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Mi Querida Maestra

El trabajo soñado

Camilhe

Ser maestra en un escuela como en el Colegio Internacional para Señoritas, entrar alumna es que tus padres tengan ingresos anuales que superen 9 o 10 cifras, no es exagerado, ellos solo les importa lo que pueda pagar para que su hija estudie en este prestigioso colegio, dónde al salir no solo serás una excelente joven, si no que puedes llegar hacer una gran profesional o una excelente esposa de un hombre muy rico, dependerá de tu decisión. Para ser maestra debe tener una hoja de vida excelente, no basta con ser buena maestra, debes ser muy buena en todo y poseer grandes habilidades con los idiomas.

— ¿Porque mentir? — le pregunté a Frida Tibers, quien por años fue amiga de mi madre quien también fue maestra en el colegio.

— No estamos mintiendo, — me responde ella, quien es ahora es una supervisora en el colegio — solo omitimos este tipo de información que al final solo hará que nieguen tu entrada como maestra titular.

— ¿Pero me dijistes que sería suplente? — para ser titular debe tener un nivel de estudio más avanzado que el que yo tengo.

— Vamos a lograr hacerte titular — me dice la mujer y sus ojos azules brillan — la maestra de segundo se va a retirar y espero que te den su grado.

Esa tarde luego de la entrevista me informaron que sería maestra suplente y no titular de segundo grado, sin importar el cargo, estaba feliz porque estaría a cargo de ese salón por el resto del año. La rstra estaba enferma y no volvería hasta recuperarse.

Las bonificaciones son muy buenas en el colegio, ya que si eres buena maestra y tus alumnas te quieren, sus padres personalmente le dicen al director cuánto pagarte por los bonos, claro ellos entregan su aporte para el bono de las maestras, y como dije, estos padres son muy generoso. Ese año termine con segundo y me tocó el tercer grado para el próximo año. Me volví la mejor suplente.

— Señorita Bailey el director quiere verla — me habla Sofía la secretaria de la dirección mientras en el salón de maestros miraba el horario que me acaban de entregar.

— Gracias Sofía — le agradezco a la mujer que me sonríe y luego estiró mi falda.

La vestimenta es importante, falda larga a las rodillas, camisa manga larga, corbatín con un botón que tiene la insignia del colegio. Es el uniforme de tercero color azul. Cada grado debe tener un color en uniforme del maestro, así nos identificamos.

Cuando llegó frente de la puerta Sofía toca y al escuchar la orden me hace pasar.

Henrry Vitto es el director del Colegio internacional, lleva en el puesto casi 10 años, no conoció a mi madre pero sabe muy bien quien fue.

— Siéntate Camhile — hago lo que me pide mientras el mira pirvsu ventana, las niñas empiezan a llegar a su primer día.

Luego Lo veo buscar entre sus papeles.

— Camhile, tu grado este año es algo… — suspira — especial — sus ojos negros me miran — solo serás la suplente, ya hablé con Victoria y me dijo que tardará unos meses su recuperación, pero necesito que entiendas lo importante de este grado.

Me entrega una carpeta dónde están las fichas de tres niñas.

— Ellas son: Andree Scott Benne, Ghinger Rossi O'Conor y Hada Vertte D'Luca — miro las fotos de las niñas que deben tener entre 6 y 7 años, hermosas y con sonrisas inocente. — ellas no son tan problemáticas cómo son sus padres.

Se sienta a mi lado, toma una de las fichas. La niña de cabello negro y liso por ensima de sus hombros.

— Andree es callada, habla poco y no se comunica con sus conpañeras, no tiene amigas, sus padres la han llevado a todos los médicos y psicólogos del mundo y no tiene nada aparente, pero por alguna razón no habla, mucho. Su última maestra le gritó porque perdió la paciencia y ya no trabaja para nosotros.

Lo miro sorprendido.

— Ghinger, — rubia cabello rizado que parece oro y ojos azules — es todo lo contrario. Conversa mucho, sabe comunicarse, es sincera, solo que es caprichosa y su papá, el señor Rossi le da todo lo que ella desee. Su madre está ausente y por esa razón el se encarga por completo de su educación, es controlador y me pidió tu hoja de vida — levantó una ceja — lo hace con todas sus maestras, solicita una copia. También pidio para que sacarán a la maestra porque Ghinger no congenió con ella, no le gustó así que su padre no la quería como maestra.

— Hada… — cabello negro abundante, mirada profunda — ella y su madre son algo así como las brujas del colegio — lo último me lo dice inclinandode y en voz baja — son caprichosas, malcriadas y tienes más dinero que todos aquí. Por esa razón la señora Vertte D'Luca tiene tanto poder de decisión en este lugar. Su abuelo fue uno de los fundadores del Colegio Internacional para señoritas, ya que él tenía varias hijas y quería la mejor educación para ellas.

Cierra la carpeta y la pone sobre su escritorio.

— No debí recordarte que está noche será la reunión con los padres, necesito que les dejes una buena impresión, así seas solo la suplente. — me mira, estoy ya asustada, el año pasado no me fue tan mal, estan padres caprichosos pero sus hijas las pude sobrellevar.

Pero luego de lo que me dijo el director no voy a dudar que estoy nerviosa, necesito mantener este trabajo. Pagan bien y puedo tener a Alison con una niñera en casa, si Alison es la razón por la cual tuve que mentir en mi hija de vida. Es mi hija de cuatro años, y mi problema no es tener una hija, es que soy madre soltera.

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...NOTAS DEL AUTOR...

...Hola! Bienvenidos a otra de mis historias, si ya has leído alguna antes sabes que acostumbro a hacer finales siempre felices, pero no quiere decir que está termina así....

...Mi querida maestra, la escribí el año pasado, espero que les guste. Tiene mentiras, drama, romance y amor ...

...No juzguen a Camilhe, conoce su historia y la de Franco también. Espero les guste 😊...

...Luego le traigo las imágenes mientras les dejo está 👇 hecha con Canva e imágenes generadas con dream.ai ...

Reunión con los padres

Camilhe

Esa noche los padres solo hablaron de lo que les gusta a sus hijas y yo logré tomar nota de todo. En vez de ser la maestra me sentí la sirvienta complaciente de los caprichos de todas las niñas.

Suspiro cuando tomo lista de cada padre, me fijé más en esos tres de los que hablo el director, arrogantes, caprichosos. La que me trató muy mal fue la mamá de Hada Vertte D'Luca,  no me decía Maestra si no Suplente y dejo claro que solo fue porque no quería ser descortés, pero solo espera que la maestra vuelva para que ella se encargue del salón.

Al mes todo iba bien, las niñas eran inteligentes, no daban problemas con sus tareas, solo Ghinger en dos oportunidades que llego sin hacerla pero es una niña hábil, me dijo que no saldría al receso y ella las haría durante tiempo. Ella misma se puso su castigo, yo me quedé a observar  y note que ella lo hacía conmigo también. Me miraba en silencio, como si quisiera saber más sobre mi.

Un día tuve lia visita de Franmy Scott Benne, la mamá de Andree.

La atiendo dentro del salón ya que las niñas estaban en clases de música en ese momento.

— ¿Dígame señora Scott? — la mujer como su hija tiene el cabello liso, muy largo y con flequillo que sobresalen sus ojos color miel.

— Andree me informo sobre ¿un proyecto de escritura? — miro la mujer,no viene a reclamar solo quiere confirmar lo que le dijo su hija.

— Si, Andree tiene la letra muy linda para su edad — le veo sentir orgullo — el proyecto será en grupo. Lo hice así porque necesito que se apoyen en sus debilidades y ayuden en sus fortaleza.

— La coloco en grupo  con Ghinger Rossi, Andree no le gusta ella — me dice y observó su mirada, protege a su hija, cree que al estar con alguien que sea distinta podría hacerla sentir mal.

— La idea es integrarlas a todas — le aseguro y me acerco a ella — quiero ayudarla, su hija es muy inteligente pero es tímida. Ghinger no lo es, y tampoco es muy aplicada. Quiero que se apoyen.

— Pero Franco es muy difícil — no sé de qué habla.

— ¿Franco? 

— Franco Rossi es el papá de Ghinger, no creo ..

— Yo trataré de hablar con él — ella no está segura, pero igual me dió su voto de confianza.

Ahora solo quiero saber si Franco Rossi me dará problemas, pero me di cuenta que no fue así, el hace lo que su hija la haga feliz, Ghinger estaba más que feliz con el grupo junto a Andree, ya que ambas tenían mucha de mi atención. Quería que Andree se reincorporará hiciera amigos y que superara su timidez.

El interés de Ghinger por el proyecto era tanto, que dejo de salir al receso y se la pasaba en el salón con Andree y conmigo. Es una niña alegre y muy comunicativa. Una vez me trajo

Un pastel de fresas porque le dije que me gustaba mucho.

— La cocinera la hizo para usted maestra — me sentí tan emocionada que la abrace y bese en la cabeza.

— Gracias, la compartiré contigo y Andree — le digo y se puso muy feliz.

Vi como ella y la tímida Andree empezaron hacerse amigas. El proyecto no era más que realizar un cuento que luego sería leído en el salón.

La madre caprichosa

Camilhe

Ghinger y Andte hicieron uno de un panda mágico que si le frotabas la pansa te concedía deseos. Dedian hacer un libro del cuento con imágenes, en la clase de artes les pedí que ilustraran su cuento en un afiche. El mejor fue el de Hada y Victoria Gregori, su cuento hablaba de un dije en forma de estrella que llevo a su dueña a la luna. 

Ghinger se sintió mal al ver el afiche de Hada en la cartelera y no el de ella, no note lo competitiva que era, pero con Hará mucho más. Note que ambas competían hasta por mi atensión.

El día de la presentación del proyecto les pedí que debían esforzarse y pedir la colaboración de sus padres. Cada día habían dos presentaciones. Las niñas decoraban con flores, pasteles o se vestían de princesas dependiendo de su cuento. Cuando les tocó a Ghinger y a Andree, solo ví a la mamá de André con una decoradora dónde había un enorme panda de peluche que en su panza tenía un corazón, era Chulu, así lo nombraron las niñas y ellas se vistieron con vestidos blancos y orejas de oso. Rei porque ambas se veían hermosas. Cuando están a punto de empezar llegó el señor Rossi. Al contrario de su pequeña hija el tenía cabello negro pero si su ojos azules. Me incómodo su mirada y más cuando me entregó una caja llena de minis osos de peluches que serían entregados a todos los presentes. 

La presentación de las niñas termino y todos le aplaudieron. Ghinger fue la que leyó pero Andree hizo la representación de la niña dueña de Chulu.

— ¡¡¡Hermoso!!! — digo y aplaudió las niñas me abrazan por la cintura emocionadas cuando el director que era un invitado las felicito.

 — ¿Maestra puedo quedarme con usted? — Ghinger me pide sentsrse a mi lado mientras hacen la otra presentacion, que se trataba de un astronauta que vivía en la luna.

Hacer la próxima decoración les llevo un buen tiempo y ese tiempo lo usamos para merendar con la comida que el papá de Ghinger había traído. Si, pastel de fresas.

Se notaba el cariño que la niña sentía por en mi, me lo demostrarba a diario. Sin embargo, su padre nunca se nos acercó.

El problema comenzó con Hada y su presentación, su madre hizo lo posible por demostrar que no le importa gastar, cuando se trataba de su hija. Desde la decoración hasta la comida fue un derroche de dinero, sin embargo, las niñas no estaban preparadas y se equivocaron mucho y como Hada es malcriada y estaba estresada con la presencia de su madre, tiró el cuento al suelo, cuando le pedí que se calmara al equivocarse varias veces.

Por todo eso su madre me grito y me culpó de mis preferencias, y aunque le expliqué y le dije que tendrían otra oportunidad su palabra fueron claras.

— Tu no volverás a tener otra oportunidad como maestra — el director me miró y sabía que estaba en problemas.

Trabaje un mes tan difícil, porque Hada cómo su mamá, repetían que yo prefería a Ghinger y hasta la misma  Andree me dijo que a ella le llamaba la atención por cualquier cosa.

Trate de ser parcial y alejarme de la niña rubia, pero vi cuánto le afectó. Sus tareas incompletas y a veces ni las hacía, solo para que yo le dedicara el receso en ayudarla y tener tiempo con ella, su apego era evidente, pero era algo inocente, note que mis demostraciones de cariños, mis abrazos y mi atención le hacían brillar los ojos como si fuera feliz.

Pero un día al llegar el director me llamo antes de clase y ahí estaba Victoria, la maestra titular de mi grado pero estaba sola, a su lado La señora Vertte D'Luca.

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