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AMO A MI EX

01

Sentada en el sofá del salón de la mansión Gonçalves, Lucy miró distraídamente el reloj de su muñeca, 21:32 minutos, suspiró derrotada, hoy es el cumpleaños de su marido, Daniel Gonçalves, vicepresidente de En el Grupo Lacoste, una de las personas más importantes de Estados Unidos, Lucy incluso invitó a su familia a participar en una fiesta sorpresa, pero ¿dónde está el cumpleañero? Lucy se preguntó mentalmente mientras ponía una sonrisa falsa.

—Mi hijo llega tarde, ¿ha pasado algo?-Preguntó Consuelo distraídamente.

En la mañana Lucy le envió un mensaje a Daniel pidiéndole que llegara temprano, como había organizado una cena, el mensaje fue visto y como confiaba en su esposo, Lucy organizó todo, hasta la decoración y los dulces, ella fue quien Lo hice, parece tan patético ahora.

Tratando de mantener la compostura, Lucy sonrió y luego cambió de tema.

—Brindemos por este encuentro, no todos los días nos juntamos.

—Ah querida, es que trabajamos, no tenemos tiempo para visitarte todo el tiempo - dijo Dayse, cuñada de Lucy, dueña de una tienda de ropa de lujo en uno de los centros comerciales más grandes de Nueva York.

Aunque la mujer mostró una sonrisa, Lucy aún notó la ironía, Lucy vino del campo para casarse con Daniel y todos tienen una visión distorsionada de su verdadero origen.

En ese momento todos miraron a Lucy, ella se sentía como un payaso y en ese momento se arrepintió de haber cumplido los deseos de su abuelo.

—Podrías haber llamado a tu familia también, dijo José, el padre de Daniel.—Viven muy lejos, no pueden moverse por razones superfluas-respondió Lucy distraída mientras miraba su celular, en ese momento, una amiga le envió un mensaje, haciendo un pequeño ruido, ella aprovechó y dijo:

—Ah chicos, no fue esta vez, Daniel envió un mensaje diciendo que lamentablemente se quedó atrapado en el trabajo, a fin de mes toca hacer los informes mensuales y eso lo dejó lleno de trabajo – dijo sonriendo mientras ponía Al guardar su celular, nadie dijo nada, por lo que Lucy volvió a hablar:

—Pero no podemos dejar que eso nos desanime, entonces comamos, tú mismo puedes servirte – dijo para luego señalar la mesa llena de snacks y dulces.

—En realidad solo vine porque quería darle un abrazo a mi hijo desaparecido, no puedo ni comer dulces, ya estoy mayor para eso, dijo Consuelo sonriendo y José meneó la cabeza dando la razón a su esposa.

—Y no quiero engordar, vámonos a casa- dijo Dayse para luego levantarse y caminar hacia la puerta principal.

Después de despedirse de sus suegros y su cuñada, Lucy intentó llamar a su marido, 10 llamadas, todas las cuales fueron rechazadas.

—Está demasiado ocupado para atenderte, nunca conseguirás el amor de ese hombre—se dijo mientras sentía que las lágrimas corrían por su hermoso rostro.

Se sentó en el sofá y empezó a pensar en la vida, mientras intentaba entender el comportamiento de su marido, Lucy echó un vistazo a las cuatro esquinas de la habitación, en el lado izquierdo, una mesa que contenía un pastel muy hermoso y en la pared muchas fotos de la pareja, también hubo unas hermosas frases escritas en papeles de colores con tinta dorada, no fue solo una sorpresa de aniversario, también fue un acto un tanto desesperado para hacerse notar por su amor, fracasó.

"Viva aquel que me acelera el corazón y me hace soñar despierta, te quiero mucho y te deseo todo lo mejor, mi amor".

"Feliz cumpleaños mi amor, que Dios bendiga tu vida"

Leer esas palabras ahora parece una gran broma, Lucy aceptó cumplir los deseos de su abuelo y se casó con Daniel, eso tenía una fecha límite, pero se involucró demasiado y hoy no sabe cómo lidiar con el amor que arde en su pecho. Daniel nunca podrá corresponder a ese sentimiento que tanto le hizo sufrir.

La bella joven de cabello largo, ojos color miel y cuerpo bien definido, hoy de 28 años, vino del campo para convertirse en la señora Gonçalves, hoy se dio cuenta de que fue su mayor error.

Cansada de esperar lo que no llega, Lucy dio un último vistazo al reloj y sonrió amargamente al ver que era casi medianoche.

—Bueno, Daniel no era así, la situación cada día empeora, dijo al recordar las palabras de su abuelo.

“Cásate con él y ayúdame a cumplir mi promesa, sé para él, la persona que quieres para ti, da amor y todo lo recibirás en abundancia”

Estas palabras parecen aún más sin sentido en los últimos días, cuando Lucy se casó, dejó su profesión para cuidar a su marido, hacer la comida y hasta limpiar la casa, a pesar de que tenía varios empleados, que ridículo, Daniel ni siquiera molestarse en enviar un mensaje diciendo que tomaría un tiempo.

Ya planeando deshacerse de todo lo que adornaba la habitación, Lucy se levantó del sofá y comenzó a arrancar el papel tapiz de la pared, en ese momento escuchó crujir la puerta al abrirse, era Daniel quien entraba, estaban prácticamente uno frente al otro. Al otro le sonrió, pero Daniel pasó junto a Lucy como si ella no fuera nada, un objeto más en esa lujosa habitación, aparentemente estaba borracho, haciendo que Lucy suspirara derrotada, Daniel cada día está peor.

Con un gran nudo en la garganta que le impedía respirar con normalidad, Lucy tosió levemente y luego habló primero:

—¿A dónde fuiste y por qué no contestas el teléfono? Vaya amor, pensé que algo había pasado - dijo mientras caminaba hacia él.

—No recuerdo haberte debido explicaciones, pero lo diré de todos modos, estaba trabajando... y no sabía de esto-dijo las últimas palabras mirando la decoración de la habitación.

Ella retrocedió unos pasos y dijo:

—Invité a tu familia a celebrar este día tan especial con nosotros, quedé como una idiota, porque el cumpleañero no apareció, sonríe, lograste lastimarme otra vez –dijo Lucy tratando de tocar el corazón de Daniel, pero él solo sonrió levemente.

Al ver eso, Lucy volvió a hablar:

—Daniel, mírame, dime lo que soy para ti, soy tu esposa, pero nunca salimos juntos, en casa ni siquiera somos amigos, y en la cama siempre soy yo la que te busca. y te niegas casi todas las veces solo para humillarme, si no fuera por el amor que siento por ti ya me habría ido - dijo y luego subió lentamente las escaleras.

02

—Ya dije que estaba trabajando, es difícil saber lo que digo, cuando dependes totalmente de otras personas para sobrevivir – dijo Daniel enojado, casi haciendo que Lucy se ahogara con su propio aire, pero no dijo nada. y siguió subiendo, paso a paso, alejándose cada vez más de tu amor.

Cuando Lucy se casó con Daniel no esperaba enamorarse de él, al principio él era un poco amable, pero en vez de ir mejorando cada vez más, con el tiempo todo desapareció, solo quedó una bestia hambrienta que la usa de vez en cuando. al momento, cuando, pero él nunca la besó ni le dijo que la amaba, por lo que el matrimonio de Lucy es un gran fracaso.

Respirando lentamente tratando de mantener la calma, aumentó la velocidad de sus pasos y pronto entró a la habitación, fue directa al baño, se miró en el espejo y dijo:

—Quién hubiera pensado que de una mujer de inteligencia única, muy respetada en todas las comunidades y ciudades por las que pasé, pasaría a ser una persona tan mediocre, viviendo en la humillación, todo por culpa de este maldito amor—se dijo Lucy mientras analizaba Su propia situación es demasiado miserable, no se lo merece.

Ya con la cabeza dando vueltas, pensando en qué hacer para resolver su vida, Lucy se dio una ducha rápida, se puso un camisón y luego se arrojó en la cama, planeando dormir.

En ese momento Lucy escuchó pasos dentro de la habitación, sabiendo que era Daniel, cubrió su cuerpo con las mantas y fingió estar dormida, pero en realidad quería que él se acercara a ella y le pidiera disculpas, pero eso no sucedió.

Luego de tomar una ducha, Daniel se acostó de espaldas a Lucy, luciendo como si quisiera dormir, pero en realidad estaba intercambiando mensajes con su amor, sin embargo Lucy tenía los ojos cerrados y gracias a Dios no vio el contenido del conversación.

...

Lucy incluso intentó conciliar el sueño, pero el peso en su corazón y los ronquidos de Daniel simplemente se lo hicieron imposible, así que se levantó de la cama y salió al balcón, se sentó allí en una silla y empezó a pensar en la vida.

El viento durante la mañana era helado, pero a Lucy no le importó y siguió admirando la belleza de la noche.

—¿Se enojaría el abuelo si dejara de complacerlo? Ah, pero claro, la pimienta en los ojos ajenos es un refresco-dijo las últimas palabras y luego sonrió amargamente.

Pronto la Luna y las estrellas que antes iluminaban el cielo fueron reemplazadas por el Sol, comienza un nuevo día, con él nace la esperanza de días mejores, pero ¿existe tal posibilidad en la vida de Lucy? Ella no lo cree así.

Lucy salió del balcón y pronto fue a cambiarse de ropa, quitándose el camisón de seda blanco y poniéndose un vestido sencillo.

Daniel seguía durmiendo, pero ni siquiera se molestó en despertarlo, "si se fue a tomar un miércoles es porque hoy no necesita trabajar", se burló mentalmente y luego fue al baño, la lavó. cara, se cepilló el pelo, los dientes y luego salió de la habitación.

En el pasillo de la mansión Gonçalves, Lucy se encontró con Nancy, la ama de llaves, ella sonrió y le dijo:

—Buenos días Nancy, envía a alguien a limpiar ese desorden de la sala, no te preocupes por buscarle un buen lugar, el bote de basura más cercano es de buen tamaño – dijo Lucy dejando perpleja a la anciana, ya ha estado En la sala y vi varias fotos de la pareja, pero ¿por qué tirar todo eso?

Planeaba preguntarle a su jefe, pero Lucy pronto desapareció del campo de visión de la señora, quien solo suspiró y comenzó a sacudir el polvo de los cuadros en la pared, son miembros de la familia Gonçalves, personas que llevan muertas más de 30 años. años y esto asusta un poco a Nancy.

Mientras el mayor se pierde en sus pensamientos tratando de entender por qué diablos estas personas guardan fotos de personas prácticamente desconocidas para ellos, Lucy acaba de llegar a la cocina, a diferencia de los días anteriores, hoy solo se preparó un café solo, se sentó a la mesa. y se puso a pensar en la vida mientras tomaba el café lentamente, un café tan amargo como su vida, cada gota consumida parece acercar a Lucy a la realidad, Daniel esconde algo, pero ¿qué será? Se preguntó Lucy al analizar el comportamiento de Daniel en los últimos días, él sale todas las noches y siempre regresa borracho, ¿por qué bebe así, es porque no está contento con estar casado con Lucy?

Después de tomar café, Lucy fue a la sala, se recostó en el sofá y comenzó a mirar el periódico matutino, además de vivir lejos de la ciudad, Lucy tampoco tiene vecinos ni amigos en la ciudad, por lo que vigila todo lo que sucede. en la televisión, le guste o no.

Alrededor de las 11:00 de la mañana, Daniel bajó las escaleras, el delicioso olor llamó la atención de Lucy, ella miró en su dirección solo para encontrar a un hombre sumamente apuesto, vestido con un traje azul bien confeccionado y zapatos de vestir negros en los pies, pero con tal Una mirada fría, todavía sostenía un maletín negro, ciertamente va a trabajar.

—Buenos días, dijo sin molestarse en mirar en su dirección, Lucy tampoco cedió, ni siquiera respondió al saludo de su marido y luego subió el volumen del televisor.

Sin la paciencia para lidiar con Mi-mi-mi, Daniel pronto se fue sin mirar atrás, en ese momento Lucy lloró, pensando en lo estúpido que había sido estos últimos dos años, Daniel no lo admitió, pero Lucy está segura de que sí. No funciona.

—Por muy bueno que sea tu corazón, en algún momento tendrás que tratar a las personas como te tratan a ti—se dijo mientras secaba las lágrimas que caían sin parar.

...

Ya era de noche y como siempre Daniel no había llegado ni llamaba para dar ninguna satisfacción, tal vez por eso Lucy estaba sentada tristemente en el sofá, con la cabeza gacha, parecía estar llorando, en ese momento llegó Nancy al sala de estar, tosió levemente queriendo llamar la atención de su jefe y dijo:

—Buenas noches señora, dejé la cena del señor Daniel en el horno, como siempre voy a pasar un día en casa de mi hija, extraño a mis nietos-dijo Nancy toda emocionada, pero Lucy parece demasiado triste para interactuar con ella. ella y simplemente le dio una señal de ok.

Habiendo estado en la mansión desde el inicio de la convivencia de esta pareja, Nancy aprendió a querer a su ama, como si fuera un miembro más de su familia, por lo que volvió a hablar:

—No sé qué es lo que hace que tu sonrisa desaparezca, pero quédate con Dios, él nunca abandona a tu hijo.

—Gracias Nancy, ya puedes irte-dijo Lucy y luego se acomodó en el sofá y volvió a encender la televisión, Nancy se fue y Lucy se fue a buscar una buena película para ver.

Alrededor de la medianoche, Lucy se cansó de ver películas románticas, que traen una visión distorsionada de lo que es una relación, el amor no es solo besos, abrazos y cálidas sonrisas, el amor también es soledad, tristeza y dolor, Lucy ahora odia este amor que arde en En su pecho, tomó toda su dignidad.

Ya apagando la televisión, planeando irse a dormir, Lucy escuchó el sonido del auto llegando, seguramente era Daniel, al pensarlo corrió hacia el dormitorio y saltó a la cama fingiendo estar dormida.

Unos minutos después Lucy escuchó un crujido de la puerta al abrirse y luego pasos dentro de la habitación, como aún estaba enojada con su esposo, Lucy mantuvo los ojos cerrados, hasta que escuchó un fuerte ruido de un cuerpo cayendo al suelo, se levantó rápidamente. y vio a Daniel acostado, estaba muy borracho, pero él le sonrió y le dijo:

—Estoy aquí mi amor, por favor ayúdame a llegar al baño-dijo Daniel para luego estirar su mano hacia Lucy, haciendo que su corazón se acelerara de repente.

03

Tratando de contener esa euforia en su pecho por finalmente ser llamada amor, Lucy se acercó a él y le dijo:

—¿Me estás hablando a mí?-preguntó sonriendo, pensando que Daniel estaba bromeando, pero el hombre la acercó más haciéndola caer en sus brazos y, como si fueran una pareja enamorada, se besaron locamente.

Es un hecho que el olor a alcohol incomodaba mucho a Lucy, pero por amor no se alejó y correspondió todo el amor que recibió.

Después de terminar el beso, Lucy se levantó y con mucho esfuerzo ayudó a Daniel a levantarse y fueron juntos al baño, ella lo ayudó a quitarse la ropa e incluso a lavar su cuerpo, a Daniel le costaba incluso mantener los ojos abiertos. abierto.

Luego de darle un baño a su esposo, Lucy le pidió que regresara primero a la habitación, después de todo, ella estaba toda mojada y necesitaba darse una ducha y así lo hizo, tambaleándose y recostándose en la cama.

Luego de ducharse y ponerse un camisón de encaje negro y bragas rojas, se puso un poco de perfume y también se acostó, de hecho pensó que Daniel estaba durmiendo, pero por arte de magia, pronto estuvo con su cuerpo pegado al de ella.

—Te extrañamos mucho —le susurró al oído, mientras colocaba su miembro contra sus nalgas, haciéndola estremecer.

Sin saber cómo reaccionar ante esa situación, Lucy no dijo nada y solo pudo entregarse a ese amor, se giró para mirarlo y luego lo besó con urgencia.

Todo parecía un sueño, siempre que hacían el amor los besos en la boca estaban prohibidos, pero esta casa hoy parece no tener reglas, Lucy solo puede disfrutar del cuerpo caliente de su marido.

Mientras se besaban, las grandes y hábiles manos de Daniel pasaban por el cuerpo de Lucy, cada toque la hacía sentir viva como nunca antes se había sentido.

Pronto Daniel comenzó a quitarle el camisón a Lucy, le quitó el tirante del lado derecho y luego comenzó a chupar su pezón derecho y acariciar el izquierdo, luego hizo el proceso contrario, esto fue dejando a Lucy sumergida en un placer extraordinario.

No pasó mucho tiempo y Daniel se deshizo del camisón de Lucy, dejándola solo en bragas rojas, se posicionó justo entre sus piernas, era como si quisiera mirar de cerca su intimidad, le quitó las bragas, le mordió el labios de puro deseo y luego comenzó a deleitarse en cada centímetro, pasando su lengua de abajo hacia arriba para luego hacer movimientos circulares por todos lados y esto hizo que Lucy gemiera fuerte.

Usando su pulgar e índice, Daniel separó los labios mayores, dándole mayor visibilidad a esa hermosa florecita y luego comenzó a chupar nuevamente, siempre más rápido y con más ganas.

Ya completamente entregado a ese placer abrumador, Daniel se deshizo de la toalla que cubría su cuerpo para luego penetrarla con fuerza, haciéndola gritar, ella lo estaba disfrutando, pero no pudo evitar pensar en lo pesada que podría haber sido la droga que Daniel usaba. sido, él nunca lo llamaría amor en conciencia.

Después de hacer el amor en varias posiciones, Lucy y Daniel cayeron jadeando sobre la cama, Lucy estaba sonriendo hermosamente como si hubiera visto un pajarito verde, mientras Daniel estaba postrado en la cama y respirando irregularmente, en ese momento, tomó la mano de Lucy con cariño y dijo:

—Amor, estuviste increíble como siempre, te amo mucho mi princesa... mi Juliana-dijo lentamente, haciendo que el corazón de Lucy se rompiera en mil pedazos.

“Entonces eso es todo, ¿me llamó amor pensando que soy otra persona? ¿Me hizo el amor pensando que le estaba haciendo el amor a Juliana? Reflexionó mentalmente mientras intentaba encontrar fuerzas para levantarse, se encerró en el baño, se miró en el espejo y dijo:

—Lo siento abuelo, pero no toleraré esto, es demasiado humillante-se dijo mientras pensaba qué hacer.

Lucy perdió a sus padres cuando era niña, tratando de proteger a su nieta, Leonardo llevó a Lucy al campo, la crió con mucho cariño y atención y por eso Lucy aceptó el pedido de su abuelo, pero ella no tiene corazón. de acero y acababa de llegar al límite.

...

Lucy pasó toda la noche en el baño, llorando y recordando el pasado, emprendió un viaje dentro de sí misma, navegando por sus recuerdos, de hecho buscaba una razón para amar tanto a Daniel, no la encontró, solo Recuerda las veces que ella dormía en el sofá esperándolo, las veces que se levantaba temprano y le preparaba un desayuno especial a su marido y él la humillaba diciéndole que ella solo hacía ese tipo de comida solo para tener la oportunidad de comer tan bien. , ya que ella viene del campo y seguro que nunca había probado eso, idiota, Lucy es mucho más de lo que aparenta ser.

Después de otra noche de insomnio, Lucy se levantó del frío piso, hizo su aseo matutino, se duchó y luego salió del baño y fue directa al armario, se puso unos pantalones blancos de talle alto y una blusa verde hoja, planchó un poco de perfume. , tomó su celular y luego salió de la habitación y se dirigió a la sala, esta vez la mesa ya estaba puesta.

—Buenos días señora, hace tiempo que no preparo el desayuno, como usted siempre lo prepara a su manera, espero que le guste la comida que preparé con todo el cariño – dijo la cocinera sonriendo, tratando de ganarse el favor de ella. jefe, pero Lucy no lo hizo. No dije nada, sólo jugueteé distraídamente con mi teléfono celular.

Ana se fue y en ese momento llegó Daniel y se sentó en silencio y luego comenzó a servirse él mismo, verlo tan cerca, hizo que Lucy recordara claramente el evento de anoche, su corazón se apretó dolorosamente y como si fueran varios cuchillos afilados, las palabras salieron arrancadas del cuerpo de Lucy. garganta:

—San Valentín, Navidad, cumpleaños, año nuevo, aniversario de bodas, cuando estuve enfermo, todo esto lo pasé solo, entonces está demostrado que soy perfectamente capaz de salir adelante solo, Daniel Gonçalves, quiero el divorcio-dijo Lucy y Él luego tomaron un poco de café, tratando de mantener la calma y la concentración.

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