En una tarde de lluvia una dama que irradia elegancia, educada desde niña para ser la prometida del Duque Fitz, entra ante una gran sala, su delito es intentar matar a la mujer que su prometido ama.

-Señorita Raquel del Valle, la acusación es muy seria como se declara.

-Soy inocente

un llanto la hace voltear y girar los ojos, era aquella joven de apariencia angelical, rubia y con un vestido con muchos adornos.

-Miente majestad, ella me intento matar estuve en cama una semana por su culpa.

Junto a ella el joven que es su prometido aún la abraza para que deje de llorar, intenta consolarla y la mirada hacia Raquel es de desprecio y odio.

-Majestad, fui sacada de mis aposentos en la academia, sin ninguna orden, soy huérfana pero soy una noble mi rango es de Baronesa, lamentablemente no tengo territorio pero mi título hace que tenga derechos, no acepto los cargos por qué yo no hice nada, el té que menciona la señorita no se lo di yo, jamás he tratado con ella, nunca la he molestado aunque pude haberlo hecho, el joven a su lado sigue siendo mi prometido, que clase de mujer se enreda como un hombre que tiene un compromiso.

El joven duque se siente ofendido por su comentario pero no puede decir nada, no quiere perjudicar a la joven rubia, quien no deja de temblar.

-Señorita Raquel, usted niega haber intentado matarla?

-Asi es, quiero ver las pruebas, no se me ha explicado por qué me acusan

El emperador solicita las pruebas al joven Duque quien le entrega unos documentos, el Emperador los leé atentamente y su seño se frunce.

- Joven duque acaso piensa que soy idiota? estás pruebas no son como para haber citado a la señorita, ni siquiera sirven para llamarle la atención.

-Pero majestad ahí dice que el té fue comprado por ella.

-Aquí dice que ella fue a la tienda pero no dice que compro o si compro algo, tampoco tiene testigos que la hayan visto poner el veneno en el té.

Señorita Raquel puede retirarse, tendrá una compensación por el mal rato.

-Majestad, quiero que usted firme la disolución de mi compromiso, soy huérfana y no tengo tutor, también que el Ducado me entregué la herencia que la duquesa dejó a mi nombre y la indemnización correspondiente, también solcito un cambio de academia, quiero estar en la academia de Medicina.

-Claro se le dará lo que pide, joven duque, usted y yo tenemos que hablar usted está acusando a alguien sin pruebas, así que me debe una explicación.

Raquel sale de la sala, no se toma la molestia de voltear a ver a su prometido, regresa a la academia, para tomar un baño y estar relajada.

En su balcón solo piensa en que todo ha salido bien, ella llegó a este mundo siendo una niña, en el funeral sus padres recordó su vida anterior, su sorpresa fue más al saber que estaba en el cuerpo de una villana, una novela romántica, dónde ella acosaba a la dulce protagonista y el joven duque la ayudaba, sabedora de su destino seguido el rumbo de la novela, se concentro en sus estudios, los cuales eran sencillos, con su prometido solo estuvo un año en casa, cuando entraron a la academia ella hizo de cuenta que no se conocían solo en vacaciones convivían.

Con los años pasando la duquesa enfermo y murió cuando ellos tenían 12 años, fue entonces que el joven Duque se refugio en una amiga, para Raquel la muerte de la duquesa fue triste pero estuvo tranquila, al regresar a la academia todo transcurrió normal, ella solo veía de lejos como esos dos empezaban una relación, ella le hizo saber al padre de él que estaba dispuesta a romper el compromiso, pero jamás le dijo a su hijo, al contrario lo regaño por fijarse en alguien más, por eso el joven Duque se enojo con Raquel, el Duque murió en un accidente al caer de su caballo, los jóvenes quedaron solos a cargo de un tutor asignado por el Emperador

Ahora son jóvenes de 15 años, ella sigue siendo menor de edad, lo que no le permite salir de la academia, tiene que cumplir 17 años, para poder ser libre, la solución que encontró es ser cambiada es academia, el albacea del Ducado acepto será trasladada a la academia de medicina, ella posee magia de curación.

-Señorita está usted segura?

-Si, no quiero estar donde esos dos están, podrían querer recriminarme de nuevo.

-Bien, firmaré la autorización, solo que la herencia le será entregada hasta que cumpla 17 años, gracias a la emperatriz las mujeres en su situación son libres de manejar su dinero y propiedades.

-Es un alivio, no quería casarme para poder recibir lo que me pertenece.

-Prepare sus cosas, firmaré los documentos para que pueda salir de la academia y haré los trámites para ir con usted a la academia de medicina.

-Muy amable, quedó al pendiente.

Así el tutor realizó todos los trámites, el Emperador le hizo llegar el documento donde el compromiso quedó disuelto, ahora ella era libre, algo que la hizo feliz.

El día que estaba lista para salir de la academia, su exprometido llegó a verla, para despedirse.

-Es en serio que te vas, no era necesario

-Disculpe joven duque, nosotros ya no tenemos ningún compromiso, que mi educación fuera en la academia era para cumplir con ser una buena esposa para usted, ahora no tiene caso, tengo magia de curación así que deseo que en estos tres años me enseñen a utilizarla, seré una doctora, le deseo suerte, me despido.

-Raquel, nunca me viste como tu prometido, si tan solo fueras diferente...

-Eso es verdad jamás lo vi de esa manera, ahora usted ha conocido a alguien que le gusta, es libre de casarse con ella.

-Raquel...

Él ya no pudo decir nada por qué ella subió al carruaje y se puso en marcha, el joven duque solo veía como desaparecía por el camino.

-Raquel, si tan solo me hubieras querido 😔, pero siempre que intente acercarme, me gustabas, pero tu indiferencia hacia mí hizo que me fijara en alguien más, pero yo.

Así Raquel va en camino para hacer realidad su sueño, no será la villana, los protagonistas ya están juntos así que ella no se preocupa por eso, solo tiene que esperar unos años por ser completamente libre.

Para Raquel estar en la academia de medicina es fascinante, ahora puede ser ella misma sin tener que seguir el guion de una novela, a pesar de que la academia está en una provincia cerca de la ciudad, ha recibido cartas del joven duque, pero ella no las abre y las manda de vuelta, se pregunta por qué las mandara, pero los días se convierten en meses, su entrenamiento se basa en controlar su maná para poder cerrar heridas y diagnosticar a las personas, tiene compañeros y compañeras, solo son pocos los que tienen esa clase de magia, pero cualquiera que quiera aprender medicina puede hacerlo, la academia se fundó para tener un centro médico que atienda al reino y se ha convertido en una de las más importantes.

-Señorita, tiene una visita, la espera en el recibidor del edificio.

-Que hace aquí joven Duque.

-Raquel cómo estás, por qué no recibes mis cartas.

-No entiendo para qué las manda, entre nosotros todo está dicho, ya no hay compromiso, por favor retírese tengo clases.

-Raquel, solo quería ver qué estuvieras bien, yo...

Tu rostro siempre es sin expresión cuando hablas conmigo, eres fría por eso pensé que si yo hablaba con otras jóvenes tu voltearías a verme, incluso te lleve ante él Emperador para que me hablaras y ...

-Que😡 acaso lo planeaste todo?, 😮‍💨 escúchame bien yo jamás he sentido nada por ti, me has hecho un favor al romper el compromiso.

-Yo no lo rompí fuiste tú, yo si quería el compromiso.

-Heee!!

Raquel no sabía qué pasaba, para ella el amor de los protagonistas era enorme y el duque se enamoraba profundamente de su amada, que carajos pasaba, era lo que ella se preguntaba.

-Desde que llegaste a mi casa, mi madre te crío como la futura Duquesa, pero nunca quisiste acercarte a mí, acaso yo tuve la culpa, dímelo!!

-Martin, disculparme pero no sé que decir, no entiendo que sucede, me culpaste por querer envenenar a tu amada, por qué vienes a decirme eso ahora.

-Yo esperaba que por lo menos dijeras algo al verme con ella que...

-Estás loco, acaso querías que te rogara para que no me abandonaras, que suplicará por tu amor, por tu atención y para no perder mi lugar como tu prometida, si es asi estás loco, por favor vete y no me molestes más.

-Raquel, por favor perdóname, nosotros podemos retomar el compromiso.

-No, claro que no, quiero ser una doctora, quiero ayudar a la gente, vete y sé feliz con tu amiga, amante o lo que sea, este matrimonio jamás me interesó.

Raquel salia del recibidor confundida, dejando al joven duque ahí solo, él se cuestiona por qué ella es así, cuando llegó la observó por la ventana y jamás la había visto tan feliz, le dieron celos solo de pensar que ella era feliz sin él, como es qué cambio tanto

El joven duque se retira, vendrá a buscarla una vez más, intentar que ella lo acepte de nuevo, su amiga intento ayudarlo, pero el plan no salió como ellos pensaban, al contrario, Raquel no sufrió, no lloro y mucho menos rogó, solo son su rostro serio se defendió y logo romper el compromiso.

-No puedo darme por vencido, ella no puede dejarme así.

Raquel continúa con sus clases y se cuestiona que fue lo que sucedió, pero no dejará sus planes atrás, probablemente más adelante ellos se enamoren.

Con el pasar de los meses tiene prácticas en diferentes regiones del reino, así que las veces que la ha visitado el joven duque ella no está ahí, ahora ella está por cumplir los 17 años cosa que le alegra muchísimo, pero este día la han mandado a una región norte, ahí ella pasará sus últimos días de entrenamiento, la región es fría, pero se ve agradable.

-Mi señorita, no cree que debemos quedarnos en el campamento.

-No mira esta casa es bonita además la región me gusta, la casa la estoy rentando, pero quiero comprarla más adelante.

-Pero como vivirá sola, bueno viviremos por qué yo no la dejaré.

-Gracias, te lo agradezco mucho, mi tutor dice que empezará a realizar los trámites para mi herencia y la indemnización, no tendremos lujos, pero tu pago no te faltará

-Mi señorita no es eso, mi única familia es usted, cuando se case yo cuidaré a sus hijos.

-Eso será difícil, quien se va a querer casar con una huérfana, tengo título pero no tierras, 😅

-Pero entonces puede casarse por amor, el hombre que la quiera tendrá suerte.

-Eso el tiempo lo dirá

Raquel vivía solo a unos minutos del campamento, como estaría una buena temporada ahí decidió rentar una pequeña casa, así podrá estar sola, va a trabajar y regresa a casa, últimamente la zona ha Sido atacada por mercenarios, por eso la emperatriz mando doctores a la región, también para que las personas de ahí puedan ser atendidas

Así su vida transcurre por otro año más donde el trabajo se intensifica, hay más ataques incluso ha tenido que pelear con su espada, lo que no le gusta la idea de matar a alguien no le agrada pero por defender a personas inocentes lo hará, su entrenamiento con espada es desde niña en la que es muy buena y su técnica es perfecta, también el territorio donde están es de su ex-prometido quien tuvo que salir antes de la academia para poder asumir el mando, lo ha visto en algunas ocasiones, pero lo evita lo más que puede, solo sabe que se comprometió con la protagonista y para ella es algo que ya sabía.

Hoy llegó a casa y está totalmente cansada, pero una visita inesperada la saca de sus pensamientos

-Has llegado

-😮‍💨🙄 Que hace aquí joven Duque.

-Nunca más me dirás por mi nombre

-No somos cercanos, asi que es mejor asi, estoy cansada, podrá decirme a qué vino.

-Me sorprendí al saber que estabas en una casa aparte, si no te gusta el campamento podías ir al Ducado.

-No es necesario, estoy bien aquí.

-Solo vine a ver cómo estabas, la zona es peligrosa por qué no regresas a la capital, puedo hablar con la emperatriz, para que te asignen lejos de aquí.

-Duque, no quiero irme de aquí, gracias por su preocupación, pero en verdad no es necesaria.

-Raquel me preocupas y eso no puedo controlarlo.

-Duque usted solo debe estar preocupado por una mujer y esa es su prometida, yo no soy importante para usted, por favor solo haga su trabajo como duque de esta región.

-Así que sabes de ella, por lo que veo nunca te interese, está bien ya no me voy a preocupar por ti, que tengas una buena vida.

El joven Duque salió de la pequeña casa, era bonita y acogedora, si tan solo ella pudiera aceptarlo, le daría todo, la intención de estar con su amiga fue para que Raquel lo viera y sintiera celos, pero logro todo lo contrario, termino por alejarla y ahora sí termino en un compromiso que no quiere.

Raquel solo sube a su cuarto, toma un baño y se duerme, solo piensa en que la trama ha cambiado, pero ella realmente jamás se interesó en él, sería cruel quedarse si no lo ama

Después de la visita del joven Duque, Raquel va a su trabajo, le gusta lo que hace solo en algunas ocasiones se aburre, al venir de una era más moderna y con tecnología es complicado, pero con los años se ha acostumbrado, está vez para distraerse va a la escuela del pueblo cercano ahí acostumbra ir para enseñarles a los niños y jugar con ellos, en su vida pasada nunca tuvo hijos y le hubiera gustado ser madre, talvez ahora pueda lograrlo.

En camino a la escuela puede notar que han llegado nuevos caballeros, se nota que el conflicto es más serio.

Durante la mañana juega con los niños, pero una explosión los saca de su alegría, eran muchos mercenarios que atacaban la escuela y habían incendiado la bodega del pueblo, ella resguarda a los niños en un pequeño salón donde en la puerta no deja pasar a nadie, al tener entrenamiento logra contener a varios, pero son muchos, sobre todo no son mercenarios ordinarios tienen entrenamiento, se nota en el manejo de sus armas.

-Presiosa, baja esa espada, puedes lastimarte.

-Quienes son, dejen a los niños váyanse.

-Tú vendrás con nosotros, las mujeres bellas son valiosas.

-🫤 Puede intentarlo si quiere, pero no soy fácil de vencer

El mercenario le lanza un golpe y las espadas chocan, a lo lejos puede ver qué los caballeros han llegado, es cuestión de tiempo para que llegue la ayuda debe proteger a los niños, mientras lucha ella se distrae por qué otro mercenario intento entrar, pero lo pudo detener no sin antes recibir un golpe del otro, se pone de pie, ella sangra de un costado, la herida es profunda, solo ve borroso y puede ver qué un caballero se acerca para someterlos, ella intenta mantenerse de pie, pero no puede así que los niños intentan ayudarla, pero cae.

El caballero logra vencerlos a todos, son demasiados así que pone a los niños la salvó y los llevan a un lugar seguro, él puede ver la herida de la chica, pero solo la cierra y le pasa maná, así no seguirá sangrando, la carga sobre su espalda para llevarla al campamento, en el camino le preguntan quien es ella, pero no sabe, solo defendía a los niños.

Cuando Raquel despierta solo ve al caballero que la ayudo dormido en la camilla de al lado, tiene un golpe en la cabeza, no se ve que esté más herido.

Ella intenta ponerse de pie, pero se siente mareada.

-Estás bien, sigue descansando, tu herida fue grave, la cerré, pero perdías sangre así que te pase mamá, por eso estás débil.

-Gracias, caballero, los niños están bien.

-Si están bien.

-Que alivio ☺️

-Me llamo Ernesto y tú.

-Soy Raquel, soy doctora, pero dos veces por semana voy a la escuela a dar clases.

-Mucho gusto, fue bueno que estuvieras ahí, solo así los niños se salvaron.

A los dos les llevaron de comer y platicaron un rato, para Raquel es fácil hacer amigos, Ernesto se siente a gusto platicando con ella, Raquel le cuenta que estudio primero en la academia, omitiendo a su ex, Ernesto por su parte también le cuenta que el también estudio ahí, también sin decir un pequeño secreto que tiene.

-En la academia nunca te vi me parece que eres más grande que yo cuántos años tienes

-Cumpliré 18 años y tú

-Estoy por cumplir mi mayoría de edad en unas semanas por fin cumplo 17 años 😁

-Que bien, debemos hacerte un pastel de cumpleaños.

-Claro ese día haré una fiesta en mi pequeña casa, te invitaré, si es que no te vas.

-No, me quedaré aquí por lo menos un año, también depende de la guerra, el capitán de los caballeros es mi maestro, soy del reino de Dark, estaré en este reino dos años más.

-Asi que regresaras a tu reino, eres un noble?

-Algo parecido, luego te cuento.

-Bien.

Para Raquel no era raro ver a jóvenes de otros reinos venir a la academia y luego irse, varios de sus compañeros eran así. Pero Ernesto es amable y le cae bien.

Ella fue dada de alta, Ernesto se ofreció a acompañarla, en el camino platicaban del trabajo y de otras cosas.

-Raquel, vives sola?

-No, vivo con una compañera, pero no es necesario que me acompañe, puedo ir sola no está lejos.

-No es molestia vamos.

-Bien, vamos.

Al llegar a su casa, Ernesto pasa, la casa le parece muy bonita y acogedora, la compañera de Raquel baja para recibirla, pero se da cuenta de que más que compañera parece su doncella, algo extraño ya que ella dice que no es una noble.

Raquel sube a cambiarse, en lo que Ernesto está en la pequeña sala.

-Caballero quiere té

-Hee, si gracias

-En un momento se lo traigo.

Al probar el té, es de buena marca, no es barato y todo dentro de la casa es de buen gusto, desde los muebles, los adornos, incluso las tazas de té.

Estaba tan entretenido mirando por la ventana el jardín trasero cuando, unos golpes muy fuertes en la puerta suenan era la voz de un hombre, como la doncella se retiró él abrió la puerta.

-Quien demonios eres tú, que haces en la casa de Raquel.

Ernesto se molestó, pero reconoce a la persona en la puerta.

-Duque?, pero por qué hace escándalo.

-Donde está Raquel me dijeron que fue herida, quítate.

-Duque no puedo dejarlo subir ella se está cambiando, está bien, si salió herida, pero ya está bien, por favor cálmense.

-Y tú quien eres, que relación tiene ustedes, ella es...

-😡 Nada, no soy nada.

Raquel bajaba las escaleras con un vestido sencillo y su doncella entraba por la puerta trasera, fue por fruta para hacer una tarta.

-Raquel como estás, no estás herida.

Decía el duque con preocupación.

-Duque, que hace aquí, porque ya había quedado todo claro entre nosotros.

-Raquel quien es él.

-Eso a usted no le importa, él puede ser mi amigo, mi amante o mi prometido, pero eso a usted no tiene por qué importarle.

Ernesto estaba rojo por las palabras de Raquel, pero sobre todo, por qué el Duque venía a buscar a una doctora que no es una noble, para él en su cabeza solo era una razón, el duque quería a Raquel para amante solo para jugar con ella, ella es amable y bonita, cualquier hombre la querría a su lado, pero es huérfana lo que para una familia del rango de duque es imposible de aceptar, solo los veía discutir y reacciono cuando el duque intento tocarla, lo que hizo que se pusiera entre los dos.

-Duque por favor debe controlarse, no la toque.

-Quien te crees que eres, soy un duque y tú eres un simple caballero, puedo hacer que te castiguen

-Basta, Ernesto déjame hablar con él, ve atrás dónde está el jardín espérame ahí, no me hará nada, por favor

-Segura

-Sí.

Ernesto salió hacia el jardín, era la primera vez que quería gritarle a ese imbécil que el es un príncipe y si lo toca puede provocar un problema más grande.

Raquel estaba molesta ahora tenía que explicarle a Ernesto la situación, ella no quiere que la vean diferente, si se enteran que ella fue la prometida del duque pueden tratarla diferente, pensaran que fue abandonada.

-Duque me dan ganas de darte un golpe, quedamos en que no me molestarias, por favor haz tu vida ya estoy cansada.

-Es por él verdad dime quién es.

-Si quieres saber si es mi amante, si pues si y que

-Acaso tu te has entregado a él, no dime qué no es cierto dímelo

-Ya, si me entregué a él, ahora que lo sabes vete y no vuelvas.

El duque no podía creer lo que ella decía su mente se nubló por un momento, tomo su espada y quería salir al jardín, pero Raquel lo detuvo con su espada, el duque sintió el filo en su cuello.

-No te atrevas, él no sabe quién soy, solo quiero una vida tranquila, no sé porque ahora te importo, nunca dijiste nada, solo te enredaste con ella siendo yo tu prometida, si tan solo no lo hubieras hecho, ahora yo estaría en el ducado, no me culpes por tus errores, de ahora en adelante no voy a tolerar ninguna intromisión más de tu parte, más te vale dejarlo en paz, o jamás te voy a perdonar.

El duque quedó helado por esas palabras, claramente le decía que su estupidez fue lo que causó todo.

-Entonces tú te habrías casado conmigo.

-Claro, ya era un compromiso, si tú lo hubieras respetado, yo no tendría motivos para irme, así que déjanos en paz.

El duque bajo su espada, ahora ya no hay nada que hacer, la ha perdido para siempre, solo se da la vuelta, para salir y en la puerta solo se despide.

-Adios, te amó.

-Queee, acaso se volvió loco 😨😮‍💨