En una humilde casa estaba una pareja llorando por la perdida de su hijo, ellos lo esperaban con ansias, no estaban bien económicamente pero querían formar su familia, tener hijos y educarlos llenos de amor y respeto.

Ellos eran personas de bajos recursos, pero eran honradas, de buen corazón y llenos de muchas ilusiones; en el hospital no le entregaron el cuerpo de su hijo, los médicos le dijeron que era mejor dejarlo porque ellos no tenían dinero para brindarle un sepultura digna, losbpadres exigieron ver el cuerpo de su hijo pero tampoco se lo permitieron, ellos amenazaron a los médicos con denunciarlos porque apezar de ser de bajos recursos sabian que los medicos estaban haciendo mal, era su hijo y no podía negarles ver y entregarles el cuerpo de su bebé.

Los médicos hicieron salir a la pareja del hospital bajo amenazas, ellos salieron del lugar destruidos por como sucedieron las cosas con du hijo, no tenían donde llorar a su bebé, para ellos todo eso no era normal, pero no tenían a quien recurrir porque los médicos le dijeron que cualquier cosa que intentarán era su palabra contra la de ellos que eran unos profesionales.

La pareja guardo como recuerdo de su primer hijo el conjunto que pretendian ponerle cuando le dieran el acta médica, pero tampoco olvidarian la fecha de nacimiento de su hijo 5 de abril de 2002.

La pareja día y noche no dejaban de pensar en lo sucedido con su hijo, pero tenían que seguir adelante; años después la mujer volvió a quedar embarazada, pero le aterraba los hospitales después de lo sucedido con su primer hijo, su esposo le dijo que buscarían un hospital diferente donde tener a su hijo.

En otra parte de la ciudad iba una mujer enojada conduciendo un carro blindado, era una mujer de la alta sociedad; la mujer de un poderoso mafioso, el hombre era el número uno en todo, era dueño de empresas que eran legales y en el mundo de la mafia era muy temido porque no le perdonaba una traición a nadie, no tenía piedad de ninguno; así mismo estaba dispuesto a entrenar a su hijo.

La mujer conducía y con su palma pegó en el volante, agregando un golpe a cada palabra.

— no…Ess… Justo…

La mujer estaba desesperada porque el niño estaba ardiendo en fiebre y quería llegar lo más pronto posible a la clínica, ella iba arrepentida de algunas cosas que había hecho sin pensar bien lo que hacía, no era justo para ese pequeño niño todo lo que se le venía encima con un padre mafioso.

—Lo siento bebé, no medí las consecuencias, no es justo para ti, pero ya no puedo hacer nada.

El niño lloró y lloró, sin importarle las disculpas que la madre le daba, el no entendía nada de lo que la mujer quería decirle, solo tenia desesperación por la fiebre y el dolor fuerte que sentía en su cabeza, para el niño era una tortura todo lo que estaba sintiendo, la mujer continuó reprochado.

—Estoy arruinando todo, ¿no? te arruine la vida llevándote con ese mafioso, yo lo amo, pero aprendí amarte más a ti.

Ella continuó cuestionando todas sus decisiones, especialmente esta, haber llevado a su hijo con su padre, pensaba si escapar de la ciudad sería la mejor opción. Pero ahora... Era demasiado tarde

su marido la encontraría donde fuera, así se escondiera debajo de las piedras, era el mafioso más poderoso. Ella había hecho su elección y ya era demasiado tarde para dar marcha atrás; tenía que seguir las reglas de su marido.

Llegó a la clínica donde atendieron a su hijo, el médico lo revisó y le dijo que el niño tenía una infección en la boca, ella no se había percatado de eso, pero si se dio cuenta que no quería comer nada.

Su marido la llamo para reclamar porque había salido sin seguridad de la casa, ella le explicó los motivos y de inmediato fue a la clínica con mucha seguridad, era el mafioso más temido, pero tenía otros mafiosos que quería su lugar y por eso debía cuidarse, no sabía quien era su enemigo o su amigo.

A la mujer le dolía ver al niño, sabía que ese dolor era el principio de todo lo que le esperaba al lado de su padre durante los entrenamientos que iba a tener junto a su padre, viviendo junto a traficantes de metanfetamina, delincuentes y asesinos.

 Ella tenía cargos de conciencia por arrastrar a un niño a ese mundo al cual él no pertenecía.

Pasaron los meses y la pareja de esposo estaban en un hospital esperando ser atendidos y rogando a Dios que todo saliera bien, después de ser revisada la llevaron a sala de parto, la mujer lloraba por los fuertes dolores, pero sabía que valía la pena luchar.

Después de tanto dolor la mujer escucho llorar a su hijo, se alegró y lloró de felicidad porque su hijo nació bien, ella moraba como limpiaban a su hijo con una sonrisa que aparentemente era difícil que se le borrara, rstaba alegre porque su hijo nacio el mismo mes que nacio su primer hijo, 9 de abril del 2005, no dejaba de sonreír al ver a su frágil hijo, era tan pequeño que ella dudaba si podía tenerlo en sus brazos sin desarmarlo. Su sonrisa se borró cuando vio entrar a uno de los médicos que la había atendido en su primer parto en el otro hospital, se acordó de las amenazas de él junto a otros dos; ella quedó en shock mirándolo, no podía moverse y tampoco hablar.

La mujer asustada sólo miraba al médico, este se acercó a ella y le dijo:

*tranquila, tu hijo nació vivo, ya lo vistes así que no tienes por qué preocuparte, todo ha salido bien en este parto.

La mujer no dijo nada, solo miraba al médico y el le sonrió y salió de la sala de parto, el no esperaba volver a encontrarse con ella, le dio pesar por lo que pasó con su primer hijo, pero era algo que se le salía de sus manos, no podía hacer nada para ayudarla; pero se alegraba que estuviera bien y con un nuevo hijo.

El médico preguntó por los datos personales de la mujer, le dieron toda la información de ella, su esposo y el nombre de su hijo BRAILER GUZMÁN APONTE; el médico sonrió y guardo toda la información en una memoria.

A la mujer después de tres días le autorizaron la salida, la pareja estaba feliz por su hijo, aunque no han olvidado a su primer hijo, para ellos era muy difícil pero tenían que salir adelante y más porque ahora tenían un nuevo integrante.

La mujer, ELOÍNA APONTE y su esposo DAGOBERTO GUZMÁN eran una pareja feliz, llena de amor mutuo, él trabajaba con personas de un hotel, ellos le pagaban por sacar a pasear los perros, por hacer cualquier mandado o arreglar algo que estuviera a su alcance, mientras que su mujer se dedicaba a cuidar de su pequeño retoño.

Un día estando en el parque con los perros se acercó un hombre ofreciéndole un trabajo, le dijo que siempre lo veía paseando perros, que eso no era una buena paga, que si trabajará con él podía ganar en un día lo que se gana en un mes, el hombre ya lo tenía pendiente, ya sabía cada uno de sus movimientos, de donde vivía, su esposa y su hijo.

— con lo que yo te voy a pagar le puedes dar una mejor vida a tu esposa e hijo.

Dagoberto se sorprendió, no se explicaba como el hombre sabía tanto de él, después de eso él sintió temor por su familia.

— ja, ja, ja ¿te sorprende? sé más de lo que te imaginas.

Dagoberto se asustó, no sabía que hacer o decir, pero el hombre le contó de lo que se trataba el trabajo; él inmediatamente lo rechazó, no quería esa vida para su familia, prefería pasear perros y mandados, pero no tener esa vida ocultándose de lo que ibaiba a hacerrefería andar libre y sin esconderse de nada y de nadie, él no quería la vida fácil de esa manera; vendiendo drogas y extorsionando a personas que luchaban día a día en su trabajo para seguir adelante, él no iba a escoger ese camino.

Así pasaron los días y él hombre continuaba vigilando a Dagoberto, no se iba a dar por vencido, cuando eran las tres de la tarde Dagoberto iba camino a su casa, pero se sentía vigilado, ya le estaba dando miedo la insistencia de aquel hombre y más por su esposa e hijo.

Cuando Eloína se le pasó un poco el miedo de haber encontrado al médico que los amenazó en el hospital donde dio a luz a su segundo hijo, fue que ella decidió contarle, pero le dijo que sintió sarcasmo en sus palabras y que no era sincero con lo que le decía. Dagoberto no sabía que pensar, tenía otra preocupación más que era el hombre que sabía mucho de ellos, ella notó su preocupación y pensó que era por lo que ella le había contado, pero él le aclaro que tenía otra preocupación mayor que ese médico; él le contó todo lo que estaba pasando, ella se asustó y le dijo que no aceptara ese trabajo, que prefería salir con su hijo en brazos a trabajar antes que él elija esa vida.

Pasaron los años y el hijo del mafioso ya tenía 9 años, su padre empezó a entrenarlo desde los 7 para que se fuera haciendo a la idea de lo que le esperaba en el futuro, a sus 9 años ya sabía usar las armas, lo estaban enseñando a pelear cuerpo a cuerpo, su madre estaba preocupada por el futuro de su hijo, y más porque le preguntó el porqué su padre lo obliga hacer todo ese entrenamiento, pero ella no sería quien le contara el motivo.

Su hijo NEDER al terminar el entrenamiento fue a la oficina de su padre, quería saber por qué de lis entrenamiento, al entrar su padre lo miró y le preguntó:

— ¿Qué quieres?

NEDER: quiero saber por qué me están enseñando a defenderme y el manejo de armas.

— ¿Estás seguro que quieres saberlo?

NEDER: si, pero quiero la verdad.

— ¡bueno! Te estoy entrenando por qué eres el heredero de mi imperio, de mis empresas legales y mis negocios ilegales.

NEDER: ¿negocios ilegales?

— ja, ja, ja ¡no te asustes! Pero déjame decirte que soy el mafioso más temido que pueda existir, quiero que seas igual o peor que yo, que la gente te obedezca, que te tengan miedo con solo mirarlos, pero así mismo ganarás enemigos, mira toda la seguridad que tenemos, es por eso.

NEDER: y... Sii no quiero nada de esto?

El hombre al escuchar lo que dijo su hijo llenó de ira, no estaba dispuesto a ser cuestionado por su hijo de 9 años, ya la decisión estaba tomada y no había marcha atrás, estaba dispuesta a llegar hasta lo último, pero eéltenía que ser su sucesor y por eso le dijo fuerte.

— ¡¡lo vas a hacer quieras o no!! Para eso te críe… tú eres mi heredero.

NEDER: ¡¡pero papá!! Soy tu único hijo ¿ cómo me vas a exponer?

— para eso son los entrenamientos, continúa con ellos que cuando cumplas los 18 te voy a ceder el trono.

NEDER: ¡no lo puedo creer! Soy tu único hijo… Date cuenta, soy tu sangre o ¿es que no lo soy? dime la verdad.

El hombre no estaba dispuesto a aguantar más, tenía que ayudarlo a poner su corazón duro y que tuviera sed de venganza de todo aquel que intentara hacerle daño, tenía que sembrar en el odio para poder obtener los resultados que él ha deseado de su hijo, y él tenía que poner el granito de arena y más por la información que había recibido años atrás de un médico que actualmente trabaja para su familia.

— ¿Estás seguro que quieres escuchar la verdad mocoso?

El niño vio el cambio que tuvo su padre, puso una mirada malvada y una sonrisa de triunfo que le dio escalofrío y con su voz temblorosa dijo:

NEDER: si.. quiero la verdad.

— bueno, tu lo has pedido.

— este es un hogar temporal para ti, porque no eres hijo mío y tampoco de mi esposa, pero te crié como tal, para que fueras mi heredero.

El niño no podía creer lo que le decía aquel hombre, era totalmente un desconocido para él, le decía todo sin ningún sentimiento de culpa o de lástima.

— tus padres te abandonaron a pocas horas de nacido porque no tenían como mantenerte, mi esposa que estaba en el lugar quiso adoptarte como nuestro hijo y aquí estás, ah… Y después de eso tuvieron otro hijo y tal parece que lo quieren mucho, tú fuiste el que no fue de su agrado y no sabemos por qué; continúa con lo tuyo que pronto serás el dueño de todo.

Neder no dijo nada más y salió de la oficina de su supuesto padre, la madre escucho todo lo que su esposo dijo, la mujer estaba dolida y fue a ver a su hijo, él le reclamo, pero ella no podía decir lo contrario de su esposo, tenía que seguir y sostener lo que aquel hombre había dicho.

La mujer fue sincera en decirle que lo amaba mucho como su hijo, también le contó que ellos no podían tener hijos y por eso lo adoptaron, el niño no entendía como sus padres pudieron abandonarlo, le preguntó a su madre si sabía o conocía algo acerca de la familia que lo tiro como un objeto; la mujer negó todo, no podía decir nada para no arruinar los planes de su esposo, porque ella sabía de lo que el era capaz.

El niño se encerró en su cuartoe, las blancas paredes eran testigo del sufrimiento del niño, eso lo hizo pensar muy bien en la oferta de su supuesto padre, ahora más que nunca iba a entrenar duro, tenía que ser más despiadado que su padre, si alguien lo iba a rechazar tenían que tener un motivo y él se los iba a dar.

Neder empezó a entrenar duro, su padre se dio cuenta que funcionó la conversación que tuvieron, salió de su casa con una sonrisa victoriosa a entregar un cargamento de drogas, Neder después que termino el entrenamiento camino un poco alejándose de la mansión, se quedó observando un árbol con un gran hueco que nunca había visto porque estaba un poco retirado de la mansión.

Neder se acercó por curiosidad, al estar cerca escucho movimientos dentro, sacó su arma y llego hasta la entrada apuntado y dijo:

NEDER: ¿quién anda allí? Salga o disparo.

Neder no tenía miedo, ya sabía como defenderse, él se acercó más y escuchó una voz que le dijo que no disparará y salió del árbol, Neder se sorprendió al ver a un niño con la ropa sucia y muy deteriorada, los dos quedaron con la mirada fija uno al otro, pero después salió otro niño en las mismas condiciones del primero.

Neder los observaba apuntando con su arma a los los niños y les dijo:

NEDER: ¿ quiénes son ustedes y que hacen aquí?

El niño que había salido primero fue quien respondió, que él era OSWALDO y el otro niño era su hermano menor OSMEL, dijo que estaban allí porque no tenían donde vivir y no tenían familia; Neder los interrogó, Oswaldo era el mayor y tenía 11 años y Osmel tenía 9 años, ellos le suplicaron que no los corriera de ese lugar porque no tenían a donde ir, le contaron Neder que sus padres eran unos alcohólicos y no les importaba su bienestar, que nunca les ha importado.

Neder les dijo que podían quedarse, que hablaría con su padre para que los dejara quedar en la mansión con ellos, Neder vio una buena oportunidad para tener amigos, él no iba a la escuela porque los profesores iban a darle las clases a la mansión, él iba a convencer a sus padres para ayudarlos.

Efectivamente, Neder convenció a sus padres, les dijo que les dieran entrenamiento y estudios para que fueran su mano derecha en los negocios, el gran mafioso no dudo en aceptar el pedido de su hijo, ya estaba seguro de lo que quería y lo iba a dejar tomar decisiones a temprana edad.

Neder fue en busca de los hermanos, les dijo las condiciones para tener un techo y comida, también les contó el porqué utiliza armas siendo un niño, a los hermanos no les importó vivir bajo las condiciones de Neder, los dos le dijeron que iban a ser sus más fieles amigos, que estaban dispuestos a todo; las cosas se dieron, los tres se volvieron inseparables, estudiaron juntos en la mansión, entrenaban y jugaban.

En casa de Eloína estaban decorando la casa para celebrar el cumpleaños de Brailer número 6, las tres personas estaban muy felices porque todo estaba quedando como querían.

Un hombre llegó y tocó la puerta para que abrieran, las tres personas emocionadas pensaron que eran los que ellos estaban esperando y abrieron, ellos se sorprendieron al ver a un hombre armado frente a ellos; cuando la mujer grito el hombre le disparo en el pecho, después lo hizo con el hombre y por último el hijo; los tiros se escucharon en toda la cuadra, una mujer que hacía obras sociales en el barrio vio desde su carro el hombre salir de la casa, Eloína, su esposo y su hijo se dieron cuenta también y corrieron encontrándose con la señora de las obras benéficas quien les grito que subieran al carro, la señora sabía que esa era la casa de ellos y estaba segura que el atentado era para ellos, el niño lloraba asustado y Dagoberto y su esposa estaban preocupados porque sus vecinos y amigos posiblemente perdieron la vida en su casa, un atentado que era para ellos.

Dagoberto sabía quien lo había hecho, era el mismo hombre que siempre le insistía wue trabajará para el, pelo como no pufo convencerlo decidió acabar con la vida de él y su familia, pero no le salió como quería; el lo lamentaba por sus amigos pero ellos no sabían que algo así podía suceder.