Prólogo:

Isabella McMichael, una chica de 24 años, tiene que escapar de su país debido a un suceso que tuvo presencia, estuvo en el momento y hora equivocada, las personas que la relacionarán intentarán dar con ella por todos sus medios, debido a que son altos funcionarios de la ley y no desearían tener cabos sueltos que puede poner sus nombres en juego de sus puestos.

Ella pensando que solo sería un tiempo trata de mediar la situación pero todo empieza a ponerse mal para ella, no tiene apoyo de su familia debido que ella desde muy chica se quedó sin padres donde ella trabajaba y estudiaba al mismo tiempo para salir adelante. Crista su mejor amiga la apoya mandándola a un lugar donde va estar segura por un tiempo.

Tiene que pasar un cierto tiempo donde Isabella tendrá que enfrentarse a la vida por si sola, tratar de buscar a las personas correctas donde ella pueda tener apoyo y sacar a luz lo que ella presenció.

Isabella tendrá muchas aventuras y momentos que nos harán reflexionar si realmente es culpable o no de lo que le ha sucedido…. La única ayuda para alejarse tiene que ser de ella misma y no contar nada a nadie.

Isabella, moverá sus cartas para no ser descubierta, logrando siempre que ella ha sido inocente de aquel suceso…

Bienvenidos a esta nueva historia, como saben mis novelas tienen un poco de todo, así que viviremos una nueva historia “Silencio de Sangre… Mentira oculta, es mentira” en esta historia podremos observa como un suceso puede lograr destruir a una persona en su estado emocional y sentimental haciendo que pierda la confianza en si misma.

Muchos de mis lectores saben como manejamos las novelas sobre todo las partes explicitas que por regla no se pueden publicar en la aplicación debido a las reglas y normas de la misma, les pido su comprensión ya que no puedo poner nada explicito en los capítulos… ¿Por qué no podemos publicar nada explicito? Muy sencillo, la aplicación detecta esas partes y nos rechazan los capítulos, por esa razón y cuidando el contenido ya que muchas veces para otras lectoras no es de su agrado terminan reportando la novela y la verdad, aunque ustedes no lo crean, me duele despertar y ver la notificación que han reportado la novela, muchas personas que me acompañan desde un inicio saben y lo he explicado que un capitulo me lleva casi 2 horas, como para que alguien lo reporte entonces… son cosas que trato de evitar y seguir dando contenido que para muchas disfrutan esas partes de los encuentro que son sumamente divertidos, románticos o quizá de contenido fuerte por la violencia que se pueda usar.

Lo capítulos especiales (Así les decimos a los explícitos) Se publica parte de ellos en el Instagram: lucymomhistorias, donde se comparte la imagen y debajo de la imagen digo en donde se pueden leer completos. No puedo hacer mención tampoco en la aplicación de donde están por eso se comparte en el Instagram para que sigamos el hilo de la novela.

Comparto capítulos todos los días:

Lunes a viernes: a partir de las 6:00 pm horario México.

Sábado y Domingo: a partir de las 2:00 pm horario México.

Por lo regular siempre les comparto 2 a 3 capítulos. A veces muchos más… pero de ustedes va depender mucho, no le pido mucho solo como siempre al final de cada capitulo o al inicio verán las etiquetas:

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Ustedes me ayudan mucho para ir siguiendo creciendo es muy importante que tengan en cuenta, que mientras más interactúen con la novela, más personas nos van conociendo al empezar a promover la novela en la misma aplicación…

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En verdad para mi es de gran ayuda… si ustedes me apoyan, crezco y tendremos más historias para disfrutar, para interactuar con ustedes. Les he dicho ya en novelas anteriores a veces se me puede complicar en subir capítulos por el trabajo, mi familia… son cosas que tenemos que tener un poco de comprensión. Yo a la escritura más de 8 hrs le dedico sé que quieren que se suba muchos capítulos pero cuando no puedo les aviso en el Instagram así como también sus opiniones de como va la novela… Me pueden escribir por el Instagram y con gusto hasta nos ponemos a conversar…

Dicho esto… cualquier cosa estos a sus ordenes… Para mi ya que dediquen un poco de su tiempo a mis historias, ya es una de las mejores ganancias.

Tratemos de como siempre dejar fluir la historia, lo comento por que hay momento que deseamos matar a los personajes mis historias por lo general siempre van arriba de los 100 capítulos y se puede extender conforme vaya viendo de como va la novela, pero depende de ustedes….

Empecemos…. Bienvenidos a esta nueva historia que es de romance… Perooooo… un romance muy a mi estilo.

Gracias por darme la confianza y su apoyo que sé que no tendré muchos seguidores pero para mí, los que tengo son de calidad y me basta con un saludo y leer sus comentarios créanme, eso ya me hace el día mucho mejor.

Ahhh… otra cosita, no doy descripción de mis personajes, subo las imágenes de como para mi son los personajes… A veces son guapísimos, a veces son jóvenes, grandes… todo tiene un motivo de los personajes y de las imágenes que les comporto. Siempre trato de darles hasta la mínima descripción de los personas y de la manera que interactúan… Así que pues vamos a empezar y siempre con la sonrisa en los labios esperemos que no nos la reporten…

Las historias son basadas en historias, no son basadas en hechos reales…

Disfrutemos de esta hermosa historia: “Silencio de Sangre… Mentira oculta, es mentira”….

Isabella:

Levanté mi mirada hacia el reloj de pared, pasaban ya de las 8:40 pm de la noche, solté un gran respiro… Negué con la cabeza al ver que no había logrado terminar mis expedientes que me habían solicitado para el día de mañana que era una de las juntas extraordinarias en el despacho de abogados donde laboraba como asistente de estos abogados pretenciosos que siempre me ponían a llenar los formularios de los clientes que tenían sus casos.

Isabella: Todo a ultima hora… todooo…

Solté una carpeta de mala gana haciendo que el cerro de las carpetas amontonadas se cayeran al piso. Rodé los ojos al ver mi tontería de lo que había causado. Hice mi puchero de tristeza ya que se habían regado todos los documentos y ya se habían revuelto algunos.

Hombre: Niña Isabella, ya es tarde. Todos se han ido.

Levanté mi mirada esbozando una sonrisa nerviosa, el hombre de la limpieza como siempre tan lindo y gentil, se inclinó quedando de cuclillas para ayudarme a levantarlos. Me apresuré negando con la cabeza, el pobre hombre ya es de avanzada edad y no por mi culpa lo iba a poner a trabajar en algo que no le correspondía. Lo miré fijamente sosteniendo sus manos arrugadas, su piel muy frágil por su edad.

Isabella: No jacinto. No se preocupe ahora lo levanto. Fue mi error.

Jacinto: Vamos niña. Ya es tarde, vaya a casa… la deben estar esperando.

Sonreí negando con la cabeza, lo ayudé aponerse de pie, pasé mi mano por su cabello blanco mientras lo miraba.

Isabella: Lo cierto es que nadie me espera…

Jacinto: ¿Cómo no? El joven, Reigi.

Isabella: No, eso ya se terminó hace más de 6 meses.

Jacinto: Hay niña, que lastima. Se veía buen muchacho.

Asentí con la cabeza… pero la realidad era que él prefirió a otra mujer que además era casada, así que no podía hacer nada por él y por la decisión que había tomado. Levanté mis hombros en señal que no me importaba.

Isabella: Ya, mejor me voy…

El hombre me asintió con la cabeza, él se dispuso a empezar a limpiar el área de las oficinas donde mis jefes siempre exigían que estuviera limpio por que los clientes no podían llegar a un lugar donde predominaba el polvo. Se me hacía un poco injusto cuando la chica de la mañana venía y solo se la pasaba de oficina en oficina con los altos mandos. A ella ni la ocupaban para hacer su trabajo real, mientras que al pobre Jacinto lo trataban con la punta del pie valiéndose que solo tenía su permiso para trabajo en el país…

A mi mente se vino mi padre que también era de mayor edad cuando falleció, el eterno trabajo que se dedicaba hacer para lograr que me tuviera una profesión, mientras que tomaba mis estudios y lo poco que podía ganar de pequeños trabajos de mesera, en los restaurantes de lujo… Lugar donde solo mi jefe acudía por ser un hombre demasiado soberbio y muy egocéntrico… Rodé los ojos al recordar que mi jefe es de esos hombres que te miraban por debajo, no había mujer suficiente para él y claro, siempre se fijaba en esas mujeres de alta alcurnia donde su cuenta bancaria también estuviera llena de ceros…

Levanté todas las carpetas, las miré sabiendo que si me ponía ordenarlas sería un cuento sin final. Total mañana lo puedo hacer que llegue desde temprano.

Escuché unos pasos y una risa que llenaba todos los pasillos. Jacinto se puso del otro lado para que no lo vieran que estaba aun trabajando.

Anton: (Jefe) Vaya… aun aquí…

Isabella: Buenas noches señor… Ya me voy.

Él pasó su mirada viendo las carpetas que estaban revueltas, caminó hacia donde estaba mi escritorio. Su mirada de intimidación era muy de él, pero conmigo no funcionaban así las cosas.

Anton: DIME QUE NO SON LOS EXPEDIENTES DE MAÑANA.

Los miré sin apartar la mirada de las carpetas. Levanté mi mirada hacia él donde entró una de las chicas que él siempre estaba acostumbrado.

July: Vamos Anton, no perdamos el tiempo con esta tonta.

Pasé mi mirada hacia la chica… ¿A quien le estaba diciendo tonta?

Isabella: ¿Disculpa?

La chica me miró de arriba abajo dándome una tremenda barrida, como si además de tener que aguantar a mi jefe también tenía que aguantar a su noviecita…

Se llevó la mano en la cintura levantando una ceja mientras me desafiaba de manera prepotente como era lo típico de todas a las que le he conocido.

July: No se te olvide niña que eres una empleada.

Isabella: ¿Por ser empleada tengo que soportar sus groserías pues no? FIJATE QUE NO.

Anton: Isabella…

Isabella: No Anton, lo siento, se me cayeron las carpetas… pero eso no me hace tonta.

July: ¿No?

Anton levantó una mano para que no se acercara la loca esta, él la miró sin decir nada, solo se limitó a quedarse callada…

Ella rodó los ojos saliendo de donde nos encontrábamos… La seguí con la mirada, no me fiaba para nada de esa chica y aunque la verdad sé que solo hoy la veré por que mañana la botaran como un trapo, pues me tenía que aguantar.

Anton: ¿De cuando aquí crees que puedes hablarle así a mis amistades? ORDENA ESO DE YA.

Solté un gran respiro mirando que me había dado la espalda pero no me iba a quedar callada y tampoco me iba a quedar más tiempo mientras que él tomaba su tiempo con esa yo seguir trabajando pues no.

Isabella: Dije que mañana lo haré.

Él se detuvo dándose media vuelta… Tomé mi bolso y mis llaves de mi auto, no pensaba quedarme más tiempo para escuchar los gemidos de esa mujer y no por que me interese o me importe su vida de mi jefe, solo que no estoy para recibir ordenes de esa manera. Se apresuró a llegar hacia mi tomándome con fuerza del brazo… Me miró fijamente mientras me asusté terrible al ver su mirada como que deseaba matarme en este instante… sentí cierto miedo al sentir el fuerte agarre en mis brazos.

Anton: NO TE CONFUNDAS ISABELLA, TRABAJAS PARA MI…

Metí mis manos con fuerza… empujándolo por completo haciendo que me soltara, me miré mis brazos que me había dejado la huella de sus manos en mi piel.

Isabella: ESO NO TE DA DERECHO DE DARME ORDENES DE MALA MANERA…

Él me miró sonriendo… negó con la cabeza mientras daba pasos hacia mi.

Anton: No me digas que aun sientes algo por mi, y lo que estas sintiendo son celos…

Entre abrí mis labios sorprendiéndome de sus palabras… Negué con la cabeza mis ojos se llenaron de lagrimas al recordar la vil burla que hizo con los demás apostando que si me llevaba a la cama me ascendería.. que por suerte la mía nunca pasó, ya que una de las abogadas que era nueva en el despacho me lo hizo saber con tiempo, y claro que si me enamoré por lo lindo que siempre había sido conmigo… sus detalles y su forma de tratarme pero de allí a sentir algo por él, solo era repulsión y cierto odio.

Tomé unas cuantas carpetas, no quería entablar platica con él.

Isabella: Será mejor que me vaya. Me las llevaré y en mi departamento las ordenaré.

Anton: ahora no quiero que te vayas hasta que me digas que lo que sientes son celos.

Negué con la cabeza, tomé como unas 20 o más, mis lagrimas empezaron a caer, traté de apartármelas cuando Anton se acercó a mi.

Anton: Isabella, lo sien…

Isabella: No digas nada. El daño ya lo hiciste. Solo te puedo decir, que lo que sentía por ti en su momento era honesto y real, lastima que no supiste aprovecharlo y solo te has dedicado día y noche a querer destruirme… Lo lograste Anton… fue mucho el daño que me hiciste al hacerme parte de un juego sucio y una apuesta con tus amigos. Ve… Te están esperando.

Anton se quedó callado por completo, pasé a su lado abrazando con fuerza las carpetas, esperaba que no se le ocurriera venir detrás de mi, al menos no en este momento. Llegué a la puerta del ascensor donde estaban abiertas… entreí dándome media vuelta, levanté mi mirada encontrándome a la de Anton que solo me miraba mientras me marchaba… Oprimí el botón viendo que las puertas se iban cerrando.

Cerré mis ojos reposando mi cuerpo en la pared del ascensor… negué con la cabeza una y otra vez… Juré mantener mi palabra de nunca decirle sobre el daño que me había hecho.

Las puertas del ascensor se abrieron me apresuré a salir, levanté mi mano para despedirme del portero del despacho… Salí mirando que caía una leve llovizna.. Me detuve mirando mi auto que estaba algo apartado, no me quería mojar… saqué mi mano hacia el espacio… Levanté mis hombros en señal que no me importaba mojarme. Salí corriendo desesperada, no podía mojarse los documentos que todos eran documentos notariados y legales…

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Isabella McMichael

Anton Gold.

Había llegado a mi auto dándome un pequeño resbalón donde me sostuve del espejo, las carpetas se me cayeron nuevamente.

Isabella: No.. no.. nooo nooo se mojen.

Abrí de prisa la puerta de mi auto, estaba batallando por abrir la puerta… Levanté mi mirada hacia el otro lado viendo a unos hombres, eran como 4 o 5… escuché como empezaron a golpearlo sin piedad alguna, me removí de mi auto abriendo la puerta, lancé mi bolso hacia al lado del copiloto. Iba a cerrar la puerta pero caminé de frente para tratar de calmarlos.

Isabella: OIGAN…. SUELTEN A ESE HOMBRE..

Los hombres se percataron que estaba parada frente a ellos mirándolos y reconociéndolos sabía quienes eres… Negué con la cabeza mientras llevaba mis manos hacia la cintura sabiendo que estos miserables eran los amigos de Anton…

Pasaron de mis palabras para seguir golpeando al hombre que ya ni se podía defender, estaba cubierto de sangre por todo su rostro, parecía un muñeco de trapo que empujaban y zarandeaban.

Isabella: Déjenlo en paz…

Hombre: NO TE METAS DONDE NO TE LLAMAN RAMERA.

¿Qué cosa? ¿Cómo me dijo? Di dos pasos hacia adelante, cuando levantaron un arma, me detuve, sintiendo como hasta mi cuerpo estaba apunto de desvanecerse en este momento.

Hombre 2: ¿Dónde ESTA EL MALDITO DINERO?

Me llevé mi mano hacia mi boca tratando de ni siquiera moverme, mi cuerpo me temblaba, otro de los hombres levantó directamente su mirada hacia mi…. Negué con la cabeza…

PUM!!!! PUM!!! PUM!!!!

Cerré mis ojos con fuerza abriéndolos nuevamente viendo como el cuerpo del chico caía ya sin vida. Ellos me miraron fijamente… di varios pasos hacia atrás, dándome la media vuelta llegando a mi auto… entré sin abrocharme el cinturón… Cerré la puerta tratando de poner la llave en mi auto… Trataba de salir lo antes posible de ese lugar, levanté mi mirada donde ellos estaban corriendo para llegar hacia mi…

Mis manos me temblaban, se cayó mis llaves en el piso, donde en seguida reaccioné poniendo seguro al auto, ellos ya estaban casi cerca, mis lagrimas desesperadamente caían por mis mejillas, estaba que no me lo podía creer… Todos ellos eran amigos de Anton y de seguro que Anton también estaba involucrado con todo esto por eso quería que me quedara hasta tarde para no ser testigo de este terrible asesinato…

Pasaba mis manos desesperada por el piso del auto donde no encontraba mis llaves… Me iban a matar, me iban a matar… tenía que salir a toda prisa de aquí.. tenía que ir a la policía. No podía quedarme en este lugar…

Toqué la punta de la llave levantándola… Me incorporé viendo a uno de los hombres que me estaba apuntando con un arma, metí la llave al auto girando, escuchando que no encendía…

Isabella: NO ME QUIERO MORIR… NO ME QUIERO MORIR…

Clich!! Clich!!!

Iasbella: ARRANCA MALDITA SEA…

Uno de los hombres se puso al frente de mi mirándome fijamente, levantó su arma en mi dirección.

Mi auto encendió donde pisé el acelerador a todo lo que daba…

Poc!!!

Me llevé sin importarme a uno de los hombre pasando mi auto encima de él. Negué con la cabeza… estaba tan asustada que no me iba a detener…

PUM!!! PUM!!! PUM!!! PUM!!!

Escuché varios disparos que iban dirigidos hacia mi auto, no me iba a detener… Levanté mi mirada viendo que ellos corrían hacia sus autos mientras otros atendían a su amigo que había atropellado… Metí velocidad dando una gran vuelta con el volante saliendo del estacionamiento…

Levantaba mi mirada por momentos hacia el retrovisor, no podía llegar a mi edificio ya que ellos sabrían donde vivo y terminarían por matarme.. Negaba con la cabeza, ¿Cómo pudieron matar a ese chico a sangre fría? Si ellos daban conmigo fácilmente darían conmigo… No podía darme ese lujo.

Isabella: Dios.. Dios… sácame de esto… te lo ruego.

Levante mi mirada viendo que venían autos detrás de mi, negué con la cabeza estaba hasta temblando todo mi cuerpo. No podía yo sola con esto… Tampoco tenía muchos a quien recurrir solo estaba mi amiga que vivía en el piso de abajo… Negué con la cabeza, no podía involucrarla en nada de lo que fuera mi culpa. Ni siquiera era mi culpa.

Giré por una calle donde tenía un buen espacio para conducir… Volví a dar vuelta del otro lado, necesitaba perderme, conducía a toda velocidad… Frené viendo la luz roja de un semáforo, levanté mi mirada viendo que ellos estaban detrás de mi… Aceleré a todo lo que daba saliendo el auto a toda velocidad.

Mi corazón estaba latiendo tan rápido que sentía que iba a salirse de mi cuerpo… No sabía nada de lo que había pasado y ni conocía al chico pero yo era testigo de ese asesinato y no me iban a dejar con vida… Además que ellos eran oficiales y de alto mando..

Estaba perdida, completamente perdida en esto… No les iba a poder ganar con nada…

Giré dando una gran vuelta…

Isabella: NO NO NO….

Perdí el control del auto por completo empezando a dar vueltas como si de un trompo se tratara…

Isabella: AAAAHHHHH!!!!!!!.....

Escuché el tremendo golpe en un árbol….

Hombre:

Salimos corriendo detrás de esta chica Isabella que había sido testigo ocular del asesinato de un hombre que nos debía tanto dinero…

Hombre 2: NOOO… HAY QUE IR TRAS DE ELLA…

Hombre 3: DISPAREN DISPAREN…

PUM!!! PUM!! PUM!! PUM!! PUM!!

Ella giró de manera brusca, si seguía así se terminaría matando cosa que no nos preocupaba en lo más mínimo, teníamos que ir por ella. No podía delatarnos nuestros puestos estarían en juego y mucho menos por una mujer como Isabella McMichael, estaba en mis manos.

Corrieron para ver a nuestro amigo que estaba en el piso tirado en que lo atropelló, eso también nos serviría para meterla presa… No nos quedaba de otra, su palabra era contra la nuestra.

Nos subimos a mi auto, teníamos que dar con ella cuanto antes posible, no la dejaría vagar por nada del mundo con esa información.

Aceleré viendo que había llegado a un semáforo.

Hombre 2: Señor… allí está.

Hombre: Alcanzalaaa….

Ella aceleró sin importarle absolutamente nada, se había volado la luz roja, otro de mis hombres aceleró donde un trailer pasó golpeando el auto, solté un golpe al volante negando con la cabeza… Levanté mi mirada viendo a otro de mis hombres que venía atrás de nosotros, La luz marcó en verde…

Aceleramos, curveando el trailer que había golpeado a mis hombres… Ellos ya sabían que tenían que hacer en este caso…

Hombre 2: Por ahí señor…

Bajé la velocidad viendo el auto de Isabella que se había volcado. Empecé aparcarme viendo que era un cruce cerrado… Sonreí tomando mi arma, su final de esta mujerzuela había llegado. Nadie la salvaría por nada del mundo.

Me bajé del auto, cartuché mi arma..

Clic, Clic…

Llevé mi dedo índice a mis labios para que nadie hiciera ruido, por como había quedado su auto estampado en un árbol, de seguro estaba inconsciente, le puse el silenciador a mi arma viendo que los demás hicieron los mismo. Miramos por todos lados, no vaya dar de malas que también nos vean asesinar a Isabella…

Le hice señal a uno de mis hombres para que rodeara el auto… Empecé a dar pasos lentos y muy silenciosos, sino estaba inconsciente al menos estaría con vida pero muy lastimada. Le sonreí a mi hombre recibiendo el mismo gesto de triunfo que al menos tendremos a Isabella en nuestro poder.

Me acerqué tomando la cerradura del auto, el humo del auto salía, había quedado inservible el auto… Abrí la puerta del lado del conductor mientras mi hombre abrió la del lado del copiloto, los dos apuntamos hacia adentro empezando a disparar sin importarme su vida de esta estúpida…

PUM!! PUM!!! PUM!! PUM!!

Levanté mi mano haciendo señal de detenernos, negué con la cabeza…

Hombre: MALDITA SEA…. ESCAPO LA MUY PERRA… ¿Dónde DEMONIOS PUDO HABERSE IDO TAN RAPIDO? ENCUENTRENLAAAAAAAAAA….

Le di un golpe a mi mano con mi arma… Mi móvil empezó a sonar. Lo tomé mirando el nombre del jefe…

Hombre: Señor…

Jefe: ¿Que sucedió? ¿Dónde esta mi dinero?

Hombre: Josh no dijo nada, pero…

Jefe: Espero que le hayas dado una lección.

Hombre: Señor todo se salió de control

Jefe: ¿a que te refieres?

Hombre: Josh está muerto, pero tenemos una testigo ocular que estaba en el lugar.

Jefe: ¿Les reconoció?

Hombre: Se trata de Isabella McMichael…

Jefe: SI SERÁN ESTUPIDOS, TRAINGANLA ASI SEA ARRASTRAS… NO PUEDE ESTAR CON VIDA.

Hombre: La seguimos, fue una persecución, su auto está destrozado, pero ella no estaba en el auto…

Jefe: HAZ LO QUE TENGAS QUE HACER… PERO LA QUIERO FRENTE A MI ASI SEA QUE LEVANTES HASTA LA MISMAS PIEDRAS PARA ENCONTRAR A ESA MAL NACIDA… TE LO ADVERTÍ GERO… NO QUIERO ERRORES, PERO NUNCA ESCUCHAS… SOLO A TI SE TE OCURRE HACER TODO EN EL ESTACIONAMIENTO DEL DESPACHO… TRAELAAAAA…..

Gero: Si señor.

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Isabella