Jara estaba en la biblioteca con un montón de libros a su alrededor, tenía una tarea por hacer y entregar, estaba tan concentrada y metida en la lectura que no le importaba quien estaba a su lado, ni quien la observaba, ni mucho menos cuanta gente estaba ahí, su propósito era concluir con su deber para luego ir a su casa y ayudar a su madre con las tareas del hogar.
Cuando por fin terminó su tarea, salió a las corridas de la biblioteca, sin querer choco con el chico más lindo de su aula, pero a ella no le interesaba si era lindo o no, solo quería correr y salir de ahí, pero este la detuvo, tomándola del brazo muy fuerte.
- ¿Por qué no tienes cuidado?, más torpe no podías ser- Le dijo enojado Brian.
- ¿Quién te crees que eres?, suéltame quieres- Ella le grito.
- Ya sé quien eres.
- No te conozco.
- Vamos a la misma clase.
- No me importa eso, hazme el favor y suéltame, que tengo prisa.
- ¿Estás segura que quieres que te suelte?
- Si- Ella gritó.
Cuando él la soltó puso su pie para que ella tropezara y cayera por las escaleras.
Jara cayó y se lastimó, enfadada tomó barro del jardín cerca que tenía ahí y volvió a subir las escaleras, y le tiro a la cara.
- No vuelvas a meterte conmigo cerebro pequeño. Le dijo y se fue muy molesta.
- Esto no se va a quedar así, cabeza de libro-Le grito.
Jara al escuchar eso se río sola.
Ya tendrás noticias mías, no sabes de lo que soy capaz estúpida, hablo solo.
Jara era una estudiante muy inteligente de la secundaria, estaba en su último año y ya se estaba preparando para hacer su ingreso a la universidad, su sueño era estudiar en la UBA, recibirse, trabajar y ayudar a su madre. Por ese motivo no tenía mucha relación con sus compañeros, solo con los más cercanos que eran sus amigos.
Brian era uno de sus compañeros, pero Jara jamás se involucró con él, es más ni le registraba bien. Brian era el chico más lindo del aula y de la escuela, todos en la escuela lo conocían porque, sus padres eran gente de dinero, pero a Jara eso no le importaba, para ella era una persona más, una persona insoportable y mala, pero una persona más.
Jara llegó a su casa, se fue directo a su habitación a cambiarse, su mamá ya había preparado la comida.
- Hola mamita- Con un beso la saludo.
- Hola mi reina, hoy toca comer canalones.
- Que delicia ma.
- ¿Qué te paso, que estás caminando así?.
- Me caí al salir de la biblioteca, no me fije y tropecé ma.
- Tienes que andar con cuidado.
- Si mamá, no te preocupes es solo un raspón.
- Bueno anda come que nos tenemos que ir a la tienda.
- De acuerdo mamá.
La madre de Jara tenía una pequeña tienda de ropa, así que ella iba siempre a ayudarla por las tardes.
Siempre llevaba su mochila de la escuela para que cuando las ventas sean bajas, ella aproveche a estudiar. Solo faltaba meses para terminar la secundaria, pronto arrancaría una nueva etapa de su vida, fuera de la secundaria y a distancia de sus compañeros.
Al día siguiente se levantó muy temprano para alistarse he ir a la escuela.
- Buenos días, mamá.
- Buenos días, amor, ¿cómo está tu pie?
- No es nada mamá, ya me duele menos.
- ten cuidado siempre hija.
- Si ma.
Mientras desayunaba le llegó un mensaje de su amiga.
- Hola amiga, ¿terminaste la tarea?, hoy la tenemos que entregar, ayer se me complico y no pude acercarme a la biblioteca.
- Hola Gema, si, si la termine, no te preocupes ya la tengo lista.
- Sos una genia amiga.
- Nos vemos en la escuela.
- Dale, besitos 😘
Jara tomó sus cosas, se dependió de su madre y se fue.
Cuando llego a clases se cruzó con Brian, y este la empujó, ella cayó, él le había pedido a sus amigos que luego la tirarán agua en la mochila.
- Que es lo que te sucede idiota- Jara le grito.
Todos sus compañeros vieron la escena y reían.
- Te dije que esto no se quedaría así- En son de alegría y chiste le decía
- ¡ho no!, grito
Rápidamente, abrió su mochila y la tarea que tenía que entregar se había mojado, se lamentó y se enfureció. Jara furiosa se levantó del piso y le miró directamente a los de Brian y le dijo.
- ¿Te das cuenta lo que hiciste?- Le grito.
- Parece que hoy alguien no podrá entregar la tarea- Con ironía y sarcasmo le dijo.
- ¿Te divierte hacer todo esto?, acaso tus padres no te enseñaron a ser una buena persona, no te enseñaron modales, por lo visto no los tienes, que lastima. Espero que cumplas todas tus expectativas. Pero lo dudo, personas como vos no encajan en todos los lugares.
Brian se sintió mal al escucharla, era verdad, sus padres no le habían enseñado ciertas cosas porque siempre estaban ausentes.
En ese momento llegó el docente y preguntó que había pasado. Brian y sus amigos escaparon enseguida y se fueron a tomar sus asientos.
Jara quedo sola ante todo el desastre y habló.
- Perdón profesor, fui torpe me tropecé y caí, no me di cuanta que había agua ahí. Pero enseguida lo limpió.
- Mejor siéntate, ahora llamamos a la portera para que limpie este desastre.
- Gracias profe.
- Bueno, chicos les había pedido una tarea para hoy, antes de empezar la clase traigan aquí los trabajos.
Todos se levantaron y entregaron la tarea. Jara se quedó sentada porque su tarea estaba empapada de agua.
- ¿Jara donde está tu tarea?- Preguntó el docente.
- Aquí lo tengo, pero está mojada, cuando caí se me mojo.
- ¿Lo tienes para volver a imprimirlo?.
Jara asintió con la cabeza y una sonrisa en su rostro.
- Te voy a dar unos segundos para que vayas a dirección y le digas a la secretaria que te lo imprima.
- Muchas gracias profe.
Jara salió contenta del aula, mientras el docente continuó con la clase.
Gema no tuvo oportunidad de ayudar a su amiga en su apuro, porque llegó al mismo tiempo que el docente, así que directamente se sentó.
Jara volvió de dirección y le entregó la tarea y le dio las gracias al profesor por esa oportunidad. Tomó asiento y se concentró en la clase, le pidió un cuaderno a su amiga para tomar apuntes. Cuando terminó la clase Jara y su amiga se fueron al pequeño parque que tenía la escuela.
- ¿qué paso, amiga?, ¿qué fue todo eso?
- eso pasó por no haber venido ayer a la biblioteca y dejarme sola.
- perdón, amiga, ensérió lo siento, mi papá se puso mal y tuve que ir rápido a casa.
- Si amiga, lo sé no te preocupes. Tuvimos suerte más bien.
- tienes razón.
- pero cuéntame que sucedió.
- ayer cuando salía de la biblioteca me cruce con Brian, sin querer le choque, se enojó y me empujó el muy maldito.
- que desastre, y que hiciste.
- agarre barro del jardín y le tire a la cara y bueno hoy se vengó de eso.
- ¿no tropezaste entonces?
- no, él me volvió a empujar, caí y sus amigos buitres me tiraron agua.
- Que imbécil que es. ¿Y porque no le acusaste?
- de que va a servir, seguro va a tomar represalias y volverá a querer hacer algo. Y la verdad no tengo energías para perder mi tiempo en cosas bajas.
- si mejor.
- y dime como esta tu padre.
- le subió el azúcar, y bueno ahora está en observación.
- ojalá pronto se ponga bien amiga.
- si, también quiero eso.
Brian no dejaba de pensar en Jara, él creía que ella le acusaría ante el profesor, pero no lo hizo. Ya era hora de volver a la siguiente clase. Brian quedó pensativo, después de lo que ella le había dicho de sus padres también fue un golpe, esas palabras fueron fuertes y le dolió.
- chicos hagamos un poco de silencio que la clase ya empezó. Dijo la profesora.
Todos tomaron sus respectivos asientos.
- hoy todos van a cambiar de asiento, cada uno ponga su nombre en un papel y póngalo aquí. Las mujeres de este lado y los hombres aquí. Primero las chicas van a empezar.
Todos protestaban, pero a la docente no le importaba eso.
- bueno vamos a empezar, Gema saca un papel.
Gema abrió el papel y dijo Diego.
- bueno los dos se van a sentar ahí. Continuamos, Carlos saca un papel.
Carlos tomó un papel y dijo Gabi.
- ustedes se van a sentar del otro lado.
Y así sucesivamente les estaba ordenado la maestra en sus nuevos asientos.
- Brian te toca. Dijo la profesora.
Brian saco el papel lo abrió, y cambió de cara.
- ¿y quién es?, pregunto la profesora.
- Jara.
Jara cuando escucho su nombre quería protestar, pero no hizo. Tomó sus cosas y se fue al asiento que la profesora le asignó. Brian también tomó sus cosas y fue a lado a Jara. Cuando terminó el sorteo la profesora continuó con la clase.
- de ahora en adelante todos los días se sentarán así, la profesora de química hizo una queja, como están sentados entre amigos hablan mucho en clase y no toman atención.
Los chicos protestaron, pero no había forma de que la profesora cambien de opinión.
- todos días tendré que aguantarte. Le digo enojado Brian.
Jara le ignoró, estaba muy atenta a la clase. No tenía deseos de dirigirle la palabra.
Brian se sintió más incómodo al no recibir ninguna respuesta. Le miraba atentamente, nunca la había mirado con tal atención, se dio cuanta que tenía unos ojos muy hermosos de color celeste, su piel no era tan blanca, sino que tenía el bronceado más perfecto. Jara se dio cuenta de que él la observaba y giro para mirarlo.
- deja de mirarme quieres.
- veo lo fea que eres. Jamás tomé atención en eso, ahora que me doy cuanta sos la más fea de la clase.
- y crees que eso mi importa, cerebro pequeño. Con una sonrisa irónica que le dijo.
- terminarás la secundaria soltera por fea.
- Tu inteligencia solo te permite decir babosadas. Me das pena.
Brian se enojó más, no veía que la clase termine para estar a distancia de ella.
Para Jara también era incómodo estar con él, lo despreciaba por los últimos acontecimientos, habían pasado 4 años juntos, pero ambos siempre estuvieron a distancia, nunca habían tenido comunicación ni se dirigían la palabra. Jara sabía que él siempre fue engreído y altanero, jamás tendría amistad con alguien así, por eso siempre le ignoró. Ahora le costaría un poco más ignorarlo porque le tendría cerca todos los días.
Cuando terminó la clase Jara tomó sus cosas y con Gema salieron de la clase. Juntas se fueron a tomar un helado.
- amiga no sé cómo voy a aguantar a ese estúpido todos los días.
- que mala suerte tuviste amiga. Más bien yo no me salve, ja, ja, ja.
- será una tortura para mí.
- ¿te hablo?
- me dijo que soy fea y que por fea voy a terminar soltara la secundaria.
- quien se cree para decirte así.
- no me dolió que me diga eso. Vos sabés que ahora lo que en menos pienso es en tener novio.
- pero debe haber alguien que te guste amiga. Dime quien es.
- ja, ja, ja, no hay nadie.
- sos una mentirosa, a mí me gusta Lucas.
- ¿tu amigo del otro curso?
- así es. Pero solo me voy a conformar con ser su amiga, porque a él le gusta una compañera de su curso.
- uh, que bajón.
- ¿y a vos quien?
- te dije que nadie. Mejor termina tu helado y vamos a la siguiente clase.
Cuando iban a clase Jara se cruzó con los ojos más lindos que jamás había visto. Este se acercó y les preguntó donde quedaba el aula B, no puso decir nada porque estaba apreciando lo lindo que era. Gema se dio cuenta que su amiga se había perdido y habló.
- nosotras vamos haya, si quieres podemos ir juntos.
- muchas gracias chicas, mi nombre es Thiago. Soy nuevo en la escuela, mis padres se mudaron por temas de trabajo.
- Bienvenido Thiago, ella es Jara y yo soy Gema.
- mucho gusto chicas.
Jara en compañía de Gema y Thiago entraron al aula, Thiago no sabía donde sentarse porque todos tenían un asiento destinado.
- no te preocupes ahora viene la profe y seguro te asignará un asiento. Dijo Gema.
- está bien.
- ¿vos donde te sientas Jara?- le pregunto Thiago.
- Haya, a lado del chico más estúpido de la clase. El que tiene los ojos claros. Le señaló con el dedo.
- por lo visto no te agrada mucho.
- la verdad no, no nos llevamos bien porque es arrogante. Pero vos no te preocupes contigo no se va a meter.
- ¿por qué crees eso?
- sos más inteligente que él.
- gracias por el cumplido.
Jara solo sonrió, y en ese momento llegó la docente.
- bueno, chicos tomen sus asientos, vamos a continuar con la clase, ¿y tú quien eres?. Preguntó.
Jara corrió a su asiento, con cara de decepción.
- ¿quién es tu nuevo amiguito?. Preguntó Brian.
Jara le lanzó una mirada de indiferencia y luego le ignoró.
Mi nombre es Thiago me asignaron a esta clase dijo, y le dio un papel. La profesora enseguida le asignó un asiento delante de Jara.
Jara sonrió al ver que le asignaron un asiento casi a lado de ella.
- sonríes como una tonta- le dijo Brian.
- Nadie te preguntó nada, porque no solo te callas, escuchar tu voz es irritante eh insoportable.
Brian una vez más se enfureció al escucharla, él tenía relación y comunicación con todos sus compañeros, pero con ella era algo difícil.
La profesora daba la clase y Jara tomaba mucha tención, Brian la observaba, se daba cuenta de que se veía muy bonita tomando atención en la clase, Jara giro la cabeza para cruzarse con la mirada de él, cuando los dos me miraban Jara le regalo una pequeña sonrisa. Brian jamás había visto esa sonrisa tan encantadora. Jara después de regalarle una sonrisa continuó con lo suyo, que era tomar atención a la clase.
- eres muy bonita tomando atención a la clase- le dijo Brian.
- Lo único que sale de tú boca es pura basura.
- uno trata de ser amable contigo y mírate.
- ¿hablas de amabilidad?, ¿Dónde quedó tu amabilidad esta mañana cuando tú y tus amiguitos me tiraron al suelo para luego arrojarme agua?
- ¿por qué no me acusaste?
- tú y yo somos muy diferentes.
Termino la clase, ella tomó sus cosas y se fue, Gema la siguió y Thiago se fue con ellas.
- Chicas les invito un helado. ¿qué dicen?
- si vamos dijo Gema.
- si vamos. También dijo Jara.
Brian veía como se iba y se alejaba, ¿que tanto miras?, le dijo uno de sus amigos.
- no nada, vamos que los chicos nos esperan.
- ¿amigo en que piensas tanto?, te noto como perdido. Le dijo su amigo a Brian.
- Te diste cuenta de que Jara es muy bonita.
- ja, ja,ja. Amigo esta mañana le hiciste una maldad y ahora sales con que es bonita, estás loco.
- Mejor olvida todo lo que te dije.
Jara estaba contenta compartiendo un helado con su amiga y su nuevo compañero.
- gracias por ser muy amables conmigo chicas.
- no pasa nada, si necesitas algo solo nos dices.
- pues me gustaría ponerme al día con las materias.
- Jara te puede ayudar con eso, es buena en clase. Dijo Gema.
- ¿eso es verdad Jara?
- no tan buena, pero si te voy a ayudar. Mañana te traigo algunos apuntes.
- muchas gracias.
- Bueno chicas fue bueno conocerlas, pero tengo que irme. El fin de semana mi madre hará una fiesta por el cumpleaños de mi padre. Me gustaría invitarlas.
- ¿Pero no habrá muchos señores en la fiesta?, pregunto Gema.
- Si, pero también habrá muchos jóvenes.
- bueno si nos das una invitación, iremos.
- se van a divertir, yo no conozco a nadie así me harán compañía.
- ¿seremos tus damas de compañía?.
- algo así, ja, ja, ja.
- nos vemos mañana en clase, chau chicas.
Chau, dijeron ambas.
- Jara.
- dime.
- te gusta Thiago ¿verdad?.
- es lindo.
- más lindo que el estúpido de Brian.
- en eso tienes razón amiga.
- sabes con qué me salió el estúpido ese, me dijo que me veía bonita cuando tomaba atención a la clase.
- ja, ja, ja. Y que bicho le picó para hacerte ese comentario.
- no lo sé. Pero eso me dijo.
- y vos que le dijiste.
- que nadie le pidió su opinión.
- ¿será que le gustas?
- ¡no!, que dices, ahora la loca sos vos.
- bueno es solo un decir. Te imaginas que él se enamore de vos.
- ¿por qué lo haría?.
- sos bonita, inteligente, con metas.
- ja, ja, ja. Mejor que nunca pase eso porque estaré en problemas.
- es verdad, Laura te matará, es su chico.
- ya me voy a casa que mi mamá me debe estar esperando nos vemos mañana, chau Gema.
- Chau Jara.
Jara se fue rápido a su casa, tropezó con una roca y cayó, Brian la ayudo a levantarse.
- ¿estás bien?. Le pregunto.
- si estoy bien, gracias.
- si deseas te acompaño a tu casa.
- a que se debe tanta amabilidad se puede saber.
- somos compañeros, si tú me verías en esa situación ¿no harías lo mismo que yo estoy haciendo ahora?.
- después de lo que me hiciste esta mañana, lo pensaría muy bien.
- como dijiste vos y yo somos muy diferentes, eso es verdad, así que estoy seguro de que tú si me ayudarías.
- Ya se me hizo tarde.
Jara como pudo se marchó, tomó el colectivo y se fue directo al negocio de su madre, se le había hecho tarde, le mando mensaje a su madre para decirle que se veían haya y que le lleve algo para comer.
Jara se ponía a pensar en porque era amable Brian con ella, ¿acaso está tramando algo?, tengo que estar alerta con él, se decía. De él se puede esperar cualquier cosa. Su amabilidad me asusta.
- en que tanto piensas hija mía- le dijo su madre.
- en nada importante mamá, es solo una tarea que me tiene así.
- ¿es una tarea o un compañero?
- ¡Mamá que dices!
- conozco muy bien a mi hija para saber que no es una tarea.
- tienes razón mamá.
Jara le contó un poco lo que le había pasado, la discusión que tuvo con su compañero y que tenía un compañero nuevo que les invito a una fiesta.
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