Si alguien viniera y me dijera que el dinero lo es todo me le reiría en la cara, a mayor cantidad de dinero mayor odio y maldad fue cosechando, otra noche mas me encuentro sentada en el techo de mi salón de danzas, vengo aquí porque esto es mi mayor distracción primero y segundo desde aquí analizo mi muerte, tengo 16 años y estoy en quinto año del secundario, voy a colegio pijo donde los odio a todos, creen que por ser la hija del Senador Reyes soy intocable y estoy lejos de eso, en mi hogar abunda el dinero como también abunda el odio, el engaño, la traición, las infidelidades, los deseos enfermizos, etc...

El día de hoy tuvo lo normal, desayuno en mi habitación, cruzarme a Sebastian y Carla mis amados padres es detestable pero peor es cruzarme con Kevin que me mira con deseos, es repugnante, a la hora del almuerzo mis padres como siempre cada uno en su mundo con sus celulares y mi hermano intentando tocar mi pierna por debajo de la mesa, me levanto a mi habitación a terminar de comer (es mi lugar de salvación gracias a las 4 trabas que le puse mi hermanito querido no puede entrar por las noches) y mis padres les importo tanto que me levante de la mesa que casi se caen de las sillas para decirme que vuelva (sarcástico), se meten en su habitación empiezan a discutir y a pelear se escuchan objetos estrellarse contra el piso, mi padre abandona la mansión y mi madre llama siempre a su consuelo el hermano de mi padre su querido cuñado, él llega todo caballero con armadura de hierro a follar con mi madre olvidándose que sus sobrinos escuchan todo, a lo sumo Kevin esta fumando hierba, tomando cocaína, viendo pornografía o follando con la hijastra de mi tío, así de asqueroso es todo en este dulce hogar, luego salimos en televisión, eventos, fiestas como una familia de 4 que se aman que somos ejemplos, mi madre ayuda a los mas necesitados, tiene fundaciones para personas con adicción y su hijito preferido es un drogadicto, yo una psiquiátrica depresiva, que pide ayuda a gritos y nadie la escucha, al salir de mi cuarto paso por la habitación de mis padres y los ruidos y gemidos que se escuchan me confirma una cosa, los cuñados se esta consolando, son unos cualquiera, al pasar por el living encuentro el teléfono de mi madre en la mesada, lo guardé en mi bolsillo y salí, la seguridad de mi padre sabe que a mi no me tienen que molestar en teoría creen que me encuentro en la casa de mi amiga cuando llegue hasta mi estudio de danza subí y acá estoy con su celular viendo cosas que preferí no haberlo hecho...

Un ruido atrás mio me hace poner en alerta.

-Perdón.- dice un hombre, no tiene gran musculatura pero no es delgado, es alto, cabello color negro y ojos azules, no respondo nada simplemente lo ignoro y vuelvo a mirar a la nada misma, si es asesino que haga el trabajo rápido ya estoy cansada de esta vida.

-Mi hermana odia que fume, así que invado su espacio de trabajo.- fuma y me mira cada tanto esta buscando sacarme conversación a toda costa, ¿su espacio de trabajo? su hermana vive aquí, ¿donde? si esto es un estudio de danza.

-Si esto es un estudio de danza.- le digo capaz se volvió loco, bueno ya somos 2 en un techo, el dúo de Los Adams seríamos.

-Ya sé.- me mira y se ríe.

-Es tu hermana la Profe Isabel?.- vaya que loco...

-Si, una mujer muy sana y yo todo lo contrario.- me invita con el cigarrillo.

-No gracias, solo fumo hierba.- rechazo con la mano, saca de su bolsillo un cigarrillo un poco más gordo, lo enciende le hace una calada y me lo cede, se lo acepto y empiezo a fumar, esto es un placer lo necesitaba tanto esta noche no vuelvo a casa.

-Puedo preguntar que haces aquí?.- entra en modo curioso y esa mirada fija de escanearte entera.

-Escapando de la vida y buscando hacerme amiga de la muerte.- sonrío de forma triste, mirando el celular en mi mano.

-Somos 2, pero siempre me dicen, que para todo hay una salida.- hace una calada de su cigarrillo.

-Yo ya tengo mi salida.- río tristemente, -hace rato lo tengo decidido.- fumo y mi cabeza maquina lo que vi en ese bendito celular.

-Cual es?.- pregunta

-La muerte.- le digo como si fuese obvio.

-Y hasta que llegue esa solución, que te parece si hablamos y hablamos?.- me mira intensamente, seguro mirando mis ojos, si son de color amatista y el 100% les llama la atención.

-Hablemos.- levanto los hombros para darle la razón.

-Que te parece si entramos al estudio?.- se levanta y me tiende la mano.

-A que?.- que quiere ahora este?

-No se, bailar, beber, fumar no porque va a quedar el olor y mi hermana va a saber que yo estuve ahí.- ríe negando con la cabeza.

-Bailar? Si puede ser.- estoy de acuerdo de paso vuelvo a mi mundo.

Entramos al estudio y pone música, Where Have You Been de Rihanna y mi cuerpo cobra vida haciendo movimientos suaves, sexis, delicados y me olvido de todo, termina la canción y cuando abro los ojos, el esta estático y nunca dejo de mirarme, espero que no se confunda con sus testosteronas a mil, empieza a aplaudir saliendo de su estupefacción, luego niega con la cabeza y me dedica una sonrisa ladeada y picara, como se nota que los hombres sacan sus artilugios para poder llevarse a una persona a la cama, Dios mio me acaba de conocer, pero bueno quien soy yo para juzgar?

-Te pinta unas cervezas o algo de comer?.- empieza a acercarse despacio hacia a mi.

-Ambas.- le sigo el juego relamiendo mis labios.

-Aquí o entro lugar? Publico o privado?.- insinúa queriendo cama, y no se lo voy a dar.

-Conozco un lugar genial!.- le digo saliendo del estudio, él se encarga de cerrar todo, y salimos rumbo al bar de una amiga, la única que me sostiene en todo momento y a la que ayudo económicamente sin que sepa nadie.

Llegamos al bar, es un lugar frecuentado por jóvenes, adultos, humildes y con dinero, el ambiente es muy bueno y los días de partido de fútbol se pone espectacular.

- NIKIIIIII!!!- grita mi amiga.

-Valen, amore mio!.- no soy tan efusiva a la hora de demostrar sentimientos, pero cuando quiero, quiero con fuerza.

-¿QUE ONDA POR ESTOS LADOS?.- siempre tan efusiva para hablarme.

-Una mesa para mi y él.- señalo a mi acompañante. Ella lo miro demás, más que una mirada le saco la ropa visualmente.

-Al fondo tengo una libre.- nos guía mientras intenta zafarse varias manos y cuerpos, Dios son patéticos.

-Desde ya te pido 2 cervezas y una pizza a la Napo.- le voy pidiendo, Mi acompañante mira el lugar, y se lo ve alegre, varias mujeres le coquetean, y eso que entro con una mujer y aún así no les importa somos porque me incluyo unas descaradas.

Hablamos de todo y de nada, bebemos y bebemos hasta el cansancio, nos paramos y bailamos, cuando me dirijo al baño soy interceptada por una persona.

-La putita no aguanta.- la voz repulsiva de Kevin resuena en mis oídos.

-No me vuelvas a poner una mano encima.- lo amenazo alejándolo de mi, el alcohol demás en mi sistema y su presencia no son buena combinación.

-Que haces aquí? Saben nuestros padres?.- se me acerca, le meto una cachetada y corro a la salida del baño, cuando estoy llegando cerca de mi acompañante Kevin me agarra de los pelos a lo que hace que yo lo empuje, en ese momento mi hermano sale expulsado hacia unas mesas, mi acompañante le dio un puñetazo, Kevin es levantado por la hijastra de mi tío Rocio.

-NO TE ME VUELVAS A ACERCAR O JURO QUE TE DENUNCIO, MALDITO ASQUEROSO!!.- grito fuera de si, mi amiga Valen viene a mi rescate y nos dice que nos vayamos antes que llegue la policía, se lo que va a desencadenar esto, Kevin le dirá a nuestros padres y el saldrá victorioso, pero mas le vale a mi madre defenderme a mi o su teléfono sera expuesto y destruirá la candidatura de mi padre.

Llego a mi casa ebria, colada, fuera de sí, el hijo de perra de Kevin arruino mi noche, como siempre se encarga de arruinar mi vida, voy a mi habitación me encierro con llave y me duermo plácidamente.

Unos gritos abajo me hacen sobresaltar, otro día igual como todos los días, nada novedoso, es mas el día que en esta casa se respire paz es porque fue invadida por los extraterrestres, me tomo todo el tiempo del mundo para levantarme, bajo a desayunar y lo único que me recibe es una bofetada de mi madre que me tira al suelo.

-Donde estabas anoche? Con que derecho te da escaparte?- me grita mi madre, y es mi momento de explotar y decir las cosas en su cara, años aguante y nadie me escucha.

-Con el mismo derecho que viene el Tio para acá todos los días- le digo con mi labio lleno de sangre.

-Que estupideces dices?- se pone roja de bronca.

-Segura Carla?.- la miro con asco.

Y me mete otra cachetada, me le río y la miro.

-Me das asco como madre, ojala te mueras.- le digo con mis ojos llenos de lagrimas.

-ANTES TE MUERES TU.- me grita

-En eso te doy la razón.- y salgo dando un portazo, en teoría tendría que ir a la escuela, pero en este estado no pienso ir. Siempre hace eso de pegarme, de mandarme toda golpeada a donde sea que vayamos, me da la sensación que no solo me odia sino también me tiene envidia y celos, con decir que se compra mi misma ropa y se pone lente de contactos color amatista, mi madre es de terror.

Me dirijo al edificio de mi padre donde esta trabajando, ingreso, todos me miran, algunos me saludan, otros simplemente me ignoran, llego al ascensor marco el piso numero 20, en un  pestañeo ya me encuentro en su piso, al salir del ascensor se respira silencio y olor rico con razón le gusta estar aquí y no en casa, me dirijo a su oficina y esta entre abierta me asomo y mi padre follandose a su secretaria, bien lo ultimo que esperaba era ver a este hombre fabricando mas hermanitos, Sebastian tiene porte y elegancia es alto, musculoso, rubio y ojos color amatista mismos que yo herede, tiene voz ronca y grave, sabe conquistar al publico, pero ahora veo que lo del jefe y la secretaria es real, no es cosa de libros y películas.

-Diria perdón, pero yo no me tengo que disculpar con nadie.- digo ingresando al despacho.- donde mi padre pega un susto haciendo que la escena se desarme, la secretaria al pasar por mi lado y le digo: patética agradece que no fue mi madre sino te manda a matar.- gozo internamente al verla que se pone blanca como un papel.

-Nikeila, que haces aquí?.- pregunta mi padre enojado.

-Hola yo también me alegro de verte.- digo irónicamente.

-No estoy para vueltas.- se levanta a servirse licor.

-Tampoco es que te estoy robando tiempo, no estabas en ninguna junta ni salvando el país, así que háblame bien.- lo encaro enojada.

-Que necesitas?.- así nomas lo dice, le importo tanto, que destila amor y felicidad.

-Carla volvió a pegarme.- le muestro mi rostro.

-Que hiciste?.- me mira

-Y por que seria yo la que hizo algo y no ella?.- le pregunto dolida.

-Que paso esta vez?.- se vuelve a sentar y mira su computadora, como si no le importara nada se nota la felicidad que tiene al verme.

-Nada, nada ya esta, hoy no asistiré al colegio, cuando tengas un tiempo quisiera mostrarte algo.- le daré el teléfono de mi madre y mi diario intimo.

-Okey, esta noche tenemos una cena a beneficio para las personas con adicción.- me informa haciéndome que largue una carcajada.

-Es broma?.- quede estupefacta, es el colmo, o sea Kevin es un adicto, yo una psiquiátrica, tendrían que predicar un poco mas con el ejemplo, me dirijo a su escritorio, me hago un cheque con muchos 0 y me dirijo a la salida, esa fue toda la visita lo mas loco que el dinero no es para mi, es para mi profe de danza y para mi amiga Valen.

-Te veo en casa mas tarde.- me dice

-NO IRÉ.- grito entrando al ascensor.

Me encuentro en el bar donde trabaja mi amiga, después de pasar por el banco a cobrar el cheque le entrego un fajo de dinero, paso un rato mas bebiendo, y salgo a mi estudio de danza, al llegar la profe esta explicando la nueva coreografía, yo paso al frente a mostrar lo que arme, pongo TITANIUM de Sia y empiezo a bailar, muevo mis brazos, mis caderas, mis piernas son un vaivén, una vez termino una lagrima se derrama por mi mejilla, al girarme veo al hermano de Isabel, lo cual no lo he visto desde el episodio de la noche anterior, esta hablando con una chica, ella le coquetea busca su atención desesperadamente, una vez terminamos, voy a los baños ignorando a todos, ingreso a las duchas y escucho una conversación de fondo...

-Invite a salir a Ignacio.

-El hermano de Isabel?.

-Si, acepto.

-Pero no esta de novio con Mía?.

-La otra profe? No solo follan...

Salgo ya cambiada cortando su conversación, así que se la da de follador? ja, ja, ja, conmigo perdió, para problemas tengo mi familia, no necesito mas, salgo encontrando a mi profe con su hermano, hablando, me acerco...

-Profe, corto un segundo su conversación, necesito un minuto a solas con usted.- ni siquiera lo miro. Su hermano se aleja mirándome, le entrego el dinero a mi profe, lo cual ella se niega a la ayuda extra.

-Si no me lo recibe me enojare con usted.- le hago un puchero, ella me da un cálido abrazo, y me retiro del lugar, con su hermano pisándome los talones, me giro de repente encarandolo.

-No me dijiste tu nombre.- me pongo seria, de brazos cruzados.

-Ignacio Vega...- le corto para que no siga hablando.

-Anoche la pasamos genial, y eso es todo, pero te doy un consejo-me le acerco demasiado- cuando la polla entra y sale hay que ser más vivo, si sos el puterio del barrio, ya dejas de agradar.- le doy un guiño y salgo de ese edificio. Se quedó estupefacto, pobre iluso, al final más grandes más inmaduros, no aprenden más, busco el teléfono en mi bolso y decido llamar a Giuliano mi guardaespaldas para que me "atienda" para lo único que lo busco, se supone que me tendría que estar "cuidando", pero hoy no asistí a la escuela, y a danza me trajo el chófer, en fin no tienen que saber que follamos.

Llamo a la puerta de Giuliano, recuerdo las veces que lo busque me rechazaba, deje de insistir y buscarlo, si me preguntaran ¿lo provocabas, te le aparecías desnuda? la respuesta es NO, solo vino el a buscarme, le entregue mi virginidad, pero NUNCA ame a nadie, no me podría enamorar, es dañino, y todo tiene un fin como mi vida, Giuliano se sorprendió de no verme como una cría enamorada detrás de el,, abre la puerta en bóxer, piernas, abdomen y brazos de Gym tatuajes por todos lados, piel color canela y ojos color verde, me agarra del brazo adentrándome a su departamento, me folla hasta el cansancio, me pide que le baile y me vuelve a follar, una vez llegada la noche nos vamos de su departamento y nos dirigimos a la mansión Reyes, una vez llego subo a mi habitación y me pongo un vestido cortito negro de cuero pegado al cuerpo y unos tacos altos negros, hago ondas en mi cabello dejándolo suelto, ojos delineados, mascara para pestañas y labios rojos, perfume, crema con destellos de brillos en los brazos y piernas, listo cuando voy bajando muchos ojos me miran, mi padre, mi madre con odio, Giuliano, Kevin que repulsivo, mi Tio Sandro ¿que hace aquí? sus hijos e hijastros, me dirijo a la salida ignorando todos...

-Vamos Giuliano.- miro a mi guardaespaldas, haciendo que mi madre se ponga roja de odio, ja, ja, le gusta también? Carla ¿por que no te mueres? quieres todo lo mio.

-Vamos todos juntos.- acota mi madre.

-Nos vemos allí Pa.- salgo dándole una mirada retadora y de advertencia.

En el auto Giuliano lleva una mano en mi muslo y otra en el volante, sabe que tiene que follarme después, ahora estoy demasiado arreglada, llegamos, al bajar miles de flashes me dejan ciega, odio toda esta farsa, luego llegan mis padres y mi hermano, me mira y se relame los labios, que alguien me de una pistola y acabo con esa lacra.

Entramos al hotel donde se llevara la fiesta a beneficio de los Kevin¨s, que manera de haber dinero, trajes caros, falsedad, odio, asesinos, con smokin, ¿que loco es todo no? lo que uno hace por votos para una campaña, imagínate a Sebastian reelecto, me caigo de culo, me ofrecen vino espumante rosado, en eso sube Carla al escenario a comenzar con el "show" de donaciones para las fundaciones, la vez ahí toda risita y es mas falsa que beso de suegra, una yarara es buena a su lado, mi Tio la mira demasiado efusivo, lo que veo es su mujer o sea mi tía que no le importa nada es mas ella mira a mi padre, ahhh bien son un intercambio de cuñados, asco dan!!.

Me voy hasta la barra a pedirme un trago, en eso alguien se pone a mi lado, uff!!!

-Que chico es el mundo.- Ignacio me dice en mi oído.

-Vaya, ultimo lugar donde esperaba encontrarte.- le digo de reojo.

-Así que Nikeila Reyes la hija del Gran Senador.- me dice de forma irónica. Tiraste la pelota a la cancha equivocada mi cielo.

-Mucho gusto si Nikeila, ya lo de " hija del gran senador" ahorratelo.- lo miro con la ceja enarcada.

-No se si ahorrármelo, por ser la hija de...te creíste con todos los derechos de tratarme como quisiste en el estudio de mi hermana.- me mira furibundo.

-JA, JA, JA, no cielo yo no me creo nada, que te folles, a alumnas, profesoras, no es mi problema, pero no vayas haciéndote el amigo mio por ahí.- lo encaro enfurecida.

-Y ¿que te importa a vos con quien me acuesto?.- me encara.

-Por supuesto que me importa un carajo con quien follas, pero después esas estúpidas se hacen la película que son tu pareja y me traen mas problemas de los que ya tengo, o que te pensas que por tener dinero amo la vida que tengo? No, todo los días cuento el día en que llegue donde salte del techo!!.- le presiono el dedo indice en su pecho y luego le meto un empujón saliendo de ahí. Intenta seguirme pero Giuliano se le atraviesa alejándolo de mi, una vez llego afuera lloro desconsoladamente, siento unas manos gigantes abrazándome por detrás al ver unos tatuajes me doy cuenta quien es.

-Vamos.- es todo lo que me dice y lo que necesito escuchar, salimos del hotel y nos vamos a su departamento, follamos hasta la madrugada, el se queda dormido y yo salgo en silencio de ahí, le robo un cigarrillo de marihuana, lo enciendo y camino por las calles desiertas, hasta llegar a la mansión, ingreso con las sandalias en la mano, un silencio ensordecedor me recibe, raro. Subo a mi habitación inspecciono debajo de la cama, el ropero, el vestidor, baño, una vez todo revisado cierro con seguro me saco la ropa y me acuesto a dormir...

Un olor a carne asada me despierta, me asomo por la ventana y toda la "familia" reunida en el patio, me pongo mi trikini negra y bajo, al llegar al patio mi Tio esta haciendo hamburguesas a la parrilla, mi mama y su hermana hablan animadamente, mi padre prepara vasos de alcohol, y los "peques" en la pileta.

-Hija ven.- me llama mi padre.

Los demás me miran y yo ignoro a todos, me tiro a la pileta y de lejos veo a Giuliano, que me muestra mi celular, frunzo el ceño, ¿que querrá? que espere, nado un rato mas, y salgo a comer, luego voy a ponerme una bikini seca y un vestido, cuando estoy por salir, me intercepta Kevin, cerrando la puerta de mi habitación y apoyándose en esta.

-Tienes 2 segundos para que salgas.-me hago la fuerte.

-Como le va a mi hermanita favorita?.- me mira descaradamente.

-Te das cuenta lo asqueroso que sos? somos hermanos.- le digo apretando los dientes.

-En tus sueños.- me dice riéndose.

-Estas enfermo Kevin.- lo encaro.

-Por vos estoy enfermo.- y me lanza a la cama, lucho para sacarlo de encima mio, me intenta abrir las piernas y le meto una patada en su costilla izquierda, el me mete una cachetada fuerte tirándome al piso, me levanta de los pelos y me tira de vuelta a la cama.

-AYUDAAAAA!!!!!.- grito desesperada.

Patean la puerta del otro lado hasta que la rompen, entra Giuliano, agarra a Kevin de los pelos, y lo saca de encima mio.

-Que mierda haces?.- le dice enojado Kevin a Giuliano.

-Me vuelves a poner un dedo encima y muestro todo lo que me haz hecho.- digo agitadisima.

-La próxima vez no te salvas.- ríe como desquiciado y sale de la habitación.

-Necesitas hablar con tus padres.- dice Giuliano rojo de odio.

-No, siempre lo defienden a el.- lloro desconsolada.

-Te salgo de testigo.- me abraza.

-Van a decir que follo con vos y sale libre de culpa el.- y por primera vez le busco los labios y lo beso intensamente.

-Vamos.- me levanta cortando el beso.

-No, no, te aseguro que el día de hoy va a tener cosas mas interesantes.- salgo de mi habitación, como si nada hubiera pasado, agarro mi celular, y mi bolso.

Bajo y me estoy por adentrar a la oficina de mi padre cuando lo veo follando con mi tía, saco mi celular con cuidado y lo grabo, lo justo y necesario, subo de vuelta voy a la biblioteca y ahí esta mi madre con el tío querido, me convierto en camarografo porno, busco comida la guardo, botellas de vino y le pido a Giuliano que me lleve a la casa de mi mejor amiga, descargo todo en su computadora, mas lo esencial del celular de mi madre, que recién hoy se lo devolví, después de clonarlo todo, comemos con mi amiga, bebemos y me pide si la puedo ayudar esta noche en el Bar, va a haber una banda en vivo de música Country, me pongo una pollera tableada blanca, un top mangas anchas mostrando el ombligo blanco y mis botas tejanas blancas, parezco un ángel, ja, ja, ja.

Llegamos al bar traídas por Giuliano, esto se empieza a llenar de forma descomunal, uno de los cantantes me dedica una canción y yo le guiño el ojo, le estoy por llevar un trago a Giuliano y lo veo hablando con una chica, le dejo el trago y le doy una mirada de muerte, pasa el tiempo sigo sirviendo y el cantante me invita al escenario me pone un sombrero negro y me pongo a bailar al ver hacia el fondo Giuliano y la chica no se encuentran, termino de bailar, bajo, sirvo toda la noche y una vez cierra el bar me dan mi pago que se lo doy a mi amiga, por lo visto se fue en el auto de la chica, nos vamos en mi auto, la dejo en su casa y me voy a mi sitio favorito el techo de danza...

Subo y exploto en llantos, se que el y yo no somos nada, pero habíamos dejado en claro que frente al otro no hacíamos eso, para ahorrarme el dolor, se cambia de guardaespaldas y punto, alguien se sienta a mi lado, y no me hace falta mirar para saber quien es, pasa un rato y no habla nada, silencio y mas silencio nos acompaña.

-Ignacio quieres ir a tomar algo?.-lo estoy por usar por la bronca que tengo.

-Si.- me dice despacio.

-Si no tienes otros compromisos, por supuesto.- sonó medio toxica.

-Donde quieres?.- ignora lo anterior.

-Puede ser en tu casa?.- me levanto para ir donde el diga.

Se levanta y salimos camino hacia su departamento, llegamos, pone música, cocina, bebemos, nos besamos, follamos, me despierto culpa de los rayos de luz del sol, agarro mi celular son las 11 de la mañana, dios mio agradezco que sea domingo, tengo 20 llamadas perdidas de Giuliano, 1 de mi padre y 2 de mi amiga, ignoro todo, y me levanto, me dirijo al baño me doy una ducha cuando salgo Ignacio esta levantado en bóxer, le doy un beso corto y salgo rumbo a la mansión, cuando llego no hay nadie, me pongo al día con las tareas de la escuela,  llega la noche bajo a buscar la cena y me encierro en mi habitación, una nueva semana me espera, y lo primero que me tengo que encargar es cambio de guardaespaldas y un departamento para irme a vivir.

Lunes un nuevo día me espera, me levanto primero que todos, y no me quedo a desayunar, salgo rumbo a una cafetería en mi auto, veo que un auto me sigue, Giuliano seguro, estaciono y bajo ignorando todo a mi paso, me acerco al mostrador pido mi frapuccino frío preferido y 2 muffins de vainilla con chispas de chocolate, me siento a desayunar y le mando un WhatsApp a Valen...

N: por donde estas?

V: alistándome para ir a la escuela.

N: te espero en la cafetería que esta al lado.

V: la que es toda rosa?

N: si!

Al rato llega Valen va a buscar su pedido, y nos ponemos a hablar de todo, me cuenta que se acostó con uno de los músicos que toco la otras noches en el Bar, al mencionar eso me recuerda lo que Giuliano me hizo y recuerdo que cuando llegue a casa tengo que hablar con mi padre.

-Con cual?.- pregunto picara.

-El baterista.- responde riéndose.

-Y que tal?.- le guiño el ojo.

-10 puntos!!!.- contesta haciendo que larguemos una carcajada.

-Vamos para la escuela, antes que me arrepienta de entrar.- me levanto con pereza, entramos al aula y mi profesor de matemáticas me mira mas tiempo del que es normal, es un hombre apuesto debe tener cerca de 29 o 30 años, mis compañeras están con las hormonas a full.

La clase transcurre normal, suena el timbre para salir al patio y mi profesor  me pide un segundo para hablar con el...

-Señorita Reyes tome asiento un segundo.- me señala con unas manos gigantes, que te hacen estremecer.

-Si, Profesor dígame.- no entiendo que quiere ahora.

-El día viernes usted no asistió al colegio.- me dice apoyado en su escritorio.

-Así es.- le doy la razón, no se a donde quiere llegar.

-Luego por la noche me llego un correo electrónico con un mensaje de usted y el día domingo también.- se dirige a buscar su computadora.

-Un correo mio?.- no entiendo nada, ni siquiera tengo sus datos.

Gira su computadora y me muestra 2 fotos una salgo con el vestido de cuero y otra en bikini, no, no, no.

-Tiene que haber un error, yo ni siquiera tengo sus datos.- me levanto del banco aturdida.

-Le hackearon la cuenta?.- pregunta con una ceja enarcada.

-No tengo idea, yo le puedo decir que hice esos 2 días me los acuerdo clarito.- me froto la cara con las manos.

-No hace falta.- dice girando su computadora.

-No fui yo, se lo juro.- lo miro asustada, mas problemas en mi vida.

-Tranquila, vamos a dejar este tema acá como que nada paso.- se me acerca tanto que nuestros pies se chocan.

-Todo el colegio va a hablar de mi.- digo en un susurro bajando la cabeza, seré puterio para las revistas de chimento, y otro tema mas para discutir con mi padre.

-Nadie hablara nada, porque nadie lo sabe.- dice poniendo su dedo indice bajo mi mentón y levantando mi rostro, se esta acercando tanto que no es correcto esto...

-Gracias.- digo en un susurro, y salgo del aula sin mirar atrás, busco a mi compañera y la encuentro sentada bajo un árbol.

-Todo bien?.- pregunta mirándome de forma intrigada.

-Si, solo me recrimino porque falte el viernes.- miento descaradamente.

-Uff, que intenso que es, pero así de intenso es hermoso, ¿sabias que asiste a Velvet?.- me guiña el ojo mientras busco su celular.

-Al club de practicas sexuales?.- pregunto perpleja.

-Si, así es, todo un fuego el profe.- se ríe mostrándome una foto donde se lo ve al profe con una mascara tomando un trago.

-Te toco trabajar ahí?.- se me esta ideando un plan.

-Si, 7 veces, y las 7 veces va los días viernes nomas. A menos que vaya otro día.- dice elevando su hombro.

-Lo haz visto escoger pareja?.- me entro la curiosidad.

-No, no, el directamente va al segundo piso.- dice distraída mirando su celular.

Suena el timbre volvemos a ingresar al aula, y el día transcurre de los mas normal, al medio día salimos del colegio y le pido a mi amiga que me acompañe a ver departamentos para alquilar, vimos 2 y su teléfono sonó diciéndome que pidieron que se presente antes en el Bar, una buena va a salir temprano hoy.

Llego al tercer departamento, cuando estoy por salir Giuliano me agarra del brazo y cierra la puerta dejándonos a los 2 adentro.

-Se puede saber que te pasa?.- pregunta enojado.

-Te pagan para cuidarme o hablarme?.- me cruzo de brazos.

-Para cuidarte y también te follo, eso no entra en el pago- levanta una ceja y sonríe de lado.

-Follabas, Giuliano, tiempo pasado, no confundamos las cosas.- encaro la salida y vuelvo a agarrarme de los brazos sin soltarme.

-Tiempo pasado Nikeila?.- pregunta confundido.

-Si, así que ahórrate todo y pedile a mi padre que alguien mas haga tu servicio y tu ve a cuidar las espaldas de el.- le digo zafandome de sus brazos.

-Decile tu.- dice acercándose tanto a mi que puedo respirar su aliento mentolado.

-Si se lo digo yo no va a preguntar ni el porque, simplemente te va a despedir.- lo miro enarcando una ceja

-Y serias capaz de dejarme sin trabajo? Sabiendo lo que paso con mi hermana y mi sobrino?.- dice con la voz estrangulada.

Cierro los ojos con fuerza sin atreverme a mirarlo, Giuliana la melliza de el, tenia un niño de 4 años cuando su ex marido apareció como loco y los choco, su hermana salio despedida del vehículo muriendo al instante, su sobrino quedo con vida y esta al cuidado de sus abuelos, los padres de Giuliano, le conseguí los mejores abogados y el hijo de perra tiene prisión perpetua...

-No te atrevas a tocar ese tema.- le encaro con ojos cristalizados.

-Si me quedo sin laburo, ¿quien los mantiene?, aparte no se que mierda te hice?.- me mira con el ceño fruncido.

-Simplemente paso de vos Giuliano.- le digo sin mirarlo.

-No, es otra cosa y lo se, ¿por la chica del bar?.- pregunta enderezándose.

-Déjalo acá al tema.- intento irme y me vuelve a agarrar.

-Nunca me acosté con ella.- dice buscando mi mirada con urgencia.

-QUE DEJES EL MALDITO TEMA ACÁ!!!.- le grito enojada.

-NO!.- me responde en el mismo tono. Lo miro con la ceja enarcada.

-No voy a dejar el tema acá.- me habla con calma, y se empieza a agarrar los pelos con desesperación.

-No quiero hablar mas.- le digo.

-Me vas a escuchar Nikeila.- tiene el tamaño de la puerta, ¿como mierda lo muevo?

No, niego con la cabeza despacio, esto parece un drama de parejas y yo no quiero eso.

Me levanta en brazos me apoya contra la pared, agarra mi cabeza y me da un beso profundo, que me niego a seguirlo, me muerde el labio con fuerza haciéndome que gima de dolor, lo que hace que me bese con vehemencia, aprieta mi culo con fuerza, se sienta en el piso conmigo encima y busca desprenderse el pantalón con urgencia, hasta que su celular suena y suena, cortando el momento, me levanto e intento irme pero el me agarra, nos dirigimos a la salida, subimos cada uno en un auto diferente y me deja un mensaje de voz: conferencia de prensa de tu padre, te veo esta noche en mi departamento.

Imposible esta noche tengo otros planes.

Sigo viendo departamentos hasta que ya elijo el que mas me gusta, es sensacional, me voy a la mansión cuando mi padre regrese le comentare sobre este tema.

Llego a la casa del diablo, ja, ja, ja al ingresar Kevin esta con unos amigos en el living están bebiendo, fumando y sonando ¿Reggaeton? de fondo, tienen mujeres en sus piernas y nuestra querida primastra esta arriba suyo, subo directo haciéndole seña con mi dedo mayor, son asquerosos sus amigos, unos pubertos que están como perros en celos detrás mio.

Me baño, elijo un vestido rosa todo acordonado a los costados, sin corpiño, solo bragas, unas bucaneras hasta arriba de las rodillas en color blancas, pelo suelto, maquillaje y un tapado largo que cubra todo, mi celular, bolso, dinero, al salir de mi habitación Kevin esta apoyado en la pared, mi corazón empieza a latir rápido, solo esta la seguridad afuera de la casa, intento cerrar la puerta de mi habitación y el pone el pie, hago presión para apretárselo hasta reventarlo, el abre la puerta tan fuerte que vuelo al suelo, y la cierra con seguro.

-Andate.- le digo intentando levantarme.

-Te dije que iba a haber una próxima vez.- me mira con cara de loco.

-Andate porque grito.- le advierto tanteando algo en mi espalda para partirle la cara.

-Y quien te va a escuchar?, mis amigos? están fumando, follando y la música resuena por toda la casa.- dice aercandose despacio.

-Andate Kevin por favor.- le suplico entre lagrimas.

-No, no, no.- me dice y se me abalanza encima mio, lucho, lucho con todas mis fuerzas, pero su fuerza es de locos, no lo puedo mover, mete las manos buscando mis bragas, y le meto una cachetada fuerte, haciendo que el me arranque la ropa interior, le pego otra vez y otra vez, provocando que se excite, esto es asqueroso y repugnante, lloro fuerte e impido que se desprenda el pantalón, aun así fallo en el intento, le meto un puñetazo en la nariz haciendo que el me pegue una cachetada tan fuerte que me nubla la vista, se incorpora saca un preservativo de su bolsillo y se lo pone, intento levantarme y salir de la habitación y el me tira tan fuerte de los pelos que soy tirada al suelo, me abre las piernas y busca introducirse dentro mio, lo rasguño, le pego y de una estocada entra en mi interior,  haciéndome pegar un grito y llorar fuerte, me agarra las manos las une arriba de mi cabeza, y se mueve...

-Sos música para mis oídos.- me mira fuera de si, completamente loco. Esto es demasiado, se empieza a mover rápido, busca su liberación y sale, de mi interior, se lleva el preservativo y cierra la puerta, quedo en el suelo, llorando, me levanto corro al baño y vomito hasta lo que no tengo, me siento en el suelo y empiezo a llorar como loca, rompiendo todo...

Después de no se cuanto tiempo, bajo con la frente en alto, salgo, subo a mi auto y me voy a mi lugar favorito, el techo, llego, subo y me siento al borde, miro todo lo que sucede en la ciudad, no dejo de llorar, y pensar todo lo diferente que seria mi vida si hubiera nacido en otra familia, mi teléfono suena y suena y ni siquiera miro quien es, elijo sacarle la batería, no quiero saber nada de nadie, me quedo horas aquí, y es increíble que mientras este fuera de mi casa estoy bien, un viaje, una nueva identidad me vendría bien.

Decido regresar a la mansión a la madrugada, silencio absoluto, busco mi mochila del colegio, ropa, mis documentos y salgo de mi habitación, al bajar veo a ¿Giuliano entrando al cuarto de mi madre?, no puede ser cierto, me asomo a ver que pasa...

-Señora Carla a bebido demasiado.- dice el modo profesional.

-Tranquilo, estoy acostumbrada.- se intenta quitar la ropa.

-Bueno.- el se da la vuelta para salir, y ella lo toma del brazo.

-Me puedes ayudar?.- le pregunta tocándole el pecho.

-Con que señora?.- el la aleja delicadamente.

-No me digas señora Giuliano, ya estuvimos juntos.- dice ella haciéndose la enojada.

que no sea cierto lo que escuche, no, no, no, por favor Giuliano, porque esta vez si se acabo...

-Con que te ayudo.?.- pregunta, sin negar lo que ella dijo anteriormente.

-A desnudarme, si sabes como duermo.- se le acerca.

Es suficiente, basta por hoy, salgo corriendo de mi casa, estuvieron juntos, vuelvo a vomitar, me subo a mi auto y mi telefono suena informando la llegada de un mensaje lo abro y es Kevin: ¿que te pensas que con vos nomas follaba?, lloro fuerte y salgo de ese maldito lugar, llego a un hotel y pido una habitación, subo al primer piso, habitación 12, y paso la noche ahí, mirando el techo mientras lloro hasta quedarme dormida, la alarma suena, me dirijo al baño me doy una ducha, me pongo el uniforme del colegio, salgo del hotel me dirijo a la cafetería, suena mi celular, Kevin me envió un vídeo de Giuliano follando con mi madre, corro al baño de la cafetería vomito todo, y me cruzo al colegio, transcurre normal, voy a almorzar con mi amiga a su casa, paso el día ahí, a la tarde me dirijo hacia la oficina de mi padre, donde esta vez esta en una reunión, cuando sale y me ve, me dice que lo espere en su oficina...

-Que paso?.- pregunta mientras acomoda unos documentos.

-Quisiera mudarme de casa.- le digo sin mirarlo.

-Por que tenes la cara golpeada?.- se acerca a tocarme y le corro la las manos.

-Si estuvieras mas tiempo en casa sabrías.- le digo mirándolo enojada.

-Estoy ocupado Nikeila.- dice enojado.

-Si, me imagino.- respondo de forma irónica.

-Mudarte?.- me cambia de tema.

-Si, Sebastian, ¿cual es el problema?.- pregunto enojada.

-Como lo vas a pagar?.- pregunta enarcando su ceja.

-Ofreciendo mi cuerpo no se, no es de tu incumbencia.- me levanto ya no lo soporto.

-No, toda la prensa va a querer saber el ¿por que Nikeila Reyes, bla, bla?.- niego con su cabeza.

-No?.- pregunto incrédula.

-No, Nikeila, tema terminado.- y se sienta en su silla detrás de su escritorio.

-ERES UN MALDITO.- le grito dirigiéndome a la puerta

-Otra cosa, cuidado! no vaya a ser que la prensa se entere que te follas a tu cuñada.- salgo dando un portazo.

Voy a mi estudio de danza, y practico con mis compañeros, cuando mis piernas dicen basta, corto salgo de ahí, subo a mi auto y me dirijo al hotel donde me estoy hospedando, no volveré a la mansión, busco mi celular y llamo a Marcos el jefe de los guardaespaldas.

M: Señorita Nikeila, dígame.-

N: Cambio a Giuliano por otro hombre.-

M: Si señorita, ¿sucedió algo?.-

N: Carla solicito sus servicios.-

M: No estaba al tanto.-

N: Ahora lo estas Marcos.-

M: Hacemos cambios de Giuliano por Alfonso?.-

N: No, por Nicolas.

M: Perfecto, Alfonso retomara sus servicios con Kevin. Nicolas estará a primera hora con Usted.-

N: Te paso la ubicación.-

Ese nombre es repudiable, finalizo la llamada, y llamo a Ignacio para que venga, me ducho y lo espero en ropa interior, llega después de una hora y media, trae comida y bebida, cenamos, nos besamos, follamos hasta que suena la alarma avisándome que tengo que ir al colegio, salimos juntos el se dirige no se a donde, y yo me voy a la cafetería, me siento con mi orden a desayunar, reviso las notificaciones en mi teléfono cuando la silla frente a mi es corrida con violencia, un Giuliano, serio y enojado me mira, yo lo ignoro y sigo con mi celular.

-Ten los ovarios de mirarme y decirme las cosas en la cara!.- dice apoyando los codos en la mesa, yo río, niego con la cabeza, y sigo con mi teléfono.

-Eres una cobarde Nikeila, hacer las cosas por detrás deja mucho que pensar!.- intenta sacarme el teléfono, vuelvo a reírme, termino mi desayuno, intento levantarme me toma del brazo, haciéndome sentar de vuelta.

-Me vuelves a poner un dedo encima y mando que te despidan.- lo miro enojada.

-Hacelo!.- me reta con la mirada.

-Y que Carla se quede sin su juguete favorito?.- me le río en la cara.

-Que?.- pregunta confundido.

-Conmigo no.- me suelto intento levantarme y no me suelta.- por tu bien Giuliano suéltame.- le digo con los dientes apretados.

Me saca a rastras de la cafetería y me sube en su auto,-no voy a ir a ningún lado.- arranca y sale disparando de ahí, llegamos a su departamento, me agarra del brazo, entramos y cierra la puerta con seguro, bloqueándola con su cuerpo, ¿ahora como corro esta pared?, se queda ahí mirándome, y yo miro para otro lado.

-No me vas a mirar?.- pregunta con una ceja enarcada.

-Por que tendría que hacerlo?.- lo encaro.

-Por lo que hiciste.- me dice acercándose, y yo por inercia retrocedo.

-Hice lo que tendría que haber hecho.- sigo retrocediendo.

-Lo hubieras pensado antes de buscarme.- se sigue acercando, choco con la pared y quedo acorralada ahí.

-Tiempo pasado, ahora no te busque mas y seguirá así.- intento moverme y el me aprisiona el cuerpo con la pared.

-Por que pediste a Nicolas ?.- me busca con la mirada.

-Y ahora lo quiero follar a el!.- le digo irónicamente.

-Estoy hablando en serio.- dice largando un suspiro profundo.

-Y yo también.- me hago la desentendida.

Busca besarme y yo lo esquivo, el suspira fuerte...

-Queres tomar algo?.- ignora todo lo anterior.

-No, yo tengo colegio, no se si lo olvidabas.- me dirijo a la puerta.

-Te puedes quedar así hablamos?.- me mira de forma suplicante.

-De que?.- cruzo los brazos.

-Estas visitando a tus médicos?.- pregunta en un susurro, niego con la cabeza.

-Queres que te lleve?.- pregunta acercándose, vuelvo a negar con la cabeza, se cuanto tiempo queda, o no se imagina porque me la paso en el techo, antes que llegue ese día, yo ya salte.

-Hacelo por mi.- me intenta abrazar y lo vuelvo a rechazar.

-No, dije que no.- doy la vuelta para salir, y el me abraza de atrás, haciéndome que este a punto de llorar.

-Voy  estar siempre...-me susurra en mi oído.