

—auch—se quejo y tomo entre sus manos el papel de mala gana—, "no seas descortés".

Will le arrebata el papel a Sebas para escribir algo más, pero esta vez el papel fue extendido en dirección a Lily.

—"perdón por la actitud de Sebas. No le hagas caso es un idiota, por cierto, ¿Quieres comer con nosotros?, claro si es que quieres compartir no te obligó" si, si quiero—contesto mirando con una sonrisa a Will.

—¡¡¡SIII COMIDA GRATIS!!!.

—¡Sebas cállate de una maldita vez!—grito Luan enojada por aquel grito fuerte.

—bien, bien, pero no me grites que no soy sordo.

Después de todo eso los chicos se ubicaron para comer de manera cómoda ya que los bancos donde estaban no era lo suficientemente largo como para que caban los cuatro. Sebas y Will insistieron en ir a un banco más largo o comer en otro lado pero por alguna extraña razón la azabache no quería eso inventando así escusas que convencía fácilmente a sus amigos y también soltó otra escusa para que la ojisrosa este con ella y no con sus amigos.

Lily al estar con Luan sentada en aquella banca quería decir algo para empezar un tema de conversación, pero las palabras no le salían de la boca. Lo único que podía haces es mirar a la azabache para luego rendirse al no poder cumplir un simple objetivo tan sencillo y fácil.

—y... ¿Por qué estas en esta escuela?—pregunto repentinamente la azabache para romper el hielo aunque aquella primera pregunta como principal tema de conversación le extraño un poco a la peliverde, ¿Pero de que se iba a quejar? Hay personas que al apenas verla un escándalo de groserías se formaba.

—¿he?—musitó la ojisrosa con su vista en Luan—, pues... Sólo sucedieron cosas y... Estoy aquí—contesto con una sonrisa.

—¿Se puede saber que cosas?—volvio a preguntar pero está vez mirando a la ojisrosas con una mirada fría.

—es... Un asunto privado—contesto apartando la mirada al sentirse nerviosa por aquella frialdad que se reflejaba en los ojos extraños de la azabache.

—mira, voy a ser directa contigo, ¿Como se que no cometiste problemas y harás lo mismo aquí?.

—¿Desconfías de mi?—pregunto Lily bajando sus orejas. Su ilusión de poder tener a su primero amiga cayó por los suelos.

—¿Tu que creés?, ahora responde a mi pregunta.

Lily no dijo ninguna palabra, no trasmitió ningún sólo sonido luego de esa pregunta. La ojisrosas solo se dispuso a ponerse de pie para salir de allí con una notable decepción. La azabache solo miraba como la de mechones verdes y azules salía de la terraza cosa que provocó un enojo en ella al no contestar su pregunta.

¡Ja!, ahora finge estar ofendida conmigo para no contestar, es obvio que oculta algo, fingió estar enojada para no responder mi pregunta.

Pensó mientras miraba como sus amigos se acercaba a ella.

—Luan, ¿Por qué Lily se fue así?—pregunto Sebas enojado junto con Will, el cual estaba de brazos cruzados.

—no lo se, sólo se fue sin hablar. Quizás habrá ido al baño ¿Por qué no vas a comprobarlo?.

—no te hagas la tonta, se que algo hiciste o dijiste.

—no hice nada, ella se fue, eso es todo.

—¿Como te podemos creer?.

—¿Desconfían de mi?.

—si.

—yo soy su amiga de siempre y ¿Desconfían de mi sin pruebas?.

—claro, Lily quizás se debe sentir como te sientes tu ahora mismo.

—¿De qué estas hablando?.

—es más, puede que se sienta peor. Luan, te escuchamos, no debes de ser así.

—yo no dije nada ni hice nada—y al decir aquellas palabras se levanto de la banca dispuesta a irse para no tener esa charla la cual sabia perfectamente que no le funcionaria.

—¡Luan te escuchamos!, di la verdad—volvió a repetir el pelirosa para hacer entrar en razón a su amiga de cabello oscuro.

—bien, no dije nada esa, esa es la verdad.

—¡¿Encerio le mentiras a tus mejores amigos por esta estupidez?!.

—¡¿Encerio se van a enojar conmigo por una chica que apenas conocen?!, ¡¿A caso se olvidaron de Lizi y Luz?!.

—¡Ellas eran así y lo comprobamos, eso quedo en el maldito pasado! ¡¿y si Lily no es así y tuviste una mala imagen de ella?!.

—¡¿Y si, si?!, ¡¿Como quieres que me perdone si ella les hace algo?!, ¡No quiero que los lastiman!—en los ojos extraños de la azabache comenzaron a salir lágrimas. Sus amigos se quedaron sorprendidos al ver eso y guardaron silenció—¡Dímelo!, ¡¿Como mierda lo are?!.

—L-Luan, y-yo-

—¡No!, ¡Ustedes son la única familia que tengo!, ¡No tengo a nadie más a mi lado que a ustedes!.

—Luan, pero-

—¡Déjenme en paz!

La azabache solo se fue corriendo de ese lugar, Sebas quería ir detrás de ella pero Will lo detuvo y le negó con la cabeza comprendiendo así que el peliverde quería dejar a su amiga azabache aclarar las ideas que rodeaban en su cabeza.

+++++++

Lily

Eso fue muy infantil de mi parte. Irme y esconderme en el baño. No tube que salir así, soy una estúpida, no sirvo para nada.

Mi escuela... ¡No!, Ellos fueron los culpables de ese accidente, no debieron provocarme y... Hacerme eso, pero yo... No devi aver...

Olvídalo, todo siempre va a hacer mi culpa y siempre lo será.

—siempre—murmuro en voz alta con mis orejas agachadas.

Pero mis orejas se levantaron muy alto al escuchar unas fuertes risas provenientes del exterior. Mis pasos se diriguieron fuera de los baños para ver a las dos chicas que me molestaron antes.

—espera esa no es... ¡Luan!—grite para luego correr hacia ellas con enojo.

Las dos chicas se encontraban molestando a Luan, ella estaba en el suelo enojada y antes de que la de ojos negros haga una acción para golpear a Luan me meto en el medio y la empujó.

—¡Déjenla en paz!.

—¡Idiota! ¡¿Que crees que estas haciendo?!—me grito enojada.

—¡¿Que crees que estas haciendo tu?!

—¡Eso a ti no te incumbe!—y se levanta de nuevo para intentar golpearme pero detengo el puño.

—¡Cada cosa que pase en este mundo va a hacer mi culpa así que me incumbe!—le grite enojada para volverla a empujarla.

Esta vez la de ojos azules me intento atacar pero llegué esquivar todo los golpes sin problema y la empuje.

—¡Maldita!—grito la de ojos azules levantándose al igual que la de ojos negros

—y-yo, pe-perdón, no qui-quise hacerlo—pero luego de darme cuenta de lo que estaba diciendo sacudí mí cabeza y las miro enojada—¡Pero ustedes me obligaron!.

Escuché como de los labios de la de ojos oscuros salían unas risitas—¿Enserio crees que tu sola nos vencerás?.

—en verdad somos dos al igual que ustedes.

Al ver mí lado derecho pude notar que Luan me miraba con una sonrisa la cual le devolví.

—bien, que así sea—dijo la de ojos oscuros preparándose tal vez para atacarnos.

Después aparecieron dos chicos más los cuales se ubicaron uno al lado de cada una de nosotras y eran nada más ni nada menos que Sebas y Will.

—querrán decir cuatro contra dos ¿Les parece justo?, ¿Le da igual que pierdan contra cuatro?—pregunto Sebas con una sonrisa con su mirada en las dos chicas.

—ag—gruño la de ojos oscuros para darse la vuelta—vamos hermana. No valen la pena esos fenómenos, ya sabes perfectamente cual va a hacer su destino—menciono comenzando a caminar pero detuvo sus pasos—¡ho! Y Luan, ten en cuenta lo que hablamos—y al decir eso, siguió caminando seguida de la de ojos azules.

—pff, como si ahora fuera tan estúpida como para creerle—murmuro Luan viendo como se retiraban.

—bueno... Yo me voy—dije para empezar a caminar sin decir nada.

—¡hey! El descanso no termina, falta cinco minuto—menciono Luan apartando la mirada—¿No quieres pasar ese poco tiempo con nosotros?

Yo me quedé parada unos segundos, pero me di la vuelta y les dedique una sonrisa.

(...)

Pov omnisciente.

Después de una charla para conocerse un poco mejor, el timbre comenzó a sonar como señal de que el descanso ya termino, así que los cuatro chicos comenzaron a hacer una carrera para ver quien llega primero.

Sebas al llegar al aula abrió la puerta del salón con una sonrisa, pensando que ganó el primer lugar pero se sorprendió al ver que los otros tres ya estaban sentados en sus asientos.

—¿Pero que?.

—¿porque tardaste tanto?—pregunto Luan con una sonrisa.

—¡Hicieron trampa! Abran usado el hechizo de teletransportación.

—no saques pretextos. Además, era obvio que ganaríamos. Yo soy un canino, Lily un catperr lo cual la hace el doble de rápida y ágil, y Will... creo que por su diez en gimnasia.

—¡Pero yo soy un conejo mitad zorro! Debería ser el triple de rápido y ágil que Lily.

—exacto, eres un conejo, no una liebre. Los conejos sólo son ágiles no son tan rápidos como la liebre, eso hace que sólo corras con la velocidad del zorro.

—¿Las liebre y los conejos no son lo mismo?.

—claro que no.

—¡Joder!.

—Sebas, ve a sentarte, ya vamos a comenzar la clase—anuncio Fede parado cerca del pizarrón .

—bien—respondió Sebas alargando la "e" y camino a su lugar desanimado.

—bien, la clase de hoy va a hacer de matemáticas.

—buuuu—gritaron Sebas y Luan.

Fede comenzó a reír—¿enserio se creyeron eso? La clase va a hacer de magia no sean bobos.

Después de que el profesor halla dicho la materia, Luan y Sebas celebrado mientras que Lily se quedaba confundida y Will soltó bufido.

—por cierto—la mirada de Fede se clavo en peliverde el cual mostraba enojo—tranquilo, tienes que practicar—animo el rubio con una sonrisa.

Will rodó los ojos y escribió algo en su papel para mostrarlo—"no creo que pueda hacer magia pero are lo que pueda y lo posible".

—esa es la actitud.

Fede al darse cuenta de que alguien levantó la mano, miro a la persona para luego preguntar.

—Lily, ¿Alguna duda o pregunta?.

—si—contesto la ojirosa bajando la mano—¿De qué se trata la clase de magia?.

—digamos que en esta escuela es una tecnica secreta que no se lo decimos ni siquiera al mismo gobierno. Los estudiantes que ingresan a esta escuela y se van, al intentar hablar de la tecnica secreta de magia no va a poder y si lo intenta escribir su mano no reaccionará y si intenta dar pista pues... ¡nada! no va a poder hacer nada.

—¿Eso es encerio?.

—si, está escuela oculta un libro con información y la información apenas dada fue sobre la magia que tenemos.

—¿Tenemos magia?.

—si, todos los Nekos tenemos magia, algunos distintas pero además de la magia está la habilidad.

—¿Habilidad?—volvio a preguntar Lily sin entender nada.

—lleva mucha práctica hacerlo pero si logras hacerlo tienes que elegir que habilidad quieres.

—¿A qué te refieres?.

—bueno... las habilidad son elementos que te ayudarán en algún futuro: fuego, agua, tierra, planta, viento y así.

—ho, ¡Eso me interesa mucho!.

—bien, empezaremos ahora mismo. Hable con la directora sobre esto y dijo que le parece bien.

—¿Cómo la habrás convencido? ¿Nos quieres decir algo profe?—pregunto Sebas mirándolo con una sonrisa pícara al mayor mientras subía y bajaba las cejas.

—¿Que?—pregunto el rubio con un color carmesí formándose en sus mejillas—¡Sebas, no tomarás agua durante la práctica!.

—valió la pena—murmuro Sebas en voz baja, bajando sus orejas.

—sólo vallamos al salón de gimnasia y nada de preguntas, sólo Lily puede hacer preguntas.

(...)

Lily al llegar al salón de gimnasia, no pudo evitar sorprenderse por ese lugar, era muy grande pero estaba más sorprendida por la supuesta "clase de magia", en su mente estaba segura que podría ser una broma o algo así.

—Luan y Sebas practiquen ustedes dos lejos mientras yo le doy indicaciones a Will y Lily—ordeno Fede. La azabache y el pelirosa asintieron Al mismo tiempo y se alejaron demaciado—mientras que ustedes dos..., Will tu ya sabes, intenta concentrar tu magia y Lily...—y la mirada de Fede se clava en la ojisrosas para escanearla—¿Que sabes hacer? ¿Alguna cosa sorprendente?.

—mmm... Creo... Que soy algo ágil y tengo reflejos—contesto Lily pensando.

—mmm... No creo que puedas-

Pero Fede fue interrumpido por una bola color roja, salian llamas de aquella bola que casi le da a Lily pero la ojisrosas lo esquivo rápidamente a lo cual los tres miraron de donde provino.

—ups, perdón Lily, se me escapo—se disculpo Luan.

—¿Sólo un perdón? ¡Casi le dan a Lily sean más cuidadosos!—grito Fede enojado.

—dije perdón, no quise hacerlo se me escapo, se supone que le daría a Sebas pero se movió y por accidente use la bola de fuego de larga distancia, es por la costumbre.

—bueno... No importa fue un accidente, sigamos—dijo Lily entusiasmada.

—bien, pero la próxima ves más cuidado

—¡Si está bien!—grito la azabache para luego mirar a Sebas.

—¿Lo hiciste a propósito?—pregunto Sebas hablando un poco bajo y poniéndose en una pose de pelea.

—claro que si—contesto la azabache haciendo la misma pose que el pelirosa.

—y pensar que te importa Lily.

—no me importa sólo le devolví el favor.

—¿Por?.

—lo de las chicas en el patio.

—¿No dijiste que en primer lugar tu la ayudaste cuando estaba apuntó de perder el control?.

—pero ella después me había devuelto el favor.

—¿con que?.

—perdí la primera clase—contesto la azabache mientras que Sebas entrecerró los ojos con envidia.

—claro—afirmo.

De las manos de la azabache salio otra bola de fuego la cual, se la aventó al pelirosa, pero Sebas llego a esquivar—menos charla más acción.

—¡Hey! Primero avisa y luego ataca, es lo mismo que me ataques por la espalda—se quejo enojado, lanzo una bola de color azul pero Luan lo pudo esquivar.

—¡No vale usar congelamiento!.

—¡Tu estas jugando con fuego ¿Porque yo no con hielo?!.

—¡El contrario de fuego es agua y sabes perfectamente que ese hechizo te congela quedándote inmóvil por cinco minutos!.

—¡Menos charla más acción!—grito, para lanzar otra vez la misma bola pero Luan la esquivo de nuevo

—bien, que así sea.

Mientras tanto con los otros tres, era solo explicaciones que Fede le daba a la ojisrosas mientras Will solo observaba.

—intenta concéntrarte en algo que amas o odias e imaginalo, y luego a ese sentimiento tienes que pasarlo por tu cuerpo.

—... ¿Que?—pregunto Lily confundida.

—sólo concéntrate en lo que entendiste.

—he... ok—la ojisrosas solo comienza a pensar con los ojos cerrados, intentando que algo le venga por la mente, pero lo único que se le venia por la cabeza era la imagen de su madre, eso le provocaba tristeza y dolor asi que decidió cambiar la imagen y vio la imagen de sus abuelos.

Al recordar a sus abuelos, sus emociones cambiaron a una de felicidad, era el sentimiento de amor que sentía por ellos.

Inconcientemente Lily sonrió y sintió una chispa por todo su cuerpo.

—bien Lily, lo estás haciendo, ahora tienes que llevarlo en tus manos.

—¿Como lo hago?.

—tu sólo extiende tus manos e intenta.

Lily imito las acciones que el rubio le dijo, dio un suspiro, la ojisrosa estaba segura que no iba a funcionar pero de todos modos lo intento, se relajó y pensó en momentos graciosos que vivió con sus abuelos, momentos inolvidables.

Luego pensó en otras cosas que la hiciera emocionarse, así que pensó en esta escuela; Luan, Sebas, Will, Fede.

Esos fueron momentos de emociones muy fuertes al igual cuando piensa en sus abuelos, Lily no dejó de sonreír y permanecía con los ojos cerrados hasta que una voz la tomo por sorpresa.

—¡Bien Lily, lo lograste, ya lo tienes!.

Los ojos rosas de la chica se abrieron haciéndose presente en su campo visual una esfera de color amarillo demasiado brillante, aquello la tomo por sorpresa—¿Que es esto?.

—energia, tus emociones son energia para hacer magia y al parecer pensaste en emociones muy fuertes, mientras tus emociones sean enormes vas a tener mucho más poder.

—wow es... Muy hermoso—murmuro Lily fascinada por la esfera, hasta sus ojos brillaban de lo brillosa y hermosa que era.

—con esa energía puedes aprender la magia de sanación.

—¿Sana que?—pregunto distraída por ver la esfera.

—sanación, con ese poder puedes curar a los que estén heridos.

—eso sí serviría—comento aun sin apartar la vista de la esfera.

—¡Por supuesto que si! Will sabe dominar eso, pero necesita tambien aprender los ataques.

Los ojos rosas de la chica se apartaron de la esfera para mirar a Will—¿Luego me enseñarás con explicación?—pregunto con una sonrisa a lo cual, el peliverde asintió con una expresión feliz la cual contagio a la ojisrosa.

—gracias.

—me parece bien que Will te ayude—comento Fede.

—bien, ahora... ¿Que?

—la mayoría tira la esfera en el aire—menciono Fede apuntando la esfera.

—¿Qué hace?.

—compruébalo.

Lily con curiosidad tomo impulso para que la esfera sea lanzada con mucha fuerza. Todos los presentes miraron el espectáculo de la esfera la cual al ya estar en el aire explotó lanzando pequeñas estrellitas haciendo sorprender a Lily.

—¡Woow!.

—es muy lindo ¿Verdad?—pregunto Fede al ver la gran sonrisa de la ojisrosa.

—para mi es hermoso.

—¿todo es hermoso para ti?.

—... Depende.

—¿De que?—pero Lily se quedó en silencio, un largo silencio que Fede no comprendió—¿Lily?—pregunto, mirando a la recién nombrada.

—me da ganas de seguir practicando ¡Estoy emocionada!.

—pero-

—¿que sigue?—pregunto con su mirando al rubio acompañada de una sonrisa.

Fede al ver aquella sonrisa ya sabía perfectamente que era falsa, estaba seguro que Lily sufre por su pasado, un pasado oscuro que lo ve negativo y no lo puede dejar de olvidar. Pensó que tal vez debería sólo preocuparse de que este feliz y que este bien.

—sigamos—al fin dijo, con una sonrisa.

—¿Que es lo que tengo que hacer?.

—como Will te enseñará sobre lo de curación estarás con el—y los ojos del rubio de clavaron en Will—¿Te parece bien?—al ver que el peliverde asiente, sus ojos volvieron a mirar a la ojisrosa—yo tengo que hacer unas cosas. Ahora regreso—anuncio, empezando a caminar hasta la puerta

—¡Adiós!—se despidió Lily con una sonrisa.

El profesor le devolvió la despedida con un gesto con la mano y cerro la puerta tras el para caminar hasta donde tenía pensado ir.

Después de mucha caminata llegó a una puerta con letras en ella que decía "dirección". Fede le dió cinco golpes a la puerta y al escuchar un "adelante" no dudo en entrar para encontrarse con una mujer sentada en su escritorio, era una mujer con orejas y cola de mono y unos lentes con los marcos negros.

—hola Vane—la saludo Fede adentrándose más al lugar y cerrar la puerta detrás de el.

—hola Fede, ¿Paso algo por tu visita?—pregunto la azabache preocupada.

—no, todo está bien pero... Necesito el informe de la chica nueva que vino hoy a esta escuela.

—¿Hablas de la que está en tu clase?-—pregunto dudosa.

—si, hay una cosa que me da curiosidad sobre ella.

—bien, déjame ver—dijo mientras abría uno de los cajones de su escritorio—¿Nombre?.

—Lily.

—por suerte nadie en esta escuela tiene un nombre igual al de ella—menciono mientras sacaba una hoja del cajón y se la extiende a Fede el cual estaba a punto de tomarla entre sus manos pero la azabache le aparta la hoja—dime lo que sucede, te recuerdo que soy la directora de la escuela y ellos son muy importantes para mi al igual que para ustedes.

—¿Una cita a las tres te parece?.

—a las una o no hay trato.

—bien, voy a estar libre a esa hora.

—bien, aquí tienes—dijo para entregarle el papel—ella a ido a varias escuelas, eso es algo que los que transfirieron a Lily no an querido decir, según yo, los tutores lo habrán echo.

—mmm... no sabía eso de las escuelas pero aunque los tutores la allan transferido es algo que me da curiosidad—menciono comenzando a leer el papel.

—si buscas la información de las escuelas que a ido, no encontrarás nada de eso.

—no, es por otro motivo.

—¿Se puede saber cual?.

—a las 1:00 te lo contaré todo—respondió con una sonrisa.

—ag, ¿Puedo cambiar el horario?.

—nop, el trato está echo.

—que aburrido eres—murmuro soltando un bufido y bajando sus orejas.

—... Pero a ti te puedo dar un descuento—menciono aún sin apartar la vista del papel.

—¿Encerió?—pregunto la azabache subiendo nuevamente sus orejas.

—si, pero debe ser un horario estable.

—bien, ¿Que te parece apenas salir de la escuela?.

—me parece bien.

—tu invitas.

—en ningún momento dije eso.

—¿Encerió le arias pagar a una mujer?.

—soy feminista y moderno—bromeo el rubio.

—al menos paga la mayor parte—pidió bajando de nuevo sus orejas.

—era broma, tranquila yo pago.

—la próxima cita o salida yo invito.

—si claro—murmuro con sarcasmo, al terminar de leer el papel se lo extendió a la azabache con una sonrisa—gracias Vane, fuiste de mucha ayuda.

—lo que sea por ti—dijo para tomar el papel entre sus manos y dejarlo en su lugar.

Fede y Vane se miraron entre sí unos segundos pero Fede en un movimiento rápido tomo la mejilla de Vanessa para plantarle un beso en los labios, un beso que la azabache no dudo en corresponde pero luego se separaron para estar mirándose uno al otro.

—¿Eso por que fue?—pregunto la azabache con una sonrisa.

—por ayudarme—contesto su contrario con la misma sonrisa contagiosa.

—encerio ¿Qué pasa?—volvio a preguntar aún con duda.

—Vane, no te voy a mentir, creo que Lily tiene problemas emocionales por su pasado y es mitad demonio.

Vane se queda en shock, su miranda no se aparto de la de Fede por un tiempo, sus labios estaban entre abiertos pero por fin hablo.

—eso es malo

—lo se, quiero ayudarla a que no pierda el control

—ella ya...

—no, por ahora está estable, creo que aquí se siente seguro pero ¿Por que?—contesto, pero aquello último que dijo, pareció que se lo decía a si mismo.

La azabache solo soltó un suspiro pesado para luego decir las siguientes palabras—confió en ti.

—tranquila—dijo animandola y tomo la mano de ella para que no se preocupe—nada le pasará, ella es especial.

—¿De qué modo?.

—¿No la viste? es muy tierna y adorable.

—ahora comprendo porque quisiste ser maestro de primero—nego con la cabeza mientras sonreía.

—claro, me gustan los niños, son tiernos, todos menos Sebas

Vane no pudo evitar que una risa salga de sus labios por aquel comentario—ve con tus niños si no quieres ser despido.

—que mala eres Vanessa—dijo, soltando una risa al ver la cara de la azabache al pronunciar su nombre completos—no te olvides, después de clases—le recordó mientras se alejaba de ella para dirigirse a la puerta.

—si claro, no lo olvidaré ¡Adiós!.

—adios—y cerro la puerta detrás de el

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Will y Lily al ver la puerta cerrarse se

miraron entre ellos.

—¿Ahora?—pregunto Lily mirando a Will el cual comenzó a escribir en su papel para luego de terminar, dárselo a la ojisrosas—gracias—agradeció, para echarle un ojo a lo que decía—"lo are sonar fácil pero en verdad es un poco complicado, sólo tienes que hacer lo que hiciste antes y concentrar tu magia en las palmas de tu mano y transferir esa magia a la piel de la persona" mmm... difícil es eso de "transferir" no me parece muy fácil la verdad—opino Lily extendiendole el papel a Will el cual no dudo en tomarlo, escribirlo, y dárselo de nuevo a su contraria—"aprendes rápido, no creo que haya cosa que no puedas hacer" aww muchas gracias, entonces en ese caso ¡Lo intentaré!.

Lily ya con animo, le entrego el papel a Will y comenzó a recordar momentos en el que estuvo feliz, uno de esos momentos fue el destello de estrellas de la esfera que abia echo anteriormente, al pensar en eso sintió algo pasar por sus cuerpo, ella intento llevarlo a las palmas de su mano lo cual le resultó difícil pero al final logro hacerlo.

—¡Will, lo hice!—grito emocionada

Will acintió con una expresión feliz y escribe en su papel para mostrárselo a Lily—"aún necesitas practicar la transferencia"

—¿A qué te refieres con eso?—pregunto confundida

Will de su bolsillo saco un saca puntas el cual lo tenía por si a su lápiz se le rompe la punta, apoyo la parte con filo en su muñeca, un acto que dejó helada a Lily.

—W-Will ¿que vas a hacer?—pregunto tragando en seco.

El chico a lo pocos segundo de hacerse la herida, cae al suelo del dolor mientras algunas lágrimas salían de sus ojos.

—¡¡¡WILL!!!—grito Lily acercándose desesperadamente a él.

—¡¿Que mierda hizo?!—grito Luan acercándose a ellos junto con Sebas

—Will rápido, usa la magia sanadora y sana la herida—dijo la ojisrosa asustada pero el chico solo le extendia la mano para que ella lo cure pero Lily negaba con la cabeza repetidas veces—n-no puedo y-yo no se hacer magia sanadora, rápido vas a perder sangre.

—¿¡Que le hiciste?!—le grito la azabache a Lili, mientras la miraba con una mirada furiosa.

—n-nada y-yo—y la ojisrosas sintiéndose culpable por lo que paso, no pudo evitar llorar—e-es mi culpa.

—Will maldita sea sanate ¿¡Qué esperas?! ¡Vas a morir desangrado!—le grito el pelirosa a Will enojado pero el de tapabocas seguía extendiendo su mano para que Lily lo haga.

—y-yo no puedo hacer n-nada—siguió insistiendo Lily con lágrimas.

—¡Sólo tómale la puta mano!—le grito Luan.

—¡¿Pero después que hago?!.

—¡Transfiere la magia para que se cure!.

—¡Pero no se como!

—¡Entonces inténtalo!.

Lily tomo la mano de Will suavemente y se concentra pero nada—¡No puedo n-no se como!.

—¡Maldición Will!.

Will comenzó a cerrar sus ojos lentamente, un acto que sobresaltaron a los otros tres chicos.

—¡Will, no vallas hacia la luz!—grito Sebas nervioso.

Lily ya se le acumuló una muy fuerte emocion de tristeza, cerró los ojos fuertes e intento hacer lo mismo que había echo para crear la esfera, cuando quito su mano vio que su herida seguía igual pero poco a poco noto que se cerraba hasta cerrarse por completo.

—¿W-Will?.

Aquellos ojos color morado se abrieron lentamente hasta que aquel color se notaba completamente, y el de ojos morados mostró su papel para que Lily lo pueda leer—"sabía que lo arias".

—Will, eres un idiota, tu maldita especie está en peligro de extinción ¿¡Y a ti que se te ocurre?! ¡¡¡CORTARTE LA MUÑECA Y PERDER SANGRE!!!—grito Luan tomando a Will de los hombros.

—"no seas exagerada sabía que Lily lo aria"—mostro su papel pero está vez para que la azabache lo vea.

—¡¿Pero si no?! ¿¡Que mierda les dije a ti y Sebas?!.

—"calmate"

—¡¿Cómo quieres que me calme?!

La ojisrosas repentinamente abrazo a Will haciendo que Luan deje de tener sus manos en los hombros del chico—por favor no vuelvas a hacer eso, te lo suplico, no lo hagas nunca—suplico Lily mientras más lágrimas caían de sus ojos, Will solo soltó un suspiro y correspondió el abrazo.

—espero Will que hallas aprendido la lección—dijo Sebas enojado mientras apartaba la mirada pero Will solo rodó los ojos.

—hola chicos llegue, ¿Qué tal les fue en- ¡¡¡¿ESO ES SANGRE?!!!—grito mirando el suelo el cual tenía un poco de sangre.

—ya no te preocupes, Will lo lo volvió a hacer pero con Lily—explico Luan entrecerrado los ojos.

—Will, ya hablamos de esto y volveremos a hablar más tarde—le regaño Fede.

Will dejo de abrazar a Lily para levantarse, escribir algo y entregarle la hoja a su profesor.

—"solo quería que Lily aprenda a transferir la energía para la magia de curación" ¡Por eso o no, no tuviste que ser tan descuidado!—Fede intento decir algo más pero al escuchar el timbre de quedo callado—terminaron las clases, mañana hablaremos sobre esto—Will solo asintió con la cabeza como respuesta.