Hola queridas lectoras esta es una obra que se me vino a la mente y a pesar de que tengo otras obras en emisión, no quería que se me olvidara, esta no es una historia como las que he hecho antes, a pesar de que es de mafia esta novela no tiene a la mujer poderosa y empoderada que siempre plasmo en mis obras, está es una pequeña e inocente chica totalmente carente de malicia fue prácticamente criada en una burbuja, la novela es de mafia, señores, así que esperen escenas de violencia, sexo, y palabras fuertes si son personas sensibles sigan de largo, Quiero Aclarar que Ángela a pesar de saber de todo es una niña mentalmente.

Aquí encontrarán cosas muy infantiles y sé que hoy en día los niños saben más que los adultos, pero a ella se le bloqueó todo acceso con la malicia del mundo, le enseñaron cosas como muchos idiomas, historias y eso, pero NO LE ENSEÑARON NADA QUE TIENE QUE VER CON SEXO, HASTA CON LO DE SU PERIODO FUE ENGAÑADA, CUALQUIER COSA QUE USTED DIGA, PERO MI HIJA TIENE SIETE Y YA SABE ESO, SÍ PORQUE USTED SE LO ENSEÑÓ, O ELLA EN LA ESCUELA LO VIO.

ÁNGELA ES CUIDADA EN CUATRO PAREDES POR UNA MONJA QUE LE ENSEÑA LO QUE ELLA QUIERE QUE SEPA. ¿POR QUÉ ACLARO ESTO? PORQUE HAY MUCHAS LECTORAS QUE NO ENTIENDEN ESA PARTE Y HACEN MALOS COMENTARIOS SOBRE SI LA CHICA ES RETRASADA Y A PESAR DE QUE ÁNGELA NO EXISTE, PARA MÍ Sí LO HACE Y YO LA DEFIENDO.

HAY PERSONAS QUE LAS CURSILERÍAS LES ABURRE O LES DAN RABIA BUENO, ENTONCES MEJOR NO LA LEAN PORQUE PASARAN MUCHOS CORAJES.

SÍ LA NOVELA ES DE MAFIA PERO NO ES LA TÍPICA A LA QUE ESTÁN ACOSTUMBRADAS, HE LEÍDO COMENTARIOS COMO: "UN MAFIOSO NO HACE ESO, UN CAPO NO SE COMPORTA ASÍ" YO IMAGINO QUE ESAS LECTORAS SON MUJERES DE MAFIOSOS Y SUS ESPOSOS NO LO HACEN, DIGO PARA HABLAR CON TANTA SEGURIDAD, PERO ESTA NOVELA ES DE MI IMAGINACIÓN ODIO HACER LO MISMO QUE OTROS Y LOS QUE ME LEEN SABEN QUE ES ASÍ, POR ESO LES DIGO SON LIBRES DE NO LEERLA, AL IGUAL RECIBO SUS COMENTARIOS BUENOS Y MALOS PORQUE SON MUCHOS LOS BUENOS COMENTARIOS, LOS MALOS SON DE PERSONAS QUE SI ENTRAN A SU PERFIL Y A SUS MOMENTOS, SE PUEDE VER QUE EN TODAS LAS NOVELAS DEJAN MALOS COMENTARIOS.

Esta novela es de mi imaginación e iré escribiendo como me vaya llegando la inspiración, pero quiero ser libre al momento de escribirla, aunque los que ya me han leído saben que soy un poco inesperada, me gusta meter de todo en mis novelas besos se les quiere y no olviden dejar su like y comentar así sean malos los comentarios yo siempre los aceptos hay personas que solo se meten a criticar a mí no me afecta bien me beneficia, bueno comencemos con esta aventura los quiero besos.

(Novela completa y en edición.)

Ángela Expósito es una chica hermosa, piel blanca, ojos de color gris con rayas amarillezcas, mide uno setenta, tiene un cuerpo espectacular, no le falta ni le sobra nada, tiene buen trasero y buen busto, caderas anchas, un cuerpo de guitarra, cabello castaño claro y tiene una cara angelical, es una muy dulce e inocente pequeña, no sabe de malicia solo sabe que es un castigo por no obedecer o por mentir, es un completo Ángel.

En el orfanato ángeles del cielo crían a las jovencitas para ser buenas amantes, algunas son usadas por el cura, otras son vendidas por su pureza, pero el cura es tan depravado que ya casi no manda a chicas vírgenes.

Todas allí son educadas e inteligentes, la pequeña Ángela sabe muchos idiomas y sabe de historia, literatura, sabe de números, es muy buena estudiante, pero ha sido criada como una niña pequeña, todavía juega con muñecas y le gusta que le canten y le cuenten un cuento para poder dormir, usa ropa de niña le gusta peinarse con dos colitas y es un poquito mingona o mimada, es una dulzura de niña el problema es que tiene el cuerpo de una mujer.

Todos los días ella tiene su rutina de estudio y de modales, pero no convive con otras chicas ni mucho menos con chicos, la madre aura la baña y la viste, pues, es una pequeña niñita, ella se encarga de cuidarla, pero tiene miedo a hablar y que le maten a su familia.

Ángela está por cumplir sus dieciocho años y el cura Alberto va a hablar con la madre Aura para que prepare a su niña linda, que pronto será su niña y el su papi y así ella deberá llamarlo eso fue lo que él fue a hablar con la madre a

Aura para que la fuese preparando, pero dos días después de esa conversación llegaron unos hombres armados y mataron a todos, la pobre Ángela lloraba, pues es algo fuerte de ver para alguien como ella.

Se las llevaron a Italia, a la casa de Madame Elizabeth, allí sería su nuevo hogar o como las chicas dirían el mismo infierno pero con distinto diablo. Llegaron a un lugar tan grande como una mansión, cada una tendría su cuarto y serían llamadas luego para qué les asignarán a sus mafiosos, ya que estos hombres no todos, pero los que mejor pagaban siempre tenían a una chica fija para ellos, habían pasado unos días dónde la pequeña Ángela lloraba, pues, nadie le cantaba para dormir y su muñeca se había quedado, solo logró llevarse escondido a su oso y único amigo pochito él era su confidente en esta nueva vida donde estaba sola.

Melisa, una chica que le tenía envidia a Ángela, se encargó de hablar cosas malas de Ángela con todas las chicas de la casa de madame el día que les serían asignadas sus respectivos clientes, madame las paro a todas frente a ella para decirle que se les tomaría las fotos para enseñárselas a los mafiosos, les habló sobre lo peligroso que eran y que no intentarán escapar.

Madame tenía a una chica de confianza Aida, ella sabía todo sobre las chicas, pues, averiguaba entre ellas, Melissa le había contado a Aida que Ángela era una zorra que se acostaba con el cura y con los guardias del convento, Aida le comentó eso a madame Elizabeth y ella quitó su foto del catálogo, le entregaría esa chica a cualquier cliente de esos que no le importaba a qué chica llevarse, entonces por concejo de la perversa Melissa madame decidió entregársela a Mario Bianchi y a Adán Ferreti, ellos eran hombres inescrupulosos se decía que les hacían cosas terribles a sus chicas y luego de algún tiempo las chicas ya no regresaban, llegó el día de la entrega y a cada hombre se le entregó una chica, Ángela paso por el frente de tres hombres con su cara agachada y delante de ella iban los asquerosos de Bianchi y Ferreti.

Pobre chica es demasiado hermosa, me da mucha lástima, dijo uno y el otro apretó los puños con fuerza y el último solo se rió sin importancia, cada uno se fue de allí con su acompañante, no sin antes hablar con madame para preguntar por qué esa chica no estaba entre las fotos, ella les dijo que era una chica muy usada y sin decoro y por eso no se las dio a ellos, ellos se fueron y dos de los chicos se fueron con una gran duda en ellos.

Angela Esposito.

Ángela Esposito.

Hola soy Ángela, hoy me siento muy triste ya llevo tiempo en este lugar y no me gusta para nada aquí son muy extraños, nadie me habla y me dicen que soy una perra o una zorra, no sé por qué me dirán así debe ser porque soy tierna como ellos, no lo sé el día que me fui con Mario y su amigo la pasé muy mal nunca me habían hecho eso, lloré toda la noche tenía miedo ellos dijeron que nos acostaríamos, pero todo estuvo muy extraño, al otro día todos veían mis marcas en las muñecas y en mi cuello, unas me veían tristes y otras solo se reían, siempre es lo mismo con ellos, después de ir a su mansión regreso adolorida y toda marcada.

La monjita nunca me dijo que podía pasar esto, solo me decía que obedeciera siempre y es eso lo que hago por qué si no vienen los castigos, y no me gustan para nada. Ya han pasado alrededor de cuatro meses, estoy muy triste, mi cumpleaños se acerca y sé que ese día no abra pastel ni regalos.

Los días siguen pasando y ni el joven Bianchi ni su amigo han venido a buscarme gracias a Dios, no me gusta irme con ellos, pero aquí tampoco es tan lindo las chicas me golpean y se burlan de mí todo el tiempo, cuando hay muchos hombres en la mansión me esconden o me encierran sobre todo Melissa, ella no me quiere y no sé por qué, hoy hay muchos hombres aquí, pero no está Melisa se fue con un señor y aprovecharé para pasear al jardín, ya que me siento muy triste hoy, bajo las escaleras con un hermoso vestido rosado es algo corto, pero no tanto así que no me molesta mucho por qué es rosita, al llegar a la sala un señor se me acerca y le dice a Madame.

Señor: Si tú fuiste capaz de dejar ir a mi perra con cualquiera, me llevaré a esta, que es la de esos asquerosos, y no te puedes negar, ah no la esperes porque la compro ahora mismo.

Ay no qué terror siento, los señores me dijeron que si me iba con otros hombres me harían lo mismo que ellos, pero mucho peor, Diosito ayúdame sí, el señor me jala hasta la oficina de Madame luego de un rato me dice que nos vamos corro a mi habitación y tomo mis cosas, pero sobre todo a pochito y salgo, él me hace entrar a su auto, en el camino voy muy asustada, de verdad tengo mucho miedo y este hombre es muy serio, es alto, piel clara, su cabello es castaño un poco largo, sus ojos de color azul y es un hombre fuerte, este hombre da miedo con su seriedad.

Después de mucho rato en su auto llegamos a una mansión enorme y muy linda, Woow era tan grande como la de madame Elizabeth, pero esta era solo para él, me dijo que fuera con una chica de servicio, apareció una mujer de unos cuarenta y algo, me llevó a una pequeña habitación bonita, entré, me duche, abracé a pochito y empecé a llorar muchísimo estaba asustada, tenía mucho miedo, pero me quedé dormida de tanto llorar.

Al día siguiente desperté temprano, tocaron mi puerta, era él y me dijo.

Hombre: mira perrita, te vas a levantar y vas a ayudar con el servicio de la casa solo cuando termines podrás comer y descansar ah y mi nombre es Lorenzo Fabbri el capo de la mafia Sacra Corona Unita, así que no hagas que me moleste.

Lo miré confundida ladeando mi cabeza, que era una mafia, no lo sé, pero por su cara me debería asustar, los días siguieron pasando y yo hacía mi rutina diaria, que era levantarme temprano, hacer los quehaceres y luego me voy a mi cuarto a descansar, el señor Lorenzo siempre dice que me venderá, ya que no va a dormir conmigo por qué fui la perra de ellos.

Los días seguían igual, hasta que a esta casa llegó otro señor, es muy lindo y muy buena onda, se llama Damián Cappelletti y me contó que es el capo de la Cosa Nostra no sé qué sea un capo, pero es muy divertido, el señor Lorenzo no está viene mañana, ya que él dijo que me vendería a cuatro hombres espero que sea mentira.

El joven Damián es muy guapo, es muy alto, de cabello alto, liso y negro, de ojos grises azulados, labios gruesos, es muy fuerte, tiene muchos músculos, y es de piel clara tiene muchos dibujos en su cuerpo me encanta estar con él es muy, divertido y juega mucho conmigo estábamos hablando y le conté que hoy cumplía años así que me llevo al centro comercial y me dijo que comprara la ropa que quisiera, no quise, pero insistió y hasta hizo un puchero, parecía un perrito tierno.

Escogí tres conjuntos lindos dos de color rosa y uno amarillo él se acercó a la vendedora y le dijo que de ese estilo buscara más, luego con mucha pena le dije que si podríamos ir por juguetes, él arrugó su entrecejo y luego siguió conmigo tomada de la mano, pero serio, iba caminando a una tienda con luces extravagantes y que tenía la silueta de una mujer y un hombre en la vidriera no creo que vendan juguetes allí, pero él sabe más que yo, entonces tiré mi vista a un lado y vi una tienda con una muñeca igual a la que había dejado en casa y me le solté de la mano y salí corriendo, él corrió detrás de mí a lo mejor pensó que escaparía, pero no, luego me dio miedo y lo abracé.

Ángela: Señor, no me castigue, juro que no me iba a escapar, solo quería el juguete que le dije y en esa tienda no creo que vendan.

Él me miró con una carita como de disculpa y entramos, escogí la muñeca y la abracé, la vendedora me veía raro, pero no le hice caso, luego vi un oso más grande que pochito estaba hermoso, pero no podía abusar, pero entonces.

Damian Cappelletti

Damián: señorita, por favor quiero uno de cada juguete de la tienda.

Al escuchar eso salté de alegría y caminé con él con mi muñeca abrazada, me llevo a comer helado, él solo me veía y se reía, al llegar a la mansión fui a mi habitación y él entró.

Ángela: Desea algo, señor Damián.

Damián: solo dime Damián, por favor, podemos hablar es tu cumpleaños.

Ángela: claro que sí, saqué mis juguetes y le expliqué cómo debía jugar conmigo, así como lo hacía la monjita, él se reía de él mismo y yo estaba muy feliz.

Luego entro una señora con un pastel y Woow era hermoso, lloré de alegría y lo abracé, le di mil veces las gracias a Damián.

Angela.

Después de comer pastel le conté sobre cuando era bebé, que me abandonaron a mí y a pochito en el orfanato y todo lo que viví allí, cada castigo y cada regla, él abría sus ojos, escuchándome y apretaba sus puños, también le comenté que mañana me venderían a cuatro hombres para que me acostara con ellos, entonces le dije.

Ángela: Damián, verdad que vamos a dormir muy incómodos los cuatro en una sola cama, pero Lorenzo no entiende.

Le dije haciendo un puchero.

Damián se desesperó, se agarraba su cabeza, no sabía lo que le sucedía, por qué estaba molesto, él empezó a llamar a Lorenzo y no le contestó, le preguntó a sus hombres por él y dijeron que vendría mañana temprano, este suspiró molesto y dijo.

Damián: Esta noche me quedaré aquí contigo y mañana temprano hablaré con Lorenzo para que te venda a mí, ahora no te puedo llevar porque no está y sería algo muy malo.

Ángela: Siiii, y jugarás conmigo después que termine de limpiar tu casa y arreglar todo.

Damián: Si jugaremos mucho, pero no limpiarlas nada okay.

Yo saltaba de la alegría y lo abrazaba, me encanta Damián, es un amigo genial.

Las horas pasaron y yo tenía sueño, pues, bostece, él me dijo que iría a dormir y le pedí que durmiera conmigo él asintió con su cabeza y se acostó a mi lado, yo tenía un pijama de conejitos rosa y él se acostó a mi lado con un pijama que creo era de Lorenzo; un mono gris y una franelilla, él me abrazó y le pregunté si me podía contar un cuento o cantarme algo para dormirme, quería vivir mi antigua vida aunque sea una vez más, él empezó a contarme la historia, pues, dijo que no cantaba muy bien y así nos quedamos dormidos.

A la mañana siguiente amanecimos abrazados y yo feliz me levanté y el igual, fuimos a desayunar para esperar a Lorenzo y así comprarme, pero Damián recibió una llamada que lo vivió como loco, se veía preocupado y feliz, me vio, me abrazo y dijo.

Damián: Me tengo que ir princesita, pero te juro que te sacaré de aquí, ahora me tengo que ir.

Yo lo abracé muy duro y el marcó un número y dijo.

Damián: La encontraron, por fin la encontraron, me tengo que ir de viaje, ahora por fin estará conmigo mi pequeña, adiós luego te llamo.

Fue lo único que dijo, bueno se fue a buscar a alguien importante claro, por eso se va y me deja aquí, ojalá se divierta mucho con su pequeña, dije y fui a mi cuarto.

A eso de las diez de la mañana llegó Lorenzo y vino a mi habitación, ya yo había limpiado todo, este me gritó muy feo como siempre, me dijo que era una perra, que como había podido embaucar a Damián, sacarle cosas y de paso acostarme con él para pagarle, que no se me olvidara que el que puede cobrar era él y nada más, dijo que no sabía cómo Damián siendo tan delicado con sus zorras me había aceptado a mí, que daba mucho asco solo por haber sido la perra de ellos, mientras hablaba me abofeteaba.

Yo bajé mi cara y este me Volteó de espaldas y me dio con un fuete, me dio cinco en la espalda, luego me gritó que me curara por qué hoy sería vendida a cuatro tipos, dijo que buscara algo lindo que ponerme en las cosas que le saque a Damián y me vistiera para acostarme con ellos, dijo que también se enteró de que me había comprado juguetes los cuales utilizamos ayer, que también los llevara yo solo lloraba en silencio, él salió de mi habitación y fui a asearme.

Al salir del baño una mujer me esperaba con una crema y unos pañitos húmedos, me limpio las marcas y me dijo que descansara para que a las siete fuera al cuarto que me asignaron, allí estaría con los cuatro hombres. Pase la tarde acostada no sabía por qué tenía que descansar si lo que haría era dormir, pero bueno Lorenzo es extraño, se hizo la hora y busqué un hermoso pijama color rosa con pequeños osos panda, era un pantalón de seda y una camisa manga corta, me puse unas pantuflas de oso, me hice dos colitas y llegué al cuarto donde estaban cuatro hombres, dos eran como de unos treinta y algo y los otros dos tenían la edad de Damián más o menos veintitantos, esos hombres al verme hicieron una mueca y luego se rieron.

Pijama de Ángela (solo pijama).

Hombre 1: Pequeña y vas a una pijamada o qué.

Ángela: Me voy a Acostar con ustedes no, por qué no están listos.

Hombre 2: Créeme chiquita que lo que menos haremos será dormir.

Hombre 3: Es un poco enfermo que te vistas así para la ocasión, pero mataremos fantasías.

Hombre 4: la ropa no importa en un momento estorbará.

No sabía qué estupideces decían, me dio miedo, así que me metí a la cama y me tape con la sábana, estaba muy asustada, luego uno de ellos me tocó y lo empujé.

Ángela: Oye, ten tus manos quietas y acuérdense, no pagaron para eso.

Hombre 3: eso haré perra.

Dijo y empezó a quitar mi camisa, pero corrí por la habitación, otro trato de aguantarme, pero luché y me solté, parecía una ranita saltando, estaba muy asustada hasta que otro me agarró y rompió los botones de mi camisa dejándome en mi sujetador rosa iba a pegar su boca de mi cara, pero le di un cabezazo y salí corriendo hasta la oficina de Lorenzo.

Abrí la puerta mientras me aguantaba con mis manos la camisa.

Ángela: Lorenzo, esos hombres están locos, no querían acostarse conmigo, empezaron a tocarme y me rompieron mi pijama.

Lorenzo me miró con furia.

Lorenzo; por qué te vestiste así perra y por qué te saliste, ve hacia adentro ahora.

Empecé a negar llorando, no quería volver.

Ángela: dijiste que me acostaría con esos cuatro, bueno me puse pijama y no quiero regresar, ellos son raros, me quitaron la camisa mira, no Lorenzo, por favor.

Estaba tan asustada que no me di cuenta de que en la oficina se encontraba alguien más, hasta que habló.

Hombre: Te dije que me la llevo ahora y no me sigas discutiendo.

Lorenzo: esa perra debe estar con ellos, ya pagaron, luego te llevas lo que dejen.

Hombre: no me hagas perder la paciencia Lorenzo, dije que me la llevo ahora.

Dio un golpe en el escritorio y yo me asusté, el hombre era imponente, daba miedo, era guapo, cómo Damián, rubio, alto ojo azules, de piel blanca un poco bronceada, tenía dibujos en el cuerpo como Damián y también era muy fuerte y grande.

Está bien Dominick eres mi amigo y no pelearemos por una perra.

Dominick.

Dominick: Vuelve a llamarla así y me olvido de nuestra amistad.

Cuatro hombres entraron y uno me jaló de una de mis colitas, el señor Dominick estampó su puño contra él dejándolo en el suelo, los demás empezaron a temblar al verlo.

Hombre 1: Señor Dominick Di Marco, buenas noches, discúlpenos.

Hombre 4: Capo de la Ndrangheta es un placer verlo, ya nos vamos.

El señor Dominick camino hacia mí y sin decirme nada me tomo en sus brazos para luego salir de la oficina y decirme.

Dominick: nos vamos de aquí tranquila.

Estaba asustada, este hombre era mucho más grande que los otros cuatro,de él no podría escapar y es que sus dibujos y seriedad daban terror, pero a pesar de todo me sentía segura con él, le dije que esperara que las cosas que me compró Damián estaban aquí y mi pochito también, él asintió y con una seña unos hombres fueron hacia donde dormía y trajeron mis cosas él me subió al auto y vi como llevaban a mi pochito traté de correr, pero su brazo me detuvo entonces le pidió el oso y me lo entregó, me aferré a pochito y el carro se puso en marcha, yo solo lloraba en silencio mi vida estaba muy mal.