DESTRUYENDO HOGARES

Enna fue una niña que creció con carencias emocionales, nació siendo la mayor de las hermanas, tiene 3 hermanas menores, ella se siente presionada por sus padres, ya que debe comportarse y ser el ejemplo para las demás, sus padres no son los mejores, pero tampoco los peores, se esfuerzan día a día por darle lo mejor a sus hijas, aunque para ello deban dejarlas un poco solas y a cargo de la hermana mayor. Ella estudia y trabaja, a la vista de todos es una joven bonita, alegre y sociable, siempre anda muy bien vestida, es algo vanidosa, pero en el fondo es tímida, con autoestima baja, se porta así para tratar de sentirse importante y valiosa. Enna es demasiado delgada, cabello castaño oscuro, largo lacio, ojos marrones, mide 150 cm, por lo que es un poco baja, y todo eso unido la hace sentir inferior ante sus amigas de cuerpos más voluminosos.

En uno de sus trabajos conoce a Iván, un joven que vive con su pareja Susi desde hace 5 años, parecen tener una familia feliz, con una bella hija de 4 años, una hija hermosa como su madre, una joven de piel de canela, pelirroja, cabello al hombro rizado, ojos azules, altura de 165 cm, que cuida mucho su cuerpo, va al gimnasio, se alimenta bien, así como a su familia, trabaja para apoyar a su esposo y porque no le gusta ser dependiente de él, ella es una gran mujer, por eso su esposo la ama, o eso dice él, fueron novios toda la secundaria y al salir decidieron vivir juntos.

Iván es guapo, pero no es una perita en dulce, es alto, mide 180 cm delgado, ojos negros, es conocido por sus compañeros de trabajo como un chico que le gusta jugar mucho con las chicas que le dan entrada fácilmente, para mostrar y presumir a sus amigos y compañeros que es un hombre capaz de derretir hasta a la más dura de las mujeres y a las fáciles con mayor razón las trae trapeando el suelo por él.

 ¿Qué  pasará cuando Enna e Iván se conozcan?

¿Enna se dejará seducir por Iván como las demás?

¿Podrá ser el inicio de un romance que destruirá la relación entre Iván y Susi?

¿Iván lo dejará todo por ella y conocerá el verdadero amor o terminará sin ellas?

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Les invito a leer una de mis nuevas obrasDESTRUYENDO HOGARES, esta es una historia corta, que consta de 27 capítulos únicamente; he terminado algunas más, pero de una decidí sacar 11 historias más o menos cortas que se pueden leer por separado sin que tengan que leer todas, a menos que deseen conocer más de cada una de las chicas que serán parte de un programa médico y que convivirán durante unos meses que durará su control, pero esa quiero subirla hasta terminar todas las historias para que quienes deseen leerlas no pierdan el hilo de la historia al terminar una y tener que esperar semanas o meses para leer las demás historias, también he ido creando otras que han surgido mientras escribo esa Saga, pero escogí esta para subir primero de las demás que ya tengo terminada, voy a hacer lo posible por subir diariamente por lo menos un capítulo, en caso de no poder un día subiré tan pronto me sea posible varios, y al terminar empezaré a subir más de mis obras terminadas.

Espero que esta pueda ser del agrado de la mayoría como lo han sido las demás, de antemano, les comento que esta historia tiene un final diferente, muchos esperamos que cuando los protagonistas sufren tanto en la historia, terminen con el: "Y FUERON FELICES POR SIEMPRE", esta tal vez les deje con el deseo de que tenga un final diferente, pero la termine pensando en varios comentarios que he recibido de mis novelas publicadas anteriormente.

Espero que al final puedan compartirme su punto de vista de como termino mi novela y si les hubiera gustado uno diferente cuál final le darían ustedes.

Hoy subiré los primeros capítulos de esta historia para que inicien a leerla. No olviden apoyarme dando LIKE y votando por mi novela.

Apúrate Enna que ya es tarde y tienen que ir a la escuela, Priscila no te muevas o te saldrá chueco el peinado, Jimena deja que tu hermana te cambie o van nos van a cerrar la escuela - se escuchaba la voz de una madre algo desesperada por no salir las cosas como deseaba, era un día de escuela y como siempre su mamá batallaba para que estuvieran listas sus hijas.

Hay niñas es lo mismo siempre con ustedes, por más que las levantó temprano siempre se tardan por ponerse a jugar, les decía a sus hijas.

Ya terminé de cambiar a Jimena mamá, solo falta que salga del baño Fanny para que la peines. Yo ya me peiné, decía su hija mayor quien estaba apurada ayudando a su madre como lo hacía todas las mañanas.

Fanny… ya sal de ahí, no creas que por tardarte te vas a ir sin peinar, las niñas mal peinadas o sin peinarse se ven feas y los niños se burlan de ellas, apúrate que ya nos tenemos que ir- trataba la mamá de mantener la calma ante sus hijas.

Tranquila mi amor, son solo niñas, dijo con mucho amor el esposo mientras entraba a la recámara donde se encontraba su esposa arreglando las niñas..

Sí, pero es que... no vez que estamos con el tiempo justo para llegar… -decía suspirando para mantenerse tranquila- ¿ya están los lonches de las niñas?, dijo soltando el aire retenido por el estrés de ver la hora que era.

Todo listo en sus respectivas loncheras, no te estreses, voy calentando el coche para llevarlas, decía el papá mirando con amor a su esposa.

Gracias amor, le dejo un casto beso a su esposa en los labios.

Amara tomo aire profundamente para calmarse y seguir asegurándose de que sus hijas estuvieran listas para dejarlas en la escuela y jardín de niños.

Enna tenía 9 años, Fanny 6 años, Jimena y Priscila eran mellizas y tenían 4 años. Amara trabajaba en una boutique de ropa de marcas reconocidas, era encargada de la boutique, por lo mismo se deber era llegar y asegurarse que se abriera a tiempo, organizar a todo el personal, supervisar que atendieran de acuerdo con las políticas de la empresa y dieran el mejor trato a los clientes que llegaban sin importar como se portaran o vieran, ya que la mayoría de las clientes era mujeres de estatus alto, por lo que se portaban algo engreídas con las empleadas, otras solo entraban a querer sentirse aunque fuera por un momento que eran capaz de adquirir una prenda de ese lugar y solo deseaban ver y tocar esas telas que nunca podrían lucir puestas, como no podían prohibir la entrada a persona alguna se les permitía el acceso y Amara les dejaba soñar aunque fuera por un momento, al fin que por soñar no se paga.

Luciano su esposo era contador de una empresa no muy grande, por lo cual debía llevar todo lo referente a los registros de la empresa, era muy demandante su trabajo, aunque los productos que vendían no eran muy caros, si eran muy vendidos, por lo cual tenían muchos movimientos por día, y por el sistema no muy actualizado que tenían, debían estar capturando mucha información día a día, lo que hacía que aunque tenía un auxiliar apenas alcanzará el tiempo para que llevaran al día los registros, por ello siempre se quedaba tiempo de más para asegurarse que todo estaba bien registrado y terminado, llegando algo tarde a su casa.

Amara normalmente salía para recoger a sus hijas y las pasaba dejando en casa, las dejaba encargada con la señora que le ayudaba en la casa a limpiar, organizar, cocinar, después de asegurarse que las niñas comieran, las dejaba encargadas con Enna para que les ayudará a hacer la tarea y que no hicieran travesuras, algo que era imposible controlar para una niña de su edad. La señora Clarita estaba hasta las 6 de la tarde y se iba, esperando que Enna pudiera controlar a sus hermanas, sobre todo los torbellinos de las mellizas, cuando le era posible se quedaba un poco más para no dejarla tanto tiempo sola con sus hermanas, pero también necesitaba hacer cosas en su respectivo hogar y pasar comprando para el otro día y si se iba muy tarde cerraban en donde realizaría sus mandados, por lo que no siempre le era posible ayudarla por mucho tiempo.

Para Enna no fue fácil su infancia, teniendo una corta edad se convirtió en la madre de sus hermanas, algo que Amara nunca se dio cuenta, porque pensaba erróneamente, que era su deber como hermana mayor ayudarles a sus padres con las más pequeñas, ya que mientras ambos contribuían con lo económico, ella debería apoyar con su tiempo y cuidados. Así fue como Enna desde pequeña se le dio esa gran responsabilidad, teniendo que ver por tres niñas menores a ella, que se comportaran, enseñarles buenos modales, arreglar lo que desordenaban, prácticamente era andar detrás de las tres chiquitinas.

Fanny era muy tranquila, donde tuviera algo que le llamara la atención permanecía por mucho tiempo, si ponían una película de su princesa preferida, se la pasaba sentada viendo su película, cuando mucho se paraba para dar brincos en su lugar emocionada por las escenas que pasaban, cuando terminaba la película iba por sus muñecas y jugaba tratando de representar las escenas que habían salido en esta. A diferencia de Jimena y Priscila, que parecía que no podían estar quietas, parecía que estaban paradas sobre un hormiguero, porque brincaban, gritaban y corrieran la mayor parte del tiempo; no había una película, serie, caricatura, o programa favorito, por mucho estaban diez minutos viendo algo antes de pararse y empezar a dar vueltas por la casa viendo que hacer o inventar, lo cual cansaba demasiado a su hermana y muchas veces la desesperaban.

Cuando había fiesta de aniversario y fin de año de la empresa donde trabajaba su mami, Amara llevaba a su familia, a Enna le fascinaba ver como las compañeras de su mamá iban hermosamente vestidas, su madre procuraba vestirlas como las hermosas princesas que eran para ella, siempre vestían muy femeninas y a la moda, pues su madre por su trabajo debía estar siempre presentable y con un toque de elegancia para dar una imagen adecuada acorde a su trabajo. Enna, Fanny, Priscila y Jimena por lo mismo crecieron sabiendo que debían estar siempre bien vestidas y a la moda, ya que era parte importante de su imagen tanto para obtener un buen trabajo, como para que la sociedad las viera como unas hermosas damas.

Luciano y Amara amaban a su familia, pero tener cuatro hijas no era fácil y menos porque al no tener un hogar propio tuvieron que endeudarse con la casa donde actualmente vivían y abonaban la mitad de sus sueldos, por lo que por los siguientes 10 años estarían endeudados pagando esa propiedad, ya que la habían sacado a quince años y llevaban 5 hasta ese momento.

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Conforme fue creciendo Enna se fue sintiendo cada vez más frustrada por tener una responsabilidad tan grande, ella deseaba ser una niña normal, poder divertirse, hacer travesuras como sus hermanas menores, no sentirse presionada por las responsabilidades, ya que al estar al frente de sus hermanas, debía portarse lo mejor posible para que ellas trataran de emular su comportamiento. Lo malo era cuando los torbellinos de sus hermanas menores hacían de las suyas en casa, porque a la que culpaban sus padres era a ella por ser la mayor y no estar pendiente de que hacían sus hermanas, por lo cual no solo se llevaba el regaño de sus padres, sino, también el castigo.

Luciano y Amara, tenían la idea errónea que con solventar todas las necesidades de casa y de sus hijas, esto es, que tuvieran un hogar donde resguardarse de las inclemencias del tiempo, así como donde estar seguras, comida suficiente y nutritiva, educación en buenas instituciones, ropa bonita y a la moda, juguetes a su gusto, con esto sería suficiente. Cuando había días de descanso estaban tan cansados que solo querían olvidarse de todo y con tal de recuperarse del estrés y cansancio acumulado, solo querían dormir hasta tarde, relajarse, por ello le encargaban a Clarita que les echará un ojo a sus hijas en lo que ellos se tomaban un descanso, o bien, salían ellos dos solos para tratar de pasar tiempo de esposos de calidad, olvidándose que sus hijas también necesitaban amor y tiempo para sentirse que eran parte importante para sus padres.

Trataban de apartar varios días del año para pasar en familia con sus hijas, pero era difícil, ya que eran muy pocas las veces que coincidían todos juntos y el cansancio del día a día era mucho, aunado a que muchos planes se frustraron, porque cuando por fin estaban por ir a un viaje, parque, salida o simplemente hacer algo en casa todos, alguna de las hermanas menores se enfermaba y los papas debían andar entre médicos, exámenes de laboratorio y hasta hospitalización si era algo más delicado, siendo frustrado el día familiar programado, hasta parecía que el destino no quería que pasaran tiempo juntos. Esto afecto la estima de su hija mayor, que sentía que no era tan importante para  sus padres y que solo la veían como la niñera de sus hermanas.

Conforme las hermanas fueron creciendo, se ponían cada vez más bonitas, su alimentación era muy estricta, ya que para poder lucir la ropa debían tener un cuerpo sin grasa, estético, deportivo, digno de una mujer muy femenina, de pequeña Enna era la más gordita de las hermanas, por eso su madre le hacía mucho énfasis en que debía cuidarse en su alimentación y ejercicio, porque las mujeres llenitas no lucen la ropa y se ven feas, esto afecto mucho a la imagen de sí misma, marcando el inicio de su problema de autoestima entre otros más delicados.

Enna influenciada por las ideas de su madre empezó a comer menos desde pequeña, esforzarse por mantener un cuerpo esbelto, antes de acostarse hacía mucho ejercicio, ya que era el momento en que sus hermanas menores ya estaban dormidas y su hermana segunda, como era fanática de la lectura de cuentos infantiles, se sentaba a leer un cuento en su cama antes de dormirse, entonces Enna aprovechaba y se aventaba una rutina larga que había visto en internet para bajar de peso, siguiendo al pie de la letra tanto la rutina como la alimentación ahí establecida. Empezó su rutina desde los 9 años, por lo que conforme crecía, su cuerpo iba marcando los resultados de su esfuerzo, no podía comer ni un gramo o libra de más porque sentía que ya había subido varios kilos.

Enna empezó a desarrollarse, a sus 12 años de edad, su cuerpo empezó a mostrar los cambios que mostraban que empezaba a convertirse en una mujercita, pero por su alimentación y cantidad de ejercicio que seguía realizando, sus proporciones fueron muy pequeñas, teniendo un bajo peso que medicamente era marcado como con una leve desnutrición y su cuerpo no solo no creció mucho, sino que sus caderas y pecho tampoco crecieron mucho, pero todavía quedaba tiempo para que siguieran creciendo y que su cuerpo tomará un poco más de volumen en las áreas que seguían casi planas.

Los médicos, les indicaban a Luciano y Amara que Enna estaba baja de peso y debía de consumir vitaminas y comer un poco más para poder alcanzar su peso ideal, ya que si seguía así podía tener problemas futuros por su condición. Le cambiaron la alimentación a Enna y las vitaminas le empezaron a hacer que su cuerpo pidiera más alimentos para cubrir sus necesidades, por lo que su apetito aumentó considerablemente, ya que su organismo ayudado por los pastillas y complementos alimenticios que le incluían en la bebida le provocaban esta necesidad de comer, para cubrir sus necesidades, esto hacía que ella comiera más de lo que quería, por lo que cuando sentía que comía mucho, sin que se diera cuenta su familia se iba al baño y se provocaba el vómito para sacar el exceso de comida ingerida.

Esto la empezó a llevar a un problema de bulimia y anorexia, del que nadie estaba enterado en su casa por no ponerle mucha atención, al pensar que por ser la mayor no tenía necesidad de estar al pendiente de ella, sus padres la veían como una joven centrada, fuerte, madura, independiente, por lo que pensaban que no los necesitaba tanto, sino ellos a ella.

Enna a veces quería desaparecer, haber nacido en otra familia, veía que sus amigos hablaban maravillas de su niñez, su libertad que tenían como jóvenes, de sus salidas entre ellos, algo que ella no podía hacer porque ahora era ella la que apoyaba a su madre a recoger a sus hermanas menores y llevarlas a casa para seguir la rutina marcada desde que recordaba, no recordaba un día siendo niña, recordaba días felices con sus padres y hermanas, días no tan felices y días malos, pero ninguno donde actuara como niña, sentía que había estado perdida en el tiempo siendo quien no era.

Quería irse de pinta sin tener que pensar en quien recogería a sus hermanas, quien les daría de comer, quien se aseguraría que se bañaran ese día, que las tareas escolares estuvieran antes de terminar ese día, quería salir de la mano de un chico como sus amigas y saber lo que era tener un novio y pasarla bien en su compañía. Deseaba tanto haber sido de las menores, para no tener tan gran responsabilidad como era en su realidad.

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